…y buena falta que le hace, puntualizo. Después del decepcionante GP de Mónaco para el equipo Alpine, urge algún tipo revulsivo de cara al GP de Azerbaiyán que se disputa este fin de semana en otro circuito urbano aunque, afortunadamente, de características muy distintas a las del Principado: aquí, al menos, los monoplazas podrán correr y no ir de paseo.
Parece que la dirección de Alpine ha acelerado los procesos para adelantar algunas mejoras en el coche, que podrán ser estrenadas este fin de semana. Lo ha explicado el CEO del equipo, Marcin Budkowski:
«Ha sido una semana muy ocupada en la fábrica para tener todo listo y tenemos un pequeño paquete de actualizaciones, siguiendo nuestro plan de desarrollo. Hemos realizado análisis y simulaciones rigurosas para asegurarnos de que vamos a Bakú con la mejor comprensión posible de nuestros problemas en Mónaco, para asegurarnos de que no nos afectan de nuevo»
Budkowski no oculta tampoco que Mónaco fue una gran decepción para el equipo después de una tímida pero constante progresión en las carreras anteriores:
«Después de dos carreras prometedoras en Portugal y España, Mónaco frenó brevemente nuestra progresión. En general, fue una mala actuación y no debemos esconder eso como equipo. Aunque logramos sumar puntos, no estamos contentos con nuestro rendimiento en Mónaco en comparación con nuestros principales competidores»
Lo bueno es que en Bakú hay una de las rectas más largas del calendario que puede beneficiar el rendimiento del Alpine.
PD. En principio esta carrera será la última antes de que Fernando Alonso disponga de una dirección asistida adaptada a sus necesidades.