La crónica verde La crónica verde

Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera. (Pablo Neruda)

Entradas etiquetadas como ‘reciclaje’

¿Por qué no reciclamos las cápsulas de café?

Cápsulas de café encontradas en la basura doméstica.

Cápsulas de café encontradas en la basura doméstica.

Prácticamente ya no hay una casa en España que no tenga un máquina de café por cápsulas de un solo uso. Sus precios han bajado muchísimo y hay además muchas marcas blancas ofreciendo productos económicos en cualquier supermercado.

El café sale muy bueno y rápido, pero no tiene nada de limpio. Porque además de ser muchísimo más caro que el café de cafetera tradicional (haz cuentas y verás), el sistema de cápsulas supone una pérdida de valiosos recursos naturales, su reciclaje es costoso y no hay un sistema de reciclado cómodo que funcione correctamente. En otras palabras, las compañías fabricantes te dejan la responsabilidad del reciclado a ti, el consumidor. Ellas se lavan las manos. Lee el resto de la entrada »

¿Qué hacemos con los medicamentos caducados?

Punto SIGRE de reciclaje en una farmacia

Punto SIGRE de reciclaje en una farmacia

Todavía son muchos los que, cuando terminan un tratamiento médico, guardan en el armario los medicamentos a medio gastar «por si acaso». Se van acumulando por decenas en cajas de todos los tamaños y colores, habitualmente esas mismas cajas que suelen caerse a la mínima en exasperante desorden. Y que volvemos a guardar todas mezcladas.

Algunas veces te da por revisarlos y te encuentras con que la mayoría de las medicinas están caducadas ¿Qué hacemos? Lee el resto de la entrada »

Quiere limpiar el mar haciendo gafas de sol con redes de pesca recicladas

Gafas sol

François van den Abeele es un soñador. Y un emprendedor. Amante del mar, de la navegación y el buceo por el Mediterráneo, su sueño es acabar con el plástico que envenena los océanos. Especialmente con esas redes a la deriva responsables de lo que se conoce como redes fantasma: trampas mortales de nylon enredando inútilmente miles de animales durante el más del medio siglo que tardan en descomponerse. Por eso ha ideado Sea2See, una moderna línea de gafas de sol cuyas monturas están hechas exclusivamente con viejas redes de pesca abandonadas. Que quiere hacer realidad gracias a un proyecto de crowdfunding.

Conocí a François el mes pasado en el Sustainable Sunday de Barcelona, una feria de promoción de la sostenibilidad empresarial. Fue allí donde me contó su proyecto, nacido en colaboración con la Agència de Residus de Catalunya (ARC), el proyecto MarViva y la cofradía de pescadores de Palamós. En esa localidad gerundense, en apenas un mes, recogieron una tonelada de redes viejas que son las que le abastecen de materia prima para sus gafas. Redes que previamente deben clasificarse y transformarse en pequeñas partículas de nylon listas para fundir. Y que, no por casualidad, ofrece un material flexible, duradero y muy resistente a los golpes, al agua y al sol. Perfecto para los amantes de los deportes náuticos.

«Lo más difícil fue encontrar al fabricante y que no pensara que estoy chalado», confiesa. Lo encontró en Milán, en una feria internacional de gafas. Le convenció con su entusiasmo, además de con una interminable lista estadística del horror de estos fantasmagóricos plásticos incorruptibles vagando durante cientos de años por el mar: un millón de aves marinas muertas al año, 136.000 focas y cetáceos, redes cubriendo seis veces la superficie terrestre de España. «A este paso, en el 2050 habrá en los océanos más plásticos que peces«, explica sobrecogido.

Por eso sus gafas son, como François señala, «más una declaración ecologista que un producto». Y es que pocas cosas hay más visibles y vistosas que unas gafas de sol. Que pretende vender a precios económicos. «Para que las pueda comprar todo el mundo y sea rentable seguir eliminando las redes fantasma».

Ahora tiene el prototipo, pero aspira a comercializarlo si logra el apoyo de los consumidores concienciados. Por ahora no va demasiado bien. Necesita reunir 39.500 euros antes del próximo 8 de julio y lleva 16.000 euros. Por el bien de nuestros mares, que es el nuestro, ojalá lo logre.

Si te ha gustado esta entrada quizá te interesen estas otras:

Claves para entender el incendio de neumáticos de Seseña

Incendio-002

El gigantesco e ilegal vertedero de Seseña ocupa 117.000 metros cuadrados de un terreno fronterizo entre Seseña (Toledo) y Valdemoro (Madrid). Esta indefinición regional le ha permitido permanecer en el limbo de los jetas desde su creación en 1991, pues ni para algo tan flagrante son capaces las comunidades autónomas y los ayuntamientos de coordinarse. El medio ambiente no es un tema importante para ellos. Lee el resto de la entrada »

No aguantamos a los vecinos que no reciclan

Reciclaje

Me estaré haciendo mayor, pero ya no lo aguanto. Cuando voy a tirar la basura, inconscientemente, y mira que me digo ¡no mires!, abro el contenedor y la vista se me va hacia la basura de los otros. Menudo cabreo. Hay decenas de botellas y tetrabrikes, papeles y cartones varios, todo revuelto, todo sin reciclar. Y claro, generalizo acordándome de esos cerdos de vecinos, egoístas, insolidarios, pero ante todo vagos redomados. Lee el resto de la entrada »

Esta Navidad acuérdate de reciclar todo el vidrio y el papel

Foto_Ecovidrio 1

Son fechas de derroches y excesos. ¡Bienvenidos sean! Pero acuérdate de reciclar también en Navidad. Especialmente con los muchos desechos que produciremos en estas fechas: papel, cartón, plásticos y vidrio.

Te sorprenderá saberlo, pero cerca del 20% del total de todos los envases de vidrio del año se reciclan en Navidad.

Ecovidrio, la entidad sin ánimo de lucro encargada de la gestión del reciclado de los residuos de envases de vidrio en España, espera recuperar en estas fechas más de 120.000 toneladas de envases de vidrio, casi un 20% del total anual. Para lograrlo cada español tendría que reciclar 8 envases, lo que así visto, y teniendo en cuenta lo mucho que bebemos, no parece especialmente difícil. Tan sólo se trata de no olvidarlo y buscar cerca de casa el famoso contenedor verde. Recuerda que el 100% del vidrio que se recupera en los contenedores es reciclado para fabricar nuevos envases. Gracias a este pequeño-gran gesto de todos nosotros se logran múltiples beneficios para el medio ambiente y la sociedad. Lee el resto de la entrada »

Acabemos con la moda basura de usar y tirar

Ropa-Barata-En-Miami

La llaman moda rápida, moda low cost, moda barata, pero la deberíamos llamar moda basura. Es su mayor mérito. Favorecer comportamientos compulsivos de compra a bajo precio que, más pronto que tarde, acabará en el contenedor dada su mala calidad. Lee el resto de la entrada »

La basura flota sobre nuestras cabezas

Gravity

El día en que la humanidad desaparezca, nuestra basura seguirá presente en la Tierra durante muchos miles de años más. En ríos y mares contaminados. En tierras cubiertas por desechos donde el reciclaje brilla por su ausencia, donde el vidrio se desaprovecha, el metal se oxida, el papel se quema, las bolsas de plástico destrozan el paisaje. Pero igualmente en los cielos, orbitando sin rumbo alrededor del dolorido planeta azul. Porque también el espacio recibe las sobras de la civilización en forma de chatarra espacial. Aunque por suerte (y seguramente por efecto de la crisis), la cantidad de desperdicio no aumenta.

Según datos facilitados a la agencia Europa Press por la Oficina del Programa de la NASA de Restos Orbitales, entidad que hace pormenorizado recuento de la basura espacial que orbita la Tierra, el número de escombros espaciales parece haberse estabilizado en la primera mitad de 2015, manteniéndose en los 16.900 objetos.

Concretamente, de los 16.906 cacharros con los que se inició el año, junio ha cerrado con 16.925. Lee el resto de la entrada »

Acabemos con el despilfarro de tirar alimentos a la basura

Basuras

La crisis nos ha traído terribles escenas inéditas. Como el rebusque de comida caducada en contenedores de los grandes supermercados. Algunos los cierran con candados para evitar la mala imagen.

Cada año, sólo en España  más de 50.000 toneladas de comida fresca de las tiendas de alimentación (dañada, fea, desigual, cercana a su fecha de caducidad) acaban en la basura.

Miles de personas podrían comer si se prohibiera ese derroche, pero el problema no es donar los alimentos desechados. El problema es distribuirlos, hacerlos llegar a quien los necesita. Porque la legislación obliga a que esa comida cuente con todos los controles sanitarios, sea manejada por personal acreditado, transportada en vehículos homologados y almacenada en espacios refrigerados. Al final lo más barato y sencillo es tirarlo todo a la basura.

Ocurre lo mismo con alimentos como la pasta, el arroz o las latas. Solo el 20% de los distribuidores donan habitualmente este tipo de productos, lo que implica desechar otras 357.000 toneladas de alimentos al año.

En Francia es diferente. País famoso por la importancia que allí se da a la cocina, está causando furor el reciente movimiento de “Les Gueules Cassées” (Los Rostros Rotos). Una alusión a los soldados franceses desfigurados por la Primera Guerra Mundial que fomenta el consumo de productos feos, destinados a la basura sólo por su aspecto. Igual de sanos, pero más baratos y sostenibles.

Además, una reciente Ley exige a los supermercados galos donar toda su comida sobrante.

Siguiendo el modelo francés, casi medio millón de europeos han firmado una solicitud reclamando que en la futura “estrategia de economía circular” promovida por la Comisión Europea se incluya la obligación de donar los alimentos desechados. Y se sancione a las empresas que no lo hagan.

Sólo así acabaremos con tan insolidario despilfarro.

Foto: Editorial J / Flickr

Si te ha gustado esta entrada quizá te interesen estas otras:

Un estudiante de 19 años inventa una solución para limpiar los océanos

Clean Ocean

Boyan Slat, 19 años, sueña con recoger toda la basura flotante de los océanos © The Ocean Cleanup

¿Qué podemos hacer para eliminar las ingentes cantidades de plástico que contaminan gravemente nuestros mares? Esa basura que mata albatros, pardelas y cetáceos. Esa mierda que ensucia las profundidades abisales más inaccesibles. Esas islas flotantes de desechos tan grandes como un continente.

Evidentemente, lo primero es no tirar basura y cumplir la regla de las tres erres de la ecología: reducir, reciclar y reutilizar. Pero también es importante limpiar todo lo ensuciado, algo que no hace ningún país, empeñados como estamos en considerar a los océanos como los vertederos comunitarios más gigantescos del planeta.

Por eso me gusta mucho el proyecto de Boyan Slat, un joven holandés de 19 años que ha patentado un invento genial, capaz de retirar del mar cientos de toneladas de plásticos. Un gran embudo de bajo coste y sin riesgo para la fauna. Lo acabo de leer en el periódico francés Le Figaro [gracias @luimguisel por el enlace], donde se elogian los muchos premios logrados por un chaval que, en realidad, quiere ser ingeniero aeroespacial, pero al que su afición al submarinismo le reveló este grave problema medioambiental.

Inteligente y ambicioso. Ha creado una fundación, The Ocean Cleanup, donde cuenta con la colaboración de un centenar de voluntarios. El objetivo: desarrollar tecnologías para extraer, prevenir y detectar los objetos de plástico que contaminan los océanos.

Para llevar a cabo su investigación, el joven estudiante puso en marcha una primera campaña de crowdfunding que le ha permitido recaudar más de 65.000 euros y confirmar el éxito de su invento. Ahora necesita 2 millones de euros más para culminar su sueño, acabar con la gigantesca isla flotante de plásticos del Océano Pacífico en menos de 10 años. Su sueño es el de todos nosotros. Ojalá se convierta pronto en una realidad.

Si te ha gustado esta entrada quizá te interesen estas otras: