
Sean Penn fue ganador de un Oscar por interpretar al activista Harvey Milk
Noche de alfombra roja que, como cada año, deja multitud de titulares. Algunos muy desechables como los que hacen referencia a los escotes de las actrices como lo menos soso del paseillo previo, y otros van directos al grano anunciando las mejores imágenes sin aditivos de mal gusto.
Estos meses que antecedieron a los Oscar han dado pie a muchos artículos, quinielas, rankings, remembers y videoteca. The Advocate, uno de los medios LGTB que os recomendamos, este mismo mes de febrero publicó varios artículos memorables. El último, repasa Los siete discursos más inspiradores de actrices, actores y directores de películas con protagonista homosexual o trans: Tom Hanks por Philadelfia (1993), Hilary Swank por Boys Don’t Cry (1999), Ang Lee por Brokeback Mountain (2005), Sean Penn y Dustin Lance Black por Milk (2008), Jared Leto por Dallas Buyers Club (2013), Graham Moore por The Imitation Game (2014).
«El color de la piel es algo irrelevante como lo es la longitud del pelo». Esta posiblemente será una de las frases que más se van a reproducir a lo largo del día, y que sin duda pasará a la historia de esos discursos inspiradores. La ha dicho el premiado Alejandro Iñárritu, director de El Renacido y, lamentablemente por obvia no es menos cierta. Debería ser irrelevante pero no lo es. Ese va a ser otro de los debates de fondo a los que asistiremos estos días. Nosotros, por nuestra parte, esta tarde asistiremos a un debate similar y de calidad en la presentación del libro de Octavio Salazar, La igualdad en el Rodaje, cuyo enfoque más bien desmontará la fábrica de estereotipos que es Hollywood para dejarnos, cuando menos, en estado de reflexión. De esta publicación os hablaremos esta misma semana en 1 de cada 10. Si acudís, allí nos encontraréis.
Pero volvamos a la fiesta americana del cine y a la polémica de si el color de la piel o la condición sexual determinan el reparto de papeles así como las opciones de ser premiados con la codiciada estatuilla. Precisamente, The Advocate, ha elaborado una lista de cincuenta interpretes heterosexuales (aparentemente) que fueron nominados o premiados por meterse en la piel de una persona homosexual o trans. De esa cifra nos vamos a quedar tan solo con cinco, el resto de la lista les invitamos a ustedes que la consulten en la fuente original, merece la pena, aunque sea para ver lo mucho que hay que remover para encontrar buenos (y escasos) personajes LGBTI en películas que si recordamos no es por dejar al descubierto (mayoritariamente) esos elementos de la historia.
1.- Peter Finch, nominado a su primer Oscar en 1971 por Sunday Bloody Sunday. Interpretaba a Daniel Hirsch un médico judío que tiene un affair con otro hombre.
3.- Whoopi Goldberg, fue nominada por su interpretación de Celie Johnson en ‘El color púrpura (1985). Una mujer que lucha por encontrar su identidad tras haber sufrido años de abusos por parte de hombres de su vida. Celie tiene una relación con la amante de su marido, Shug.
4.- Felicity Huffman fue nominada por su interpretación de Bree en Transamerica (2004), una mujer transgénero que se entera de que su hijo es un estafador.
5.- Annette Bening, fue nominada por su papel como Nic en Los Chicos están bien (2010). Forma pareja con otra mujer (Julianne Moore), ambas tienen dos hijos por inseminación artificial que quieren conocer a su padre biológico, todo se vuelve muy complicado.
Como decía Charo Alises: «el cine es un medio muy poderoso para transmitir ideas y mensajes, es capaz de crear un imaginario colectivo sobre muchos temas- también sobre la diversidad sexual y de género- por eso es muy importante que el celuloide no oculte la realidad LGTB y la haga visible.»
El Cine que llega, y que estamos deseando ver, trae una novedad y mucha buena actriz: Susan Sarandon y Naomi Watts en ‘About Ray’, y Ellen Page y Julianne Moore en ‘Freeheld’. La novedad es que, por primera vez, una actriz abiertamente lesbiana representa este papel. Veremos como trata la prensa este hecho a la hora de valorar la calidad de su interpretación. Pero lo cierto es que hasta ahora ningún gay, lesbiana, bisexual o trans ha sido premiado por interpretar un papel de nuestro colectivo, al menos que sepamos. El color de la piel te delata, algo que no pasa con la orientación sexual, y sí con la identidad de género, por eso precisamente no es algo irrelevante que te discriminen por ello.