Sobre ‘Cocina con Clan’ y tener clase de cocina en los colegios

Julia está entusiasmada ahora con un programa de Clan llamado Cocina con Clan, un programa (que no concurso) gastronómico infantil muy bien llevado por el chef andaluz Kike Sánchez en compañía de tres niños. Si vuestros peques quieren ir, pueden proponerse como pinches, estoy pensando hacerlo con Julia, le encantaría. En ellos se cocina, se habla de los alimentos, se investiga de donde proceden visitando molinos de harina, huertos y establos, se aprende sobre sus propiedades. Un acierto televisivo que está en el culmen de preferencias televisivas de mi hija.  De hecho mañana vamos a hacer alguna de sus recetas juntas, probablemente las croquetas con forma de zanahoria o calabaza.

Con patrocinio olivarero (de hecho el primer programa estaba centrado en el aceite de oliva), se emite los domingos a la 13 desde hace poco más de un mes. En la aplicación de Clan y en la web de RTVE hay unos cuantos ejemplos. Ojalá dure muchos programas y no sea un breve ejemplo de la moda por la cocina que nos invade.

cocinaconclan
Ese mismo entusiasmo que ahora despierta en ella este programa lo tuvo durante varias semanas del primer año de infantil, gracias a un breve taller de cocina que aún recuerda. Probablemente será la única vez en todos sus años de escolarización en los que podrá cocinar y aprender sobre los alimentos que consumimos.

Julia es cocinillas, como su madre. Disfruta cocinando conmigo y, antes del verano, se lo pasó muy bien en un curso infantil de cocina en Apetitoh, el taller de cocina en el que yo sigo aprendiendo.

Ya os he dicho recientemente que enseñar a nuestros niños a alimentarse bien es tan importante como enseñarles a leer y escribir. Y no me refiero en absoluto a la obsesión por comerlo todo sano y no pisar una hamburguesería o tener niños que miren las chuches como baratijas marcianas, no me entendáis mal.

Sé que hay muchas materias interesantes y útiles que tratar en clase, pero algunas horas dedicadas a enseñar a disfrutar cocinando, aprender técnicas básicas y un mínimo sobre los alimentos que consumimos tal vez sería un paso decisivo para luchar contra esa moderna lacra sanitaria de la obesidad.

Coincido completamente en eso con mi compañero Juan Revenga, el nutricionista de la general, que no hace mucho decía:

Nuestro actual patrón de alimentación ha evolucionado con el de respecto a hace un par de décadas (o más) introduciendo más alimentos procesados, más manipulados y menos frescos. Todo ello implica, sobre el papel, una mayor libertad y de este modo no se le presta al acto alimentario la importancia que tiene ya que siempre habrá algún sistema al que echar mano para proveerse del cotidiano sustento… y en esta situación hay muchas más probabilidades de hacerlo “a salto de mata”. En este sentido el animar, fomentar y promover que la población cocine tendría, desde mi modesto punto de vista, dos ventajas casi casi incontestables:

Por un lado de forma general, se incluirían más alimentos “normales”, más carnes, pescados, verduras, hortalizas, legumbres, etcétera… y menos alimentos procesados y precocinados. Y por el otro, y al mismo tiempo, implicaría que las personas que se encargan de proveer el diario sustento en una casa hicieran un acto de previsión de qué se va a comer en los días venideros. Si se come lo que se cocina y no otra cosa salvo excepciones, el diseño de las listas de la compra sería, casi seguro, mucho más acertado. De este modo, la población, invitada y promovida de forma adecuada a cocinar haría mejores elecciones y además no se daría al traste con nuestra cultura culinaria… algo también en claro retroceso en nuestros días.

No sé qué os parecería a vosotros que tuvieran ese aprendizaje en el aula, en algún momento de sus muchos años escolares, pero yo aplaudiría la medida. Se puede trabajar muchas materias cocinando: matemáticas, lectoescritura, conocimiento del medio… Aprendizajes prácticos y con sentido. En cualquier caso, es mucho lo que podemos hacer en casa al respecto.

Y bienvenido sea en cualquier caso Cocina con clan, mil veces preferible a productos como Monster High o Violeta. Dos series que me sorprende ver lo mucho que gustan a algunas niñas tan pequeñas como la mía (Julia tiene cinco años) y que no han entrado en mi casa y procuraré que sigan fuera. Aunque eso ya es otro tema del que hablar otro día.

Otras entradas que podrían interesarte:

24 comentarios

  1. Dice ser LolailosLalalas

    Y no sólo de cocina: labores del hogar como coser, o chapuzas varias… cosas que en un futuro ayuden a desenvolverse en la vida adulta.

    Son cosas que mis padres aprendieron (vale, aparte del cole también en casa porque era lo que tocaba), y creo que sería muy útil y redundaría en un mejor desarrollo personal.

    Ojalá hubiera más programas como Cocina con Clan, y menos MonsterHigh o series que más que infantiles parecen adolescentes.

    12 noviembre 2014 | 09:19

  2. Dice ser Diana

    Pues qué quieres que te diga. Lo de la cocina se ha puesto de moda y ahora todo el mundo quiere hacer «cocina de autor». Mientras tanto, han sacado la educación musical de las aulas cuando está científicamente demostrado que el aprendizaje de la música y de la práctica de un instrumento musical desarrolla áreas del cerebro en el niño de una manera que no se consigue con ninguna otra disciplina. Pero sigamos atontando al pueblo, no interesan cerebros desarrollados, está claro.

    12 noviembre 2014 | 09:20

  3. Dice ser Juan

    Pues sí, mola, está guay …

    Cada cierto tiempo alguien (con bastante razón) sale opinando que tal o cual cosa debería enseñarse en los colegios; educación vial, alimentación saludable, cultura física, etc, etc … pero … ¿De donde salen esas horas?, porque también se exige mas horas de lengua, matemáticas e idiomas (en plural).

    Es fácil, salen de las artes; plástica y música. Cada vez que a un genio se le ocurre una educación para la ciudadanía, una cultura empresarial o lo que sea que se les ocurra, les quitan horas a las artes, porque, total, «no sirven para nada», es decir, no rinden un servicio económico evidente a futuro. Sin embargo, cualquier cosa que se nos ocurra sí que debe tener espacio en el colegio.

    Y si no me creen, pregúntense a si mismos: ¿cuantas horas de lengua sacrificarían para meter horas de cocina?, y ¿ cuántas de plástica o música?. La respuesta me la temo, y me entristece, mi hija pequeña, hoy por hoy, solo quiere dibujar y cantar (y por que no decirlo, hacer magdalenas de colores conmigo cuando la invitan a alguna fiesta).

    12 noviembre 2014 | 09:30

  4. Dice ser Verónica

    Me parece muy buena idea este tipo de programas para niños, ya que aprenden sobre alimentación y la importancia de comer todo tipo de alilmentos para estar sanos.

    La propuesta que haces de llevarlo a las aulas la considero muy interesante como maestra de educación infantil, porque esto permitiría a los niños a adquirir desde pequeños costumbres saludables de alimentación y disminuirían los casos de obesidad y otros trastornos y enfermedades alimenticias. Además la cocina sería una bonita de forma de acercar a los padres y los hijos en una actividad que puede resultan muy sencilla y divertida.

    12 noviembre 2014 | 09:30

  5. Dice ser Lico

    Creo que seria una idea excelente tener una vez a la semana una clase de cocina , de poner lavadoras, etc. Cosas que tarde o temprano les resultarán útiles. Y es que en casa se ha de integrar en los quehaceres de la casa a los hijos para que poco a poco tomen la responsabilidad de ayudar en las tareas de la casa y que no recaiga continuamente en los padres.

    12 noviembre 2014 | 09:49

  6. Dice ser Antonio Larrosa

    La iniciativa es estupenda, el saber no ocupa lugar.

    Clica sobre mi nombre

    12 noviembre 2014 | 10:02

  7. Dice ser marian

    Pues a mi me parece estupendo, es algo cotidiano que precisarán para vivir solos o acompañados; sobre quitar horas a plástica y música, pues francamente también me parece estupendo, vivir sin hacer dibujos o tocar la flauta se puede perfectamente, mejor sería dejar estas dos últimas disciplinas para extraescolares; no todo el mundo quiere o no a todo el mundo se le da bien tocar instrumentos o dibujar y no entra en lo básico y necesario como alimentarse, cocinar, ir a los bancos, tratar con la Administración, poner lavadoras…incluso aprenderse las calles de la propia ciudad.

    12 noviembre 2014 | 10:33

  8. Dice ser Doraemon

    ¿Y por que no nos encargamos los padres de enseñar ese mínimo de competencias, en lugar de derivarlo todo a las aulas y a los colegios?

    Parece ser que ahora sean los colegios los responsables de toda la educación de los hijos.

    12 noviembre 2014 | 10:37

  9. Dice ser Marisa

    Totalmente de acuerdo. Según he leído en el libro «¿Cómo ser una mamá cruasán?» en Francia los niños desde muy pequeñitos, 2-3 años ya van a clases de cocina y es habitual que todos los fines de semana preparen un postre con sus padres. Y precisamente los niños franceses son los que menos problemas tienen de obesidad infantil y enfermedades asociadas. Además ya desde las guarderías se les presenta la comida antes de tomarla con respeto, anunciando lo que hay en cada plato, el tipo de queso,….y son comidas sofisticadas, como si fueran para un adulto si bien adaptada en la textura a la edad (molida o partida, según edades).

    Creo que si aprenden cómo se preparan los alimentos además de comer mejor, más sano, algunos perderían el rechazo por algunos alimentos o por mancharse las manos¡¡ que es algo que últimamente me han comentado algunas mamis cercanas con hijos de mal comer.

    Y como dices la clase de cocina además puede servir para que se les instruya sobre la procedencia de los alimentos, sus características,…

    Mi hija tiene 3 años y siempre me ha ayudado en la cocina, bien echando las verduras ya picadas a la olla (y comiéndose algunos trozos por el camino), bien preparando un bizcocho o madalenas.

    12 noviembre 2014 | 10:45

  10. Dice ser EA

    Mi niña tiene tres años y también está encantada con el programa, le gusta muchísimo

    12 noviembre 2014 | 10:48

  11. Dice ser Almudena Fer

    No he visto el programa, pero lo veremos, seguro que a mis hijos les encanta. Y en cuanto se enteren de que pueden participar no pararan hasta que les apunte.
    En cuanto a la enseñanaza en los colegios, pues estoy de acuerdo en lo que algunos han dicho por aquí, en los colegios se deberían enseñar cosas prácticas y útiles para la vida diaría, cocinas, costura, bricolaje, ir al banco, pedir cita en el médico, como poner lavadoras y limpiar cristales, etc. y dejarse de tonterías como música, arte, fracciones, análisis sintáctico, física, historia, etc. Porque, como decía una compañera mía del insituto ¿acaso voy a encontrarme un polinomio andando por la calle? (por si alguien lo duda, ironía en modo on)
    Estaría bien algo de cocina, porque no, pero me temo que queremos cargar muchas cosas en el colegio. Me parece mejor, como tienen en el colegio de mis hijos, programas de alimentación sana, enseñar que alimentos son saludables y luego te dan propuestas de recetas para hacer en casa con los padres. Porque yo también opino que cada vez delegamos más responsabilidades en la escuela ¿y los padres? ¿nosotros no tenemos que enseñar nada?

    12 noviembre 2014 | 11:00

  12. Dice ser Tired spaniard

    Perfecto, vamos a darles educación en cocina y a quitarles de desarrollar artes (plástica o música) o por qué no! Ciéncia ¿para qué dar ciéncias si pueden vivir mejor siendo chefs de pacotilla que pueden vivir trabajando 2 meses al año? Todo el mundo que cree que plástica es hacer dibujitos, que música es tocar la flaúta o que en la vida real no se usa trigonometría y por tanto es prescindible, supongo que no han considerado que el aprendizaje forma parte del desarrollo personal, por no hablar de la necesidad de todo lo anterior aún seguiriamos en las cavernas (alimentandonos de puta madre, eso sí).

    Estoy harto de esa moda de los programas de cocina y de que éste país se limite a auto-explotar sus tópicos. Creo que todo el mundo sabe cómo alimentarse, otra cosa es si su balanza se inclina hacía salud o placer, por suerte o por desgracia hemos sido seleccionado para que nos guste la grasa.

    A mí me gusta cocinar pero sinceramente prohibiría a mis futuros hijos ver éste tipo de programas deleznables de moda.

    12 noviembre 2014 | 11:02

  13. Dice ser mila

    yo tengo una hija mas mayor que las vuestras tiene 13 años
    y me hace unas tartas de frutos secos y frutas con hojaldre.

    12 noviembre 2014 | 11:33

  14. Dice ser José Luis

    En el cole de mis hijos se dan como extraescolares este tipo de clases de cocina y esta teniendo un éxito arrollador. Normalmente a las extras van niños a los que sus padres no pueden recoger en horario normal, pero a estas de cocina van niños que niños que solo van ese día a las extraescolares.

    12 noviembre 2014 | 11:34

  15. Dice ser marian

    No es quitarles de desarrollar artes (el que quiera que las desarrolle y el que no pues no), optativa como extraescolares (para eso hay conservatorios y talleres de pintura), me parecen clases totalmente prescindibles, para sacarlas partido e incluso soportarlas hay que tener cierta habilidad que no todo el mundo posee y que no es educable (el que canta bien canta bien, el que no, difícil lo tiene tanto cantar como que le guste, para eso también hay coros), sin embargo la rutina diaria de la vida es mucho más interesante y por supuesto imprescindible y aunque en casa podamos enseñarles algo, sería más completo a través del colegio; el resto de materias y aunque un binomio no pasee por la calle, son conocimiento que solo requiere memoria y entendimiento.

    12 noviembre 2014 | 12:03

  16. Dice ser Juan

    Que barbaridad, que tristeza … y que miedo … En el orden que las quieras poner, Marian, es muy triste.

    12 noviembre 2014 | 12:38

  17. Dice ser marian

    Pues bien Juan, es mi opinión, ni triste, ni bárbara, ni da miedo, será que mi sensibilidad artística es escasa pero sobrevivo, hace muuuchos años que dejé de tocar la flauta y ahora es mi hijo el que lo sufre, eso y pintar dibujos, todo un arte (5º primaria), él preferiría más mates o lengua, odia esa asignatura y lo que es más curioso, le parece una pérdida de tiempo.
    No todos somos ni pensamos igual, opiniones hay muchas.

    12 noviembre 2014 | 13:13

  18. Dice ser Almudena Fer

    Mariam, la enseñanza de la música no se reduce a tocar la flauta ni la plástica a hacer dibujos. Es también enseñar a disfrutar de la música y de las expresiones artísticas en general. Otra cosa es que no se enseñe bien. El que haya niños que no se les da y no les gusta no es ninguna justificación, por esa regla de tres quitamos las matemáticas o el inglés. O no digamos la educación física. La educación artística es fundamental para un completo desarrollo de la persona en todas sus dimensiones. Lo triste, si, triste es que hay mucha gente que piensa como tú y estan en el ministerio de educación decidiendo el curriculm escolar.
    Se puede sobrevivir sin muchas cosas, claro. También sin cocinar y poner lavadoras. Otra cosa es vivir y disfrutar de la vida

    Un saludo

    12 noviembre 2014 | 13:29

  19. Dice ser Diana

    Mariam, por opiniones como la tuya tenemos la deficiente educación que tenemos en general en las escuelas. Las artes son importantísimas para el desarrollo del niño, la plástica y la música no son «extraescolares para aparcar al niño un ratito». Entre las artes, la música desarrolla su cerebro en una forma que le permitirá enfrentarse a conocimientos complejos con más recursos mentales, y es algo que está demostrado sobradamente. Mira en Europa cómo se potencian las artes y los idiomas, cualquiera sabe dos idiomas y tiene una formación musical siquiera sea básica. Mira cómo les va a esos países con su población joven. En España, lamentablemente, sólo se potencia el deporte (digo, el fútbol) y aunque por supuesto todo es importante,se descuidan las artes. Menos cocina y fútbol, más arte. Y, no, la música no es «tocar la flauta» solamente,aunque realmente quedas excusada al no haber recibido formación musical alguna. Eso que te has perdido.
    Y para enseñar a cocinar, limpiar o poner lavadoras, mejor que lo aprendan en casa, ya que eso no son más que labores de supervivencia básica. Para las aulas dejemos lo importante.

    12 noviembre 2014 | 13:40

  20. Dice ser familia viajera

    No sé cómo lo hacen pero en Finlandia tienen menos horas de clase que en España pero les cabe en el horario por ejemplo una asignatura llamada ‘Hogar y cocina’ y luego los resultados totales de los estudiantes finlandeses son magníficos.
    En esta asignatura obligatoria para chavales de 13-14 años y optativa en los dos cursos siguientes se aprende a cocinar, poner lavadoras y utilizar productos de limpieza y, por ejemplo, ¡bañar a un bebé!
    Claro que son cosas que se pueden aprender en casa, pero si se hacen el el colegio, resultan mucho más divertidas y, además, llegan igualmente a niños y niñas sin diferenciación de sexos.

    12 noviembre 2014 | 13:51

  21. Dice ser Nara

    A ver, no creo que haya de que dramatizar. No creo que hubiera que quitar TANTAS horas como dicen por aquí. Pero hacer un taller trimestral de una semana en cada asignatura no estaría mal, ni se perdería tanto tiempo. Para dar información extra soy profesora de secundaria. Y a ver, eso si se va bien con el programa, por ejemplo esos días a final de trimestre que ya están las notas puestas y no sabes qué hacer con los chavales y al final se recurre a películas. Pues en vez de películas, tallleres.

    Por ejemplo, en matemáticas se podrían hacer talleres de economía doméstica, en lengua de redacción de documentos, en natulares (al ser la más relacionada con los alimentos, de cocina), en artes taller de costura (el patchwork ahora casi se considera «arte»), en tecnología se podría enseñar bricolaje (arreglar una cisterna, cambiar una gfrifo). Una semana al trimestre y más teniendo en cuenta que son los últimos días de clase antes de unas vacaciones no creo que sean para tanto, y podrían ayudar mucho.

    12 noviembre 2014 | 14:02

  22. Dice ser Coherencia

    Vamos a ver, hace algún tiempo tu misma, madre reciente, escribiste un post sobre lo acertada que era la decisión en algunos colegios de no hacer fiestas con comida para evitar peligros al alumnado con alergias alimentarias. Y ahora, ¿Quieres que si vuelva la comida al centro? Pues lo siento, pero no podemos hacer ambas cosas. Son incompatibles muy a nuestro pesar. Y esos talleres eran una actividad que se hacían en muchos colegios, pero ya no las podemos llevar a cabo precisamente por las peticiones de familias con niños alérgicos o por la amenaza creciente de demandas por posibles intoxicaciones alimentarias. Vamos a ver si empezamos a pensar con un poco de coherencia.

    12 noviembre 2014 | 16:07

  23. Dice ser Gema

    Me gusta la idea de clases de cocina en el cole. En casa tenemos un gran chef y Alejandro es un entusiasta de los programas de cocina. Ayer me pidió para cenar pescado con mango y leche de coco!!!

    13 noviembre 2014 | 10:25

  24. Dice ser marian

    Lo siento, no veo la imperiosa necesidad de dichas asignaturas, sigo opinando que deberían ser optativas o extraescolares; por esa regla de tres, el kárate es una disciplina que mejora sustancialmente el autocontrol, disciplina y esfuerzo en los niños, por lo que también debería darse como la música y la plástica.
    Por otra parte ¿qué se entiende por arte? considero que el arte sale de dentro no es algo enseñable, lo que para unos es una maravilla para otros no vale nada, como tal, es totalmente subjetivo, otra cosa es enseñar la historia del arte y de la música, no su práctica (el que quiera practicarlo, lo haga en extraescolar)

    13 noviembre 2014 | 10:45

Los comentarios están cerrados.