Viaje a la guerra Viaje a la guerra

Hernán Zin está de viaje por los lugares más violentos del siglo XXI.El horror de la guerra a través del testimonio de sus víctimas.

Archivo de diciembre, 2015

De «Nacido en Gaza» a «Nacido en Siria»

Cuando tomé la decisión el año pasado de ir a Gaza durante la guerra, en ningún momento llegué a imaginarme que aquel intento de dar voz a sus víctimas más vulnerables iba a tener tanta repercusión. Más aún cuando llevaba en la cabeza un planteamiento estético muy alejado del que habitualmente se utiliza para retratar la realidad en una zona de conflicto.

Quería hacer caso omiso de las bombas, del sonido y la furia, y tratar de mostrar qué sucede en el interior de los que la sufren. Porque la guerra, efectivamente, son los disparos, las muertes, la sangre, pero también los traumas que permanecen en la gente mucho tiempo después de que se haya acabado el conflicto (como en numerosas ocasiones hemos visto en este blog).

En este caso, dentro de los diez niños que seguí a lo largo de la ola de devastación que Israel lanzó sobre este territorio paupérrimo, cerrado a cal y canto, olvidado por el mundo.

"Nacido en Gaza", Premio del Jurado en el Festival Internacional de Al Jazeera

«Nacido en Gaza» no solo ha estado nominada a los Premios Goya, Platino y Forqué, sino que se ha estrenado en más de 30 salas de cine en España y también en Londres, Toronto, Roma y Sofía, además de haber participado en numerosos festivales (algunos con tanto recorrido como el de Cartagena de Indias).

El último reconocimiento que se le ha regalado a la película ha sido la semana pasada en el Festival Internacional de Al Jazeera, donde recibió el Premio del Jurado.

Las voces de las víctimas

La apuesta estética fue original. El trabajo del equipo, sobre todo por las prisas por terminarlo lo antes posible, de un compromiso ético y profesional por el que le estaré siempre agradecido. Pero el mérito indiscutible de la película es de sus protagonistas. La hondura y la coherencia con la que se expresan a lo largo del documental no deja de despertar mi admiración.

Y esa es, sin dudas, la mayor satisfacción que me genera que una producción tan pequeña haya llegado tan lejos: que la voz de estos niños no deja de escucharse, de multiplicarse y de mostrar bajo otra luz el horror de la guerra y del inhumano sitio que sufre Gaza.

En septiembre empecé a rodar «Nacido en Siria». Otro tanto tengo que decir de sus protagonistas. Resulta profundamente aleccionador escuchar sus testimonios. Ojalá sus voces lleguen lejos también y ayuden a no perder la perspectiva humana del conflicto que lleva cuatro años ya devastando Siria.