Es probable que lo más identificativo de Victoria’s Secret sea su característico mensaje ligado a la sensualidad. Perfumes con el packaging rosa, encajes, alas y purpurina son solo algunos complementos que rodean lo que la marca quiere transmitir.

GTRES
Lo de que solo querían hacer lencería relacionada con mujeres atractivas quedó claro cuando la firma explicó que no pensaba aumentar el tallaje para hacer sus productos más inclusivos y disponibles para todas las mujeres.
Simplemente es algo que no interesa a la empresa lencera. Tienen sus ángeles, sus iconos, sus clientes y mientras la fórmula funcione y el desfile de visitas, se va a seguir haciendo. Sí, aunque las ventas vayan en picado trimestre tras trimestre.
Y su bien Victoria’s Secret no nos da trozo del pastel, nos regala una pequeña golosina para que se nos quite el mal sabor de boca, y esa golosina tiene nombre y apellidos: Winnie Harlow.
La modelo ha sido fichada para desfilar por primera vez para la marca americana. Lo que hace tan especial a la canadiense de 24 años, que hace poco estuvo desfilando para Tommy Hilfiger, es el vitíligo, una enfermedad degenerativa de la piel que hace que su epidermis se despigmente.
Para un espectáculo con una audiencia como el de Victoria’s Secret, la noticia es grande, desde luego (recordemos que es el evento no deportivo más visto a nivel mundial). Pero por mucho que es un paso importante a favor de la diversidad, no es suficiente.
Todos empezamos caminando antes de echar a correr, pero que en 23 años haciendo el desfile, esta sea la primera vez que sale una modelo con una enfermedad dermatológica no me parece una velocidad suficiente.
No quiero esperar otros 23. La firma tiene que entender que si no se adapta a los nuevos tiempos, al body positive, a la inclusión de modelos de más edad (Zara apostó hace poco por una modelo mayor de 30 años para su catálogo) y a diferentes cuerpos, esas ventas que van cuesta abajo, no harán otra cosa más que seguir empeorando.