¿Existe la ninfomanía? Una sexóloga desmonta los estereotipos más extendidos

«Ninfómana» es un término que me ha acompañado desde que empecé a escribir este espacio. Una palabra que se escurría en los comentarios, respuestas en Twitter (o como se llame), mensajes privados…

Y todas ellas tenían lo mismo en común: quien me lo llamaba no tenía ni idea de mi vida íntima. Sin embargo el apelativo, en su opinión, era correcto.

¿Quién podría escribir de sexo sin ser adicta a él?

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«Ninfómana» no es un piropo, no se usa a modo de halago ni como cumplido. «Ninfómana» es un arma arrojadiza que, entre líneas, deja caer que eso de que seas mujer y vivas una sexualidad a tu gusto y elección, es cuestionable.

Sobre el término he hablado largo y tendido con Lucía Jiménez, que es sexóloga y colaboradora de Diversual, y sabe lo mucho que nos queda por deconstruir más que a las ninfómanas, a quienes lo usan como agravio.

«La ninfomanía no existe como categoría diagnóstica», comienza explicándome. «No es más que la herencia cultural de un término que acuñó en el 1886 un psiquiatra alemán llamado Richard Von Krafft-Ebing en su obra Psychopathia Sexualis».

«En este libro describió la libido sexual como la fuerza del deseo, que en exceso podía denominarse ninfomanía (para ellas) y satiriasis (para ellos)».

Aunque lo curioso, como la misma sexóloga se pregunta es por qué sobrevive el adjetivo «ninfómana» mientras que casi ninguna persona sería capaz de reconocer o utilizar el término «sátiro».

Como en el caso de aquellos que me han colocado la etiqueta, «ninfómana» no se usa para hablar de la sexualidad: «Es una palabra empleada para ejercer violencia de género utilizando como pretexto la sexualidad, pues discrimina por género y sexo. Ninfómana no es la persona con adicción al sexo, ninfómana es una mujer».

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Algo que, coincido con Lucía, no hace más que acrecentar el estigma sobre la sexualidad femenina contribuyendo a una doble moral donde el placer parece solo reservado a un 50% de la población.

«Por un lado, se sigue creyendo que la mujer cis tiene menor deseo sexual que el hombre cis, pero cuando esta lo tiene, lo expresa y lo vive, se convierte en ninfómana. ¿Entonces, cómo me tengo que sentir? Poco deseo es malo porque no satisface a terceros, mucho deseo es peligroso porque desafía», resume la experta.

«Por supuesto que hay personas que viven su deseo de maneras que pueden ser perjudiciales para sí mismas, y que piden ayuda para aprender a gestionarlo. Pero, qué instrumento de control tan potente para inhibir la sexualidad, es educar a la mujer en el miedo a un deseo sexual incontrolable que pueda arruinar su vida y sus proyectos», reflexiona.

Entre el deseo sexual hipoactivo y la hipersexualidad

En términos profesionales, a la hora de hablar del deseo sexual «lo que existe es un deseo sexual hipoactivo (bajo) o
una hipersexualidad», explica la sexóloga.

Normal es un concepto muy relativo, ya que «estadísticamente, la normalidad habla de cómo se distribuyen las conductas en la población, es decir, es lo que más se repite. Eso no quiere decir que sea lo correcto, ni lo mejor. Es una descripción de las tendencias».

Aunque, como Lucía comenta, «cuando alguien pregunta si, en este caso, su deseo sexual es ‘normal’, probablemente quiere saber si su deseo sexual ‘está bien’, si hay algo de malo en sentir menos que no sé quién, o más que no sé cuántas».

Así que en vez de preguntarnos eso, la experta recomienda plantearnos otro tipo de cuestiones, como si la frecuencia sexual genera malestar persistente, si interfiere con el desarrollo de la vida, si empeora las relaciones personales, etc.

Una vez comprendida la relación que mantenemos con el deseo sexual, también toca desmontar algunas falsas creencias como que frecuencia es igual a adicción (cuando es algo que varía según la percepción de cada persona).

«Cuántas relaciones se tienen no es un buen indicador. Adicción son otros procesos, como la compulsión, mediante los que se produce un deterioro de la persona y de su vida», explica la colaboradora de Diversual.

Aunque también el mito de que una persona es adicta al sexo porque le encanta el sexo: «Puede utilizar mucho la relación sexual, pero también puede no disfrutarla en absoluto, ya que se ha convertido en un acto de consumo y de alivio de una ansiedad persistente».

«Puede estar todo el día pensando en ello, y que le resulte completamente incapacitante», resume Lucía.

¿Qué hacemos con «ninfómana»?

A día de hoy, internet ofrece un crisol de resultados cuando introduces el término. «Todavía hay blogs y webs de profesionales de salud mental que emplean este término para referirse a la hipersexualidad», dice Lucía.

«Si tienes la mala suerte de ser diagnosticada como tal, se te atribuirán toda una serie de características que muy probablemente no te corresponden».

Y es que como la sexóloga explica, «ser ninfómana, socialmente, te convierte en una mujer impredecible, manipuladora, peligrosa, seductora, que hará lo que sea para tener relaciones».

«A ver si va a resultar que la ninfómana es la que vive su sexualidad de una manera que no le va bien al hombre. La ninfómana es un arquetipo cultural que despoja al hombre de todo control y raciocinio, ‘obligándole a follar'», afirma.

Así que la manera de darle una vuelta de tuerca es, como la experta sostiene, recordar que «la ninfómana a la que se señala no es más que la mujer cis que desafía el statu quo, amenazando a otras mujeres cis porque les subraya lo que ellas no se permiten y retando al hombre cis porque se iguala a ellos en su vivencia sexual».

Mara Mariño

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6 comentarios

  1. Dice ser 1000 me parecen pocos para lo interesante que está

    Lo que no entiendo de algunas chicas. Critican a otras chicas porque les parecen muy guapas y ellas son más guapas aún. Te vas a cabrear, te vas a cabrear, que te lo digo, que te vas a cabrear, pero te lo comento, qué bien te sientan las mallas. Para que hablen de bodys top.
    1000 libros son pocos. Deberían leerlo más. Felicidades.

    25 enero 2024 | 15:37

  2. Dice ser Si es que no se puede...

    AitanaX dice que lleva preservativos en el bolso y «abre un debate» en redes… XD
    Mara, escribe un libro para los debatidoressss cerradossss y cerradassss… a ver si se enteran de lo que es el mundo.
    Por favor a la estupidez que llega alguna gente.

    25 enero 2024 | 18:04

  3. Dice ser ana

    Ninfómana: dícese de la mujer que dice NO al hombre que le propone tener relaciones…..
    Vamos, lo de toda la vida.

    25 enero 2024 | 22:32

  4. Dice ser El ninfómano está ya en puertas

    Oye, que acabo de ver un anuncio de un tal Hugo 2, que tiene mayor potencia que el 1, que ni me había enterado que existía. Y leyendo aún no lo tengo claro si es para lo que parece que es. Un masajeador prostático dice el anuncio. Y digo yo que la próstata, para encontrarla, la forma que tiene el bicho, no sé, yo no quiero pensar mal, pero si lo acompañan frases como… te levará al culmen del placer… Vamos a ver, entonces el hombre va a ser ahora ninfómano si le da por el gustirrinín o qué?.

    26 enero 2024 | 11:31

  5. Dice ser A ver si hay alguna inteligencia extraterrestre que valga la pena

    Ma acabo de cabrear con la IA.
    La he puesto a parir buscando argumentos cuando me ha dicho que un cuerpo humano al natural es un tema inapropiado par ella. Al rato me puso unos dibujos como de muñecos y le he vuelto a dar la brasa. Lo llamé de todo. Bueno, de todo lo que se merece la persona que, sin argumentos, da portazo con un adiós y que tengas un buen día. He vuelto a pedirle explicaciones, hablándiole de la dictadura que existe contra el cuerpo humano, de la rareza mental que supone que una persona se desmemorie pensando que nunca ha visto un desnudo y luego tache de inapropiado eso mismo. De la barbaries que se cometen en el mundo por causa de la censura contra el cuerpo, de la represión que supone el pensar que el enemigo de la mente es el cuerpo, de toda la porquería que eso genera contra la propia libertad de pensamiento del humano… Y va y me dice que me veía muy afectado por todas esas cosas. Y voy y le pregunto que si ella no. Como seguía dándome largas le espeté qeu vaya esperanza lo de al IA, que es como entrar en una biblioteca antigua esperando resolver los problemas del mundo y te largue una perorata de los escritos antiguos que no han servido más qeu para crear y mantener la realidad que tenemos y que dicen van a cambiar…
    Pues ná, que desnudé a la IA y lo mismo de siempre.

    26 enero 2024 | 13:29

  6. Dice ser YO

    ENTIENDO EL CONCEPTO NINFOMANA COMO LA MUJER QUE NO ES CAPAZ DE CONTROLAR SUS DESEOS SEXUALES Y QUE ADEMÁS TIENE ESA NECESIDAD DE UNA MANERA CONSTANTE, Y QUE TIENES QUE SATISFACER IMPERIOSAMENTE. O SEA COMO LA NECESIDAD DE TABACO, ALCOHOL, DROGAS, ETC.COMO UN VICIO QUE NO PUEDES CONTROLAR. NO HAGAMOS FEMINISMO CON EL TÉRMINO.

    27 enero 2024 | 11:34

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