A veces, tengo la necesidad de decir que estoy bien, cuando en realidad no lo estoy; o que voy a superar algún bache por el que esté pasando en ese momento, cuando ni siquiera yo misma sé cómo voy a salir de él; o incluso decir que algo no me importa cuando no es del todo cierto. Me siento aliviada cuando el resto me ve bien, cuando no se compadece de mí, porque si algo detesto, es la lástima.
Es como si cuando lo dijese en alto, se fuese a cumplir y así, me ahorraría todo el esfuerzo que supone superar algo. Todas las lágrimas que hay que derramar, el afán que hay que poner para desechar los malos pensamientos, ese sentimiento de estar mal con uno mismo por padecer una maldita enfermedad. Como si no tuviese que pasar por todo eso.
Aunque en mi interior sé que no va a ser tan fácil como expresarlo, que hay procesos que son inevitables. Pero a la vez, siento que cuantas más veces lo digo, mejor me siento, porque más me lo creo, y entonces pienso que quizá, tarde mucho menos tiempo en reponerme que la última vez. Me gusta esa sensación de fortaleza y de dominio, aunque solo aparezca durante el tiempo que tardo en decir «voy a estar bien«.
Además, ya tengo una experiencia en esto de superar obstáculos, me conozco y sé que más tarde o más temprano, me voy a sobreponer. Siempre lo hago, porque me gusta estar bien y cuando sinceramente lo digo, se nota. O por lo menos yo, percibo que es de verdad.
1decada1000.
Yo lo veo como tú. Así también me quito todo el peso que conlleva todo el mundo (yo les llamo mi equipo, marido, padres, amigos…) que arrastro en este palo que la vida me ha hecho llevar encima.
Pero por qué no pensar que es una etapa de la vida y la medicina nos va a liberar en breve de toda esta tortura? Hay días que soy más científica que otros, jejeje, también te lo digo. Pero sí, mira hoy estoy bien a mi manera!!! Dentro de mis parámetros que son los que son y son los míos!!
07 enero 2015 | 15:13
Uy, yo lo de la cura, lo veo como algo a muy largo plazo, no tan inminente. Que están investigando sí, que están consiguiendo muchos avances también, pero la cura son palabras mayores. Quizá sea algo escéptica, no sé.
Me alegro que compartamos la misma actitud, seguro que nos irá genial 😉
Besotessss
14 enero 2015 | 20:25
Que sencillo lo escribes! ☺ Y además es cierto, diciendo que estamos bien, por no preocupar o no dar pena, terminamos sintiéndonos mejor nosotras mismas.
Pero espero que además estés bien de verdad
07 enero 2015 | 15:45
Estoy bien, tenía ganas de dejar atrás el 2014 y ya se fue. Es una forma de auto-convencernos que estamos bien o que vamos a estarlo, como si a veces, tuviésemos la necesidad de decirlo para empezar a estarlo 🙂
14 enero 2015 | 20:27
Dices «bien» por no preocupar o dar pena, como dice María; y hay que dar demasiadas explicaciones cada vez q te preguntan como estás. Yo antes decía que bien y me sentía mal pq no es verdad (siempre hay algo): Ahora respondo «ahí vamos». No sé si es una amenaza XD Pero es un «sigo adelante aunque no estoy bien».
07 enero 2015 | 16:53
Hay veces que no te apetece contar cómo estás y sales del paso como puedes. En mi casa, depende de quién me lo pregunte, del momento, del lugar respondo de una manera u de otra. Según me dé. Luego hay otras personas, con las que me puedo sincerar y contarles realmente cómo me siento y además me apetece.
Y tu frase también significa: «no me preguntes más» 🙂
Cada uno lo hacemos a nuestra manera, y sea la que sea, lo importante es que nos haga sentir bien a nosotros mismos.
Besooootes
14 enero 2015 | 20:32
Yo cuando no puedo más con el dolor me repito a mi misma: no tengo dolor, qué poco me duele…y por unos segundos mi cerebro se lo cree y yo espero que al final sólo sea ese el mensaje que le llegue…
Me parece muy positiva tu actitud, es lo que hemos de intentar y al final puede que lo consigamos…o no…
07 enero 2015 | 19:02
Jajaja, yo también pienso eso, cuando estoy en la cama y no me puedo dormir porque tengo algún dolor por el cuerpo. A base, de esfuerzo me acabo durmiendo, digo yo que algo hará pensar así.
Creo que si quieres, puedes, pero hay que empezar por creérselo uno mismo.
Un beso!!
14 enero 2015 | 20:35
Todas estamos igual: unas veces más positivas que otras pero los síntomas nos pueden. Es normal. Y sí yo también pienso que cuando más veces digas que estás bien, mejor. Parece que no, pero funciona. Cuando me pasa eso: intento tomar el aire, estar con gente que me haga reir, oír música, ver pelis…
Hay un montón de cosas que podemos hacer cuando no nos apetece estar muy activas o no se puede estarlo tanto como otras veces.
Muchos besos y ánimo que ya veras que te queda poco para estar así.
07 enero 2015 | 23:47
No si yo no estoy mal. He escrito está entrada porque recordé ese estado en el que no haces más que decir que estás bien, aunque no lo estés. Pero no estoy mal, tenía ganas de acabar el 2014 y ya se fue, todavía queda un año por delante en el que seguro que tendremos buenos momentos. Aunque seguro que estaré mejor!
Un besoteeee
14 enero 2015 | 20:47
Hola Paula!!
Primero, espero que hayas pasado unas buenas navidades. Me hubiese gustado pasarme antes por tu blog, pero lo cierto es que me está costando mucho adaptarme a la nueva situación. Aún así te he estado leyendo todo este tiempo, sólo que no me quedaban palabras alegres para decirte…Pero bueno, como bien sabes, todo pasa!
Me ha parecido muy curiosa tu entrada de hoy, es algo que hago todo el tiempo, casi sin excepciones, y de manera automática. Cuando lo has escrito, has hecho que me de cuenta de ello. ¡Qué poco me gusta decir que estoy mal! Y sin embargo es necesario decírselo a esas personas que te importan para que puedan entenderte. Pero sí, lo malo de eso es que la mayoría de veces reaccionan con tristeza, pena, lástima, preocupación…Y odio ser yo la que les genere esos sentimientos. Ojala pudiese desprender siempre alegría, fortaleza, optimismo, porque son cualidades que quiero que formen parte de mi vida y de los que me rodean. Pero las pequeñas batallas que libramos día a día contra una enfermedad no siempre son fáciles, a veces perdemos y, simplemente, estamos mal.
Pero como tú dices, esos días hay que concentrarse y mantener la cabeza fría para pensar que, antes o después, saldremos, que llegará el día que podamos decir con sinceridad ¡estoy bien! 🙂
Sabes que con tus palabras ayudas a todos los que te leemos, a los que llevan tiempo con esto y a los que estamos empezando a adaptarnos.
Te dejo una frase de un físico que admiro desde hace muchísimo tiempo:
«However bad life may seem, there is always something you can do, and succeed at. While there’s life, there is hop»
Un beso muy fuerte!!
08 enero 2015 | 16:32
Hola María,
También nos puedes decir palabras que sean menos bonitas, es fundamental que te desahogues con alguien y a veces, no se por qué un desconocido suele ser nuestro mayor aliado.
La gente que te quiere, te mirará así al principio, pero luego se acostumbrarán a verte cansada o con mala cara. Además, a nadie nos gusta que el resto del mundo nos vea débiles o vulnerables. Todos esos sentimientos que mencionas, ya llegarán, tienes que darte tiempo y tener paciencia. Seguro que si te lo propones, lo consigues! Yo ya pasé por esa fase hace tiempo, ahora me toca echar una mano a los que están pasando por ella.
Me gusta mucho la frase, te la voy a copiar!
Cuídate y mucho ánimo!!!
Besotes 🙂
15 enero 2015 | 10:41
Hola Paula. Entre tus palabras he visto tristeza y también muchas ganas de superación, que es lo que importa. Ya sabes cómo es esta incómoda y caprichosa compañera que se nos subió a la chepa un día y no se quiere bajar nunca. Pero tú saldrás siempre hacia adelante porque tu fuerza y tus ganas te empujan, así que mucho ánimo. BSS
08 enero 2015 | 19:49
Hola Ángela,
Cuando escribo una entrada, me pongo en situación. He pasado por esto muchas veces y no me ha costado recordar cómo me siento en esos momentos. Tarde o temprano, siempre salimos adelante. Aunque sea, por mis narices!!!
Muchos y grandes besotes! 🙂
15 enero 2015 | 10:49