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Te estoy amando locamente

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#CineLGTBI

 

Esta película española estrenada 2023 y dirigida por Alejandro Marín, nos sitúa en Sevilla, año 1977, con la ley de peligrosidad y rehabilitación social vigente. Miguel (Omar Banana), un adolescente gay de diecisiete años quiere ser artista y dejar a un lado la carrera de derecho que Reme, su madre (Ana Wagener) quiere para él. En ese contexto el joven se involucra en la lucha por los derechos de las personas LGTBI.

Alejandro Marín en una entrevista concedida a El cine de la Ser comentó que para hacer la película realizaron un proceso de documentación que les permitió tener un escáner de la situación de la época. Hablaron con personas que vivieron esos momentos, incluso con la familia y de ese proceso surgieron unas conversaciones muy interesantes. El realizador apuntó que quiso hacer un homenaje, desde el cariño, a las personas que enarbolaron la lucha por los derechos LGTBI en esa etapa histórica. Sobre la implicación de los sindicatos y los curas obreros en esta lucha, Marín afirmaba: Queríamos trasladar al presente como la lucha era tan transversal, era totalmente a una y lo que importaba era la causa por la que se luchaba y no tanto desde donde se hacía. Los movimientos feministas estaban mano a mano con el movimiento LGTBI, las luchas sindicales… Comisiones Obreras dejó el lugar para hacer el mitin previo a la manifestación. la participación de los curas obreros, era todos a una . Desde el principio fue esa idea: Esa lucha tan transversal, ¡qué bonita!, hay que recordarla. Decía el cineasta que era importante la lucha sindical porque la Ley de Peligrosidad Social era súper clasista. Había como el informe de buena conducta en el que iba un policía fiscal a tu casa a hablar con los vecinos, en tu puesto de trabajo y si eras de buena familia esos expedientes se perdían, pero si eras de una clase más desfavorecida decían: Uy no este es un peligroso. Y al final es normal que quienes empezaron estas luchas fueran personas de las clases más desfavorecidas. Sobre las escenas de baile y de cante de la película Alejandro Marín contó que él todo lo piensa entorno a la música que es de donde le vienen las ideas. El título le vino porque la intro de Te estoy amando locamente le parecía muy cinematográfica, además pretendía reivindicar la cultura underground sevillana.

Por su parte, la actriz Ana Wagener, también en El cine de la Ser, comentaba que su personaje le parecía muy atractivo: Quería mostrar a una mujer de aquella época sola, viuda, con un hijo de diecisiete años. Que ve pero no quiere ver. Que tiene ya estipulado para su hijo el camino de un buen porvenir: abogado, y de pronto, se le sale de la melodía el niño pero ella no quiere ver. Con Alejandro hablamos que Reme querían que fuera como un elefante en una cacharrería. Una mujer que no sabe lo que le está pasando a su hijo, entonces tira para acá, tira para allá y al final lo que realmente le queda es el amor. Tiene una mirada que finalmente termina reconociendo a su hijo y viendo que la gente le quiere, porque lo que yo creo es que ella tiene miedo de que le dejen de querer, le hagan daño y al final termina abriendo su mirada y haciendo un viaje maravilloso. La verdad es que era una gozada. Ha sido meterme en la piel de una mujer del 77 pero que realmente tiene una fuerza como la que podía tener ahora. Creo que es una película también muy actual, que habla de cosas que deben de escuchar la gente. Que la gente de hoy sepa los derechos que se han conseguido. Los derechos que se pueden perder. En la película me doy cuenta de la sensación de colectivismo que había, porque ahora el individualismo del ser humano es tremendo. En aquella época, yo creo que se vivía mucho más el colectivo.

Omar Banana decía sobre su rol en la cinta: Ha sido muy bonito, por dar voz a un personaje que representa a tantas personas que han pasado por tantas cosas, en el 77 y 78 y que siguen pasando. Es un poco el arquetipo de la persona abusada por la sociedad antilgtb o la sociedad fascista. Era dar voz a algo bastante necesario. Y meterme en el Miguel de diecisiete años del 77 y no en el Miguel de diecisiete años de 2022. En cuanto a la música y el baile, el actor decía que cuando Miguel decía que quiere ser cantante, no es que quiere ser cantante como tal. Vaya o no vaya a Gente Joven, lo importante para él es la liberación. El cante y el baile es un medio de liberarse, de ser quien quiere ser, cortar las ataduras que en su entorno familiar tiene. Entonces hemos usado el cante y el baile para transmitir a la gente una idea de liberación y de poder ser tú mismo.

El deseo de libertad, de ser sin miedo está presente también en Yo solo quiero amor, de Rigoberta Bandini, la canción de la película:

(…)Tengo ganas de no explicar por qué.
Yo te quiero querer sin miedo a que puedan
volver. Tengo ganas de saltar a tus pies,
levantar el parqué. Contarle a Dios, quién
quiero ser.

Lesbianas en la Historia: La reina Ana de Inglaterra

Por Charo Alises (@viborillapicara)
#MujeresLesbianas

 

Reina de Inglaterra, Escocia e Irlanda desde el 8 de marzo de 1702 y de Gran Bretaña e Irlanda desde el 1 de mayo de 1707, Ana Estuardo nació en Londres el 6 de febrero de 1665.
Mujer de carácter reservado y con muchos problemas de salud, la reina Ana no estaba preparada para regentar la monarquía. Su padre, Jacobo II, perdió la corona en favor de su hermana mayor, María. Cuando María y su marido Guillermo fallecen sin descendencia, la corona pasó a manos de Ana que se convirtió de esta forma en la última Estuardo.

La historiadora Anne Somerset en su obra Queen Anne: The Politics of Passion, señala que la reina había sido educada de forma muy pobre. Gozaba de una salud muy mala, probablemente con una enfermedad autoinmune y algún tipo de artritis. Su estado de salud y su sobrepeso motivaron que tuviese que ser trasladada a su ceremonia de coronación en una silla sedán especialmente diseñada para ella, ya que no era capaz de realizar a pie la tradicional ruta procesional desde el Westminster Hall hasta la Abadía de Westminster.

Ana Estuardo contrajo matrimonio con el príncipe Jorge de Dinamarca con el que tuvo diecisiete hijos de los cuales solo cuatro nacieron con vida y fallecieron pocos años después. Guillermo fue el que más tiempo vivió, llegando a cumplir once años.

El reinado de Ana se caracterizó por un sistema bipartidista. Fueron tiempos convulsos, con cambios políticos y geoestratégicos. Durante su mandato se firmó la unión entre Inglaterra y Escocia en Gran Bretaña.

Alrededor de 1673 Ana conoció a Sara Jennings, que se convertiría en una de sus consejeras más influyentes. Sara más tarde se casaría con John Churchil, futuro duque de Marlborough. Investigaciones históricas señalan que entre la reina y su consejera existió una relación sentimental. La correspondencia entre ellas apunta a una profunda unión de amor. Por deseo de la reina y en base a la relación que las unía, las dos damas se llamaban la una a la otra señora Morley y señora Freeman.

Parece ser que Sara fue una mujer de carácter fuerte y dominante que influyó en las decisiones políticas de la reina. Finalmente Ana apartó de la corte a Sara cuando empezó a pensar que su amante la manipulaba. Hay quien sostiene que la causa de la ruptura de esta relación se debió a la aparición en la corte de Abigail Marsham, quien se convirtió en la nueva consejera de la reina. Ana culpó a Sara de difundir rumores sobre su relación con Abigail.

El director Yorgos Lanthimos en su película La favorita llevó al cine la historia de Ana de Inglaterra y sus relaciones con Sara Churchil y Abigail Marsham.

 

Las locas en el archivo

Redacción 1 de cada 10

 

Geoffroy Huard y Javier Fernández Galeano dirigen Las locas en el archivo, un trabajo sobre la disidencia sexual bajo el franquismo.

Este libro reúne aportaciones que han abordado la compleja tarea de rastrear y visibilizar las experiencias de la disidencia sexual en España desde la guerra civil hasta la transición democrática. Basado en una serie de archivos que muestran tanto las violencias institucionales como el coraje, las formas de expresarse y las dinámicas sociales de las «locas».

Con este último término se quiere poner el acento en cómo las personas perseguidas se autopercibieron y crearon marcos culturales propios. Lectura imprescindible para aquellas personas que se especialicen o que se adentren por primera vez en esta página crucial de la historia del colectivo LGBTI+. Se replantea aquí el papel de la violencia estatal como eje
articulador de esa historia, y se recuperan historias invisibilizadas de alegría, placer y resistencia.

 

Boys don’t cry

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#CineLGTBI

 

Dirigida por Kimberly Peirce en 1999, Boys don´t cry es una película estadounidense que narra la historia real de Brandon Teena, joven trans que tras vivir conforme a su identidad y conocer el amor con una chica en Nebraska, acaba siendo violado y asesinado por dos ex- convictos el 31 de diciembre de 1993

Estrenada en el Festival de Cine de Nueva York el 8 de octubre de 1999, la cinta fue bien acogida entre el público y la crítica que alabó las interpretaciones de Swank y Savigny. Sin embargo, la familia de Brandon Teena no quedó satisfecha con el resultado de la película ya que, según decían, no contaba de una forme verídica el crimen de odio perpetrado contra Brandon.

La película supuso la brillante entrada de la, hasta ese momento desconocida, Hillary Swank en Hollywood. Swank obtuvo un Óscar por su brillante interpretación de Brandon Teena. La contención de Hillary Swank dista de la desbordante composición que realiza Chloë Sevigny de su personaje, la chica que se enamora de Teena. El resultado del contraste entre ambas actrices hace brillar la cinta.

En el momento del asesinato, Peirce, entonces estudiante de cine en la Universidad de Columbia, hizo un cortometraje sobre Brandon extraído de sus viajes a Nebraska para realizar entrevistas y asistir a los juicios de los dos hombres condenados más tarde por el asesinato de Teena. En esa época, la directora vivía en un enclave donde se concentraban artistas, intelectuales y personas LGTB en el East Village de Manhattan. La realizadora se encontraba en una precaria situación económica. No podía pagar el alquiler, le habían cortado el teléfono y ya había agotado los ahorros de su vida.

Por suerte, la productora independiente Christine Vachon (Kill Your Darlings, Happiness, Kids) se lanzó y, junto con el apoyo del Instituto Sundance y Hart Sharp Entertainment, ayudaron a Peirce a dar vida al hombre trans Brandon Teena en lo que se convirtió, cinco años después, en su impresionante debut, Boys Don’t Cry.

Este largometraje permite a Peirce ir más allá de los hechos y describir la realidad de un joven trans que lidió con las consecuencias de encontrarse en el corazón más intolerante de Estados Unidos.

Para la directora, si Brandon hubiese vivido en esta época, con el acceso a gran cantidad de información gracias a internet, Teena habría conocido mucho más sobre las personas trans. De hecho, Brandon investigó sobre someterse a una cirugía de reasignación, así que hubiese visto videos con testimonios de otras personas trans.

En una entrevista concedida por Kimberly Peirce a Ïndi Wire, la cineasta habló sobre el rodaje de la violación de Brandon y contó que mientras Sexton, Swank y Peter Sarsgaard (quien interpreta a John Lotter, el otro hombre involucrado en la violación) se preparaban para filmar esa escena , Sexton «desapareció».

En efecto, Sexton recordaba ese momento de desasosiego por el que pasó en el rodaje. Comentó que desapareció porque no se sentía capaz de abordar la violación y estuvo llorando desconsoladamente cuarenta y cinco minutos escondido tras una fábrica de lácteos. Al actor le costó mucho hacer frente a la brutal violación de Brandon ya que temía lastimar a Swank. Peirce le sugirió que hablara con la actriz. Hillary le dijo a Sexton que tenía que hacer la escena, que no se preocupara por ella.

La película transita de la delicadeza a la devastación con una habilidad asombrosa logrando que la historia que cuenta sacuda a la audiencia.

En la vida real, Lotter y Nissen desnudaron a la fuerza a Teena en un baño y lo violaron horas después. Para evitar que presentara cargos, lo mataron a él y a dos transeúntes.

Lotter está en el corredor de la muerte en Nebraska, y Nissen está cumpliendo tres cadenas perpetuas. Nissen se retractó de su testimonio original en 2007 y ahora admite que asesinó a las tres víctimas, con Lotter como su cómplice.

120 pulsaciones por minuto

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#CineLGTBI

Película francesa de 2017 dirigida por Robin Campillo que se adentra en la organización parisina Act Up (Pórtate mal) réplica del grupo homónimo fundado en Nueva York en 1987. El objetivo de esta asociación era llamar la atención sobre la pandemia de sida y las personas que la padecían con la intención de obtener legislaciones favorables, promover la investigación científica y la asistencia a las personas enfermas así como la implementación de políticas públicas adecuadas para la erradicación de la enfermedad.

Ganadora del Premio del Jurado en el Festival de Cannes, 120 pulsaciones por minuto es una cinta emotiva y vibrante con una cuidada puesta en escena y un ritmo que rebosa intensidad.

En una entrevista concedida por Campillo a Cineuropa en 2017, comentó que se unió a Act Up en 1992. Vivió el sida y los años 80 como algo extremadamente violento. En aquella época no se hablaba de ello, había una especie de ley del silencio. Como mucha gente en ese momento, infectada o no, el director de la cinta se integró en el grupo porque estaba enfadado. Quería dejar de ser víctima. El objetivo de Robin Campillo era retratar en la película el momento en el que se rompió el silencio que se cernía sobre el sida .La cinta rinde homenaje a esta época, a todos estos pequeños actos minoritarios convertirtiéndolos en eventos históricos importantes para dar vida a una epopeya de las pequeñas cosas.

Una gran parte del guión está basada en los recuerdos del director. Lo que interesaba a Campillo era cómo la gente se unía al colectivo Act Up para dejar de estar sola y formar una fuerza política con la que identificarse. En este contexto el personaje principal se aparte del grupo al contraer la enfermedad. Según explica el cineasta, lo que pretendía era que el espectador tuviera la misma percepción que él tenía cuando entró en el grupo y no podía entender algunas cosas que sucedían.

La película plantea la cuestión de la vida y de la urgencia. El director quería que la cinta fuera como una metamorfosis y que el espectador no tuviera tiempo de ver cómo se pasa de una escena a otra. Las secuencias tenían que ser ecos de las escenas siguientes mientras la escena anterior permanecía creando así una especie de remanencia durante toda la película. Según comentaba Campillo, la película está filmada de una manera un poco cruda, con la idea de reflejar la prisa, la inmediatez que impone esa urgencia que generaba la enfermedad.

El film se desliza de un género a otro, de un estilo a otro. Tiene elementos de documental, ficción, amor y tragedia. El director quería plasmar esos cambios por su idea de que, en la vida real, nos pasamos a otro universo rápidamente. Según el cineasta, cuando estamos enfermos, la comida tiene otro sabor, hay diferentes estados de subconsciencia, y cosas que vemos todos los días, no las percibimos de la misma manera.

Robin Campillo opina que si Act Up tuvo este impacto, fue porque había gente que no tenía otra opción. Eran sus cuerpos los que hablaban, personas que sufrían, que no tenían todo el tiempo del mundo, que ya eran débiles, que ya se trataban, etc. Según apuntaba, esta situación te colocaba en una situación de emergencia proporcionándote fuerza, poder, energía. Fue una lucha política muy personal. Para él era como la diferencia entre defender una causa y estar en el frente de batalla. La lucha de una comunidad que se creó con la idea de superarse a sí misma.
 

Cuando un único amor (one love) es posible. Los cambios que las personas LGBTIQ+ siguen esperando en Jamaica

Por Tamara Gámez Ramos, de @AltramuzEditorial

 

América Latina engloba una región muy amplia y diversa de países ubicados tanto en el norte de América, como en centro América y Caribe y el sur del continente. Esto conforma una realidad muy variada en todos los sentidos, también en la situación de las personas LGBTIQ+, los derechos garantizados para el colectivo y la visión social que determina unas experiencias de vida concretas en cada país.

En esta diversidad entre países encontramos realidades especialmente opuestas entre aquellos firmantes de la declaración de la Organización de Naciones Unidas sobre orientación sexual e identidad de género que, por ende, eliminaron las prohibiciones a la disidencia sexo genérica en sus códigos civiles, y aquellos países en los que las relaciones homosexuales siguen siendo prohibidas con sanciones en su legislación, penas que incluyen desde los 2 años en prisión y la cadena perpetua.

En concreto, son 8 los países de la región que aún penalizan la homosexualidad: Guyana, Granada, Jamaica, San Cristobal y Nieves, Santa Lucía, Barbados, Dominica, San Vicente y Granadinas.

Todos ellos se encuentran en el Caribe (exceptuando La Guyana, en América del Sur). Y en 5 de los 8 la homosexualidad entre hombres es la única penalizada (Guyana, Granada, Jamaica, San Cristóbal y Nieves y Santa Lucía). Esto no siempre corresponde a una ausencia de punitivismo social hacia las mujeres sino a una falta explícita de visibilidad, puesto que estas leyes pertenecen a un período en el que la existencia del lesbianismo ni siquiera era considerada.

Cabe destacar que la legislación punitiva y la persecución a la disidencia sexo-genérica se inician con la colonización, trayendo consigo la persecución y castigo de la sodomía, con la instauración incluso de tribunales de la inquisición que penaban con la muerte a los supuestos sodomitas, y la aprobación de leyes que sancionaban las relaciones entre personas del mismo sexo. Muchas de estas legislaciones son las que perduran hoy día en los países que continúan sancionando la homosexualidad.

Este es el caso de Jamaica, donde la Ley de Delitos contra la Persona, de la época colonial británica (1864), sanciona las relaciones entre hombres hasta con 10 años de prisión, además de la imposición de trabajos forzados. Se trata del artículo 76 que prohíbe expresamente «el abominable crimen de la sodomía». El artículo 77, por su parte, condena el «intento de sodomía» hasta con 7 años de prisión, y el artículo 79 prohíbe «cualquier acto de escándalo público» entre hombres, en público o en privado, con condenas de hasta dos años de cárcel, con o sin trabajos forzados. El «escándalo público» no es un concepto definido en el código penal del país, pero ha sido interpretado como cualquier indicio de homosexualidad entre adultos varones.

Estas regulaciones se defienden como parte de los valores cristianos del país. Sin embargo, como señala la única organización de derechos LGBTIQ+ en Jamaica, J-FLAG (Foro Jamaiquino de Lesbianas, Pansexuales y Gays), el país no cuenta con legislación respecto a otras realidades sancionables en la Biblia como el adulterio, el cual, al contrario, es elogiado como una muestra de masculinidad en el caso de los hombres.

Todo este imaginario se visibiliza y refuerza a través de la cultura. En este sentido, el reggae y el dancehall, por ejemplo, dan cuenta de algunos artistas y letras que incitan al odio y al asesinato de personas homosexuales. Cantantes jamaicanos internacionalmente conocidos como Sizzla, Capleton o Buju Banton cuentan con canciones explícitas de LGBTIQ+fobia. Este último fue arrestado por formar, supuestamente, parte de un grupo de 12 hombres que entraron en una casa y apalearon a 6 chicos por ser homosexuales.

La incidencia del movimiento LGBTIQ+ ha conseguido que algunos de los conciertos de estos artistas sean cancelados, y varias de estas canciones fueran eliminadas del repertorio, incluso de la discografía y de las listas de reproducción, como es el caso de la canción Boom Bye Bye de Buju Banton retirada de la mayoría de plataformas desde 2019, con letras que invitan a disparar a la cabeza a los homosexuales (o batty bwoy en la jerga jamaicana, nombre despectivo que viene del inglés butt boy o chico del culo).

Aunque el lesbianismo no está tipificado como delito en la legislación jamaicana, los hombres homosexuales no son el único objetivo de este tipo de violencia en Jamaica. Amnistía Internacional ha recibido numerosos reportes de actos de violencia contra mujeres lesbianas, incluidas «violaciones correctivas» y otras formas de violencia sexual. Estas, en ocasiones, se producen cuando una mujer es identificada como “masculina”, evidenciando la violencia explícita también hacia la disidencia de género.

Ejemplo de ello, fue el asesinato de Dwayne Jones en 2013. La chica, de 16 años, acudió a una fiesta de baile en Montego Bay. Cuando los asistentes a la fiesta se dieron cuenta de que era una chica trans, le agredieron en masa hasta dejarla sin vida. Dwayne se encontraba en situación de sinhogarismo desde los 12 años, rechazada por su familia debido a su identidad de género.

El asesinato de Dwayne recibió la atención de los medios de comunicación nacionales e internacionales, sirviendo de catalizador para el debate sobre la situación del colectivo LGBTIQ+ en Jamaica. El ministro de Justicia en aquel momento, Mark Golding, condenó la brutalidad de los hechos y pidió a la policía que «no escatimara esfuerzos para llevar a los autores ante la justicia». En el Parque de la Emancipación de Kingston tuvo lugar una pequeña protesta pública contra el asesinato. La policía entrevistó a los testigos; sin embargo, no realizaron ninguna detención ni identificaron a ningún posible sospechoso.

Varios organismos internacionales se han pronunciado sobre esta legislación vulneradora de los derechos humanos. En 2005, por ejemplo, el Parlamento Europeo aprobó una resolución apelando a que Jamaica revocara sus leyes contra la sodomía y combatiera activamente la homofobia. En 2008, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos solicitó a Jamaica que derogara las leyes que prohíben las relaciones sexuales consentidas entre personas del mismo sexo, considerando que las leyes de Jamaica violan el derecho a la intimidad y a la igualdad de protección. El gobierno jamaicano, sin embargo, considera estas intervenciones como una intromisión en la política del país, cuyos valores se encuentran representados en la legislación vigente.

Una encuesta en 2004, indicaba que el 96% de la ciudadanía se oponía a cualquier cambio que pudiera conducir a la legalización de las relaciones homosexuales. En la Encuesta Nacional de 2015 sobre Actitudes y Percepciones hacia las Relaciones entre Personas del Mismo Sexo, elaborada por J-FLAG, apenas existe evolución, solo el 12% de la ciudadanía manifestaba tolerancia hacia las personas LGBTQI+.

La ausencia de estadísticas y la invisibilidad de las personas LGBTIQ+ no facilitan conocer la situación real que se encuentra viviendo el colectivo.

J-FLAG indica que tiene constancia de que 30 hombres fueron asesinados en Jamaica entre 1997 y 2004. Y entre 2009 a 2021 registró más de 600 denuncias de ataques contra personas LGBTIQ+, entre los que se encontraban allanamientos de morada, agresiones físicas y ataques en grupos multitudinarios (turbas).

El papel de los colectivos LGBTIQ+ y las personas activistas es fundamental. J-FLAG se creó en 1998 y desde entonces lucha por reivindicar y garantizar los derechos del colectivo. Ha liderado la celebración del Orgullo en el país desde el 2005, visibilizando y sensibilizando sobre la necesidad de despenalizar la disidencia sexo-genérica.

Su fundador, Brian Williamson, quien se evidenciaba abiertamente como activista LGBTIQ+, fue asesinado en 2004. El periodista Gary Younge para The Guardian recogió el testimonio de Rebecca Schleifer, del Observatorio de los Derechos Humanos, quien al acudir a su cita con Williamson en el domicilio de este, encontró a los agresores festejando el asesinato con insultos y canciones homófobas. A pesar de esto, la policía negó la motivación homófoba del asesinato.

Brian Williamson no ha sido el único activista LGBTIQ+ asesinado en el país. Lenford Steve Harvey, trabajador social involucrado en la lucha contra el VIH-Sida fue asesinado en 2005, concretamente el 1 de diciembre, coincidiendo con el día mundial de la reivindicación de esta causa.

Human Rights Watch presentó el informe Not Safe at Home. Violence and Discrimination against LGBT people in Jamaica (2014), que documenta la violencia generalizada contra las personas LGBTIQ+ en el país. Entre otros aspectos, el informe reporta los resultados de 71 entrevistas a personas LGBTIQ+. Del total, más de la mitad (44) había sido víctima de alguna forma de violencia basada en su orientación sexual o identidad de género, únicamente 19 de ellos había denunciado estos hechos a la policía y solo se tomó declaración en la mitad de los casos.

El Informe The developmental cost of homophobia. The Case of Jamaica (2016), con una encuesta basada en 316 personas entrevistadas, indicaba que en los cinco años anteriores a la encuesta, el 32% de las personas entrevistadas había sido amenazada con ser agredida físicamente, mientras que el 12% había sido agredida. El 23,7% había recibido amenazas con violencia sexual, y el 19% había sufrido agresiones sexuales. Solo el 59% había denunciado estos hechos. El 41% que no lo hizo, sentía vergüenza, temor, le restaba importancia a lo sucedido o desconfiaba de la actuación de la policía y de las posibles represalias.

Tanto esta encuesta como las anteriores, deben enmarcarse en un contexto en el que la visibilidad de las personas LGBTIQ+ está fuertemente condicionada, lo que impacta en la exposición a la violencia. En la encuesta anterior, por ejemplo, el 38% no era visible en el trabajo o en la Universidad, y el 42% no había salido del armario con ningún miembro de la familia. Esta cifra se ve aumentada en otros contextos: frente al personal médico (55%), sus superiores de trabajo (60%), las organizaciones religiosas (63%) y el vecindario (68%).

A nivel institucional y legislativo, en 2011 se introdujeron algunos avances. El gobierno jamaicano aprobó la Carta de Derechos y Libertades Fundamentales, pero ello no trajo consigo ninguna garantía de no discriminación al colectivo LGBTIQ+, a pesar de las reclamaciones internacionales y de parte de la ciudadanía jamaicana.

El único acercamiento a este respecto ha sido la creación del Formulario de Evaluación de la Atribución de la Violencia, desarrollado por el Ministerio de Seguridad. En él se menciona específicamente el «delito de odio» como causa de los delitos violentos y se enumera la «orientación sexual e identidad de género» como una de las posibles motivaciones. En estos casos, se exige que la policía lleve a cabo evaluaciones inmediatas para determinar si realmente se ha producido un delito de odio. Sin embargo, este concepto no ha sido definido, lo que genera una articulación confusa en la práctica para corroborar los hechos.

En febrero de 2021, la Comisión Internacional de Derechos Humanos publicó un informe sobre los derechos del colectivo LGBTQI+ en Jamaica, estudiando las peticiones de dos personas del colectivo LGBTIQ+ jamaicanas que exponían que, al criminalizar la homosexualidad, el país estaba violando la Convención Americana de Derechos Humanos. El informe concluyó en la responsabilidad del gobierno de las violaciones de derechos reportadas. Aunque no ha supuesto cambios legislativos, ha reforzado los discursos que apoyan la derogación de la penalización de la homosexualidad, la dificultad para ello es la alianza visible con miembros influyentes y agentes de la política, puesto que la mayoría no quiere exponerse a los grupos y ciudadanía que se opone a la derogación de estas leyes.

Tras más de 20 años de incidencia y activismo de la entidad J-FLAG y de la lucha de las personas del colectivo, en la actualidad se observa una mayor tolerancia y una mayor interacción con la comunidad LGBTIQ+, lo que impacta en la construcción de una ciudadanía más segura y una atención más adecuada en todas las áreas de la vida. En particular, J-FLAG ha conseguido formar a más de 500 personas trabajadoras del área sanitaria, a partir de un acuerdo con el Ministerio de Salud del país, con el deseo de que este sea uno de los muchos avances que consigan despenalizar al colectivo y garantizar a las personas LGBTIQ+ una vida libre de miedo.

 

Rainbow pride flag flying in the daytime breeze. Original public domain image from Wikimedia Commons

Lesbianas en la Historia: La reina Cristina de Suecia

Por Charo Alises (@viborillapicara)
#MujeresLesbianas

 

Cristina de Suecia nació en Estocolmo el  8 de diciembre de 1626. Hija de Gustavo II Adolfo y de María Leonor de Brandeburgo, reinó en Suecia desde 1632, pero con plenos poderes desde 1650. Gran protectora de las artes, fue una importante  mecenas. 

Pertenecía a la dinastía real de los Vasa, iniciada en 1521. Su madre procedía de la dinastía alemana de los Hohenzollern. El nacimiento de Cristina parece que no fue bien recibido por su  madre, quien deseaba darle a Gustavo II Adolfo un heredero varón que siguiera sus pasos. Sin embargo, el rey  aceptó de buen grado a su hija y en 1627 la confirmó como su heredera. Gustavo Adolfo estaba muy apegado a Cristina y ésta  profesaba a su padre una gran admiración. 

Al morir el rey de forma prematura, Cristina se convirtió en reina de Suecia antes de cumplir los seis años, quedando bajo la regencia del canciller Oxenstierna.

El canciller cumplió con los deseos del rey, tomó a Cristina bajo su protección y comenzó a preparar su educación de forma metódica. Por razones de Estado, la  reina fue separada de su madre siendo muy niña y puesta al cuidado de su tía Catalina, hermana del difunto rey. Cristina pasó un par de años junto a su primo Carlos Gustavo, el futuro soberano Carlos X Gustavo, pero volvió al cuidado de su madre cuando su tía Catalina falleció. La relación con su madre fue difícil lo que motivó que  la niña pasara  a vivir con la  hermana del canciller Oxenstierna.

 Oxenstierna se hizo cargo de educar a Cristina en asuntos de Estado y política. El obispo Johannes Mattiae Gothus, nombrado jefe de estudios, instruyó a la joven reina  en idiomas, filosofía, historia, teología y astronomía, entre otras materias. Mattiae dejó testimonio de  la gran facilidad para el aprendizaje y la enorme sed de conocimientos que mostraba Cristina. La asignatura  preferida de la soberana eran los idiomas que siguió aprendiendo a lo largo de  su vida.

Cristina poseía un temperamento fuerte, inquieto y vivaz, así como una gran energía física. Los llamados quehaceres femeninos no le atraían, tampoco los lujos, joyas o ropajes. Prefería vestir ropas simples y cómodas, y especialmente indumentaria considerada masculina en aquella época.  Mostraba gran destreza  en  deportes como la equitación, la caza y la esgrima. Dormía poco y dedicaba gran parte de su tiempo al estudio

Dotada de una inteligencia viva y una cultura humanista, fue una reina brillante en la política pero descuidada en asuntos de Estado lo que causó  insatisfacción entre el pueblo sueco. Convirtió Suecia en uno de los reinos más cultos y refinados de Europa, hasta en punto que Estocolmo fue apodada la  Atenas del norte.

Cristina siempre se mostró reticente a casarse. Cuando el Senado la instó a contraer matrimonio en 1649, ella respondió:

El matrimonio implica una sujeción a la que no me siento capaz de someterme, y no puedo predecir cuándo podré superar esa repugnancia.

La reina  mantuvo una relación sentimental con Ebba Sparre, una dama de la corte famosa por su belleza. La monarca dirigió a Ebba numerosas cartas que confirman el amor entre ellas. En 1657 durante su exilio en Pesaro, Cristina escribe a la condesa Spare:

Si no has olvidado la facultad que tienes sobre mí, recordarás que ya son doce años que estoy poseída por ser amada por ti.

Finalmente soy tuya de tal manera que es imposible que me pierdas, y no será más que el final de la vida que dejaré de amarte.

Como Cristina no tenía ninguna intención de contraer matrimonio y para evitar habladurías sobre su orientación sexual, nombró príncipe heredero al trono a su primo Gustavo Adolfo el 10 de marzo de 1649.  

La reina sueca se convirtió al catolicismo en 1654 en medio de una gran crisis religiosa y abdicó en su primo que se convertiría en el rey Carlos X.

Para evitar ser víctima de represalias, se marchó de Suecia y vivió en  diversos países europeos. Finalmente se instala en Roma donde pasaría el resto de sus días dedicada a diversas obras de caridad, la música, la pintura y el teatro.  

 

COS by Pic a Pic licensed under CC BY 2.0

Lesbianas en la Historia: Gloria Fuertes

Por Charo Alises (@viborillapicara)
#MujeresLesbianas

En las noches claras,
resuelvo el problema de la soledad del ser.
Invito a la luna y con mi sombra somos tres.

Lesbiana, feminista, solitaria, cuentista y motera. Gloria Fuertes nació en Madrid el 28 de julio de 1917. De familia humilde, se crió en el barrio de Lavapiés. Con cinco años ya mostraba interés por las letras y empezó a escribir y dibujar sus cuentos pese a no contar con el apoyo de su familia:

Cuando mi madre me veía con un libro, me pegaba. Nadie de mi familia me dijo nunca «escribe, hija, escribe, que lo haces bien…». Nadie. No tengo nada que agradecer a mi familia. Pero cuando se quiere una cosa, aunque tu familia no te ayude, se consigue. Si vales de verdad y quieres algo con todas tus ganas, sales adelante seguro.

A los catorce años publica su primer poema Niñez, juventud, niñez. Asistió al Instituto de Educación Profesional de la Mujer obteniendo los diplomas de Taquigrafía, Mecanografía, Higiene y Puericultura. Cuando muere su madre empieza a trabajar como contable sin dejar de escribir poemas. Por esa época publica sus primeros versos y comienza a dar recitales de poesía en la radio.

En 1945 se estrenan obras suyas en diversos teatros de Madrid. Empieza a publicar en revistas destinadas al público infantil. En 1949 se edita el libro Canciones para niños y en 1950 Pirulí (Versos para párvulos), y organiza la primera Biblioteca Infantil ambulante por pequeños pueblos.

Fundó en 1951, junto con María Dolores de Pablos y Adelaida Las Santas, el grupo femenino Versos con faldas que durante dos años realizó frecuentes lecturas y recitales por cafés y bares de Madrid.

Además de su dedicación a la infancia, Gloria colaboraba en revistas para adultos como Rumbos, Poesía Española y El Pájaro de Paja. En 1950 participó en la creación de la revista poética Arquero con Antonio Gala, Julio Mariscal y Rafael Mir . Gloria dirigió esa publicación hasta 1954.

En 1952 se estrena en el Teatro del Instituto de Cultura Hispánica su primera obra teatral en verso: Prometeo, que recibió el Premio Valle-Inclán.

Estudió biblioteconomía e inglés en el Instituto Internacional de Madrid. Allí conoció a la hispanista estadounidense Phyllis Turnbull, que sería su pareja durante quince años. Trabajó como bibliotecaria hasta 1961 cuando obtuvo la beca Fulbright en Estados Unidos para impartir clases de Literatura española en la Universidad Bucknell, y fue -dijo- la primera vez que pisó una universidad. Después ejerció la docencia en el Mary Baldwin College y en el Bryn Mawr College, hasta su vuelta a España en 1963. Cuando regresa de Estados Unidos se dedica a dar clases de español para americanos en el Instituto Internacional. En 1972 se le concedió una nueva beca de la Fundación Juan March de Literatura Infantil.

A mediados de la década de 1970 se hace muy popular por sus apariciones en diversos programas infantiles de TVE, como Un globo, dos globos, tres globos, La mansión de los Plaff y La cometa blanca. Recibió el Aro de Plata gracias a esos trabajos. Esta dedicación al mundo de la infancia llegó a eclipsar su faceta de poeta comprometida con la realidad social de su tiempo. En el extranjero, sin embargo, Gloria Fuertes es una poeta fundamental de la posguerra española. Estados Unidos cuenta con especialistas en su obra, sobre las que se han realizado varias tesis doctorales. En Noruega su foto adorna la cola de los aviones de la Norwegian Airlines. Se han llevado a cabo estudios pormenorizados sobre su poesía social y su estilo particular que mezcla realidad y ficción en un lenguaje coloquial y una estilo único.

En sus versos destapa el interior de su ser. La poeta no ocultó su lesbianismo y aunque habla del amor en general, lo menciona en ocasiones como cuando dice me nombraron patrona de los amores prohibidos. Su gran amor fue Pyllis y cuando ésta murió Gloria quedó desolada y vertió en sus poemas el dolor que la arrasaba.

Ella y Gabriela Mistral son las únicas mujeres incluidas en la antología Norton que agrupa a cien poetas en lengua castellana. Jaime Gi de Biedma seleccionó sus versos en importantes colecciones. Goytisolo, Hierro y Nieva alabaron sus innovaciones técnicas.

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Margarita Xirgú

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#Mujereslesbianas

 

Margarita nació en Molins de Rei en 1888.  Su infancia transcurrió en un barrio barcelonés. La vocación actoral de Xirgú se inició a los ocho años una tarde en una taberna cuando un grupo de obreros le pidieron leer un manifiesto. Ese día recibió su primera ovación .

El primer trabajo de la actriz sobre el escenario fue en 1906 con el personaje de Blanca en Mar i Cel,en el Teatre Romea. Más tarde obtendría un gran éxito con Joventut de príncep en el Teatre Principal.
En 1909, comenzó su carrera cinematográfica con Guzmán el Bueno.  En 1911 Àngel Guimerà escribió para ella La reina jove, ese año creó su propia compañía de teatro. En 1912 un empresario porteño la contrató para trabajar en Sudamérica.

Estrena Patio azul de Santiago Rusiñol en el Teatro de la Princesa de Madrid en 1914. La crítica la define como renovadora de la escena. Importantes autores como Pérez Galdós, Benavente, Marquina o los hermanos Quintero, le escriben obras que estrena con un éxito abrumador.
Interpretó a la sirena en La sirena varada en 1934, escrita por Alejandro Casona.

Margarita Xirgú conoció a Federico García Lorca en un bar de Madrid en 1926. En esa época nadie parecía tener mucha fe en el poeta y, sin embargo, la actriz apostó por Federico. Según Maurer, especialista en la obra de Lorca:

«Se arriesgó mucho con él; García Lorca no era un dramaturgo, sino un poeta», dijo Christopher Maurer.

El estudioso explica que, por sus opiniones de izquierda, la gente la llamaba ‘Margarita, la Roja’, con el peligro que esas ideas suponían en la España de Franco.

Protagonizó la primera versión cinematográfica de Bodas de sangre, filmada en febrero-marzo de 1938, la única versión cinematográfica de una obra de García Lorca . Fue la única película sonora de Xirgu. Se emitió por primera vez en la televisión argentina en enero de 1966.

García Lorca y Xirgu, según cuenta Andrea Weiss en su documental Bones of contention:
«Eran parte de ese mundo marginal de las personas homosexuales y eran tan abiertos como se podía en aquella época. Era uno de esos secretos a voces.»

Federico García Lorca desde el estreno de Mariana Pineda, la actriz interpretó todas sus obras. Esto es lo que el poeta pensaba de ella:
«Es un caso de extraordinario talento que se impone a la ñoñería actual de nuestro teatro en batallas constantes de inquietudes interpretativas. Cada tarde en la penumbra fría del escenario me sorprende el arte genial de Margarita con un nuevo matiz, conseguido la noche anterior en el silencio de sus insomnios.»

Xirgú nunca pudo ser muy explícita respecto a su sexualidad. Sin embargo, se reivindicó como una mujer lesbiana cuando comenzó su vida en América. De todas formas, para protegerse, contrajo matrimonio con Josep Arnall y posteriormente con Miguel Ortín. En esa época la actriz tuvo una relación sentimental con la periodista Irene Polo. También se le conoció un idilio con la pintora y escenógrafa Victorina Durán. Al parecer la interprete frecuentó el Círculo Sáfico de Madrid.

Margarita Xirgú murió en la localidad uruguaya de Maldonado en 1969, después de haberse convertido en ciudadana de ese país . En 1988 el gobierno catalán repatrió sus restos y ahora están enterrados en Molins de Rei

 

Premio ‘Empar Pineda’ para el fomento de la investigación sobre mujeres mayores lesbianas en España

Por Fundación 26 de diciembre

La Fundación 26 de Diciembre convoca la primera edición del Premio Empar Pineda para el fomento de la investigación realizada por mujeres, y cuyo objeto de estudio sea la mujer mayor lesbiana en España. El objetivo del premio es fomentar la actividad investigadora, así también como la difusión y publicación de los resultados obtenidos en las investigaciones.

Este premio tiene también por objetivo dar notoriedad y visibilidad a los proyectos e investigaciones realizadas por mujeres y cuyo objeto de estudio sea la mujer mayor lesbiana en España, en cualquiera de sus manifestaciones, perspectivas teóricas y metodológicas.

La Fundación 26 de Diciembre, entidad sin ánimo de lucro especializada en las personas mayores LGTBIQ+, convoca este premio en cumplimiento de uno de sus objetivos fundacionales, el fomento de estudios e investigaciones sobre la población a la que se dirige la entidad. El nombre del premio es un homenaje y reconocimiento a Empar Pineda, histórica activista feminista y lesbiana. Empar Pineda también formó parte del Patronato de la Fundación 26 de Diciembre.

De entre todos los trabajos que se presenten, el mejor valorado por el jurado recibirá un premio de 1.000 €. La entrega del premio se realizará durante el V Encuentro de Investigación, Memoria y Experiencias LGTBIQ+, que se desarrollará a finales de 2022 en Madrid.

Las investigadoras o grupos de investigación (al menos el 75% de sus miembros deben ser mujeres) que quieran presentarse, deben hacerlo antes de las 23:59 horas del 31 de octubre de 2002. Puedes consultar las bases completas aquí.

 


Más info: www.fundacion26d.org/premioemparpineda