Antes de desembarcar en La Chureca, sigo rescatando del tiempo los encuentros que he tenido con personas que viven de la basura. En esta ocasión vuelvo atrás el reloj casi tres años. Me sitúo en el último Foro Social Mundial que se celebró en la ciudad que lo vio nacer: Porto Alegre, bastión tradicional del Partido de los Trabajadores de Luis Ignacio «Lula» da Silva y hogar de los presupuestos participativos (en los que cada ciudadano decide en qué quiere que se gasten sus impuestos).
Cuando desembarco en Brasil, el evento acaba de comenzar. Dejo las cosas en la habitación de hotel que comparto con el enviado de la revista Time, corro a la sala de prensa, donde me acredito, y después me uno a la multitud que ha salido a abogar por la paz y la justicia social, en la primera de tantas marchas que se sucederán a lo largo de esta semana. Una manifestación que termina en el escenario donde por la noche toca Manu Chao.
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El Foro Social Mundial (FSM) nació como respuesta a la reunión que cada año los empresarios, políticos y economistas celebran en la ciudad suiza de Davos. Es un encuentro de la sociedad civil más activa y comprometida, esa que trabaja desde abajo para transformar la actual repartición de poder. Por las salas de la conferencia en Brasil pasan intelectuales como Eduardo Galeano, Adolfo Pérez Esquivel, José Saramago, Ignacio Ramonet…Al mismo tiempo, miembros de grupos indígenas, ecologistas, sin tierra, debaten, intercambian ideas, en las decenas de tiendas que se han instalado por toda la ciudad gaucha.
Al terminar el FSM, me embarco en un largo viaje por Brasil que aprovecharé para realizar reportajes sobre la situación social del país tras el arribo al poder del Partido de los Trabajadores. Abandono Porto Alegre con algunos sentimientos encontrados, pero con la certeza absoluta de que ese otro mundo del que tanto se ha hablado será consecuencia de las acciones de la gente de a pie, de las bases, o no será.
Joaquim, creación en la basura
Aterrizo en Sao Paulo, donde ya en mi primer recorrido por el centro conozco a Joaquim, un hombre que desde hace ocho años vive debajo de un puente. Uno de los 30 mil sin techo de esta ciudad de brutales contrastes, en la que los altos ejecutivos van a sus trabajos en helicóptero para evitar los atascos.
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El eje de la existencia cotidiana de Joaquim es la basura. Con muebles viejos y abandonados ha construido el refugio en el que pasa los días bajo el puente de esa autopista que a todas horas se mece y se sacude por el trasiego constante del tráfico. Y es también con los trozos de cartón y papel que encuentra entre los desperdicios, que crea cestas, sillas y elementos decorativos que vende para poder subsisitr.
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Me maravilla el talento de Joaquim. En especial cuando me muestra algunas esculturas que ha hecho de papel. Lo felicito por el trabajo que realiza. Y le pregunto cómo ha terminado en las aceras.
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Joaquim se expresa con propiedad. Me dice que es contable de profesión y que tenía una empresa. El punto de inflexión llegó cuando descubrió que su socio lo había estado estafando, y no sólo perdió el negocio sino que se deprimió tanto que terminó separándose. En un punto de la narración no puede seguir adelante por el peso del dolor, del recuerdo de su mujer y sus hijos, y comienza a llorar.
Indiferencia ante los problemas mentales
Lo cierto es que a medida que su discurso avanza, empieza a perder coherencia. Vislumbro que Joaquim padece alguna enfermedad mental, ya que de hablar de su vida anterior, ahora pasa a contarme historias inverosímiles de hombres que lo quieren matar, que le disparan desde coches en movimiento, y me explica que esa es la razón por la cual decidió esconderse debajo de un puente.
Paso varias horas con Joaquim, un hombre que me genera una honda empatía. Observo cómo hace sus esculturas, lo acompaño a recoger papel y cartón. Cuando nos despedimos, ya es tarde, está cansado. Sin haber cenado, se acuesta en su refugio. Allí, en medio del ruido, de las ratas, de la violencia.
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Pienso en esa otra realidad posible de la que tanto he escuchado debatir en los últimos días. Me digo que tiene que ser una realidad donde las personas con problemas mentales reciban ayuda, medicación, compañía, y no terminen tiradas debajo de un puente. No sólo como sucede en Brasil, sino también en España, y en buena parte del planeta. Ya que parece que ahora, para este magnífico sistema de vida que hemos creado basado en la competencia, en la supremacía del más fuerte (o del que tiene más capital, que es lo mismo), aquellos que están en inferioridad de condiciones no cuentan.
Continúa…
Queridos amigos:Siento haber leído con retraso este blog, pero dada la importancia de los temas que se tocan quería participar: la situación de las personas mayores, cada vez más en número ,y el aumento de las enfermedades degenerativas que padecen los mismas y también en general las personas con trastornos mentales (entre las que se incluiría las personas mayores que padecen aquéllas).He estado dudando si contar mi experiencia personal ,pero dada la importancia y magnitud de este problema me he decidido a hacerlo , para compartirlo especialmente con aquellos que sufrís situaciones similares.Tengo una hermana disminuida psíquica y que estuvo en un centro bien atendida muchos años, pero con el tiempo empeoró y se vió obligada a cambiarse a un centro específico para disminuidos psíquicos gravemente afectados. Tenía una plaza ya de la Comunidad de Madrid, por tanto, solo era un traslado , pero hasta que pudo ingresar en el nuevo centro (que como el anterior, en el que estuvo, realmente estupendo) pero tardó 6 meses.En el lapso de esos 6 meses tuvo que quedarse con mis padres, ambos mayores y enfermos. Yo por entonces residía ( y resido) en el extranjero con la consiguiente grandísima preocupación. Contratamos a una persona que se encargara exclusivamente de ella. Yo cogía el avión a Madrid siempre que podía y mi hermano que reside en Madrid ,hacía cuanto podía.Ahora, gracias a Dios se solucionó este problema, ya que se encuentra muy bien en el centro actual. Pero me pregunto, mi hermana tiene una familia y gente que le quiere, y se preocupa por ella.Durante esos seis meses tanto el centro anterior como nosotros hicimos todo lo posible para encontrarle un nuevo hogar. No somos ricos pero tenemos un mínimo de recursos para solventar situaciones de emergencias, pero entonces ¿que será de las personas con problemas mentales, que provengan de familias desestructuradas, o que se despreocupan, o con no solo nulos recursos económicos sino también intelectuales para solventar estas cuestiones?No me extraña que, desgraciadamente que muchos acaben en la calle, abandonados, sin que nadie se ocupe de ellos.El tema de los padres mayores y enfermos también me toca – que conste que no quiero que esto parezca el blog de las lamentaciones- pero si pretendo alzar mi voz ante esta difícil y cada vez más común situación.Por la falta dichosa de tiempo leo todos los comentarios rápidamente.Querida Lola, Javier, Carmen….y todo los demásCasi nadie sabe lo que es hasta que lo vive . Me imagino que de igual manera yo seré inconsciente de muchísimas cosas. Pero ver como los seres más queridos del mundo, los que te de dan el amor incondicional, los que has conocido sanos…van perdiendo poco todas sus facultades, van volviéndose como niños,(porque un anciano es un niño en cuerpo de adulto) y de manera –aunque parezca duro pero no encuentro otra palabra- tan grotesca, es una prueba bien difícil que te pone la vida.¿Y como solucionar este tema? Hago todo lo posible para mantener a mis padres en su hogar y no internarlos en una residencia. Aunque dentro de no mucho tiempo va tener que ser así. Y como se ha mencionado anteriormente las privadas tienen unos precios elevadísimos .En fin cada historia familiar es distinta.Lo que si os puedo decir que cuando vuestros padres estén así, dadles todo el cariño del mundo, intentar desarrollar “el músculo “ de la paciencia ( que conste que a mí me falta mucha), es normal y humano desesperarse, pero soportad en la medida de lo posible sus pequeñas impertinencias, que estén lo mejor posible, para no lamentarse luego, cuando ya no estén con nosotros,: si hubiera hecho tal o cual… No pretendo moralizar ni dar lecciones de nada, y soy la primera que tiene que mejorar en muchas cosas.Querida Lola,Siento mucho lo que nos cuentas, sobre las amistades que te dieron la espalda en un momento tan delicado. Yo reconozco que he tenido más suerte, aunque he de decirte que son la minoría los que se dan cuenta de la dimensión de problema y muchas veces es gente que ha pasado por situaciones similares. Efectivamente, como señalas, la gente solo se apunta a la risa y a las fiestas y la tónica general es que nadie quiere saber de los problemas de los demás porque piensan que ya tienen bastante con los suyosQuerida MMTienes toda la razón del mundo que el personal sanitario, educadores sociales… tienen en general una situación laboral precaria. Y a toda esta gente habría que ponerla en un altar, a los que cuidaron y cuidan ahora de mi hermana, a todos los voluntarios que se la llevaban de vacaciones, que la entretenían los fines de semana…Querida Carmen,Veo que tu fe te ayuda a sobrellevar estas cosas, lo digo con todo el respeto y cariño, creo que los que sois creyentes tenéis mucha suerte de verdad y a veces, reconozco que me gustará serlo mi también ,pero es que no veo ningún mensaje divino en todo esto, de veras. Estoy contigo ,en que esta experiencia ha influido decisivamente en mi vida para ayudar a los demás .En fin ¡ no me quería poner catastrofista! No me gusta dejar mi email en público pero a si alguno de vosotros os puedo ayudar con estos temas, contactadme por favor ( no se si se podrá hacer a través del administrador de este blog) yo encantada.Moraleja: No hace falta irse a la India para ayudar (que conste que está muy bien), muchas veces es suficiente tender la mano al amigo, al compañero de trabajo, al vecino…Bueno, creo que en mi vida he escrito tanto seguido…¡un abrazo a todos los amigos del blog¡
16 octubre 2007 | 21:24
Hola La abuela, guapa…Perdona q no te haya contestado antes, aunque tu comentario no requiere contestación, sino q es toda una exposición de muchas cosas importantes que se merecen mi gratitud, mi admiración y todo mi respeto… y aunque ciertamente es un tema muy personal, te agradezco q lo cuentes con tanta sinceridad y lo compartas con nosotros… un corazón abierto es siempre un tesoro q los demás nos regalan, y q debemos saber valorar y apreciar…Todavía tengo mucho q aprender y conocer, pero en estos treinta años de vida q me han sido regalados, la mayor y mejor enseñanza q he adquirido es ésa, el Amor es lo único por lo q vale la pena vivir, Amor a uno mismo, a los q nos rodean, a nuestro trabajo, a la vida… es lo q nos hace más fuertes, ricos y dichosos, pq donde no hay Amor, aunque sobre de todo lo demás, falta lo más importante… de hecho, creo q lo único q mantiene vivos a quienes no conocen el Amor es la esperanza, la esperanza de conocerlo algún día… y los q no lo conocen ni esperan conocerlo, creo q ya están muertos aunque vivan, pq no se puede vivir sin Amor, sin Amor sólo se existe, pero no se vive…Sabes? ahora q nadie nos oye ni nos juzga ;-), me llama la atención eso q me has dicho, ese deseo de muchos, cuando me dicen q les gustaría ser creyentes para superar mejor algunos golpes de la vida… y no es así, no es más fácil para un creyente, sólo es distinto… creo q algunos piensan q los cristianos no sufrimos, y se equivocan, se equivocan mucho, pq ser cristiano es un sufrimiento añadido y constante…En fin, pues eso… sólo quería enviarte todo mi cariño, mucho ánimo y fuerza en esas situaciones familiares que has vivido y estás viviendo, y decirte q no pierdas nunca la Fe, la Fe en ti, en las personas y en el Amor, no importa q no creas en Dios, en realidad, si crees en el Amor crees en Él, pq es lo mismo…Un beso tan fuerte q lo sientas, y un gran abrazo q te llegue hasta donde estés, querida La abuela… y tb aprovecho para decirles lo mismo a Antonio Álvarez y Javier, q según nos han contado están pasando un momento tb difícil…Hernán, hoy para ti no hay nada, se terminó el cupo de besos y abrazos… 🙂 tú sigue trabajando con los vídeos q cualquier día de éstos te veo haciendo superproducciones para Hollywood, y entonces ya nos olvidarás…jeje 😉
18 octubre 2007 | 17:36
Por cierto, estoy atrapadaaaaaaa en la ofiiii… Valencia está literalmente inundadaaaaaa… necesito una lanchaaaa o una barquitaaaa para salirrrr de aquíiiii…!!!! SOS… si es lo q yo digo, las chicas de ciudad no valemos pa naaaa de naaaa, caen 4 gotas y ya no somos nadieee… bueno, chica de ciudad pero con alma de campo y de mar… 😉
18 octubre 2007 | 20:38
Querida Carmen:Muchas gracias por tus palabras.Efectivamente el “Amor” es le único motor de la vida, preciosa palabra tan manoseada y mal empleada, sobre todo el Amor con mayúsculas, que es el que no espera nada a cambio y que está por encima y más allá de nuestra familia, pareja, amigos.. que son después de todo nuestro círculo social de subsistencia. El verdadero Amor, que vemos como ejercen día a día ,por ejemplo, tantas personas que tan bien nos describe Hernán y otras muchísimas que jamás conoceremos, porque como bien es sabido, los buenos no hacen ruido….Con mi comentario no pretendía llamar la atención sobre mis circunstancias particulares sino alzar la voz sobre la situación tan delicada que viven tantas familias.En fin respecto a las creencias no pretendo hacer un debate teológico. Yo fui educada para ser católica, lo que ocurre y esto es simplemente una experiencia muy personal, y que consiste en mi observación. Cuando miro un pájaro, el sol, el mar, las montañas, la sonrisa de los niños.. veo a dios pero ¿donde está dios cuando hay guerras, cuando a prostituyen a niños, cuando los pobres que se caen de hambre….? no veo a dios por ningún lado, o al menos ese que me enseñaron y que se supone que es como un padre y cuida de nosotros.Bueno que rollos echo últimamenteUn abrazo Carmen!!!Ahh y tu también guapa!!!
18 octubre 2007 | 22:37
Querida La abuela,Gracias a ti por este interesante intercambio de ideas, experiencias y opiniones… no es ningún rollo, al contrario…¿Sabes?, yo tb me hago muchas preguntas, sobre la vida, sobre Dios… y no tengo todas las respuestas, apenas unas cuántas q creo q sólo me sirven a mí… pero respecto a lo q me dices, creo q en un mundo perfecto no existiría Dios, no haría falta… para mí Dios no es un superhéroe q nos salva, es como un amigo q nos acompaña… pero q un Padre te cuide y te quiera no significa q pueda evitar siempre tu sufrimiento… y todos estamos expuestos, en mayor o menor medida…Un beso abuela 😉
19 octubre 2007 | 11:25