Hay dos cosas que encontraremos sistemáticamente en una revista de moda femenina: en primer lugar, unas 10 o 12 páginas, situadas al principio de la publicación, de publicidad y, en segundo lugar, editoriales de moda protagonizados por (las que son ya hasta típicas) modelos delgadas.
Vogue, una de las revistas con más renombre y lectores del mundillo, es una de tantas en utilizar este tipo de formato. Sin embargo, algo huele a podrido en la gran casa de Wintour, y no son los vasos vacíos de café que toma a lo largo del día.
Si echamos un vistazo a los editoriales de 2016 de la revista esto es lo que encontramos:
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Mujeres «deprimidas, débiles, muertas, locas, tiradas, cansadas, dobladas, consumidas, frágiles, enfermas, agotadas, caídas, desmayadas, encogidas, desparramadas, drogadas, endebles, lánguidas, desfallecidas, empequeñecidas, abandonadas, idas, sufrientes, perturbadas, abatidas, derrotadas, blandas, patéticas, hundidas, pasmadas, atontadas, desoladas, infelices, desdichadas…» dice Yolanda Domínguez en la petición que ha iniciado en Change.org.
Su objetivo no es otro que el de cambiar la moda de representar a las mujeres con este tipo de actitudes. Si Domínguez se encargara de estos editoriales tiene claro que «elegiría actitudes erguidas, de poder, de fuerza, con energía y diversión. También propondría diversidad a la hora de elegir a las modelos, mujeres de todas las edades y colores de piel».
No es algo nuevo para la artista, que lleva trabajando sobre esto desde 2011: «Realicé una acción callejera llamada Poses en la que mujeres de todas las edades y tallas adoptaban poses de algunas editoriales en espacios públicos como un supermercado o un restaurante, las reacciones eran de preocupación y socorro, algunos querían llamar a una ambulancia. El último vídeo es una recopilación de las editoriales que han sido publicadas sólo en este año y se puede comprobar que la imagen de la mujer, lejos de empoderarse va a peor«.
Con unas 70.086 firmas y poco menos de 5.000 para llegar a su objetivo, Domínguez considera que su petición «ha tenido mucha repercusión, las personas somos cada vez más críticas con los mensajes publicitarios y en especial las mujeres que estamos luchando por vivir en una sociedad más justa e igualitaria. No nos sentimos representadas en absoluto en la imagen de moda, tampoco nos parece atractiva ni deseable».
Pero, ¿por qué entonces vende tanto esta imagen? Para la artista «es algo adquirido y aprendido de la representación de las mujeres en el arte occidental, cuerpos desnudos y desparramados, sumisos y disponibles a la mirada masculina. Hoy se siguen repitiendo los mismos cánones pero nuestra sociedad no es la misma que hace 500 años, tienen que cambiar y adaptarse a nuestros tiempos. Antes eran los hombres los que generaban el imaginario. Hoy hay mujeres fotógrafas, no tiene ningún sentido que sigan repitiendo este modelo«.
«Tiene éxito porque las personas se sienten cómodas en lo que ya conocen, si la figura femenina se ha asociado siempre a la debilidad y la fragilidad es reconfortante ver algo que ya sabes y que no te haga pensar ni cambiar de registro. También es cómodo y a los seres humanos nos gusta la estabilidad y esforzarnos lo menos posible».
El precio de que nos pueda la comodidad es que «las imágenes son una parte muy importante de nuestra educación y estos modelos refuerzan una identidad femenina que no ayuda a esa igualdad por la que tanto estamos luchando. Si nuestros referentes femeninos son cuerpos extremadamente delgados, moribundos y enfermizos no vamos a considerarnos femeninas si somos fuertes, valientes y poderosas. Necesitamos modelos aspiracionales que nos aporten valores mucho más positivos» declara Domínguez.
Por lo pronto, Vogue no se pronuncia al respecto. «He escrito personalmente a la directora de la revista Vogue España, Yolanda Sacristán, para hablar con ella y ni siquiera he obtenido respuesta. Con actitudes así queda bastante claro lo que le importa la opinión de sus lectoras».
Como lectora de revistas de moda y como mujer, solo me queda esperar que la petición pueda cambiar algo. Yo, por lo pronto, ya he puesto con mi firma mi granito de arena.
Así es… Y si salen contentas y felices, las llaman floreros. La cosa es mirarlas con lupa. Un vicio que se extiende también de unas mujeres hacia las otras. Por otra parte, los medios no tienen autoridad: la autoridad está siempre en los que los consumen.
27 julio 2016 | 08:45
Cuando haya un porcentaje creible de mujeres trabajando en las minas, en la obra, o echando asfalto en los Monegros… tal vez sea entonces cuando se comience a eliminar esa idea de «debilidad».
Podeis comenzar por abrir peticiones en Change para que se haga una ley de equidad de género en TODOS los trabajos, y no sólo en puestos directivos, o peticiones para que se de otra imagen en publicidad.
No quereis imagen de fragilidad, pero sin embargo lo pretendeis abriendo peticiones para la publicidad. Muy coerente todo.
27 julio 2016 | 08:55
Mujeres, no objetos
https://dametresminutos.wordpress.com/2016/07/19/mujeres-no-objetos/ vía @jiribas
27 julio 2016 | 09:16
En la actualidad, la figura de la mujer está asociada al analfabetismo, la mujer española ha tocado fondo culturalmente y su capacidad cognitiva esta seriamente dañada.
La prueba definitiva de mi exposición está probada cuando la mujer española ha convertido en Best-Seller el libro de Belen Esteban, un libro que ni se ha leido y que las ceporras formaron kilometricas colas para conseguir un ejemplar.
La mujer española nunca ha estado tan lejos de ser inteligente.
27 julio 2016 | 10:01
El comentario #1 tiene toda la razón. El caso es mirar con lupa, y algo se puede sacar siempre. Que salen tiradas en un sofa: es que las queréis mostrar débiles. Que salen, contentas en casa: es que son mujer florero, que salen muy serias: es que son aguafiestas, que sale la heroina cogida por el cuello por un villano (como en la cartelera de xmen) que si es violencia machista. Que en lugar de una chica el villano coge a un heroe chico por el cuello, es que siempre los chicos son los héroes….
Siempre se puede inventar algo de cualquier foto.
27 julio 2016 | 10:09
Pues señora o señorita, si no quieres dar imagen de debilidad, deja de pedir cuotas en puestos de directivo y requerimientos fisicos rebajados para bomberos/policia/ejercito y otros trabajos duros.
Ya de paso todas esas stronk and indepandant womyn podeis ir a dar ejemplo con las mujeres fuertes de verdad, en los peshmerga no hacen distinciones, nadie que vea esas mujeres las catalogará como debiles, por que sera?.
27 julio 2016 | 10:31
Mujeres “deprimidas, débiles, muertas, locas, tiradas, cansadas, dobladas, consumidas, frágiles, enfermas, agotadas, caídas, desmayadas, encogidas, desparramadas, drogadas, endebles, lánguidas, desfallecidas, empequeñecidas, abandonadas, idas, sufrientes, perturbadas, abatidas, derrotadas, blandas, patéticas, hundidas, pasmadas, atontadas, desoladas, infelices, desdichadas…” dice Yolanda Domínguez
Pues parece que es un retrato de la realidad.
27 julio 2016 | 10:47
«Para la artista “es algo adquirido y aprendido de la representación de las mujeres en el arte occidental, cuerpos desnudos y desparramados, sumisos y disponibles a la mirada masculina»…… cuando el 99,99% de los que compran estas revistas son mujeres.
En qué quedamos.
Ainssss el activismo de salón de change.org……….
27 julio 2016 | 11:07
Las mujeres somos fuertes y valientes (probablemente mas que los hombres), pero en una sociedad machista donde esas fotos a muchas mujeres no las hace «saltar las alarmas» y les parecen normal…. pues no se puede hacer nada. Una pena.
27 julio 2016 | 11:18
Y los hombres siempre salen cuadrados, fuertes, altos.
Nosotros no nos quejamos. No somos como en las revistas.
Dentro de unos años, alguno/a se quejará porque no tiene superpoderes en la vida real, y exigirá que en el cine no salga gente que los tenga.
Es lo que hay, no alcanzamos el canon de belleza, pero eso no es machismo, es mala suerte, o expectativas demasiado altas de alguna gente.
27 julio 2016 | 11:53
#9
Jajaja. Que poca verguenza. Hipocresía nivel 10.
Comentario discriminatorio: «Las mujeres somos fuertes y valientes (probablemente mas que los hombres)».
Y luego dices «en una sociedad machista».
No puedes criticar el machismo después de hacer un comentario discriminando a los hombres. Te mereces el machismo tanto como los hombres se merecen tu hembrismo.
27 julio 2016 | 12:07
No es del todo correcto pero generalmente sí.
También se la ha asociado con la virtud de la belleza, pero como este mundo tampoco ama la belleza, la censura y la condena, pues mira… Ya llegará el día en que en lugar de censurar un pezón en instagram se dignifique la belleza libre femenina. LA calle vapor delante de los medios de comunicación y de las modas de pasarela oficiales. Todo lo oficial, o casi todo, va por detrás de la calle libre, porque son como son, atados a esas rémoras anticuadas que se escandalizan por ver belleza. La represión de donde venimos sigue aún entre nosotros.
Se suben al carro de la slibertades que odiaban y luego comienzan a dosificar esas libertades para volverlas al estado de cosas del que provienen… cerrados y censores.
La mujer, las mujeres, hay muchos tipos, afortunadamente, como hombres también hay de muchas clases de pensar.
27 julio 2016 | 12:50
La mujer de hoy no es tan frágil. Es bella, positiva, sin complejos, superando tabú del pleistoceno que otros que se dicen de progreso siguen manteniendo, incluso otras mujeres.
http://img.wennermedia.com/620-width/kendall-jenner-98c62b2f-5a91-49ea-b9c3-e5cfee3c268b.jpg
27 julio 2016 | 12:54
Cuando las ministras de Zp perdieron el culo por salir no hubo ni una crítica.
La imagen de la mujer en tv es chupi guay, el hombre es un retrasado mental, cobarde, asustado y mala persona, al que se puede someter a toda clase de maltrato, y eso 24 horas al día en todas las cadenas
27 julio 2016 | 13:06
¿Conoces a Celeste Barber? Se dedica a ridiculizar en Instagram este canon posando ella misma como las top models súper delgadas, un poco en la línea de la campaña Poses de la que hablas: https://www.instagram.com/celestebarber/
😉
27 julio 2016 | 17:52
El tema es que las mujeres son receptivas a ese estereotipo, y la publicidad como es de suponer lo explota. El problema es femenino, la gran mayoría de mujeres se identifica con lo que plasma la publicidad, la publicidad es fiel reflejo de su objetivo, en este caso fiel reflejo de anhelos y carencias.
28 julio 2016 | 16:19
Para poner el último punto en la i, si me permites n° 16, creo que es exactamente al revés. Se crea un estereotipo atractivo para que todo ese bienestar, belleza, perfumes y todo lo vendible siga siendo un negocio. Hacen que «se necesite» «urgentemente el producto, o se necesite vivir como se pretende vender, una vida cómoda, exitosa, perfumada, aborregada tantas veces, pero chic, o in, o cool. Con cánones impuestos, no por el consumidor; el ciudadano pagador, sino por el poder que tienen los que deciden que esto sea así. Es el poder de decidir por otro.
Detrás hay todo un trabajo duro de estudio de comportamiento social, de método.
De buscar la manera de crear nuevas e inútiles necesidades. Marcar el camino.
Y los peces pican.
Precisamente por todo ese vacío emocional que se rellena al fín y al cabo de consumismo atroz buscando la felicidad prometida en pechos XXL, en unos cuerpos sobredesarrollados con cabezas de aceituna, en una pose, o en una simple máscara de pestañas.
En realidad saben que es la pescadilla que se muerde la cola, la historia interminable. Para la mayoría esto pasa desapercibido
El problema no es sólo femenino, incumbe igualmente a los hombres.
Incumbe desde que naces.
28 julio 2016 | 23:25
@ elbotas
Me estás dando la razón, lo que pasa es que yo resumo y doy por hecho que todo eso de crear la necesidad del producto y demás técnicas es conocido por cualquier persona inquieta, te sobra que incumbe a los hombres, si ellas anhelan lo que la publicidad ofrece es un problema de ellas, tú las puedes decir lo que quieras, que seguirán las modas y la publicidad y punto. Al hilo de los pechos XXL es como si me dices que incumbe a las mujeres el que haya hombres que compran píldoras para que su pene crezca, es problema de ellos, no hay más, no incumbe a las mujeres.
Yo a ti te veo un tanto paternalista con las mujeres, la verdad a veces es dura y hay que referirse a ella tal cual es, sin medias tintas.
29 julio 2016 | 20:46