Zopenco, mostrenco, bruto, ignorante, mentecato, zote, tonto, memo, tarugo, pedazo bestia (esto último no, que los animales tienen su corazoncito), abrutado, bodoque y no sé cuántos adjetivos descalificativos más de nuestro rico idioma podría usar para señalar al espécimen que responde a las iniciales G.M. y vive a 12 kilómetros de la ciudad de Burgos, en las proximidades de un pueblecito por nombre Hurones. Quiera o no quiera, su historia está ya vergonzantemente ligada a la de un pobre roblón centenario al que está empeñado en matar y, casi por los pelos, también a la mía, la de un periodista curioso que a punto estuvo de contar su última historia cuando se dio de bruces con este salvaje a la sombra del sufrido árbol.
Empezando por el principio debo hablaros del robledal de Las Mijaradas. Se trata de un pequeño bosquete de roble albar (Quercus petraea) de incierto origen al que desde niño profesé una especial devoción. La granja de tan peculiar nombre también tiene una increíble historia, pues según algunos especialistas haría referencia a la presencia allí de un miliario romano, un mojón pétreo que marcaba la distancia recorrida en la calzada romana que pasa justo a su lado, el ramal hispano de la famosa Vía Aquitania. En el siglo X, en pleno proceso de avance cristiano por el Duero, y a pesar de las continuas luchas contra los musulmanes, ya estaba poblado el lugar, entonces conocido como Milieratas. En 1150 el rey Alfonso VII dona Las Mijaradas al convento agustino de San Cristóbal de Ibeas, momento en el que se hace referencia a la existencia de una dehesa próxima, seguramente mi querido robledal, que a mediados del siglo XVI será repoblada de nuevo con bellotas de roble y encina. Luego llegará la Desamortización del siglo XIX, aunque el bosque seguirá (y sigue) en manos de la Iglesia, del arzobispado de Burgos en concreto.
Fueron muchos los pateos juveniles para llegar a tan interesante bosque «de los curas» en busca de aves y plantas poco frecuentes. Constreñido por un derrumbado muro de piedra, entrar en esa espesura se me antojaba adentrarme en una recoleta fraga gallega o una carbayeda astur; imaginación nunca me faltó. Pero también descubrí viejos árboles centenarios que me maravillaban. Y uno de ellos, precisamente, es el que se ha medio cargado la acémila con dos patas de cuyas coces me salvé gracias a que iba acompañado por mis sobrinos. Porque llegó en zapatillas y con ganas de partirme la cara, caliente con un artículo publicado en el Diario de Burgos donde se denunciaba la atrocidad cometida contra el vetusto árbol.
No fui yo quien lo escribió, pero a él le daba igual. Apaciguador, buscando algo de luces en una persona sin ellas y que por cierto no era muy mayor, unos 40 años, le pregunté:
– ¿Por qué lo ha hecho?
– Porque el árbol es mío, está en mi terreno y hago con él lo que me da la pXXa gana. Además siempre se marcaron.
– ¿Con una motosierra y pintados luego con pintura verde?
-Primero lo hice con el hacha. Pero llegó uno, que ya sé quien es y que como lo pille lo mato, y lo borró y pintó de negro. Ahora que intente borrarlo de nuevo, a ver si tiene coXXXes.
Fin del diálogo. Juiciosamente, volvimos otra vez a la protectora espesura del bosque, lejos de su mirada asesina, antes de salir por patas.
Pobre árbol. Como para hablarle a su indigno dueño de Félix Rodríguez de la Fuente, de la Vieja Tronca, de educación ambiental y de mi proyecto LIFE+ para la protección del arbolado singular. Con un propietario así ese pobre roblón tiene los días contados.
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Flipante…
Da verdaderos escalofríos.
¿Y se le va a multar o algo? ¿O le han propuesto para alguna medalla?
28 abril 2015 | 10:28
Estos son los que nos ponen trampas a los ciclistas…
Si no respetan ni a las personas, como van a respetar la flora y la fauna.
28 abril 2015 | 10:33
Y no hay castigo para ese cenutrio ignorante? Algo así como re educación y trabajos de cura y plantación de árboles.
De su propiedad dice el monstrenco. Jajajaja un árbol mas antiguo y necesario que él.
El se hacia caca encima cuando ese árbol ya era un majestuoso ser vivo.
28 abril 2015 | 10:34
«Es mio» dice el pobre ser que no vivirá ni la décima parte que ese coloso, es el problema que tenemos los humanos, nos creemos el centro del universo y con derecho a todo por muy inutiles que seamos.
28 abril 2015 | 10:50
Ostras Pedrín! Me estás diciendo que entonces los PALETOS existen? Yo creía que eran una leyenda urbana!! Iiieeeee!!! El’arbo eh mío y hago coné lo que me da la p**a gana! Riau riau!! Ojalá el Paleto este léa todos estos comentarios! Perdón, que lo mismo no sabe leer el pobrecito y sólo sabe poner «su marca»
28 abril 2015 | 11:49
Desgraciadamente es así, los agricultores y los cazadores son los que más daño hacen a la naturaleza,junto con los politicuchos caciques, y eso que viven y disfrutan de ella. Yo soy hijo y hermano de agricultores, y he tenido amigos y familiares cazadores y lo conozco muy bien. Los agricultores que respetan y cuidan y tienen un conocimiento del medio ya no existen,si existieros alguna vez, o casi, agente sensata siempre queda. Pero en general ya no son agricultores, son empresarios del campo, lo que les importa es hacer rendir a sus tierras como sea y ya les puedes decir que lo que hacen va a destruir su futuro y el de sus hijos, que ellos se van a comprar la máquina más grande que puedan para seguir machacando todo. Queman, talan, perforan y hacen lo que sea, y si ese arbol le molesta al agricultor para pasar su arado… dalo por muerto amigo. Esa España profunda llena de envidias y cotilleos, hay buena gente claro, pero muuuucha ignorancia. Y creo que la nefasta educación que hemos tenido en los pueblos desde siempre tiene mucha culpa. Ese árbol si se parara a pensar un poco se daría cuenta de que le aporta mucho más a sus tierras que cualquier químico que le vendan, pero eso ni lo va a ver ni lo quiere escuchar, son así, viven orgullosamente con su ignorancia. Cuando escucho el argumento neoliberal para defender este pensamiento contra criticas ecologistas de que los dueños de algo son los que mejor van a cuidar de ello, yo les presentaría a los agricultores de mi tierra, que son capaces de desecar acuiferos enteros que pasan por sus tierras, solo por plantar cosas que no tendrían que ser plantadas en ese clima. Que pena me da de verdad todo esto.
28 abril 2015 | 11:50
no se como estará el tema en otras comunidades pero en Cataluña creo que aun que los arboles estén en tu terreno tienes que pedir permiso para cortarlos.
se que la noticia esta en catalán pero también se puede traducir 🙂
no es que no te den el permiso para cortarlos pero tienes que comunicarlo. pues si no podrías cortar eso por ejemplo—-> http://penyabtt5mes1.es/030207JM18.jpg y evidentemente no se puede permitir. de ahí pedir permiso 🙂
http://www.diaridegirona.cat/comarques/2009/02/04/palafrugell-multa-4000–veins-talar-4-arbres-permis/312549.html
28 abril 2015 | 18:07
Este Asno, debería estar con un buen ronzal pastando heno en algún prado; y con un vigilante que le diera unos buenos vergajazos cada vez que levantara su cara de tarugo. Hace falta ser ZOLOCHO o mejor dicho ZURRÓN DE PEOS, para hacer una zurullada como esa. En la escuela es donde debería haber escrito algo y no ahora hacer esa cagada.
28 abril 2015 | 22:17
No debemos sorprendernos tanto de este incidente, este país es así. Pensamos que somos un país desarrollado y si lo piensas bien España son cuatro ciudades grandes y el resto son pueblos. Si a eso le sumas que algunos no han cogido un libro en su vida y que lo único de lo que saben hablar es de fútbol, tractores y salvame deluxe el resultado es el paletazo que te a tocado a ti.
También te digo que hay mucho cateto de ciudad que los fines de semana aprovecha para irse al campo a matar animales o incendiar bosques con las putas barbacoas.
28 abril 2015 | 22:44
LA VERDAD DEL CASO “MIJARADAS”
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…Amigo mío, ese pobre roble ya tenía firmada su sentencia de muerte hace tiempo, debido a una plaga llamada “escala”. Unos bichos muy pequeños, feos, sin patas, muy tragones, capaces de comerse las hojas de los robles a dentelladas y beberse su savia. Producen además una sustancia pegajosa (la melaza) que origina el hongo fumagina. Ese hongo seca las hojas, pudre la corteza y mata la raíz del roble. Cuando esto se produce lo mejor que se puede hacer es amputar.
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…El día que usted fue a incordiar al señor G. M. Por cierto, ese señor, oiga, un santo. Según tengo entendido, es un gran amante y defensor de la naturaleza y una de las personalidades más respetadas en Hurones, lugar donde vive. Fue galardonado en 2007 con el Premio Nacional de medio ambiente por su dedicación a la protección y rehabilitación del ecosistema burgales, elaboración de abonos orgánicos y defensa de especies forestales en peligro de extinción.
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…Pues le digo, cuando usted fue a molestar a ese santo varón, adentrándose en una propiedad privada (perteneciente al arzobispado de Burgos) y dirigiéndose a él con malos modos, el señor G. M. se disponía a amputar aquellas partes del susodicho roble que se encontraban aquejadas de necrosis. Su único objetivo era: 1º) evitar el sacrificio entero del árbol, saneando sólo aquellas partes infectas y repletas de gusanos; y 2º) impedir el riesgo de contagio de otros árboles.
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…Para lo cual ya tenía esterilizado el hacha con lavandina y había marcado con un rotulador la parte exacta del roble que iba a sacrificar. No mucho, por cierto, ya que, como gran especialista, el señor G. M. conoce muy bien la anatomía de los árboles. Fue entonces cuando llegó usted con 2 matones –conocidos en el hampa canario como “sobrinos”– y un fotógrafo contratado a tiempo parcial por diversas asociaciones ecologistas (Greenpeace España, WWF/Adena, Ecologistas en Acción y Amigos de la Tierra) para trucar fotos y sacar a la gente honrada de sus casillas.
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…Según el atestado policial, el día de autos usted se enfrentó al señor G. M. acompañado de una banda de 4 personas, todas ellas de mal aspecto y ataviadas con botas, pantalones de cuero, chaquetas de mezclilla, guantes de motociclismo, cascos, badanas, lentes oscuras y cadenas. Muy del estilo de los Village People, según testigos de Hurones. A la pregunta “¿Por qué lo va a cortar?”, el señor G. M., que acababa de rezar el rosario e impregnaba con alcohol la parte del árbol que iba a amputar, respondió “Porque el árbol está enfermo, tengo la autorización del Seprona, del señor Arzobispo de Burgos –don Francisco Gil Hellín– y para evitar el contagio del hongo a los melocotoneros de la zona.
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…Entonces usted, sin mediar palabra, se desprendió de uno de sus guantes y le cruzó la cara con él al señor G. M., como hacían las damas francesas en el Barroco. A lo que el señor G. M., apaciguado, respondió: “¡Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen! Y continuó con su trabajo ecológico, mientras usted regresaba corriendo a la espesura del bosque para continuar con la recogida de setas amargas. Así ocurrió todo, perdone que le diga.
29 abril 2015 | 01:13
Hay muchas clases de zopencos peores que los de moto sierra, usan maquisnas aplastadoras del Estado, hoy muy moderno.
Lean, esto esta a la orden del dia, es ley impuesta por los que viven de la injusticia.
Asalto descarado por un ZOPENCO:
Un vecino de Parets del Vallès (Barcelona) tendrá que abandonar el próximo día 30 el piso de su exclusiva propiedad en el que vive porque una jueza a la que pidió la custodia compartida de su hija le ha concedido a su expareja el uso de la vivienda, pese a que ella tiene otro piso en copropiedad.
En un auto, la titular del juzgado de primera instancia e instrucción número 5 de Mollet del Vallès ha denegado la custodia compartida al padre, Jesús O., aunque le concede un régimen de visitas a la hija común de la pareja, de dos años, que consiste en fines de semana alternos y martes y miércoles con pernocta.
En el mismo auto, sin embargo, la jueza dictamina que será la madre, a la que da la custodia, la que tendrá que vivir con la hija en el piso propiedad exclusiva de él.
Según ha explicado la abogada de Jesús O., Sandra López, la jueza ha aplicado la ley «estrictamente sin tener en cuenta el contexto social de la pareja ni que ella abandonó el domicilio familiar llevándose a la niña y es propietaria de otra vivienda que compró con su anterior marido».
Es incongruente que le conceda de facto una guarda compartida si echa de su casa al padre, que no tiene adónde ir ni recursos para costearse una nueva vivienda El auto reconoce además que el padre tiene un sueldo mensual de 1.052 euros y tiene que pagar la hipoteca —281 euros mensuales—, el préstamo de compra de coche —350 euros— y hacerse cargo de otros gastos que le dejan menos de 500 euros para vivir.
Jesús O. acudió al juzgado para denunciar que su excompañera se llevó a la niña y no le dejaba verla, por lo que solicitó que la jueza estableciera un régimen de custodia compartida mientras se tramitara la demanda definitiva de divorcio.
En su auto, la jueza concede la custodia de la niña a la madre, pero reconoce el derecho de Jesús O. a estar con su hija los fines de semana alternos, las tardes de los martes y miércoles con pernocta y la mitad de las vacaciones de Navidad y Semana Santa.
«Es una incongruencia que la jueza le conceda de facto una guarda compartida si echa de su vivienda al padre, que no tiene adónde acudir ni recursos suficientes para costearse una nueva vivienda, máxime cuando la niña y la madre no están viviendo ahora en este piso y ella tiene patrimonio propio, como la mitad de una vivienda y la mitad de un aparcamiento», ha explicado la abogada.
La jueza ha concedido la custodia de la niña a la madre, que tiene unos ingresos mensuales similares a su excompañero, aduciendo que el trabajo del padre es nocturno y ello haría que por las noches la niña tuviera que estar acompañada por otra persona, y concede el uso «provisional» de la vivienda propiedad del padre a la madre para «proteger el interés superior de los hijos menores».
La jueza considera que como la relación entre la pareja «no es suficientemente fluida», a la menor le conviene más una custodia exclusiva de la madre, aunque ampliando las visitas del padre, y establece que el uso de la vivienda por parte de la madre contabilizará como «contribución en especie a los alimentos» de la menor, aunque impone al padre pagar también 100 euros mensuales de manutención.
La situación del padre, «desesperado»
Jesús O. ha explicado que su situación es «desesperada» y ha lanzado un grito de «auxilio ante la injusta situación en que me encuentro», que le dejará en la calle el próximo jueves teniendo un piso en propiedad, del que tendrá que seguir pagando la hipoteca y al que regresarán su expareja y su hija.
El padre ha recordado que invirtió todos sus ahorros en la compra de la vivienda y que compró el piso «antes de conocerla a ella, lo amueblé con cariño, me hipotequé como casi todo el mundo y fui el único que pagaba todos los gastos».
Además, Jesús O. ha explicado que también se hizo cargo del hijo que ya tenía su pareja de otro matrimonio anterior «como si fuera el mío propio», y ha recordado que su pareja se fue de la vivienda llevándose a su hija «y me tuvo siete meses sin poder verla y sin atender mis llamadas».
«El juzgado ha decidido que debo marcharme de mi propia casa y que debe pasar a vivir en ella mi expareja. Si me quitan mi casa, me quitan la posibilidad de poder estar y cuidar de mi hija. No tengo familia que me pueda ayudar, mis padres ya fallecieron y en casa de mi hermana ya viven cinco adultos y no hay sitio para mí ni para mi hija», ha explicado Jesús O.
29 abril 2015 | 02:20
Es que no entiendo esa actitud hacia las cosas públicas, en este caso a seres vivos. Da igual donde vayas de viaje o a hacer turismo, hay personas que se creen que las cosas son suyas y pueden hacer lo que quieran.
29 abril 2015 | 10:35
Te vamos a dar dos medallas: una por tonto y otra por si la pierdes.
Ahora resultará que los verdaderos conocedores de la naturaleza y amantes son los urbanitas que no saben distinguir una mata de patata de un espliego.
En el mundo rural nos reimos mucho de vosotros, en serio y es que sois de chiste.
29 abril 2015 | 11:56
Me encanta que los ecologetas de salón, de documentales de la 2 y del escarabajo verde, deis lecciones de ecología, de lo que, por cierto, no tenéis ni idea de su significado.
Iros a la complu a fumar porros y a reirle las gracias al majo de turno.
No teneis ni put…. idea de naturaleza…y los rurales nos descojonamos cuando salis de la ciudades…
29 abril 2015 | 12:50
Estos dos últimos comentarios son un buen ejemplo de lo que yo siempre he dicho de este blog. Hay algunos, o el mismo con distinto Nick, que se considera/n a sí mismo/s los/el gran defensor/es de la Naturaleza porque se supone (siempre que no sea uno o varios trolls con el objetivo de provocar) que vive/n en un pueblo. Yo comparto mi tiempo por varios motivos entre una aldea leonesa y una ciudad, y el manido argumento de que los urbanitas no tienen ni idea de Naturaleza y ellos, ignorantones donde los haya, son los que de verdad saben me produce risa. He visto gente de pueblo que no distingue un ratonero de un halcón peregrino, ni apenas un corzo de un ciervo. Y esto es real y no solo en mi querido León o en pequeños pueblos de la Sierra Norte de Madrid sino en otras partes. Me temo que lo que ha dicho el forero Raúl es la realidad, y los que conocemos el entorno rural lo sabemos de sobra. Lo cual no quiere decir que en las ciudades no haya ignorantes en la materia y gente que arrasa con todo, pero desde luego mucha gente de pueblo tampoco es que sea una joya.
02 mayo 2015 | 00:43
Si javi, lo he visto, que ocurre hay algo que perturbe esa sucia mente tuya?
09 mayo 2015 | 01:35
1- aqui los unicos que rabian sois vosotros, que no soportais que alguien opine que es innecesario matar animales
2- no, no me da verguenza reconocer que hay 3 cazadores psicopatas que se dedican a suplantarme y colgarme opiniones que para nada son mias.
3- como buen enano, gordo, y asqueroso urbanita que soy, sigo sin entender esa vision que teneis de la naturaleza los «rurales» , sera que veo el monte con mis ojos, no a traves de una mira telescopica…….
Pd. Toma mas valeriana, te hace mucha falta, y dejate los chupitos sobre todo cuando sales a cazar, que vas a matar a alguien……..
10 mayo 2015 | 20:42