Que te toquen el culo en la discoteca y todo lo que no es ‘normal’ por ser mujer

Todas coincidimos en que es mejor ir con zapato plano en vez de sacar los tacones. «Yo quiero ir cómoda», dice una. Aunque no lo pongamos por escrito sabemos que, en el caso de tener que correr, es preferible ir con un calzado bajo.

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Quedamos poco antes de que abran la discoteca y vienen los dos de turno. «¿Por qué estáis tan solas?», dicen a ese grupo de cuatro amigas.

Sabemos qué hacer en esos casos. El corte más ‘limpio y rápido’, la baza del novio. Una vez saben que «estamos todas cogidas», se van. La excusa de siempre que, cuando surge, te garantiza la ‘libertad’, algo que sabemos todas, por lo que utilizarla es ya normal.

Entramos a bailar. Pedimos copas y recordamos cómo nuestros padres dejaban el vaso en la barra con una servilleta por encima, para que no les echaran drogas. Nos reímos de aquel acto pero no soltamos el nuestro, no vaya a ser. De modo que se convierte en habitual ese baile a una mano mientras con la otra mantenemos la bebida va bien sujeta. Hasta ahí todo normal.

«Voy al baño», dice una. Da igual la distancia al servicio, es una norma no escrita acompañarnos. Son muchas las historias de amigas que, ante las ganas de hacer pis se han alejado y han aparecido en un piso desnudas al día siguiente.

Las colas en los baños de mujeres son siempre infinitas, todas llevamos compañía, como es normal.

Una vez reunidas de nuevo, seguras por la fuerza del grupo, el baile es más pleno. Hasta que, en la décima bajada al suelo -cambiando solo el peso de las caderas de una a otra rodilla-, hay quien nota una mano indiscreta.

Pena que, al girarse, haya un grupo de ocho o nueve chicos. Imposible dar con el autor del roce. Aunque claro, con tanta gente, y bailando hasta el suelo, es normal que se den ese tipo de choques. Que no empiece la paranoia.

Vuelve a notarla y al minuto se arrepiente de haberse puesto minifalda, no como sus amigas -más expertas en materia-, que prefieren los pantalones largos para evitar, como es normal, los manoseos que suelen acompañar aquí, en Valencia, en Cáceres, en Murcia o en Málaga, los acordes de Daddy Yankee. Pero ella no cayó en eso, solo quería estrenar su nueva compra.

Así que se resigna y entiende que el toqueteo será el nuevo normal de la noche.

Las horas se agotan y los pies, incluso sin tacones, también. Es el momento de despedirse. Dos comparten taxi, otra irá en autobús nocturno y la última, que no ha bebido, prefiere coger un coche de alquiler.

Tras los besos y abrazos, la promesa de todas las noches. «Avisad al llegar». Es el voto normal en estos casos en los que la oscuridad todavía hace mella en el cielo.

El coche está más lejos de lo que se pensaba. Tiene que andar sola un trecho e incluso pasar por delante de un grupo de hombres que también acaban de salir de otra discoteca.

«Hola bebé, ¿te acompaño?». Risas del grupo, él se ha puesto casi enfrente suyo. Ella le esquiva y aprieta el paso, mirando con desesperación el mapa del móvil para localizar el vehículo.

Por mucha rabia que le dé confesarlo, ese tipo de encuentros son lo normal cuando vuelve a casa. El miedo apretándole la boca del estómago durante los últimos metros antes de abrir la puerta -que muchas veces alcanza corriendo- se ha convertido casi en el denominador común, lo raro es que no le digan algo. El broche de siempre a sus veladas con amigas.

Finalmente llega a casa, es la última en hacerlo. Escribe que ya está en la cama y aprovecha para revisar por última vez Instagram. El chico al que le dijo su perfil le ha escrito un mensaje. Uno detrás de otro, viendo que ella no le contestaba.

Que si quiere terminar la noche por todo lo alto. Que por qué no le contesta. Que hay que ver estas feminazis que se asustan por todo. Que quién se cree que es. Que es una zorra calientapollas por haber bailado así. Que tampoco está tan buena. Que ojalá se muera.

Y ella apaga el móvil y se va a dormir después de pasarle el pantallazo a sus amigas, que, poco o nada extrañadas, le dicen que así son muchos tíos. No les sorprende a estas alturas porque tienen en sus bandejas de entrada textos parecidos. Es hasta normal.

Solo que nada de lo descrito como normal en este texto lo es. Por mucho que socialmente hayamos aprendido a normalizar las agresiones sexuales, las intimidaciones, es el momento de desaprenderlo.

Que lo normal empiece a ser no tener miedo porque no haya ningún motivo para ello.

Duquesa Doslabios.

(Y acuérdate de seguirme en Twitter y Facebook).

13 comentarios

  1. Dice ser Ray

    “Hola bebé, ¿te acompaño?”

    Esta expresion nunca la diria un chico español. Igual teneis problemas en ciertos ambitos que ahora estan de moda y basan su musica en denigrar a la mujer…

    Buscaros un hobby y encontrareis chicos mas interesantes. Si pretendeis ir a una disco con ese tipo de musica y ese tipo de gentuza a menear el culo no se que esperais.

    04 septiembre 2019 | 10:02

  2. Duquesa Doslabios

    El mito de que los españoles no violan, no intimidan o no acosan está ya bastante desmentido. Solo tienes que echarle un vistazo a las últimas ‘Manadas’ para descubrirlo: http://www.interior.gob.es/documents/10180/0/Informe+delitos+contra+la+libertad+e+indemnidad+sexual+2017.pdf/da546c6c-36c5-4854-864b-a133f31b4dde.

    El 70% son españoles, cuidado con los discursitos populistas que hacen mucho daño. El cuento de que los malos son solo los extranjeros ya no (nos) cuela.

    04 septiembre 2019 | 12:14

  3. Dice ser mario

    me parece muy buen artículo, la verdad.
    desde la perspectiva de un hombre no nos podemos ni hacer a la idea de todo to que «normalizais».
    poco a poco conseguiremos cambiarlo! ánimo.

    04 septiembre 2019 | 12:49

  4. Duquesa Doslabios

    Muchas gracias, Mario.

    Me alegra ver que el artículo te haya hecho reflexionar.

    Por supuesto que lo cambiaremos! De hecho, hace 50 años yo ni podría estar trabajando como periodista, pero la igualdad es imparable.

    04 septiembre 2019 | 12:53

  5. Dice ser Garrido

    Magnífico artículo, un texto que todo hombre debería leer para reflexionar un poco sobre nuestra sociedad actual. Todos deberíamos ponernos en la piel de una mujer, por lo menos durante unas horas, y entonces sabríamos lo que se siente, el miedo, la inseguridad, los momentos que se ven normales y que deberían indignar a cualquier Homo Sapiens con un poco de sentido común. Deseo que todo esto lo podamos cambiar entre todos.

    04 septiembre 2019 | 13:49

  6. Dice ser Lolailós

    Para @Ray:

    ¿Y para cuándo decirle a esa «gentuza» que no se comporten así? ¿Acason son (¿sois?) bestias en celo incapaces de controlar sus intintos más básicos? ¿¡Y que encima la culpa la tenemos nosotras!?

    A mí me han pasado esas cosas, y peores estando en situaciones «normales» y «decentes», ¿o el hecho de que estuviera un sábado por la tarde sentada sola en un banco de la avenida principal de mi ciudad le daba óbice a ese chico a que me tocara una teta?

    Ah, igual es que tengo que quedarme en casa, no vaya a ser que con mi ignominiosa y provocativa presencia por las calles estimule la calenturienta mente de todo macho que me rodea.
    Que sino, todo lo que pueda pasarme será culpa mia.

    ¡Ay, lolailós, lo que te queda por aprender de la vida!

    04 septiembre 2019 | 14:20

  7. Dice ser Zasca

    Don Ray… ese comportamiento se ha dado siempre. Recuerdo siendo chaval (y ya paso la cincuentena) que siempre había el grupito de tontolabas que en cuanto pasaba una chica enseguida le tocaban el culo, desviaban la mirada y su furibunda mirada se topaba con mis ojos. Suerte que no me calcaron una hostia, porque iría rebotada al cobarde cabrón… que de seguro se lo hace otro tío y le llamaría de todo menos bonito.
    Así que no hagas lo que no te gusta que te hagan.

    04 septiembre 2019 | 15:15

  8. Dice ser chaver

    Me ha hecho ver este comentario que las cosas no han cambiado desde que yo (tengo 51) salía a tomar algo, a bailar y a «ligar» (soy hombre) y me sorprende que lo mismo siga sucediendo ahora, no hemos evolucionado nada, solamente las chicas han tomado conciencia y a golpe de corte nos han hecho saber que lo normal ya no lo es y que hay que cambiar. Animo.
    El comenatrio 2 es la tontería mas grande que he leido en años ¿tu te crees que a cualquier mujer le va a importar (para mejor) quien la acose, viole o moleste? lo de la nacionalidad ya cansa y si, los extranjeros estan hiperrepresentados, eso no es mentira, otra cosa es que nos vayamos a los extremos que si % para arriba que si % para abajo que a la hora de la verdad NO VALE PARA NADA, a la chica que , por desgracia, le toca será un 100%.

    04 septiembre 2019 | 19:06

  9. Dice ser ana

    Según Ray, no deberíamos salir por la noche, no deberíamos ir a discotecas, ni mucho menos llevar minifaldas, deberíamos pedir DNI a tó quisqui para saber su nacionalidad antes de hablar con ellos (ya que todo el mundo sabe lo de los caballeros españoles) y si lo hacemos, somos todas una P..TAS -menos su madre y su novia y hermanas- y nos exponemos a que nos pase lo que nos pasa.
    Muy bueno, tío, ahora ya sé porqué llevo toda mi vida recibiendo pellizcos, metiendome mano los tíos en el culo, y tocandome las tetas a los trece años un grupo de cuatro tíos que me rodearon y me acorralaron como a un perro (perdón, una perra)
    Menos mal que ha habido muchos comentarios de hombres que son eso , hombres, y no pedazos de mierda…

    04 septiembre 2019 | 20:38

  10. Dice ser Javi

    Buenas, para mi nada de lo que comentas nunca fue normal ni lo será jamás, nunca he tocado a ninguna chica saliendo por la noche ,ni se me ocurriría, pero sí que me han tocado el culo, también he pasado miedo, he presenciado peleas, me han intentado robar y hasta me han pegado. Muchas cosas que comentas me resultan a la vez extrañas y odiosas, pero no puedo evitar pensar que muchas parecen más leyendas urbanas. No me creo que alguien tenga que coger todas las noches un taxi con miedo, o que tenga horror porque alguien le diga algo por la noche, gentuza siempre la hay y si beben peor, que por cierto; bebes es lo que todo el mundo hace al salir, emborracharse o ponerse contento y tampoco lo veo normal.
    El comentario de ir al baño acompañada no vaya a ser que te rapten y aparezcas desnuda y violada en un piso suena un poco forzado, no creo que ni mucho menos eso lo piensen las mujeres cuando van a un baño en una discoteca. Y me resulta un tanto extraño que se salga para ligar, se vista para ligar y se queje porque hay personas que te entren. ¿no se busca eso?
    Otra cosa son los toqueteos, insultos y palabras y gestos malsonantes, yo siempre he criticado esto y me parecen de seres despreciables. El típico gesto de un tío que se queda babeando cuando pasa una mujer o una chica es aberrante, e igual me parece un grupo de hombres en la calle, que solo hacen que hacer muy desagradable que una mujer sola tenga que pasar entre ellos. Como hombre me rebelo contra todo tipo de comportamiento machista y que no sea igualitario, y como tal tampoco me guste que sólo por ser macho tenga que pertenecer a ese grupo. yo por mi parte no normalizo ningún comportamiento de los que mencionas, pero contra ninguna mujer ni contra nadie.

    04 septiembre 2019 | 20:56

  11. Dice ser Javi

    Por cierto, a mí siempre me han dicho cuando me han despedido, «avísame cuando llegues» (sobretodo amigas) por lo que no es algo exclusivo hacia las mujeres.
    Y además me ocurre algo extraño, jamás ninguna amiga me ha contado que va con miedo a casa o he notado ese miedo por ir sola. Únicamente miedo a cualquier persona por ir sola de noche por algún lugar «peligroso» . Es como si hubiéramos vivido otra realidad paralela, es extraño, y eso que yo siempre que he dejado a una amiga en su casa he esperado a que entrara al portal, siempre me pareció lo normal y correcto, por lo que pudiera pasar, ahora y hace 20 años.

    04 septiembre 2019 | 21:10

  12. Dice ser UnTio

    Muy comprensible todo lo del texto y totalmente de acuerdo en lo nefasto de ciertas actitudes, pero siempre que leo estos textos me ocurre que por una parte puedo estar de acuerdo en lo que se relata, pero por otra me genera rechazo, sobretodo, la generalización que se hace. Párrafos antes veo la crítica que se hace en respuesta a los mensajes populistas que hacen ciertos partidos referidos a inmigrantes y demás, pero el caso es que no os dais cuenta que esos mensajes populistas los hace el feminismo relativos al hombre, se convierten en dogma de fe que no pueden ser rebatidos, independientemente de lo justo o no de legislaciones, comentarios, … el sexo masculino se ha convertido en el origen de todos los males que asolan a la sociedad. Yo también tengo miedo cuando voy sólo por la noche y me cruzo con un grupo, es cierto que no a una agresión sexual, pero sí a que me roben, a que me peguen una paliza,… porque muchas veces esos mismos que os abordan a vosotras ya suele tener un perfil un tanto marcado para otras muchas cosas. Claro que no tiene porque ser un delincuente, totalmente de acuerdo, pero ya hay algunos que apuntan maneras. Y también hay chavalas babosas, que se te agarran, que si ellas quieren parece que tú tienes que querer, que te tocan,… Creo que hay que empezar a poner cordura en todos los asuntos y tener debates sosegados, a día de hoy todo lo que se lleva al extremo es a lo que se le da cobertura mediática (Brexit, Cataluña, Veganismo, Trump, movimientos fascistas, movimientos antisistema,…) muy posiblemente porque es lo que da réditos y audiencias, pero nos hacemos un flaco favor estando continuamente enfrentándonos por todo, cansa mucho, a pesar de que todo tiene argumentos para tener una parte de razón, prismas de una misma realidad.

    04 septiembre 2019 | 22:54

  13. Dice ser susi

    Yo cada vez soy más partidaria de poner cámaras por todas las calles, grabando todo el rato o al menos a determinadas horas. Sería caro, pero lo q nos ahoraríamos en cárceles y en disgustos lo compensa. De este modo se podrían castigar comportamientos como estos, que de otro modo resultan muy difíciles de probar. Ya verás como a estos grupos de graciositos se les quitan las ganas de decir payasadas si les caer una buena multa cada vez q molesten a quienes crucen por delante.

    05 septiembre 2019 | 17:13

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