Ratón de campo. Foto: Pixabay
La naturaleza nunca dejará de sorprendernos. Seguramente porque muchas de las cosas que pensamos que son exclusivas de nuestra especie en realidad llevan millones de años funcionando con animales y plantas.
Te pongo un ejemplo. ¿Te acuerdas de Pulgarcito? Es un cuento muy antiguo de tradición europea que hicieron famoso las recopilaciones de los Hermanos Grimm y Perrault. Abandonado por su padre junto a sus seis hermanos, para no perderse en el bosque iba dejando piedrecitas por el camino y así regresaban siempre a casa. Pero un día solo tenía migas de pan, que los pájaros se comieron, por lo que los niños se perdieron y acabaron en la casa del ogro.
Cientos de años después de hacerse popular esta historia, un científico checo, en colaboración con otro inglés, han descubierto un animal que hace lo mismo para no perderse: el ratón de campo (Apodemus sylvaticus).
Te doy todos los detalles a continuación.
Ratón de campo (Apodemus sylvaticus). Foto: Wikimedia Commons
El ratón sabio
Pavel Stopka y David W. Mac Donald hicieron en 2003 un curioso experimento. En un campo de arena todo igual, retiraron cualquier señal natural que les pudiera servir a los ratones de orientación espacial durante sus exploraciones en busca de comida. En su lugar les dejaron cerca pequeños discos de plástico blanco. Sorprendentemente, los animalitos empezaron a colocar esas señales en las zonas cercanas a sus nidos que les parecían más interesantes, al estilo Pulgarcito.
En el campo, especialmente en lugares muy homogéneos como son los cultivos, hacen lo mismo: distribuyen objetos pequeños y ligeros, como hojas, conchas o ramitas, que a menudo son visualmente llamativos, para marcar esos puntos de interés.
Estas señalizaciones les permiten reducir la probabilidad de perder una ubicación «interesante». Y no solo señalan zonas donde comer más y mejor. También puede marcar esos sitios donde han tenido un problema con un depredador o un congénere.
Marcas con fecha de caducidad
Más de uno se preguntará. Pero si marcan esos sitios con hojas y ramitas, durarán poco. Pero es que es eso precisamente lo que buscan los ratones. Hay una doble razón para que renuncien a señalar esos sitios con marcas más definitivas como podrían ser las de olor hechas con su orina.
La primera es que con estas marcas de ruta fácilmente transportables quieren señalar sitios efímeros, donde puede pasar algo pero no siempre. Las marcas de orina duran mucho tiempo y acabarían confundiéndoles.
La segunda razón es que es una opción más segura para la navegación local, indetectable para un depredador que sin embargo no falla a la hora de localizarles fácilmente con las marcas de olor.
Gracias a esta habilidad, los ratones de campo pueden dejar una de estas señales casi invisibles y salir corriendo sin mirar atrás cuando aparece un depredador. Pasado el peligro regresarán, encontrando fácilmente la marca. Y así podrán continuar royendo piñas tranquilamente.
¡Alucina, vecina!
—
Artículo citado: Stopka, P., Macdonald, D.W. Way-marking behaviour: an aid to spatial navigation in the wood mouse (Apodemus sylvaticus). BMC Ecol 3, 3 (2003). https://doi.org/10.1186/1472-6785-3-3
—
Si te ha gustado esta entrada quizá te interesen estas otras:
- Comprobado científicamente: las encinas necesitan ratones, águilas y zorros para prosperar 11 noviembre 2022
- El primer antepasado europeo de los ratones se llama Manolo y es libanés 30 agosto 2019
- Ratones ayudan a científicos a descubrir la odisea de los vikingos 15 mayo 2015
- La quiebra de una “fábrica de mascotas” le cuesta la vida a miles de animales 14 agosto 2022
- Descubre el secreto de los calcetines desparejados que se fugan de los cajones 16 noviembre 2019
- Los pesticidas contaminan gravemente el suelo agrícola de Europa 28 diciembre 2018
La Natura es mucho más inteligente que nosotros.
Ningún humano ha sido capaz de crearse a sí mismo; ni neuronas, ni unión de órganos en común para crear ni ser más complejo… Todo lo que somo se nos ha dado de serie. Si viendo la cantidad de diseños que existen en seres vivos, si no se observan sus cualidades, sus sentidos, ,sus modos de geoposicionarse, y nos creemos por encima de ellos creando morales antinatura y políticas destructivas para satisfacer el ocio y el consumismo, la avaricia humana— Cuando al Natura manda, el humano se espanta.
10 enero 2023 | 16:14