Archivo de diciembre, 2022

Estereotipos- Bisexualidad

Viñeta de Teresa Castro (@tcastrocomics)

Momentos de magia y lecturas compartidas con perspectiva de género y de diversidad

Por Nieves Gascón, (@nigasniluznina), la cuentista de nuestro refugio

El pasado 11 de noviembre, Día Internacional de las Librerías, tuvimos la suerte de contar con la visita en Madrid de Raquel Díaz Reguera y Susana Isern Gómez, en la librería infantil y juvenil De Cuento , y gracias al apoyo de la editorial Nube Ocho.

Ambas autoras, escritoras e ilustradoras, contaron sus dos últimos álbumes ilustrados publicados: Soy solo mía, de Raquel, y Daniela y las mujeres piratas de la Historia, de Susana.

Es una gozada asistir a encuentros de lectura, pero es mucho más emocionante cuando las personas que los han creado son las mismas que los relatan. La librería De Cuento especializada en publicaciones infantiles, en un enclave céntrico y con una interesante oferta de publicaciones y encuentros, para esta ocasión estaba llena, rebosante de familias, pero sobre todo de niños, niñes y niñas sentadas por todas partes, en el suelo y bancadas de la sala, escuchando expectantes a ambas autoras sin perder detalle. Hubo alguna que otra interrupción inquieta de algún o alguna peque, porque ambas historias invitan a repensar, a removernos en el asiento y sobre todo a sentir a través de las palabras, la perspectiva de género y estupendas ilustraciones.

Comencemos por Daniela Pirata, personaje ya con una trayectoria aventurera que nos acompaña desde 2017 en varias publicaciones (Daniela Pirata, Daniela Pirata y la Bruja Sofronisa, Daniela y las chicas pirata) y desde su inicio rompiendo estereotipos de género y demostrando que las niñas pueden y deben ser libres, valientes, intrépidas y líderes de forma absolutamente positiva y contra todo pronóstico tradicional, rancio o patriarcal. Romper con los prejuicios y estereotipos abre una enorme puerta al crecimiento y consolidación de la identidad de género deseada, sentida y libremente constituida a niñas y adolescentes.

En esta ocasión, con Daniela y las mujeres piratas de la Historia, Susana ,su creadora, y Daniela, la protagonista, nos presentan a diez mujeres piratas, llevándonos a conocer a Awilda, Mary Read, Lai Choi Sab, Grace O´Malley, Ching Shih, y otras piratas que hicieron cosas muy especiales a pesar de los impedimentos y barreras de género que encontraron, y que con su fuerza, superaron, dando presencia a las mujeres invisibilizadas en la transmisión del conocimiento histórico, y completándolo. De la mano de Susana y Daniela, estas historias nos hicieron viajar desde el salón de la librería a diferentes lugares del mundo y épocas, pero sobre todo nos hizo comprender que las niñas son tan capaces o más, de llegar a ser intrépidas aventureras o lograr muchos otros objetivos vitales que se propongan. Gracias a Susana y Daniela.

Tras Daniela y las mujeres piratas de la Historia, llegó el momento para escuchar Soy solo mía narrado por Raquel, su autora. El relato nos describe la realidad de una relación de pareja entre ratones que se va haciendo cada vez más violenta por el abuso de poder y transformación del integrante que maltrata a su pareja, hasta convertirse en un felino muy peligroso. Se trata de una escalada de agresiones, de violencia desmedida de género, que también puede darse entre iguales, desde el acto más sutil hasta la casi destrucción del otro, otra u otre, en relaciones diversas de pareja o incluso de amistad.

Frente a las agresiones Raquel nos da una solución: la solidaridad y el apoyo en un entorno de amistad y amor, identificando los actos de violencia, escapando de las relaciones destructivas y rodeándonos de las personas que positivamente alimentan nuestra autoestima y nos fortalecen. Por eso somos “solo nuestres”, que en caso de la ratona protagonista, su Sólo mía se confronta frente el abuso como escudo de protección y salvaguarda. La pareja agresiva, el ratón va transformándose poco a poco en gato, y podemos observar en el desarrollo de la historia, como va consolidándose en este rol agresor a través de situaciones de intimidación y ataques muy concretos. De esto se trata, que niños, niñas y niñes conozcan e identifiquen aspectos muy concretos en sus relaciones, para abandonar libremente las que son perjudiciales y apoyar a las víctimas de violencia. Un regalo que nos hace Raquel, con preciosas ilustraciones, un estilo de crear, entender y trasmitir, muy muy especiales. Un placer escucharle, leerla y conocerla.

El Día Internacional de las Librerías pasamos una preciosa tarde tanto peques, como familias y personas adultas “usurpadoras” de un espacio de literatura infantil absolutamente recomendable.

Solo me queda agradecer e invitaros a vivir estos momentos de lectura y magia todo lo que podáis y más, en familia o en soledad deseada.

¡Hasta pronto y Felices Fiestas!

 

Boomers y Millennials

Viñeta de Teresa Castro (@tcastrocomics)

Rara

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#CineLGTBI

Película chilena de 2016 dirigida por Pepa San Martín. La cinta está basada en el caso real de la jueza chilena Karen Atala que perdió la custodia de sus hijas en 2003 por tener una relación con una mujer y vivir con ella. La película está contada desde el punto de vista de una de las menores, por eso comienza con un plano secuencia en el que la cámara se coloca detrás de la adolescente protagonista a la que seguimos en su cotidianidad y esto nos ayuda a empatizar con lo que sucede cuando se conoce la orientación sexual de la madre. Solo vemos y escuchamos lo que Sara ve y escucha.

En la vida real, la protagonista de esta historia estaba divorciada y tenía la custodia de sus hijas. Al padre se le concedió un régimen de visitas semanal. Cuando la jueza tiene una relación con otra mujer y comienza a vivir con ella, el padre solicita la custodia de las niñas . Para conseguir su objetivo, el ex de la Atala recurre al tribunal de menores, a la segunda instancia y, finalmente, a la Corte Suprema de Chile. Ëste tribunal le da la razón al padre porque entiende que la decisión de Atala de explicitar su orientación sexual se ha antepuesto a los intereses de sus hijas. Lo que se esgrime es el interés superior de las menores También se argumentó que los efectos de la convivencia de la madre con su nueva pareja podían llevar a las niñas a una eventual confusión de roles sexuales. Para la Corte, las hijas estaban en situación de riesgo y de especial vulnerabilidad ya que su entorno familiar se diferenciaba del de sus compañeras y compañeros de colegio. Esta cuestión se refleja en la cinta cuando un profesor le pregunta a una de las chicas si alguien le ha molestado por la orientación sexual de su madre y le dice a la niña, que ella tiene derecho a vivir en un ambiente normal como el resto de niña y niños del colegio. El argumento de la posible discriminación de los hijos e hijas de parejas del mismo sexo se utiliza para retirar la custodia a las madres lesbianas, a pesar de que las menores manifiesten que están muy bien en casa con su madre. Otra de las cuestiones, relacionadas con lo anterior, es la imposición de silencio y ocultamiento a las madres lesbianas para que no visibilicen su orientación sexual ya que se piensa que así se evita la discriminación de sus hijas e hijos. De hecho, en la cinta la madre de la jueza le dice que no haga pública la relación que tiene con otra mujer para impedir que sus hijas sean discriminadas.

En la vida real, caso terminó con la retirada de custodia de las hijas a la jueza, que. demandó al estado de Chile ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Ocho años después la citada Corte le dio la razón a Karen Atala en una sentencia en la que se argumentó que la orientación sexual de la madre no tenía nada que ver con sus habilidades de crianza. Y es que, la capacidad para cuidar y educar es algo que a las personas LGTBI se nos cuestiona argumentando que no somos aptas para formar familias y cuidar y educar a nuestra prole. Además, la Corte Interamericana apunta en su resolución, que los estados no pueden utilizar la orientación sexual de las personas como justificación para discriminar.

La puesta en escena es atenta con los detalles, sin grandes artificios. Destaca por su sencillez y espontaneidad. La cámara fija se detiene en todas las estancias sin enseñar ninguna. La película se apoya en diálogos naturales y un ritmo ágil que hace avanzar la historia.

Pepa San Martín, tras realizar varios cortos, debutó como directora de largometrajes con esta cinta que tuvo muy buena acogida en los festivales internacionales en los que se proyectó. En 2016, Rara ganó el Premio a la Mejor Película Latinoamericana en el Festival de San Sebastián.

Lesbianas en la Historia: Gabriela Mistral

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#MujeresLesbianas

Lucila de Godoy Alcayaga, más conocida como Gabriela Mistral, nació en la localidad chilena de Vicuña el 7 de abril de 1889. Poeta, pedagoga y diplomática, por su obra  recibió el Premio Nobel de Literatura en 1945.

Mistral nació en la pobreza .Se crió en el remoto Valle de Elqui, en los Andes chilenos. Su educación formal se limitó a los tres primeros años de escuela primaria gracias a las clases de su hermanastra Emelina Molina, maestra rural en el pueblo de Montegrande. El trabajo de Emelina mantenía la economía familiar ya que el padre de Gabriela abandonó el hogar antes de que ella cumpliera tres años. Lee el resto de la entrada »

Boys don’t cry

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#CineLGTBI

 

Dirigida por Kimberly Peirce en 1999, Boys don´t cry es una película estadounidense que narra la historia real de Brandon Teena, joven trans que tras vivir conforme a su identidad y conocer el amor con una chica en Nebraska, acaba siendo violado y asesinado por dos ex- convictos el 31 de diciembre de 1993

Estrenada en el Festival de Cine de Nueva York el 8 de octubre de 1999, la cinta fue bien acogida entre el público y la crítica que alabó las interpretaciones de Swank y Savigny. Sin embargo, la familia de Brandon Teena no quedó satisfecha con el resultado de la película ya que, según decían, no contaba de una forme verídica el crimen de odio perpetrado contra Brandon.

La película supuso la brillante entrada de la, hasta ese momento desconocida, Hillary Swank en Hollywood. Swank obtuvo un Óscar por su brillante interpretación de Brandon Teena. La contención de Hillary Swank dista de la desbordante composición que realiza Chloë Sevigny de su personaje, la chica que se enamora de Teena. El resultado del contraste entre ambas actrices hace brillar la cinta.

En el momento del asesinato, Peirce, entonces estudiante de cine en la Universidad de Columbia, hizo un cortometraje sobre Brandon extraído de sus viajes a Nebraska para realizar entrevistas y asistir a los juicios de los dos hombres condenados más tarde por el asesinato de Teena. En esa época, la directora vivía en un enclave donde se concentraban artistas, intelectuales y personas LGTB en el East Village de Manhattan. La realizadora se encontraba en una precaria situación económica. No podía pagar el alquiler, le habían cortado el teléfono y ya había agotado los ahorros de su vida.

Por suerte, la productora independiente Christine Vachon (Kill Your Darlings, Happiness, Kids) se lanzó y, junto con el apoyo del Instituto Sundance y Hart Sharp Entertainment, ayudaron a Peirce a dar vida al hombre trans Brandon Teena en lo que se convirtió, cinco años después, en su impresionante debut, Boys Don’t Cry.

Este largometraje permite a Peirce ir más allá de los hechos y describir la realidad de un joven trans que lidió con las consecuencias de encontrarse en el corazón más intolerante de Estados Unidos.

Para la directora, si Brandon hubiese vivido en esta época, con el acceso a gran cantidad de información gracias a internet, Teena habría conocido mucho más sobre las personas trans. De hecho, Brandon investigó sobre someterse a una cirugía de reasignación, así que hubiese visto videos con testimonios de otras personas trans.

En una entrevista concedida por Kimberly Peirce a Ïndi Wire, la cineasta habló sobre el rodaje de la violación de Brandon y contó que mientras Sexton, Swank y Peter Sarsgaard (quien interpreta a John Lotter, el otro hombre involucrado en la violación) se preparaban para filmar esa escena , Sexton «desapareció».

En efecto, Sexton recordaba ese momento de desasosiego por el que pasó en el rodaje. Comentó que desapareció porque no se sentía capaz de abordar la violación y estuvo llorando desconsoladamente cuarenta y cinco minutos escondido tras una fábrica de lácteos. Al actor le costó mucho hacer frente a la brutal violación de Brandon ya que temía lastimar a Swank. Peirce le sugirió que hablara con la actriz. Hillary le dijo a Sexton que tenía que hacer la escena, que no se preocupara por ella.

La película transita de la delicadeza a la devastación con una habilidad asombrosa logrando que la historia que cuenta sacuda a la audiencia.

En la vida real, Lotter y Nissen desnudaron a la fuerza a Teena en un baño y lo violaron horas después. Para evitar que presentara cargos, lo mataron a él y a dos transeúntes.

Lotter está en el corredor de la muerte en Nebraska, y Nissen está cumpliendo tres cadenas perpetuas. Nissen se retractó de su testimonio original en 2007 y ahora admite que asesinó a las tres víctimas, con Lotter como su cómplice.

16 lesbianas o medio lesbianas

Viñeta de Teresa Castro (@tcastrocomics)

Un hogar seguro para la juventud LGBTIQ+ en Albania

Por Tamara Gámez Ramos, de @AltramuzEditorial

 

El 20 de enero de 1995, tras la presión internacional del Consejo de Europa y de ILGA Europe (Asociación Internacional de Gays y Lesbianas), el Parlamento albanés despenalizó las relaciones consentidas entre personas del mismo sexo.

La Constitución de 1998 amplió la protección de los derechos humanos con una cláusula específica sobre la lucha contra la discriminación, que incluye el género como motivo de no discriminación, y será la Ley de Protección contra la Discriminación, aprobada en 2010, la que prohíba la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género. El Código Penal fue modificado en 2013 e incluye la orientación sexual y la identidad de género como circunstancias agravantes en los casos de delitos de odio (artículo 50j).

Legislar a medias, discriminar sin medias tintas.

A pesar de los avances aparentes en relación con la protección de las personas LGBTIQ+, la ley en Albania no permite las uniones entre personas del mismo sexo, y las personas trans que lo desean no pueden acceder al tratamiento hormonal ni cirugías.

A esto se añade que el trato hacia las personas LGBTIQ+ por parte de profesionales de la salud es frecuentemente discriminatorio, según apuntan Informes como Community (Self) Organizing of Transgender Movement in Wester Balkans Region (2021). Las personas trans se enfrentan a menudo a la discriminación o la denegación de la atención sanitaria. El personal médico carece de formación de las identidades trans y, por ello, suelen ser percibidas con sospecha, realidad que se hace aún más compleja para aquellas personas que se han sometido a una cirugía de reasignación de sexo en el extranjero y ahora residen en Albania.

El trato discriminatorio por parte de las instituciones genera que el colectivo LGBTIQ+ tenga un nivel de confianza muy bajo en las mismas. Como resultado, y siguiendo el informe Challenges Faced by the LGBTI Community in Access to the Justice System (2018), de la entidad LGBTIQ+ albanesa Streha, las personas del colectivo se encuentran desinformadas sobre los recursos existentes en el país y no conocen dónde pueden acudir en caso de necesitar ayuda.

Este trato discriminatorio no solo sucede en las instituciones y el sistema sanitario, sino que se trata de una situación generalizada. Según una investigación realizada en 2018, hubo 450 casos de discriminación reportados en un solo año (Informe sobre la situación de la comunidad LGBTI en Albania, Aleanca 2018).

Un estudio del Consejo de Europa en 2021 destacaba que dos tercios de los incidentes de incitación al odio en Albania se dirigían a las personas LGBTIQ+. Así, la encuesta de la entidad LGBTIQ+ Aleanca de este mismo año indicaba que el 79% de las personas encuestadas podría abandonar Albania debido a la discriminación.

Discursos LGBTIQ+fóbicos a viva voz.

Añadidos a la discriminación en los espacios de participación, se encuentran los ataques de odio por parte de grupos religiosos, personajes mediáticos, políticos y ciudadanía general, tanto en la televisión nacional como en redes sociales y el resto de medios de comunicación, que fomentan los estereotipos negativos y prejuicios hacia las personas LGBTIQ+. Estos, a menudo, se acompañan de la idea de que la homosexualidad es una norma social importada de países occidentales. Las entidades LGBTIQ+ indican el fuerte impacto cuando estos mensajes de odio se articulan en las redes sociales, por la inmediatez y la repercusión, lo que va en detrimento de los esfuerzos que las organizaciones hacen de manera cotidiana para sensibilizar a la población.

En junio de 2021, la periodista Blerta Tafani hizo varias declaraciones homófobas en televisión, con afirmaciones como: «Es una gran desgracia [que una persona LGBTIQ+] dé a luz a un niño»; “las personas LGBTI quieren eliminar la palabra madre”; «la vida con dos padres no funciona, la vida con una familia gay se acaba”. Las cuentas de las redes sociales de la activista LGBTIQ+ cofundadora de Aleanca kunder diskriminimit LGBT+» (Alianza contra la discriminación de las personas LGBT+), Xheni Karaj, fueron bloqueadas en su intento de denunciar públicamente estas declaraciones.

En noviembre del mismo año, el fundador de la Coalición para la Familia Tradicional, el pastor Akil Pano, organizó un acto en su iglesia donde la periodista italiana Nausica Della Valle compartió sus experiencias como «ex lesbiana curada» por la Iglesia. Como resultado de este evento, Pano y Della Valle dieron una entrevista en la televisión nacional declarando que la homosexualidad puede ser curada.

Las entidades que trabajan con personas LGBTIQ+ en Albania expresan encontrarse ante un colectivo con mucho estrés y alta incidencia de problemas de salud mental como resultado de la intimidación, las amenazas y discursos de odio generalizados en el país. Esto tiene un impacto añadido en la juventud, en la que observan un mayor aislamiento y una baja autoestima.

La juventud expulsada por la LGBTIQ+fobia.

La juventud LGBTIQ+ es la que enfrenta mayores dificultades. Las entidades cuentan con obstáculos para trabajar con el Ministerio de Educación y no se han producido avances en la inclusión de temas relacionados con los derechos LGBTIQ+ en los planes de estudios. Una investigación de Aleanca kunder diskriminimit LGBT+ con estudiantes de secundaria y personas universitarias LGBTIQ+ indica que el 65% siente inseguridad en la escuela, el 93% ha escuchado insultos LGBTIQ+fóbicos en el Centro Escolar muy a menudo y casi un tercio ha abandonado o cambiado de colegio debido al acoso.

En el mercado laboral, ser joven y LGBTIQ+ ahonda en el desafío de la disidencia sexo genérica para acceder y mantener un empleo. Una encuesta realizada en 2018, indicaba que solo 231 de las 734 personas LGBTIQ+ encuestadas se encontraba trabajando y la mayoría de ellas expresaba temor a ser expuestas, discriminadas y/o despedidas por ser LGBTIQ+, no hablando abiertamente sobre su orientación sexual y/o identidad de género en el entorno laboral (Informe sobre la situación de la comunidad LGBTI en Albania, Aleanca 2018).

Adelajda Alikaj, directora de Streha Center, indica el acceso a la vivienda como una de las principales dificultades que las personas LGBTIQ+ están experimentando en la actualidad. Este impacto corresponde a tres realidades, en primer lugar, la discriminación en el acceso al mercado de la vivienda, especialmente hacia las personas trans, reportando casos de negativa por parte de las personas propietarias a arrendarles por su pertenencia al colectivo LGBTIQ+. En segundo lugar, encontramos la LGBTIQ+fobia, desencadenante de la expulsión del hogar que se ha visto exacerbada a partir de la pandemia de COVID-19 cuando muchas personas LGBTIQ+ tuvieron que permanecer con familias inseguras, expuestas al rechazo y a la violencia. En tercer lugar, la discriminación en ámbitos como el laboral supone una situación de mayor empobrecimiento que limita el acceso a la vivienda; esto se ha visto acrecentado por la situación económica actual y el aumento en los precios de los alquileres.

Adelajda, quien lleva más de tres años en la entidad y es activista por los derechos del colectivo, destaca que “el primer gran problema que enfrentan las personas LGBTI+ en Albania es la marginación y la exclusión social en casi todas las áreas de la vida; el segundo gran problema son los estereotipos negativos de las personas LGBTI+ por parte de la sociedad albanesa en general”. La directora de Streha ha formado parte este año de Defenders´ Days, una de las mayores conferencias del mundo en la que se encuentran cada dos años 200 defensores de los derechos humanos de los cinco continentes. En su experiencia, la lucha por los derechos LGBTIQ+ en el país sigue siendo un asunto casi exclusivo de la disidencia sexo-genérica y las entidades del colectivo, sintiendo una ausencia de apoyos ante situaciones como las agresiones LGBTIQ+fóbicas.

Streha, construyendo hogares seguros para la juventud LGBTIQ+.

Streha es la entidad LGBTIQ+ que gestiona el primer y único centro residencial para jóvenes LGBTIQ+ sin hogar en Albania y en la región de los Balcanes. Una organización de base con sede en Tirana que prioriza la vivienda segura y trabaja para empoderar a la comunidad LGBTIQ+ proporcionando apoyo de emergencia, refugio, asistencia legal, asistencia médica y psicológica, ayuda en el empleo y apoyo en la cobertura del alquiler.

El Centro Streha fue seleccionado en 2020 como una de las 17 mejores prácticas de servicios de vivienda en Europa, y la red IRIS, que conecta a más de 200 organizaciones que prestan servicios sociales en la región de los Balcanes Occidentales, seleccionó a Streha en 2021 como caso de estudio por sus buenas prácticas.

16 lesbianas

Viñeta de Teresa Castro (@tcastrocomics)

 

120 pulsaciones por minuto

Por Charo Alises (@viborillapicara)

#CineLGTBI

Película francesa de 2017 dirigida por Robin Campillo que se adentra en la organización parisina Act Up (Pórtate mal) réplica del grupo homónimo fundado en Nueva York en 1987. El objetivo de esta asociación era llamar la atención sobre la pandemia de sida y las personas que la padecían con la intención de obtener legislaciones favorables, promover la investigación científica y la asistencia a las personas enfermas así como la implementación de políticas públicas adecuadas para la erradicación de la enfermedad.

Ganadora del Premio del Jurado en el Festival de Cannes, 120 pulsaciones por minuto es una cinta emotiva y vibrante con una cuidada puesta en escena y un ritmo que rebosa intensidad.

En una entrevista concedida por Campillo a Cineuropa en 2017, comentó que se unió a Act Up en 1992. Vivió el sida y los años 80 como algo extremadamente violento. En aquella época no se hablaba de ello, había una especie de ley del silencio. Como mucha gente en ese momento, infectada o no, el director de la cinta se integró en el grupo porque estaba enfadado. Quería dejar de ser víctima. El objetivo de Robin Campillo era retratar en la película el momento en el que se rompió el silencio que se cernía sobre el sida .La cinta rinde homenaje a esta época, a todos estos pequeños actos minoritarios convertirtiéndolos en eventos históricos importantes para dar vida a una epopeya de las pequeñas cosas.

Una gran parte del guión está basada en los recuerdos del director. Lo que interesaba a Campillo era cómo la gente se unía al colectivo Act Up para dejar de estar sola y formar una fuerza política con la que identificarse. En este contexto el personaje principal se aparte del grupo al contraer la enfermedad. Según explica el cineasta, lo que pretendía era que el espectador tuviera la misma percepción que él tenía cuando entró en el grupo y no podía entender algunas cosas que sucedían.

La película plantea la cuestión de la vida y de la urgencia. El director quería que la cinta fuera como una metamorfosis y que el espectador no tuviera tiempo de ver cómo se pasa de una escena a otra. Las secuencias tenían que ser ecos de las escenas siguientes mientras la escena anterior permanecía creando así una especie de remanencia durante toda la película. Según comentaba Campillo, la película está filmada de una manera un poco cruda, con la idea de reflejar la prisa, la inmediatez que impone esa urgencia que generaba la enfermedad.

El film se desliza de un género a otro, de un estilo a otro. Tiene elementos de documental, ficción, amor y tragedia. El director quería plasmar esos cambios por su idea de que, en la vida real, nos pasamos a otro universo rápidamente. Según el cineasta, cuando estamos enfermos, la comida tiene otro sabor, hay diferentes estados de subconsciencia, y cosas que vemos todos los días, no las percibimos de la misma manera.

Robin Campillo opina que si Act Up tuvo este impacto, fue porque había gente que no tenía otra opción. Eran sus cuerpos los que hablaban, personas que sufrían, que no tenían todo el tiempo del mundo, que ya eran débiles, que ya se trataban, etc. Según apuntaba, esta situación te colocaba en una situación de emergencia proporcionándote fuerza, poder, energía. Fue una lucha política muy personal. Para él era como la diferencia entre defender una causa y estar en el frente de batalla. La lucha de una comunidad que se creó con la idea de superarse a sí misma.