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Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera. (Pablo Neruda)

Descubre el mensaje ecologista que esconde el vestido de Cristina Pedroche

Cristina Pedroche y su vestido más sostenible para las Campanadas 2023-2024

Este año la popular Cristina Pedroche ha vuelto a dar la campanada con su famoso vestido de Nochevieja, que por primera vez lleva un potente mensaje ecologista. Este año “el vestido de la Pedroche”, en colaboración con Greenpeace, nos ha recordado que tenemos un reto vital para 2024 y los años venideros: Salvar el agua.

Como explica la asociación en su blog, millones de hogares han entrado en 2024 compartiendo con Cristina Pedroche y con Greenpeace el propósito de #SalvarElAgua. El tema elegido no puede ser más necesario, tras un 2023 marcado por el cambio climático, con fuertes sequías, y que se despide con restricciones para más de 9 millones de personas solo en España.

Un vestido de materiales orgánicos y biodegradables

Todo el estilismo para esta noche tan especial es una alegoría del agua limpia necesaria para la vida, y está inspirado en la ninfa fluvial. Por esta razón, los materiales utilizados para su fabricación han biodegradables u orgánicos. La icónica capa, que al retirarse descubrió el famoso vestido de las campanadas, estaba hecha con un tejido de 100% lana reciclada sobre el que crecen de forma natural la planta del amaranto rojo y las alegres capuchinas. Un hermoso recordatorio, en una fecha tan importante, de que somos naturaleza, y de que cuidar el planeta y cuidar el agua es cuidar también nuestras vidas.

Fue Josie, el conocido periodista de moda y director creativo del evento, quien propuso a Grenpeace España una colaboración desinteresada con Cristina Pedroche, en sus décimas campanadas, para hablar del problema del agua, por el que ambos tienen una enorme preocupación. La diseñadora del vestido, Paula Ulargui, añadió su interés por integrar plantas vivas en las prendas, su manera de invitarnos a reconectar con la naturaleza.

Eva Saldaña, directora ejecutiva de Greenpeace España; Cristina Pedroche; Edurne Rubio, directora de Comunicación y Márketing de Greenpeace España, y Josie, director creativo.

Un discreto trabajo en equipo

Presentadora, diseñadora y ecologistas han trabajado intensamente en los últimos meses con el propósito compartido de convertir en protagonista de estas campanadas al agua, fuente de vida. Con Josie como director de orquesta y artífice de la propuesta, inspirada en su propia vivencia personal de descubrir un pozo contaminado muy cerca de su casa.

En estos meses de trabajo contrarreloj, Josie, Cristina Pedroche, Paula y todo el equipo de Greenpeace y colaboradores confiesan que se han movido «con la pasión y la convicción de quienes quieren con todas sus fuerzas contagiar de su propósito a millones de personas en España». Y lo han hecho además con mucho sigilo y discreción para preservar hasta el mismísimo momento en el balcón en la Puerta del Sol el misterio del vestido de este año. Como reconoce en el blog Edurne Rubio, directora de Comunicación y Márketing de Greenpeace España, buena parte del equipo de Greenpeace no sabía nada y se ha enterado tomando las uvas junto al resto de la audiencia.

Capa vegetal del vestido de Cristina Pedroche para visibilizar la necesidad de proteger el agua.

No hay agua para tanto regadío

En total, se calcula que en la Tierra hay más de 1.200 trillones de litros de agua, pero nos hace falta cada gota, sobre todo si tenemos en cuenta que solo el tres por ciento es agua dulce.

Como recuerda Greenpeace, España es el país más árido de Europa y el 75% del territorio está en riesgo de desertificación. Cada vez hay menos agua porque llueve menos y hace más calor, por la crisis climática. Y por si fuera poco, la poca agua que tenemos está contaminada, muchas veces por nitratos provenientes de las macrogranjas, se roba o se malgasta en regadíos intensivos.

Algunos datos preocupantes que divulgan los ecologistas y que tiene un impacto directo en el planeta y en la salud de las personas que lo habitamos:

  • ¿Sabías que el 80% del agua dulce se gasta en campos de regadío, en gran medida intensivo?
  • ¿Y que toda esa superficie de regadío en nuestro país ocupa un área del tamaño de Suiza?
  • ¿O que el 44% de nuestros acuíferos, nuestras reservas de agua para el futuro, están en mal estado por contaminación y/o sobreexplotación?

Nuestro planeta tiene límites y el agua dulce es uno de ellos. La actividad humana – regadíos excesivos, deforestación, contaminación – está alterando el ciclo del agua dulce por encima de lo que el planeta Tierra puede amortiguar. Si superamos ese límite, perderá estabilidad y resiliencia. Y el mundo, tal como lo conocemos, ya no volverá a ser el mismo.

Vestido de Cristina Pedroche inspirado en las ninfas acuáticas.

¿A dónde se está yendo el agua?

Según cálculos de Greenpeace, se estima que casi el 80% del agua consumida en España va a parar a regadíos, que están en gran medida en manos de grandes empresas, lo que supone una presión brutal a los recursos hídricos. Estas mismas empresas, junto con las macrogranjas, están provocando también la contaminación del agua, creando una tormenta perfecta de agua escasa y contaminada que termina en desastres ambientales como los que están ocurriendo en el Mar Menor, Doñana o las Tablas de Daimiel.

Y lejos de pararlo, en los últimos años han sumado medio millón de hectáreas a la superficie  dedicada a regadíos en España, llegando ya a 4 millones de hectáreas en total. En un país con escasez de agua, ¡están regando una superficie casi del tamaño de Suiza! Y no quieren parar, critica Greenpeace. Los planes de las cuencas hidrográficas y las administraciones para los próximos años incluyen el aumento de superficies regadas, lo que puede acelerar la tendencia actual hacia el colapso hídrico.

¿Qué podemos hacer?

Según Greenpeace, las administraciones están permitiendo que la agroindustria y sus grandes corporaciones dejen sin agua a ecosistemas enteros, a agricultores y ganaderos que sí hacen bien las cosas y a cada vez más ciudades y pueblos. En su mano está pararlo. Por eso, los ecologistas demandan de ellos que:

  • Localicen y cierren los cientos de miles de pozos ilegales que existen por toda España.
  • Prohíban las nuevas concesiones que aumenten la presión sobre el agua.
  • Establezca un objetivo de reducción del regadío para 2030.

Como explica Pedroche en un vídeo para Greenpeace, «el agua es vida, y sin agua la vida no es posible«. Para proteger los recursos hídricos, Greenpeace ha aprovechado el apoyo de la popular presentadora para poner en marcha la campaña #SalvarElAgua, y que incluye una recogida de firmas. En muy poco tiempo ya han recogido más de 300 000. Puedes unir la tuya firmando la petición en este enlace.

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