Sebastian Vettel (Foto: Archivo).
Sebastian Vettel ha lanzado un mensaje directo a Ferrari que suena a advertencia, aunque posteriormente lo ha dulcificado un poco. Esto ha dicho el piloto alemán, una vez ha asumido que este año tampoco será campeón del mundo:
«Generalmente, la paciencia no es una virtud de un piloto porque va en contra de todos sus principios»
No sé a vosotros, pero a mí esa frase me suena a «Ferrari, ponte las pilas porque mi paciencia tiene un límite». Y eso que Sebastian solo lleva año y medio en Maranello.
Hay que decir, no obstante, que Vettel ha matizado esas palabras asegurando después que hará un esfuerzo para ser paciente porque confía en la reacción de Ferrari:
«Sin embargo, todos sabemos que algunas cosas requieren su tiempo. Mi marcha a Ferrari nunca fue sobre la base de que todo iba a funcionar bien al día siguiente. El equipo se está reconstruyendo y ese requiere tiempo»
Y hablando de la reconstrucción del equipo, ese proceso parece que va para largo porque hoy mismo se ha producido un movimiento de envergadura en Maranello: el director técnico, James Allison, se marcha de la Scuderia.
Allison era la piedra angular del nuevo proyecto de Ferrari, pero no ha tenido éxito. Según el equipo italiano, la marcha se ha producido «de mutuo acuerdo», pero obligará a reestructurar el organigrama técnico en Maranello. De momento, su relevo será Mattia Binotto, que estaba al frente del departamento de motores.
PD. A Vettel le recomendaría un buen curso de yoga o taichí para cultivar esa virtud de la paciencia…
