Históricas LBT: Elisabeth Bishop

Por Charo Alises (@viborillapicara) y#Mujeres lesbianas

Elizabeth Bishop y Lota de Macedo Soares

El arte de perder no es difícil de adquirir

   tantas cosas parecen hechas para perderse

que su pérdida no es ningún drama.

(Fragmento del poema El arte de perder)

                  

Elisabeth Bishop nació en Woscester, Massachusett, el 8 de febrero de 1911.  Su padre falleció cuando ella tenía tan solo ocho meses de edad y años después su madre sufrió una enfermedad mental por la que estuvo ingresada en una residencia psiquiátrica desde 1916 hasta su fallecimiento. En esa época, Bishop había cumplido ocho años y nunca más  volvió a verla. Lo cierto es que, en la práctica, Elisabeth fue huérfana desde niña. Sus  abuelos se encargaron de cuidarla en Nueva Escocia. Las carencias afectivas en su infancia tuvieron consecuencias muy negativas en la vida adulta de la poetisa, que desarrollaría diversas alergias y tendría que luchar contra el alcoholismo durante largos años.

En su juventud estuvo interna  en Walnut Hill School en Natick, Massachusetts,  donde publicó sus primeros poemas en una revista de estudiantes gracias a su amigo Frani Blough.​ Se matriculó en Vassar College en el otoño de 1929, justo antes del colapso bursátil. Sería en esta universidad donde Elisabeth comenzaría a tener sus primeras relaciones con mujeres. En 1933 fundó una revista literaria independiente junto a Mary McCarthy, Margaret Miller y las hermanas Eunice y Eleanor Clark.  

En la escritura de Bishop se puede notar la influencia de Marianne Moore. Moore mostró gran interés por el trabajo de Elisabeth y la llegó a disuadir de estudiar medicina en la Cornell Medical School, donde la poetisa se había matriculado tras mudarse a Nueva York después de su graduación. La amistad entre las dos mujeres perduraría hasta la muerte de Moore en 1972. El libro de Bishop At the Fishhouses (1955) contiene varias alusiones al poema de Moore, A Grave.

Bishop viajo por diversos países y residió en algunos de ellos. Estas experiencias las describiría después  en sus poemas. Vivió en Francia durante varios años a mitad de la década de los 30, gracias en parte al patronazgo de una amiga de la universidad, Louise Crane. En 1938, Bishop compró una casa con Crane en el 624 de White Street, en Key West, Florida.

En 1947 conoció a Robert Lowell con quien mantendría una amistad que perduraría a lo largo de los años. Lowell llegó a mencionar a Bishop como una de las autoras que más había influido en su poesía.

Elisabeth Bishop tuvo problemas financieros durante gran parte de su vida. Mantuvo su economía a flote gracias a la concesión de becas y premios. En 1951, obtuvo la beca para viajes del Bryn Mawr College dotada con 2.500 dólares. Esa beca le permitió iniciar una travesía por Sudamérica en barco. Llegó a Santos, Brasil, en noviembre de ese año  para  visitar a su amiga Mary Morse. Lo que pretendía ser una estancia de dos semanas se terminaría alargado quince años al enamorarse de la brasileña Lota de Macedo Soares,  arquitecta del Parque Flamingo, hoy Parque Brigadier Eduardo Gomes, en Río de Janeiro. Elisabeth, Lota y Mary, vivirían un triángulo amoroso que se convertiría en una larga e intensa relación. La hija de Morse, Mónica,  consideró a la poetisa como una de sus tres madres.

Lota  construyó un estudio en su finca de Samambaia para que Bishop se  dedicara a escribir con tranquilidad. A su lado, Elizabeth viviría los años más felices de su  vida y llegó a convertir  Brasil  en su verdadero hogar. Incluso adquirió una casa en la localidad carioca de Ouro Preto, donde residiría entre 1968 y 1974.

En 1956, durante su estancia en Brasil,  Bishop fue galardonada con el premio Pulitzer  por su libro North & South — A Cold Spring, que agrupaba varios poemarios. Posteriormente recibiría el National Book Award y el National Book Critics Circle Award, así como dos becas de la Fundación Solomon R. Guggenheim y otra de la Ingram Merrill Foundation. En 1976, se convirtió en la primera mujer en recibir el premio internacional de literatura de Neustadt.

En el país carioca, Elizabeth comenzó a interesarse por las lenguas y la literatura de Latinoamérica. Con el tiempo traduciría a muchos poetas al inglés, entre los que destacan Octavio Paz, João Cabral de Melo Neto y Carlos Drummond de Andrade.

Con frecuencia escribía artículos para The New Yorker, y en 1964 redactó el obituario de Flannery O’Connor en The New York Review of Books.

Impartió  conferencias en diversas universidades durante muchos años. Fue profesora de la University of Washington un breve periodo de tiempo antes de impartir clases durante siete años en la Universidad de Harvard . También enseñó en la Universidad de Nueva York, en el periodo anterior a su paso por  el Instituto Tecnológico de Massachusetts.

Los últimos años de la relación entre Elisabeth y Lota estuvieron  marcados por la depresión y el alcoholismo. La poetisa tuvo una relación con otra mujer. Al final dejó a Lota y volvió a Nueva York. Soares se vio afectada por una profunda depresión por la que fue hospitalizada. Tras recuperarse, siguió a Bishop hasta los Estados Unidos. El mismo día de su llegada a Nueva York, el 19 de septiembre de 1967, Lota ingirió una sobredosis de pastillas tranquilizantes y falleció días  después.​ La muerte de Lota marcaría a Elizabeth el resto de su vida.

La otra gran relación de la poetisa fue con Alice Methfessel, a quien conoció en 1971. Methfessel se convirtió en la pareja de Bishop y, tras su muerte, heredó los derechos literarios de la obra de su pareja.

La autora murió en 1979 de una hemorragia cerebral en su casa de Lewis Wharf, Boston. Fue enterrada en su ciudad natal, Worcester, Massachusetts. Elisabeth Bishop, distinguida como poeta laureada de Estados Unidos, está considerada como una de las  figuras más importantes de la poesía de ese país. La película Luna en Brasil (Reaching for the moon), dirigida en 2013 por Bruno Barreto,  cuenta la historia de amor entre Elisabeth  y Lota.

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