El amor es como dice Tokio de ‘La Casa de Papel’ (y no como en una película de Disney)

Único, para siempre y capaz de cambiarlo todo. Es lo que aprendí del amor verdadero, ese que llegaría a mi vida de repente y la revolucionaría.

Me lo habían prometido La Bella y la Bestia, La Bella Durmiente, Aladdín y hasta La Sirenita.

@lacasadepapel

Aquellas conexiones eternas que se creaban a través de una mirada era todo a lo que aspiraba. Pero no lo que iba a venir.

Viví varias historias pequeñas, muy intensas. Y una grande, la que más, la que apuntaba maneras de convertirse en la eterna.

La de años juntos y seguir enamorados incluso con la tapa del váter sin bajar o las discusiones más tontas.

Esa que le ves roncando con la baba colgando de la boca y te sigue pareciendo la persona más maravillosa.

De girar la vista un día cualquiera y que te haga ilusión pensar que tendrás la ocasión de hacerte viejita a su lado.

Cuando se acabó, busqué refugio en las comedias románticas, en Ed Sheeran, en más romanticismo si cabía. Y la conclusión a la que llegaban era la misma.

No, no era amor. Al menos no del bueno, no del verdadero.

Pero que acabara no significaba para mí que lo que había sentido en aquel momento resultara menos sincero.

De hecho, llegó una nueva persona, un libro lleno de páginas en blanco para escribir capítulos de cero.

Otra vez las mariposas conquistaron mi estómago al tiempo que empezaba a colgarme de sonrisas con hoyuelos y miradas del color del mar.

Aunque no pensaba que fuera una sustitución ni la confirmación de que -esta vez sí- estaba ante el amor del bueno.

Todas aquellas veces que alguien me había desbocado el corazón hasta el punto de emocionarme la idea de un futuro juntos, me parecían igual de válidas.

Fue en La Casa de Papel que encontré la explicación que mi cabeza (pero más mi corazón necesitaba).

[Cuidado, un spoiler se avecina.]

Tokio, rendida de cansancio y a punto de ser acribillada a balazos, mira a un atormentado Río y le dice, feliz, que su nueva vida comienza ese día.

Fue como si los guionistas hubieran dado con el interruptor de la luz que tenía mis pensamientos a oscuras.

No se trataba de elegir cuál es el amor auténtico a base de invalidar los anteriores y quedarnos solo con el último de ellos.

Se trata de empezar a vivir, cada historia, como si se estrenara el amor por vez primera. Porque, en verdad, ¿no es así cómo lo hacemos?

Contamos de nuevo el primer beso, la primera vez que nos fundimos en piel, carne y jadeos, la primera vez que vuelve a salir de nuestros labios un «te quiero».

Comenzamos una nueva vida que no entra en conflicto con las anteriores, porque, como Tokio sabe, sentimos que vivimos tantas veces como nos enamoramos de alguien.

Duquesa Doslabios.

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6 comentarios

  1. Dice ser ser sueños de nuestra vida

    En la vida hay que aprender a evolucionar. Y eso supone no censurar nuestro pasado, sino aceptarlo pero sin revivirlo, porque ya tuvo su tiempo. Dedicarle más tiempo a los sucesos pasados, y más si son traumáticos o poco agradables, es ser tontos de entendimiento. No somos inmutables, somos animales de vivencias, de experiencia. Guardar rencor, odio, etc… son negativas influencias de nuestro ser contra nuestro propio ser.
    Un poco de amnesia es ideal para sentir y querer continuar sintiendo en positivo.

    12 octubre 2021 | 12:45

  2. El guionista estaba recordando viejos tiempos.

    12 octubre 2021 | 12:55

  3. 1 – No todos quieren o pueden olvidar ese pasado. La añoranza, a veces, es mas beneficiosa que dolorosa porque nunca fue todo malo en ninguna relación sentimental.

    12 octubre 2021 | 13:51

  4. Dice ser Ernesto Cardenal

    El amor es como lo sienta cada uno, no como diga un puñetero guionista de TV

    12 octubre 2021 | 19:58

  5. Dice ser Antonio

    El amor actual, ya no es como el de las películas de disney.

    Es como ver una pelicula, mientras la estamos viendo, nos entretiene y nos produce algo, pero tan pronto como se acaba, se pone otra y listo. Duran lo que dura el momento, pero al final solemos recordar las primeras pues por juventud, novedad e intensidad de las emociones marcan mucho mas que las «rutinarias» y actuales.

    Ahora por mucho que los químicos del cerebro funcionen con cada relación, cada vez duran menos y es logico y normal. La maravillosa primera cita numero 50, el primer viaje numero 30, y la primera presentacion de los padres numero 15. Es un oximoron en si mismo.

    Mientras mas racional es una persona mas obvio es ver que eres una persona muy especial para la otra parte, como las otras 20 personas a las que llevo a su lugar especial.

    Se puede estar de viejitos en pareja? Claro, pero a diferencia de las peliculas o antiguamente, ese viejecito de al lado sera de una relación de 10 años y no de 50 como antiguamente.
    Al recordar tu juventud a tus hijos, en ningun momento aparecera el padre/madre, y a lo maximo que se podra contar son los viajes y eventos de madurez, quitando gran cantidad de anecdotas que generaciones anteriores si pudieron oir. Antes al contar historias a tus hijos, habia una evolucion desde la juventud al momento actual, y ahora es, esta es mi juventud, luego aparecio la pareja, te tuvimos y aqui estamos.

    Un saludo.

    13 octubre 2021 | 12:02

  6. Dice ser Tailandia

    Cuando ví la escena y oí esa frase se abrió mi mundo. Se acaba una etapa y se empieza otra, se acaba una vida y empeiza otra, hay muchas vidas dentro de una vida. Tokio dijo lo que yo pensaba desde hacía tiempo.

    22 octubre 2021 | 20:46

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