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¿Son los afrodisíacos reales?

Has oído hablar de las ostras, las fresas con chocolate y hasta del cava como supuestos potenciadores del deseo.

Pero, ¿y si esas características casi mágicas que se relacionaban con ellos son falsos y todo queda en una mera sugestión?

pareja comiendo

PEXELS

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Para Valérie Tasso, escritora y sexóloga colaboradora con LELO, esta asociación entre los alimentos y su supuesta capacidad de disparar el deseo se trata más de una relación etimológica que de una causa-efecto.

«Vainilla y vagina tienen la misma raíz etimológica. Se dice que la vainilla es un afrodisiaco, pero es una conexión más simbólica por la asociación de ideas».

No es el único ejemplo que pone la sexóloga. Sucede también con «cualquier elemento fálico un poco exótico, como por ejemplo el polvo de cuerno de rinoceronte».

Y sin embargo, aunque los expertos ponen entredicho estos ‘superpoderes’, según la encuesta que realizó la marca sueca de juguetes sexuales, el 40% de los españoles sí creían firmemente en que ciertos alimentos serían afrodisíacos.

Así como la asociación con el falo del cuerno se puede aplicar a la asociación con la vulva de las otras, otro caso que apunta la sexóloga, sí merece la pena hablar de si hay alguna ciencia detrás de todo esto de la comida y la libido.

Aquí entraría la gastrosexología, una disciplina que ha empezado en España hace unos años y analiza el comportamiento de personas que encuentran placer excitándose al ver comer a su pareja o comiendo juntas.

Aunque también para la gastrosexología, se trataría solo de un placebo el hecho de mitificar ciertos alimentos.

La conclusión que saco es que quizás pensábamos todo este tiempo que lo afrodisíaco era la comida, cuando se trataba del contexto de sentarse a la mesa con esa persona que nos revoluciona las hormonas.

Y también por la intimidad, cargada de tensión sexual, de que las citas suelan involucrar una comida o una cena, y son el caldo de cultivo perfecto para la expectativa de lo que puede suceder a continuación.

Entonces, ¿todo era mentira?

Sí y no. Así como el poder de los alimentos no es real, siempre habrá quien encuentre excitación en ellos.

Y no hay mejor ejemplo que la práctica del sploshing, que consiste en untarse de comidas pringosas, como espaguetis, salsas o nata montada.

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Y que, siempre nos quedará, más que un afrodisíaco, el picante, que va muy bien para la circulación de la sangre porque es un vasodilatador, al igual que el vino tinto…

Así que contar con ellos en tu próxima comida no te cuesta nada.

Mara Mariño

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¿Los afrodisíacos funcionan? Mi experiencia después de probarlos

Voy a empezar confesando que soy un poco incrédula cuando se trata de sustancias que te hacen despertar mágicamente el apetito sexual, lo que en teoría consiguen los afrodisíacos.

Tomar ostras, u otros alimentos que dicen que ayudan, no me ha terminado de afectar lo suficiente como para darlos por buenos (y eso que hay incluso un menú realfooding que mejora el sexo).

Mi concepto de alimento que sube la temperatura -y de verdad me produce deseo sexual- es que me diga que, si quiero, me prepara unas croquetas para que tenga en el congelador cuando me apetezcan.

pareja cama deseo sexual

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La cosa es que no le veía mucho sentido a usar un producto específico para eso.

O sea, creo que mi deseo sexual es bastante común: a veces menos, a veces más, si veo Outlander por las nubes, si tengo mucho lío en el trabajo lo pienso menos… Lo normal.

Pero como la curiosidad es la que mata al gato (o en este caso a la gata, que soy de Madrid como los churros de San Ginés), pensé «Bueno, ¿y por qué no?»

Mi lado más racional me decía que igual esto era un poco el timo de la estampita y lo que funcionaba era el efecto placebo.

Pero justamente por no tener una libido baja sentía que no tenía ningún tipo de expectativa -ni me llevaría decepción- con el funcionamiento del afrodisíaco.

En el mercado hay un montón de ellos, pero yo tenía claro que iba a experimentar lo justo.

El que escogí era bastante natural, de hecho, aparte de agua, lo que tenía era extracto de damiana y L-arginina.

Por lo que me informé, estos dos ingredientes son conocidos por mejorar la satisfacción sexual y aumentan el aporte de sangre a los tejidos genitales (entre muchos otros beneficios que me interesaban menos para esto).

Yo lo que quería era testearlos entre las sábanas.

El efecto no es instantáneo, no es como tomarte un café, que a los 10 minutos ya estás como una moto.

Y tampoco te convierte en una fiera en la cama ni vas a tener encuentros que podrás considerar epifanías sexuales.

La constancia es la clave, fue mi primer descubrimiento. Después de tomar la dosis durante unos días, estaba más ‘despierta’.

En mi caso, fue algo que ayudó a reactivarme. Era como que en más situaciones o momentos me entraban ganas de tener sexo.

Luego también es verdad que, cuanto más sexo tienes, más sexo te apetece, por lo que va genial para hacernos reconectar en pareja si llevamos una temporada con los deseos descoordinados.

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La conclusión es que como experimento está bien, aunque creo que no se debe usar como apaño si hay problemas más graves detrás (que quizás necesitan otras soluciones o ayuda profesional).

Para un momento puntual, a modo de empujoncito, cumple su función.

Es más, que lo usara en una etapa normal de mi vida, hizo que reflexionara de que es también normal que a veces no nos apetezca.

Saber cómo lidiar con esa frustración o falta de libido de nuestra pareja, sin que suponga un mundo para la relación, es también un aprendizaje.

Pero que vaya, que introducirlo como impulso de vez en cuando, también está genial. Y si lo que funcionó fue el efecto placebo, ¿por qué no aprovecharlo si nos lleva a querer entrechocarnos la piel más a menudo?

Mara Mariño

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Los 10 mejores y más potentes afrodisíacos para ponerse cachondos

Querid@s,

“No hay afrodisíaco como la inocencia” decía Jean Baudrillard.

Puede que así sea, pero a ustedes y a mí poco nos queda de ese candor de juventud. A un lado esos fármacos que no hacen sino engañar a nuestro organismo con estratosféricos chutes malignos, erecciones forzadas y supercherias inventadas por las gigantes farmacéuticas como son el Viagra, Cialis o Levitra. Déjese de estimulantes químicos y opte por el lado natural de las cosas. Sienta mucho mejor.

abuelitos

A continuación les sugiero una decena de afrodisíacos bizarros –que al igual que nosotros, poco albergan de inocentes- que son culpables de despertar el frenesí y el deseo sexual del paladar que ose degustarlos. Les advierto que son de complicado hallazgo en sus supermercados de confianza y puntos de venta habituales. Por orden casi alfabético.

1. Balut

En las islas Filipinas el balut es el pan de cada día, aunque a nosotros bien nos puede provocar unas inminentes ganas de vomitar. Huevos de pato con un embrión de unas 20 semanas de gestación. Bon appetit!

2. Carne de cobra

En algunos rincones del continente asiático se consume cual manjar de dioses. La sangre se mezcla con bebida. Se cuchichea desatan la libido.

3. Atta

Asi se hacen denominar las hormigas cortadoras de hojas que se comen especialmente en Colombia. Siguiendo la tradición, se regalan attas a los recien casados para que disfruten más y mejor de su noche de boda.

Andense con ojo, sólo las reinas son comestibles.

4. Mosca española

La cantárida o “mosca española” es un insecto alargado y verdoso que una vez muerto, seco y pulverizado, se transforma en una sustancia venenosa. Las secreciones de este escarabajo se viene utilizando desde hace siglos con fines sexuales. En dosis moderadas, provoca prolongadas erecciones en los penes de ellos y furor uterino en nosotras. Como todo en la vida, lo poco gusta y lo mucho cansa. Incluso mata.

La cantárida, un componente vasodilatador, reapareció en Francés a mediados del siglo XVIII debido a las «pastillas Richelieu», que permitía cargarse a alguien sin dejar rastro algunoy se utilizaban como Viagra natural. Esta mosca pizpireta tomada en exceso resulta letal. Apenas 2 gramos de polvo de cantáridas son suficientes para matar a un adulto) Al parecer, la mosca española pudo ser el venenoso afrodisíaco que mató a Fernando «El Católico». Parece que Fernando abusó de la mosca que al final del cuento le salió cojonera. Ya se sabe, si te pasas te lo pierdes.

marques de sade

Por su parte, grandes folladores de la Hisotoria como Giacomo Casanova y el Marqués de Sade echaban mano frecuentemente de la cantárida para aumentar la libido de sus presas sexuales. Marqués de Sade estuvo involucrado en el verano de 1772 en el llamado «caso de Marsella». El listo del marquesito, tras una orgía con un séquito de meretrices, fue acusado de envenenarlas al darles «mosca española». Finalmente fue sentenciado a muerte por sodomía y envenenamiento. Otro al que la mosca se le fue de las manos.

5. Pene de tigre 

En China, Taiwán y Corea del Sur el tigre (más bien su pene) se sirve como sopa para mejorar la potencia sexual. La costumbre de comer el pene de este animal salvaje para calentar motores ha provocado la caída en picado del número de estos felinos.

6. Pepino de mar

A mí este pepino me resulta especialmente repulsivo. No quiero ni pensar si me lo tengo que meter en la boca, por mucha forma fálica que posea. Estos animales marinos de la clase Holothuroidea pueden usarse frescos o secos en diversas recetas. Nuestros vecinos los chinos también lo consumen como afrodisíacos.

pepino cocinado

7. Pez globo

En algunas regiones como el Imperio del Sol Naciente, este animal es un maravilloso manjar y su particular venganza contra el ser humano tiene lugar entre fogones, cuando ya nos resulta completamente inofensivo. Aparentemente. La intoxicación por pez globo o fuguismo es un problema en Japón, donde existe un 60% de casos mortales por ingerir la carne de este animal acuático. Cortar y cocinar este pez de armas tormar, aun después de muerto, debe recaer en manos de expertos cocineros que posean un certificado especial. Un pez globo mal preparado puede matarle. Y no estoy bromeando.

8. Pipi de babuino

Para los que se atrevan, este pipi es primo hermano de saborear una lluvia dorada en toda la boca. En Zimbabue la orina de babuino se consume para curar males sexuales. Allá cada uno.

9. Sopa de nido

Le llaman el caviar del este y se prepara exactamente con nidos de pájaro. Aseguran que aumenta la potencia sexual. Personalmente esta sopita de ave no me dice nada. Y a ustedes?

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10. Vino tinto

Aunque el vino tinto de raro no tiene nada, de entre todos los afrodisíacos que puede uno encontrarse, es mi preferido. El vino, aunque sea un tintorro peleón, posee antioxidantes que son los culpables de ese beneficioso efecto llamado vasodilatador. Consumir vino con moderación (con un par de copitas diarias va que chuta) incrementa la lubricación vaginal y potencia la erección masculina. Brindemos pues. Por su salud y la mía.

Para disparar la libido no olviden añadir a la lista de la compra alguno de estos alimentos. Pero no se pasen, no vaya a salirles el tiro por la culata. Son los afrodisíacos mas rarunos que  existen, todos ellos curiosas sustancias y criaturas que nos aportan vigor. Y más que amor, frenesí.

¿Se han atrevido ya con alguno? Como es lógico el vino no cuenta.
Que follen mucho y mejor.

El poder de los afrodisíacos

Lujuria, placer, pasión desenfrenada, vigor… Todos ellos son elementos claves y codiciados a la hora de un encuentro sexual perfecto. Por eso, desde que el hombre es hombre, todas las civilizaciones y culturas han pretendido disponer de sustancias con las que provocar y aumentar el apetito sexual.

Aunque el uso de de filtros, pócimas de amor y ungüentos destinados a estimular la sexualidad o atraer al sexo contrario se remonta a la prehistoria, la primera mención escrita de los afrodisíacos procede de unos papiros egipcios del siglo XXIII antes de Cristo. También se los menciona en el Génesis, donde se hace referencia a la menta y a la mandrágora, y los griegos y los antiguos romanos hacían un gran uso de estas “milagrosas sustancias”. Y, como no podía ser menos, también se refiere a ellas el kama-sutra, tratado del amor por antonomasia.

FOTOGRAMA DE 9 SEMANAS Y MEDIA

FOTOGRAMA DE 9 SEMANAS Y MEDIA

¿Realidad o mito? A veces es difícil separarlos, pero la mente es poderosa y solo hace falta crear un clima propicio y un poco de predisposición. Y en eso, los afrodisíacos pueden ser de gran ayuda. Ya solo su nombre resulta sensual y evocador… Proviene de Afrodita, la diosa griega de la lujuria, la belleza, la sexualidad y la reproducción. A menudo se alude a ella en la cultura moderna como «la diosa del amor», pero normalmente no era el amor en el sentido cristiano o romántico. Afrodita, que nació de la espuma del mar cuando Cronos mató a su padre y arrojó sus genitales al océano. Numerosos alimentos considerados aún hoy afrodisíacos, como las ostras y otros mariscos, están asociados a su nacimiento.

Cierto o no, siempre es mejor recurrir a sustancias naturales, aunque resultasen ser puro placebo, que atiborrarse de química tirando de viagra y otros fármacos. Vamos, es mi opinión. Y aunque solo sea por si acaso, os añado un pequeño resumen de algunos de los ingredientes, ya sean bebidas, comidas o condimentos, mencionados en varias investigaciones por su supuesto poder estimulador del deseo.

-Ginseng: Se usa para aumentar el vigor sexual. Es una planta herbácea de la familia Aralacieae cuya raíz se usa en la medicina tradicional china. Ayuda al cuerpo a producir más óxido nítrico, que relaja el músculo liso cavernoso y refuerza las erecciones.

-Chocolate oscuro: Aumenta los niveles de feniletilamina, que desencadena sentimientos similares a “estar enamorado”. Es una sustancia producida en el cerebro que pertenece a la clase de las anfetaminas, estimulantes del sistema nervioso que permiten superarse durante un lapso limitado de tiempo, por sobreexcitación.

-Ostras: Poseen grandes cantidades de zinc, que incrementa la producción de testosterona. La testosterona a su vez incrementa el deseo sexual en la pareja.

-Ajo: Produce una enzima responsable del mecanismo de erección. Además, tanto en el varón como en la hembra contribuye a mejorar el flujo circulatorio en el área de los genitales. Para que haga el efecto adecuado debe tomarse crudo, exprimido o en cápsulas.

-Canela: Estimula el riego sanguíneo en la zona abdominal del organismo. Al facilitar el flujo de sangre en la región central, mejora la irrigación de los genitales, tanto en el caso de la mujer como en el hombre. De esta manera aumenta la facilidad para lograr la excitación y, en el caso de hombre, para alcanzar y mantener la erección.

-Chile picante: Según algunos investigadores comer chile hace que liberes endorfinas, conocidas también como hormonas de la felicidad.

-Azafrán: Aunque su uso como afrodisíaco se remonta al Antiguo Egipto, fue el profesor Massimo Marcone, de la Universidad de Canadá, quien demostró sus efectos permanentes en la estimulación del impulso y el rendimiento sexual.

-Zanahorias: Su gran cantidad de beta-caroteno, ayuda a incrementar las hormonas sexuales.

-Vino tinto: Un estudio de la Universidad de Florencia corroboró hace años lo que todos sospechábamos. Posee antioxidantes que producen un beneficioso efecto vasodilatador, de manera que su consumo moderado potencia la erección masculina y aumenta la lubricación femenina.

-Espárragos: Su contenido de vitamina E se cree que estimula las hormonas sexuales.

Y dicho esto… Hala, por probar que no quede.