Así ha cambiado nuestra forma de ligar según las ‘apps’ de citas

Que veinte años no es nada, dice el tango de Carlos Gardel. Y, en la era digital, apenas dos de ellos podrían equivaler a dos décadas.

GTRES

Trabajamos con prisa, comemos con prisa mirando la pantalla del móvil, quedamos con prisa porque mañana hay que madrugar y hasta tenemos sexo con prisa, porque queremos seguir viendo el capítulo de la serie de turno de HBO.

La vida va acelerada, por lo que es casi habitual acostumbrarse a la gran cantidad de cambios en todos los ámbitos. Y sí, el de ligar no se salva si paso lista.

Si sumamos el impacto social que ha tenido el feminismo, con las mejoras en las aplicaciones para conocer gente por internet, el resultado es un reflejo bastante acertado de cómo ha cambiado nuestra manera de relacionarnos.

Y parece que es para bien.

Elie Seidman, quien es el director ejecutivo de Tinder, confirmó al diario británico The Guardian que, el algoritmo de belleza de la aplicación, había pasado a mejor vida desde hacía tiempo.

Si antes tus matches dependían de la belleza de quien te hiciera swipe (cuanto más atractivo, mejor tu puntuación), la empresa ha tomado una mejor decisión.

Tu lugar en la escala virtual no está definido por el atractivo de pretendientes, ahora, la frecuencia del uso de la app y la localización (porque cuanto más cerca, mejor), son los dos factores que han ganado mayor prioridad.

Las aplicaciones para ligar han tenido que remar en contra de una mala reputación. Conocerse por internet era casi algo humillante de confesar en la comida familiar.

Sin embargo, el estudio que realizó la universidad de Chicago sobre matrimonios que se habían conocido online entre 2005 y 2012, reveló que las relaciones de pareja que empiezan de esta manera son más largas y satisfactorias que laquellas que se conocen de la manera analógica.

Algo que se puede achacar a una de las grandes ventajas de ‘tropezarse’ en la red, no solo conoces en mayor medida (internet hace que hablemos mucho y nos conozcamos bastante en profundidad para suprimir la falta de presencia física) sino que tendemos a mentir menos.

No estás frente a frente cuando confiesas que, pese a tener 31 años, todavía vives con tus padres o que todos tus exnovios te regalaron gatos, así que, ¿qué más da?

Si algo ha cobrado importancia son también las nociones de comportamiento básicas. Cada vez se limitan más las malas actitudes o fotos de genitales no solicitadas. Si la haces, la pagas, y serás vetado en la aplicación con pocas posibilidades de regresar.

Además, algunas de estas apps llegan incluso a incluir recomendaciones para que los usuarios estén al tanto de lo que no es aconsejable. Y, aunque ligar en internet no es universo paralelo, una burbuja a la realidad, que se recuerde la educación y los buenos modales, deja claro que ya no se puede ir de troll por la vida.

Ni siquiera si se trata de la vida virtual.

También Happen ha aportado su granito de arena a la lista de cambios a la hora de ligar. Según un estudio de la empresa, las mujeres se acercan mucho más que antes.

El antiguo concepto de que es el hombre el que tiene que dar el primer paso, ha quedado desfasado. Si nos gusta, también iniciamos una conversación e invitamos a tomar algo.

Duquesa Doslabios.

(Y acuérdate de seguirme en Twitter y Facebook).

Los comentarios están cerrados.