Dicen que la adolescencia es la etapa en que uno deja de hacer preguntas y empieza a dudar de las respuestas

Hoy no ha ido a clase

– Su hijo no ha venido hoy a clase, dice una voz al otro lado del teléfono.

– ¿Cóoomo?, pregunto yo, entre alarmada y sorprendida.

– Que no ha venido, repite la voz muy despacio para darme tiempo a reaccionar.

– No puede ser, se ha ido de casa por la mañana a la hora de siempre. No entiendo nada.

– Hace un rato le he visto en la calle y me ha dicho que se encontraba mal y que se había quedado en casa…

Me he quedado helada después de esta conversación. Es la primera vez que hace algo así, y ha ocurrido sólo un día después de levantarle un castigo de tres semanas por su mal comportamiento en clase (ya os hablé aquí de eso).

Inmediatamente le he llamado al móvil. Pero no lo ha cogido, claro. He tenido que llamar a uno de sus amigos para encontrarle. Estaban viendo un partido entre alumnos y profesores.

– Me encontraba mal y me he quedado en casa de papá, me ha soltado mientras intentaba poner la voz más débil del mundo entre el griterío de fondo del partido.

– Ah, claro, y te has empezado a encontrar mal de camino al cole, ¿no? Venga ya, eso no cuela. ¿Por eso no me has avisado en todo el día y estás ahora allí con los amigos? ¿No será que como tu padre tampoco estaba en casa nos la quieres jugar a los dos?, es lo único que he acertado a decir con voz calmada antes de mandarle a gritos para casa.

Así es la vida con un adolescente. Una de cal y otra de arena. Si ayer mismo parecía haber cambiado su comportamiento, hoy lo ha vuelto a poner del revés

7 comentarios

  1. Dice ser Un ado

    ay… No sabes lo difícil que es conseguir que no os entereis de todo eso…

    18 diciembre 2007 | 22:45

  2. Dice ser bert84

    mujer, tienes el cielo ganao, pero bueno… la paciencia es la madre de las ciencias. al fin y al cabo son tonterías de adolescentes. ya se le pasará al tiempo 😉

    18 diciembre 2007 | 23:09

  3. Dice ser Carmen

    Soy madre y convivo con un adolescente;tengo dos hijas de 25 y 28 y la verdad:Me encantan los adolescentes,todos los dias son distintos a su lado,se les observa madurar,se les ve confundidos…Pienso que pirarse las clases,siempre que no se convierta en hábito,no es censurable,al menos por mi parte.No hay que hacer una tragedia de un comportamiento asi,a los 30 años ya no podrá hacerlo,por desgracia,jo,jo.Has sido valiente al abrir este blog.Un saludo

    19 diciembre 2007 | 1:14

  4. Dice ser PABLITO

    Sin ser coñazo jodderrrr…pero sin dejar de marcar territorio, por supuesto.PABLITO

    19 diciembre 2007 | 2:18

  5. Dice ser Ana

    Pues… yo me temo que, cuando se convierte en un hábito, hay que ponerse serio. Me da miedo porque pienso que no saben lo que se están jugando, y sobre todo, a una edad en la que creen que lo saben todo.Yo sí he tenido que «ponerme seria» en ese tema, y, sinceramente, no se si servirá para algo.¿Qué haces cuando es uno de sus profesores el que, con motivo de un puente, les dice «Bueno, mañana no vengo, no me voy a tragar el atasco»?A veces te ponen muy dificil explicarles lo de cumplir con sus obligaciones, que no son tantas, para poder disfrutar de sus derechos…Ana

    19 diciembre 2007 | 7:15

  6. Dice ser Acc3p7

    Yo se que mi vieja escribe un blog de estos y mi objetivo es superar la cabronada del dia anterior para que lo ponga en su blog. JAJAJAJAJAOtra cosa, no se cuantos años tiene su hijo pero yo empece con unso 15 a correrme las clases hasta que a lso 17 – 18 ya no iba… Por cierto me saque el bachiller y todo eso (no con una notaza, claro esta, pero lo logre) y ahora toy en la uni… ^^!

    19 diciembre 2007 | 13:03

  7. Dice ser Jana C.

    Gracias a todos por vuestros comentarios. Lo que plantea Acc3p7 fue una de las primeras cosas que pensé al poner en marcha este blog, pero ambos saben perfectamente que cualquiera de esas «cabronadas» tendrían consecuencias, así que no creo que les compense. O eso espero.

    19 diciembre 2007 | 14:25

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