Una de cada mil Una de cada mil

Historias de la Esclerosis Múltiple

Entradas etiquetadas como ‘motivación’

Año nuevo, retos nuevos

Sí, me encantan los propósitos de principio de año, aunque más bien, intento cumplirlos como pequeños objetivos para intentar mejorar. Además, creo que es una técnica muy positiva para nosotros, exigirnos ciertos cambios en nuestros hábitos o salud, características que no funcionan, circunstancias que no nos gustan, siempre hay algo que podamos mejorar, y comenzar un año siempre es un buen punto de inflexión. Estos pequeños gestos, hacen que nos sintamos diferentes, con nuevas ganas e ilusión, y lo mejor es que te apetece comerte el mundo. Piensas que este año la esclerosis múltiple no te va a parar.

En mi caso, será un año lleno de cambios y de adaptaciones, la mayoría fruto de la maternidad. Pero tengo ciertos capítulos de mi vida que quizá sea hora de cerrar, y con otros, necesito que pase un poco más de tiempo, para después tomar decisiones.

Flickr/Marcos Gasparutti

Flickr/Marcos Gasparutti

Cuando me recupere del todo, pueda organizarme, mis propósitos para el 2016 son:

  1. Mantener la esclerosis múltiple a raya, sin brotes. Algunos de mis brotes, los podía haber evitado por estrés o por no parar a tiempo, por ejemplo. Es un año que quiero estar bien y disfrutar de Nora, no quiero poner mi cuerpo al límite, y ni por asomo ver a la esclerosis múltiple. Vuelta al tratamiento, vuelta a mis síntomas de siempre.
  2. Volver a hacer deporte. Este último año, todo mi cuerpo estaba inmerso en el proceso del embarazo, pero hay que volver a las rutinas de antes, tengo que mantener mi pequeña mejoría.
  3. Aprender a decir no. Tengo un pequeño problema, y es que me cuesta mucho decir que no cuando me proponen algo. Acabo haciendo cosas en las que no creo y eso, me trae como consecuencia mucha frustración y muchos quebraderos de cabeza que podía haber evitado.
  4. Seguir apartada de la gente tóxica. Aunque son personas a las que directamente ignoro, siempre vuelven a aparecer u otras se vuelven así con el paso del tiempo. Es importante seguir manteniéndolas lejos de mi.

¿Cuáles son vuestros propósitos para el este año?

¿Tiene recompensa todo el esfuerzo?

Siempre había pensado que así era, que tarde o temprano el esfuerzo traía una recompensa. Era una premisa que hacia que mi motivación creciese y creciese, pensando que al final del camino iba a tener algo bueno (o tremendamente bueno), esperándome.

pixabay.com

pixabay.com

Luego hay veces que me ha quedado cierta sensación de vacío cuando lo he conseguido, con cara de sorprendida y preguntándome ¿y ya está?, ¿esto es todo?, ¿y ahora qué? El ejemplo que mejor recuerdo de haber pasado por esta sensación, fue cuando llegué a Santiago después de siete largos días de Camino. Me hizo mucha ilusión llegar con todas mis circunstancias en la mochila, pero disfruté más el resto de días viendo como me superaba a mi misma paso a paso, que cuando llegué a la Plaza de Obradoiro .

Otras veces (creo que son la mayoría), piensas que todo lo que estás haciendo no va a servir para nada, simplemente porque no ves resultados inmediatos, porque tardan más de lo que te habías propuesto, o porque como recompensa, no obtienes eso que te habías imaginado. En este punto, es donde empiezas a echar el freno, toda esa ilusión del principio comienza a desvanecerse. Lo que antes tenía cierta importancia, deja de tenerla, para finalmente decidir, que todo ese esfuerzo ya no merece la pena.

Algunos abogan por la perseverancia, la cabezonería o la fuerza de voluntad para seguir. Otros necesitan un parón, descansar y reflexionar para volver con más fuerza. Y los últimos, simplemente se dan por vencidos y abandonan.

Pero para mí, la mayor recompensa: soy yo. Haberlo hecho por y para mí, porque es lo que quiero, lo que necesito, sin importar si me va a gustar más o menos lo que me esté esperando al final del camino, o lo que voy a tardar en conseguirlo.

Estoy bien

Voy a estar bienA veces, tengo la necesidad de decir que estoy bien, cuando en realidad no lo estoy; o que voy a superar algún bache por el que esté pasando en ese momento, cuando ni siquiera yo misma sé cómo voy a salir de él; o incluso decir que algo no me importa cuando no es del todo cierto. Me siento aliviada cuando el resto me ve bien, cuando no se compadece de mí, porque si algo detesto, es la lástima.

Lee el resto de la entrada »

La casa del buen rollito

Después de una semana intensa no hay nada como ir a la playa para que todos esos sentimientos que me hacen estar en ebullición vuelvan a la calma. Es algo mágico, que solo la arena, el olor y el color azul del mar consiguen de una manera tan rápida que hasta a mí, me sorprende. Lee el resto de la entrada »

Con un par

Después de escribir Maldita fatiga, del apoyo recibido, y de ver que parece que este cansancio no se me va a quitar tan rápido como yo pensaba. Decidí que mi «yo de siempre«, al que invocaba para que apareciese, si no volvía él solo, lo haría volver yo misma, aunque fuese a empujones. Lee el resto de la entrada »

Construyendo algo

A lo largo de estos años he ido construyendo «algo» a base de fuerza de voluntad, esfuerzo y tesón. Ese «algo» no sabría definirlo de una manera específica: podría tener forma de escalera, en el que voy subiendo peldaños; o de muro, en el que hago una separación entre mi vida y la esclerosis múltiple; o incluso, en forma de casa acogedora en donde me refugio de todo. Lee el resto de la entrada »

Mi realidad

Son muchos los días, que prefieres quedarte en la cama hecha un ovillo que levantarte al mundo real. La opción es tentadora, estás cansada, no te encuentras bien y te apetece desaparecer. Esos días, saco fuerzas y me levanto. Lee el resto de la entrada »