El calor hace verdaderos estragos en mi cuerpo. Hace unas semanas empecé a sentir el brazo izquierdo más raro de lo normal, tengo cierta alteración de la sensibilidad por un brote sensitivo que me dio hace un tiempo. Pero no sé, sentía que algo no iba como siempre.
Comencé a sentir como si se me clavaran mil agujas alrededor del codo, y según fueron pasando los días ese dolor, fue bajando hacia la muñeca, hasta que empecé con espascitidad en la mano (tenéis más información de este síntoma al final de la entrada). Notaba como algunos dedos de la mano tendían a encogerse, como si quisieran meterse hacia dentro, y aunque era la mano izquierda estaba más torpe de lo normal para hacer tareas cotidianas: me costaba cortar con el cuchillo, cogerlo bien, escribir con las dos manos en el móvil, coger el móvil, teclear en el ordenador, coger a Nora, agarrar para empujar la silla de Nora, coger una taza, … Vamos, que no pensé que utilizaba tanto la mano izquierda -soy diestra- y la importante función de los dedos a la hora de agarrar objetos.
Decidí esperar -sin llamar al neurólogo- y observar su evolución durante unos días más. También busqué unos ejercicios específicos y muy sencillos, os dejo el enlace al documento por si le interesa a alguien (estoy haciendo el punto 3 y 4).
Días después, el dolor se ha reducido un poco, sigo con esa torpeza en manos y muñeca aunque creo que he hecho pequeños grandes progresos. Nunca había tenido espasticidad en las manos, solo en las piernas y con la sensación de que querían estar estiradas, no como ahora, que es todo lo contrario. Así que todo consejo, experiencia o recomendación para gestionar este síntoma será bien recibido.
Espasticidad: La espasticidad se define como un aumento del tono/rigidez muscular, dependiente de la velocidad de los reflejos tónicos de estiramiento. Así el paciente percibe una rigidez continua a la que se pueden sobreañadir, con posibles exacerbaciones, espasmos en extensión o flexión, a veces dolorosos en la zona o zonas afectadas.
Más información: Documento de consenso sobre la espasticidad en pacientes con esclerosis múltiple.
Bien pasará aunque yo lo tuve en la derecha (y también soy diestra) y antes de mi diagnostico, quedaron secuelas.
Pero siempre es así no?¿
Ánimos!!!
09 agosto 2016 | 10:46
Hola Paula, pues mis síntomas de brotes fueron con pérdida de sensibilidad y algo de espasticidad en pies y manos. Yo ahora estoy como si tal cosa. La de los pies me molestaba mucho al dormir, pero afortunadamente duró lo que duró y no me ha vuelto a dar la lata desde hace muchos años. La de las manos, sobre todo la izquierda, no me resultó dolorosa, sólo me mosqueaba mucho no poder estirar una mano tanto como la otra y el no saber si recuperaría la movilidad otra vez. Sigo normal, y todo ha vuelto a su ser,
Espero que te recuperes pronto. Un abrazo
09 agosto 2016 | 11:07
A mi a veces me pasa en los gemelos, sensación de «me va a dar un calambre pero ya» y no me da,pero se me queda la sensación de que se me h subido el gemelo (una cosa que yo percibo como muy extraña) a veces haciendo estiramientos y poniendome crema de frio de esa para contracturas se me alivia…Al final acabo por no hacerle caso a la mayoría de cosas (menos si no veo o no puedo mover algún miembro) porque si no esto es un sinvivir 😩 jeje el verano es lo peor. Ánimo guapa!
09 agosto 2016 | 12:02
Hola Paula, antes de que me diesen el diagnóstico tuve un brote en las manos, perdí la sensibilidad, tenia espasticidad y me ocurrió exactamente lo que tu describes. Recuerdo que era época de exámenes y tuve que explicarle al profesor lo que me ocurria, y me llamó para que le descifrara la letra jajajaja. Ahora tengo un poco de parestesia como secuela, que varía de intensidad dependiendo del día.
09 agosto 2016 | 13:03
Hola a todos, resulta que hace diez años, no podía, con la mano izquierda, encender una linterna, tampoco tenía fuerza para usar el cortaúñas, se lo conté a un traumatólogo amigo de mi hermano y me mandó una resonancia, de la cual se concluyó que padecía EM, con una lesión de 30mm en la zona cervical. No he vuelto a tener este síntoma, de hecho toco el piano, pero otros si que son bien patentes, como el cansancio. la pérdida de equilibrio y las ganas de vivir y disfrutar de mi familia.
09 agosto 2016 | 14:25
Convivir con la espasticidad día a día es realmente difícil.
Este síntoma que narras me recuerda muchísimo a cómo empece yo con la espasticidad en mi mano izquierda. Lo que ocurre es que en mi caso tengo esclerosis múltiple primaria progresiva y los síntomas no desaparecen, ni mejoran, sencillamente se acrecentan poco a poco.
El ejercicio físico es fundamental para retrasar lo máximo posible la pérdida de funcionalidad y los ejercicios propuestos tanto por fisioterapeutas como por terapeutas ocupacionales son de una grandísima ayuda.
Realmente deseo que en tu caso este brote te desaparezca con el tiempo y no vuelvas a tener nada parecido. Pero hay fármacos como el baclofeno, que suele ser la primera elección del neurólogo, que pueden aliviar este síntoma si no es grave.
Desde luego rendirse no es la opción.
En mi caso en seis años desde mi diagnóstico, mi movimiento a causa de la espasticidad se ha visto notablemente reducido y a parte de la movilidad de mis piernas por una espasticidad muy grave he perdido la movilidad de mi mano y brazo izquierdos y gran parte de la mano derecha. Hoy estoy escribiendo esto mediante un programa de reconocimiento de voz que me facilita muchísimo las cosas.
Siempre hay algo a lo que agarrarse para intentar continuar con tu vida lo mejor posible.
Un abrazo y fuerza a todos.
09 agosto 2016 | 15:29
Hola, siempre leo y nunca comento, saludos.
10 agosto 2016 | 16:43
Hola guapi !!! Te parecerá una tontería, pero a mí me funcionó de maravilla: como complemento a todo lo que estás haciendo de ejercicio, cómete dos plátanos diarios, para la espasticidad son geniales.
12 agosto 2016 | 13:59