Este verano utilicé por primera vez una muleta para andar. Tenía la rodilla tan inestable, andaba de una manera tan forzada, que me recomendaron utilizar una muleta para caminar. Tampoco soy muy experta en brotes en las piernas. En toda mi historia de múltiple, es el segundo brote motor en esa zona, y aunque han sido muy parecidos, me siento una novata con este tipo de brotes.
En ese momento, lo único que me preocupaba es que andaba tan poco, me costaba tanto y sentía la pierna tan cansada, que cuando me puse a utilizar la muleta, sentí que había encontrado una solución para andar. No quería dramas, aunque mi padre me mirase con tristeza en los ojos. Ya fue un dramón el diagnóstico y de momento, voy servida. No quiero que se convierta en una tragedia cada obstáculo que me pone esta enfermedad, porque entonces siempre acabaría llorando. Además, estaba aliviada y contenta porque me sentía más autónoma y con más seguridad a la hora de poner los pies en suelo. Simplemente, había encontrado una solución a un problema con forma de muleta.
Una solución que por otra parte, pensaba quitármela cuanto antes. La muleta, sí está bien, pero no quería acostumbrarme, quería obligar a mi pierna a que funcionase por sí sola, y ese iba a ser mi nuevo reto. Es una relación extraña, como un te necesito y te quiero cerca, pero a la vez, quiero vivir sin ti. Mi experiencia con ella ha sido corta pero intensa, me ha ayudado a recuperarme, a que descansase la pierna en muchas
caminatas. Y un día, llegó el momento en que volvieron a ser dos piernas, en vez de tres.
1decada1000.
Me alegro muchísimo de dos cosas: la primera es que hayas podido retomar la función normal de tu pierna, pero sobre todo por la buena actitud ante el hecho de aceptar el que necesitabas usar una muleta. Mucho ánimo. Seguimos en las trincheras.
11 septiembre 2014 | 18:51
¡Eres una campeona! Lo que más me ha gustado es no convertir en drama cada obstáculo. Hay que vivirlo. Una cosa es pasarlo y otra escucharlo. Me alegro muchísimo que te lo tomes así. ¡Un besote!
11 septiembre 2014 | 22:20
Bien. Vuelven a ser dos. Quizá a mi me hubiera venido bien una ayudita para este brote que ahí sigue. Lento lento. Podrías aconsejarme donde comprar una? Estoy un poco perdida. Saludos
12 septiembre 2014 | 12:44
Pues yo me la compré en una ortopedia, me costó 14€. A mí me vino muy bien, para no forzar tanto la rodilla. Prueba, quizá te ayude algo. Mucho ánimo! Besotes!
12 septiembre 2014 | 15:23
Perdona que me entrometa, pero yo sé un poquito de esto porque lo he pasado. Ve a tu médico de cabecera, él te mandará a una enfermera de enlace que es la que se encarga de proporcionarte unas muletas o lo que necesites. Te lo debe pasar la Seguridad Social, o sea, no te cuesta dinerito. Saludos y perdón por la intromisión.
14 septiembre 2014 | 18:41
Muchas gracias Ángela. No te entrometes para nada. Toda información es bienvenida.
14 septiembre 2014 | 20:50
Por favor! No es intromisión! Yo ni lo sabía! 🙂
15 septiembre 2014 | 12:19
Dos bien, tres ya son multitud. Enhorabuena!!!
13 septiembre 2014 | 16:53