Un paseo por la librería de orgasmos

Piensa en un orgasmo. Ahora. Así. De repente.

Piensa en un orgasmo este martes por la mañana mientras me lees en el ordenador de la oficina o en el trayecto que haces en el metro para ir a la universidad.

GTRES

¿Cómo es? Déjame adivinar o describirte cómo suena en mí cabeza. Seguro que es estruendoso, rítmico, alto, exagerado… Esa es la palabra clave, exagerado.

Realmente existe un mundo de diferencia entre los orgasmos que nos imaginamos y aquellos que son auténticos al 100%.

Podría parecer que solo consideramos que es orgasmo si es alto, lacerante, ostentoso, con unos gemidos que superen el nivel de decibelios permitidos en la comunidad de vecinos. Y con grandes frases de por medio como «Oh sí», «Más, más», «Dios», «Joder» o cualquier tipo de improperios.

Si no ejecutas toda la performance de sonidos, expresiones y vibraciones guturales, es probable que más de uno te pregunte si te has corrido. Porque claro, ¿cómo va a saberlo si te has limitado a contraer el gesto en absoluto silencio?

Pero no solo de gemidos altos se retroalimenta el orgasmo. Y es algo que descubrí alejándome del porno en la Librería de Orgasmos. Un proyecto de Bijoux Indiscrets que reúne sonidos reales grabados desde el anonimato y representan las diferentes sinfonías que se pueden escuchar en pleno clímax.

Oirás desde jadeos, respiraciones aceleradas o murmullos a suaves resoplidos, pero alejados de aquellas exageradas muestras de placer. Pero entonces, ¿por qué nos resulta más familiar el otro tipo de orgasmo?

Como sociedad en la que el placer masculino lleva años ganándonos por goleada en cuanto a peso, los productos a su disponibilidad (cine, series…) estaban destinados a estimular a ese público al que había que tener satisfecho.

Librería de Orgasmos, Bijoux Indiscrets

De hecho, es tal la importancia del orgasmo que ya hemos hablado de que la mayoría de nosotras los hemos fingido alguna vez a modo de ‘premio’ para que la otra persona se sintiera satisfecha y pudiéramos pasar a otra cosa.

Sin embargo, y aunque claro que puede haber personas que hagan de sus orgasmos auténticas interpretaciones, esa pompa no es otra cosa más que parte de la escena, de la ilusión, de la película, igual que las luces, el maquillaje o la lencería de encaje del vestuario.

Así que hoy, y aprovechando que mañana es festivo, os invito a que, como yo, os deis un paseo por la Librería de los Orgasmos (con cascos si estáis acompañados) y descubráis cómo suenan realmente:

Duquesa Doslabios.

(Y acuérdate de seguirme en Twitter y Facebook).

7 comentarios

  1. Dice ser Javier

    Es más fácil que todo eso. Cuando la mujer tiene un orgasmo se le agranda el clítoris y se pone extremadamente sensible. Solo hay que fijarse

    14 mayo 2019 | 20:37

  2. Duquesa Doslabios

    #1

    También tenemos contracciones vaginales. Si hay un dedo dentro es más fácil notarlo 😉

    Pero concuerdo contigo, solo hay que fijarse

    14 mayo 2019 | 20:42

  3. Dice ser MELI

    HOLA, ME GUSTA LEERTE. SOY UNA FORERA DEL 20.

    LA DE LOS SONIDOS ERES TU?

    14 mayo 2019 | 21:05

  4. Dice ser Javier

    #2

    Duquesa, cuando tengo el pene dentro no meto el dedo, cada cosa a su tiempo.

    14 mayo 2019 | 21:05

  5. Dice ser ARKABACH

    Efectivamente el orgasmo femenino no sólo es una interpretación histriónica de gemidos y gesticulaciones, esto es una simulación grotesca, copiada del arraigo de las películas estadounidenses.

    También es consecuencia de la tradición cultural española, donde la mujer parece que tiene que complacer a su pareja para que éste se sienta más realizado.

    EL ORGASMO FEMENINO es mucho más complejo, y aún así, es fácil de descifrar para la otra persona, si éste realmente es alguien que sabe complacer a su otra persona, y además no le exige grandes exhibiciones de placer.

    EL ORGASMO FEMININO se nota en los pequeños detalles, que a veces son grandiosos. El tegumento de la chica se enarca, su respiración es más entrecortada, con jadeos que se aceleran, con el tegumento que responde a las sacudidas, sus contracciones la hacen vibrar, y a veces incluso da pequeños saltitos de placer, que concluyen con una contracción final.

    Eso sí, cada PERSONA es UN MUNDO. Y cada RELACIÓN también.

    Él éxito está en el conocimiento de los PLACERES de la compañera de COITO.

    14 mayo 2019 | 21:28

  6. Dice ser Murciana

    #5

    Arkabach, te conocemos del foro. Tú siempre así, teórico. De práctica, nada.

    15 mayo 2019 | 20:25

  7. Dice ser Marta

    Que razón! Para nada soy chillona y por eso no significa que no llegue al orgasmo… ¡me encanta tu artículo!

    24 mayo 2019 | 10:18

Los comentarios están cerrados.