¿Pensábamos que el Ferrari iba mal? Pues nos hemos equivocado, porque va todavía peor. La calificación que han protagonizado los monoplazas rojos en el primer GP de Australia solo puede definirse como un ridículo espantoso. Y no salgo de mi asombro cuando escucho a Marc Gené, probador de la Scuderia, afirmar que Ferrari ha ido mejor de lo esperado. ¿Qué esperaban? ¿luchar con HRT por cumplir la norma del 107%?

Domenicali y Montezemolo llevan repitiendo desde el pasado verano que Ferrari se estaba centrando en preparar el F2012 con el único objetivo de empezar el Mundial 2012 ganando carreras. Pues bien, han fracasado estrepitosamente.

Imagino, deseo, espero y confío en que Ferrari mejorará el coche porque la temporada es larga, pero es evidente que en Maranello han fracasado en su primer objetivo de ser competitivos desde la primera carrera.

Fernando Alonso saldrá en el puesto 12 de la parrilla de salida (el mismo puesto que logró en su debut con Minardi) después de sufrir una salida de pista, que le ha dejado fuera de la Q3. Un error del asturiano, dirán los antialonsistas. Sí, pero provocado por la obligación de ir más allá de los límites con un desastre de coche. Solo hay que ver cómo su compañero, Felipe Massa, se ha clasificado en el puesto 16 sin haber sufrido ningún tipo de percance. Ese es el puesto real del nuevo Ferrari sin las manos de Alonso. Menudo éxito de Maranello. Fernando ha sido muy claro:

«Pisé un poco la hierba y se me fue el coche, pero tampoco habría cambiado mucho la cosa porque mi diferencia con Felipe fue la misma en la Q1 y en la Q2. De momento, no hay más de donde sacar. Hay que mejorar en todo. Tenemos 15 km/h menos que el resto»

En fin, que mejor nos agarramos a los típicos clavos ardiendo: Albert Park es un circuito muy peculiar, mañana en carrera puede pasar de todo, en Australia siempre hay muchos incidentes, Malasia nos dará una idea mejor del potencial del coche, en Europa empieza otro Mundial…

Y, aparcando un poco mi cabreo con Ferrari, me gustaría destacar otros aspectos de la calificación de Australia, que ha sido apasionante para todos aquellos equipos que han hecho bien su trabajo en invierno: McLaren, Mercedes, Red Bull, Lotus, Williams… (es decir, casi todos menos Ferrari):

1. McLaren es el equipo más fuerte. Ya os comenté ayer que para mí habían sido los mejores en los tests de pretemporada y el doblete de Hamilton y Button lo ha confirmado. También confirma que el morro escalonado de ornitorrinco es, además de feo, innecesario.
2. Red Bull ya no es invencible. Webber y Vettel saldrán quinto y sexto. El monoplaza energético parece que vuelve a ser terrenal y tendrá que luchar en igualdad de condiciones si quiere ganar carreras. Pero ojo, que no es ningún desastre como el Ferrari.
3. Mercedes está en la pelea. Gracias al nuevo invento de Ross Brawn. Una especie de conducto F que la FIA ha permitido, pero que ha provocado las protestas de muchos rivales. Michael Schumacher también ha demostrado que está mejor que nunca desde su regreso a las pistas y le ha ganado la partida a Nico Rosberg.
4. Lotus también. Tiene un coche capaz de pelear por los puestos de arriba. El ridículo de Kimi Raikkonen, que no ha superado la Q1 cuando Grosjean será tercero en la parrilla, solo es comparable al de Ferrari. Eso sí, el finlandés tiene excusa porque lleva dos años sin competir. No dudo que pronto recuperará el ritmo.
5. Williams, Force India, Sauber y Toro Rosso parecen, ahora, los rivales de Ferrari, que empieza el Mundial en la Segunda División de la Fórmula 1.

PD. Espero no escuchar pronto la frasecita de que Ferrari ya se concentra en el coche de 2013.