Entradas etiquetadas como ‘amores de verano’

Puede que te estén haciendo «Summer shading» sin darte cuenta

El verano es la estación de tener aventuras románticas inesperadas o de dejar todo en pausa, hasta el regreso después de las vacaciones, si habías empezado a verte con alguien.

Y hay ocasiones en las que estas situaciones son las dos caras de la misma moneda, lo que se conoce como summer shading.

Chico teléfono móvil

PEXELS

(¿Cómo que aún no me sigues en Instagram? Pues venga…)

El summer shading vendría a ser un tipo de ghosting más específico de esta época del año, porque comparte la falta de responsabilidad hacia la otra persona así como dejar de estar disponible para hablar o verse hasta el fin de las vacaciones.

Aunque una buena manera de resumirlo sería que es poner los matches potenciales en espera durante los meses de verano.

Un comportamiento que viene a ser lo contrario de lo que pasa en Navidad, cuando la gente quiere quedarse en casa con pareja aprovechando la temporada de edredón y manta.

Puedes identificar el summer shading cuando una de las dos personas se empieza a distanciar.

De repente tiene compromisos, eventos, viajes y todo tipo de planes típicos de la agenda vacacional a los que no puede faltar, porque ya ha prometido asistir.

Resulta una forma sutil de dejar en buenos términos a la otra persona en el banquillo sin terminar de esclarecer la situación.

El motivo, claro, es la probabilidad de conocer a otras personas y que surjan posibles amores de verano durante esos meses, pudiendo hacer lo que da la gana sin ningún tipo de remordimiento al respecto.

Además, al empatizar con el lío que supone organizar los viajes, maletas etc, la víctima del summer shading tiende a no pedir explicaciones para no agobiar todavía más.

De ahí que se justifique y normalice que haya menos comunicación (“es que no llevo el móvil a la playa”), si cancela un plan (“me caigo de sueño por el jet lag, lo dejamos para otra?”) y que haya más distancia física y emocional.

Estando sin la motivación inicial de haberos conocido y estar viéndoos con frecuencia, ¿cómo sacar la conversación del “qué somos”?

Pero, por otro lado, para compensar la desaparición, de una forma o de otra te ha hecho entender que cuando pasen estos meses, volveréis a veros y hablar como antes.

No es que no quiera, es que ahora no puede.

¿Qué puedo hacer si lo estoy viviendo?

Así como hay quien puede sentir agobio por no querer esperar, también habrá a quien le dé más igual y aproveche los meses de verano para lo mismo: disfrutar.

Lo importante es valorar si estáis en la misma página. ¿El verano es carta blanca? Genial.

¿Sientes que el summer shading te está haciendo daño? Quizás hay que terminar.

En la conversación no pueden faltar las expectativas que tenéis: qué os encaja ahora mismo y qué no.

Y si la otra persona no quiere mayor compromiso en este momento, lo cual está en todo su derecho, al menos que seas consciente y puedas tomar la decisión de si esperas a la vuelta del verano o no.

Pero no que pases unos meses de agonía preguntándote qué has hecho mal o por qué han cambiado las cosas, cuando lo que ha pasado es que te han dejado en pausa con la excusa de las vacaciones de verano.

Mara Mariño

(Y también puedes seguirme en TikTokTwitter y Facebook).

Amores de verano

Querid@s,

Os animo a que repaséis vuestra vida y recordéis los amores de verano que tuvisteis. Todos, casi todos, hemos enamorado a alguien en verano y nos hemos vuelto locos de amor por alguien al que quizás, jamás volvimos a ver. El sol, los días largos, el tiempo libre y las noches en el chiringuito hacen que en verano todo se magnifique, resultando en un cóctel molotov hormonal que puede hacer de vuestro verano una auténtica revolución sexual. Una especie de viaje de vuelta a los años de nuestra adolescencia.

Dos enamorados en Verano en Lousiana

Los amores de verano son como los viajes, como las vacaciones y las escapadas a cualquier otra parte. Amores de verano, amantes pasajeros, amores fugaces. Siempre se viven intensamente, más que cualquier otro amor. ¿Por qué? Sabemos que tienen fecha de caducidad y como mucho duran lo que dura el verano. Pero nada de dramas, ya sabemos que en este época del año todo se magnifica. Llego un poco tarde, así que aplicaros el cuento el próximo año.

Para una canícula más calurosa (y azul), buscaos un amor de verano. Eso sí,

1. Que le guste bailar

Si hay baile de por medio, el rollete de verano dará mucho de sí. Imaginaos, sobre todo vosotras, que os lanzan por los aires cual zeppelin. ¿Cómo será este amante bajo las sábanas? Siempre he pensado que el baile es el reflejo vertical de cómo uno se comporta horizontalmente en la cama. Así que, a darlo todo en la pista de baile.

2. Discreción por favor

La discreción es importante. Por muchos vientos que bebáis por vuestro pille, no es preciso gritarlo a los cuatro vientos, que ya no tenemos quince años.

3. Donde comen dos comen tres

Si el vuestro es un apetito sexual insaciable y no os basta con montároslo con un solo amor, ya sabéis que donde comen dos, comen tres. Viciosill@ que os van los tríos, contad conmigo.

4. Probar la otra acera

Siempre he pensado que todos tenemos un lado homosexual, otra cosa es que queramos descubrirlo o no. Si os apetece descubrir vuestro otro lado, el verano puede ser un buen momento para aclararte las ideas.

5. De dos en dos

Para las almas, mentes y cuerpos inquietos y deseosos, quizás queráis saborear más de un amor de verano. Gestionar más de un amor a la vez no es tarea fácil, porque se nos amontona la faena y los polvos.  Pendonear con más de un amor durante el mismo verano puede ser peligroso. Como os pillen, se os puede acabar el chollo.

6. Algo más que sexo

No en todos los amores de verano tiene que haber sexo. Hay algo que a veces es mucho mejor, pero que no siempre hay: feeling, esa química especial, ese yo que sé que qué se yo. Disfrutad del momento y tened un orgasmo mental, a veces son mejores que los físicos.

Vivid el verano (o lo que queda de él) y salid por ahí, no vaya a ser que se os escape el amor del verano y tengáis que esperar hasta el año que viene para tener un affaire estival. No os enamoréis de vuestro amor de verano. O sí, ¿quién soy yo para deciros nada? Pero normalmente estas historias tienen muchas posibilidades de ser algo temporal. La mayoría no sobrevive y como mucho la historia dura hasta septiembre. Yo os diría que disfrutéis mientras podáis porque siempre llegará el momento de decir adiós. Un año más, el final del verano llegó… y vuelta a empezar.

A follar a follar que el mundo se va a acabar.