Un Brexit negacionista

Por Hugo Morán – Ex diputado

brexit-1497067_640Aún queda mucho por escribir respecto a la decisión mayoritaria de los súbditos de Su Graciosa Majestad –por los pelos, pero mayoritaria, al fin y al cabo– de abandonar la casa común europea en la que convivían con todos nosotros. A regañadientes y de aquella manera, pero después de todo convivíamos.

Cierto que prácticamente todos los análisis argumentados hasta ahora se han centrado básicamente en las consecuencias económicas del Brexit: afectación a las primas de riesgo y al crecimiento, equilibrios presupuestarios, financiación y reprogramación de fondos europeos, movimientos en inversiones y posibles deslocalizaciones empresariales, nuevos marcos fiscales…; en las sociales: la situación en que quedan los ciudadanos europeos que viven y trabajan en el Reino Unido, la de los británicos que residen y votan en municipios españoles, las restricciones fronterizas frente al fenómeno de la inmigración…; y en las geopolíticas: el futuro incierto de la Unión Europea, el posible contagio a otros países como el caso de Holanda, las discrepancias territoriales internas en el caso de Escocia, Irlanda del Norte, Londres o Gibraltar, la relación con terceros países…

Pero poco hemos leído al respecto desde el punto de vista medioambiental, por no decir casi nada, salvo honrosas y acrisoladas opiniones, como por ejemplo la de David Attenborough, junto con la de las organizaciones ecologistas, advirtiendo del riesgo que supone para la conservación de la naturaleza en el Reino Unido el perder el paraguas de las directivas ambientales, recogidas en algunos medios especialmente sensibles en la materia.

Frente al análisis inicial de destacadas personalidades, como es el caso de Christiana Figueres, o la carta abierta del propio embajador del Reino Unido en España, Simon Manley, intentando dejar sentado que el nuevo Gobierno Británico no modificaría ni un ápice su compromiso en la lucha contra el cambio climático en este nuevo escenario, la tozuda realidad ha terminado por imponerse. Y es que durante toda la campaña que precedió al Brexit, si en algo destacaron los más visibles líderes que hicieron campaña en favor del mismo es en sus posiciones marcadamente anti-ambientales, hasta tal punto que buena parte de ellos han mantenido históricamente tesis indisimuladamente negacionistas en relación con el cambio climático.

De esta forma, hemos podido comprobar como entre las primeras decisiones de la nueva primera ministra británica Theresa May ha estado la supresión del Ministerio de Cambio Climático, pese a que el Reino Unido había sido uno de los primeros países en contar con una ley pionera y específica en la materia, o que entre los primeros nombramientos aparezca el de Andrea Leadsom como secretaria de Medio Ambiente, cuando ha sido una de las voces que se ha destacado como “climaescéptica”.

Las consecuencias en el campo de la energía no se demorarán largo tiempo. Desaparecido el problema del cambio climático en el Reino Unido merced a la “benéfica” decisión del Brexit, desaparecen también las urgencias de transitar hacia un patrón económico neutro en emisiones en aquel país, lo que conllevará una revisión estratégica de las empresas concernidas para acomodarse al nuevo escenario político y no se nos escapa que las hay que desarrollan su actividad más allá de sus fronteras y más acá de las nuestras.

Confiemos en que no se cumpla la sentencia de que todo aquello que va mal es susceptible de empeorar. Me refiero al resultado que vayan a arrojar las elecciones presidenciales en los Estados Unidos.

5 comentarios · Escribe aquí tu comentario

  1. Dice ser Gonzalo Calvo Pérez

    El autor de este artículo carece visiblemente de conocimientos científicos y de capacidad de análisis.
    Hace años que multitud de científicos venimos denunciando la falsedad acerca del supuesto consenso acerca de la cuestión del supuesto calentamiento global antropogénico.
    1-Ninguna prueba científica demuestra que el ser humano cambie el clima. No existe ningún expeimento científico que demuestre que un pas de 0,035 a 0,04% de CO2 atmosférico produzca calentamiento medible alguno, por lo cual la mera hipótesis del efecto invernadero por CO2 en nuestro planeta queda totalmente refutada.
    2-Desde hace 10 años no hay calentamiento, según se deprende de los registros no manipulados. Hay incluso un suave enfriamiento, en concordancia con el comportamiento solar.
    3-Se ha evidenciado documentalmente (filtración de emails) una trama corrupta en el seno del organismo encargado de recopilar y promediar las temperaturas globales (Climate Research Unit) dedicada a modificar torticeramente al alza los registros tçermicos, para literalmente «ocultar el declive» térmico de los últimos años («hide the decline»).
    4-Se ha generado una campaña de propaganda global en base a datos científicos erróneos (curva del Palo de Hockey de Mann, desacreditada por errónea, utilizada en el documental-bodrio de Al Gore) y a una repetición goebbelsiana del mantra de que el CO2 estaría produciedo un calentamiento peligroso (a pesar de que no sea cierto a los niveles ridículos de 0,035 a 0,04% actuales)
    5-Se ha establecido un sistema de pago por emisiones injustificable (el CO2 no sólo no produce calentamiento, sino que es el alimento de las pantas) e inícuo (EEUU no paga, pero los demás sí) así como sin fundamento científico, que establece un mercado de especulación y negocio en el cual los propios propagandistas (Al Gore, por ejemplo) están involucrados directamente en ánimo de lucro, y que tiene por objetivo favorecer la industria nuclear, y frenar el crecimiento de las potencias emergentes, y en general el de todos los países menos EEUU.
    6-Se ha silenciado totalmente la serie de descubrimientos científicos que demuestran que el cambio climático presente se debe a factores astronómicos (trabajos de Jose, Landscheidt, Charvatova, Christensen, Svensmark, Charvatova, Zarkhova, etc.), principalmente debidos a ciclos solres, ciclos de oscilación del baricentro del sistema solar y ciclos de rayos cósmicos.
    7-A los científicos que denunciamos esto se nos ha marginado de las instituciones. Toda la fnanciación dedicada en estos últimos años a estudiar una hipótesis falaz sin fundamento han sido detraídos de todos los demás proyectos, imponiendo un sistema de corrupción de la ciencia. Además se nos tilda de «negacionistas», epíteto antes aplicado a los que negaron el holocausto nazi-judío.
    8-Los cabecillas «científicos» de este escándalo, James Hansen y Rajendra Pachauri, han sido ya condenados por la justicia (Pachauri, acosador sexual), y expulsados de sus puestos universitarios (Hansen, por corrupción científica) y en el IPCC (Pachauri ya no es director de esa corrupta institución, la cual sigue actuando, aún así), pero el propio Alex Jones, protagonista del escándalo Cimategate (emails del CRU donde se lee literalmente cómo afirmaba habr completado el truco para «esconder el declive» térmico), a oesar de haber sido desacreditado, no sólo no ha sido expulsado, sino que ha recibido el apoyo de su Universidad de East Anglia, demostrándose una corrupción sistémica inaudita.
    9-Los grupos ecologistas y partidos políticos han sido infiltrados por agentes del lobby nuclear y de energías renovables, y han establecido una demonización de toda persona que se atreve a denunciar la ausencia total de fundamento científico de su postura (se nos llama «criminales»), deliberadamente alarmista e irracional.
    10-Los medios de comunicación de masas se han sumado mayoritariamente a esta corriente propagandística y alarmista, sin hacerse en la mayoría de casos eco de las denuncias de ausencia de fundamento empírico en la hipótesis del calentamiento gobal antropogénico que los científicos auténticos venimos denunciando.
    11-Se usa sistemáticamente una confusión de términos: se confunde «cambio climático» con «calentamiento global» y con «calentamiento global antropogénico», impidiendo la claridad mínima y el rigor y precisión imprescindibles en las informaciones y debates.

    Por todo ello, las naciones más avanzadas democrática y científicamente, en la reunión de Doha de hace escasos años, se han desmarcado de continuar ratificando el probadamente falaz protocolo de Kioto. Aún así, se siguen organizando crónicamente reuniones (París, recientemente) para intentar continuar en la manipulación de la opinión pública y en forzar la mano a los políticos.

    El Sol, por su parte, sigue una senda de descenso emisivo desde 1997, la cual se ha explicado recientemente gracias al trabajo de Zharkova que revela la existencia de una doble dinamo magnética en la capas internas del astro. Este modelo es exitoso, pues reproduce exactamente el comportamiento emisivo solar registrado, el cual casa con los datos de cambio climático del registro.
    Por otro lado, el trabajo de Chavatova explica la causa de las glciaciones y equeñas Edades de Hielo, esta vez reconociendo unos ciclos de localización del Sol respecto al baricentro (centro de masas) del Sistema Solar que casan con los prídos fríos y cálidos geológicamente registrados.
    La correlación en el registro glaciológico y geológico de los niveles de CO2 con los ciclos climáticos no se debe a que el nivel de CO2 atmosférico determine el clima por un supuesto efecto invernadero, sino que se debe, justamente a la inversa, a que es el clima el que determina el nivel de CO2 atmosférico, al expulsarse a la atmósfera por exsolución el CO2 del océano durante períodos cálidos, y viceversa, disolverse CO2 en el océano desde la atmósfera en los períodos fríos. Esto está probado sin ambajes por el estudio del registro glaciológico y geológico, donde se ve un retardo de 800 años entre ambas curvas (CO2 y Temperatura), que corresponde con el tiempo que tarda el océano en intercambiar el gas.

    22 julio 2016 | 11:59

  2. Dice ser Gonzalo Calvo Pérez

    En cuanto al Brexit: Es lógico que un país como Reino Unido haya querido desmarcarse de una entidad como es la UE, que basa sus políticas en argumentos erróneos, y que establece una pérdida de soberanía de los Estados-Nación, en favor de los inereses de potencias como EEUU y de grandes corporaciones. El caso de la imposición de recortes es evidente. En el caso de la ratificación del protocolo de Kioto, también Reino Unido parece haberse querido desmarcar de unas políticas irracionales y contrarias a los intereses del país, de los ciudadanos y de las empresas, fomentadas, insistamos por la hegemonía estadounidense. En resumen, vemos que el New World Order, sigue funcionando.
    Ojalá el descrédito del alarmismo climático no dañe a la transición energética hacia las energías renovables ni al ecologismo auténtico. Las instituciones científicas sí han sido ya dañadas.

    22 julio 2016 | 12:17

  3. Dice ser Gonzalo Calvo Pérez

    Finalmente, insistamos, es intolerable que un medio como 20m recoja insultos a los científicos, a los cuales se nos adjetiva de «negacionistas». Aquí los únicos que niegan la realidad son ustedes, que hacen caso omiso de los estudios del Sol.
    Y no se nos pasa por alto que cuando hay una ola de frío no dan noticias, pero cuando hay una de calor enseguida sacan noticias de alarmismo climático. ¡BASTA DE DEMAGOGIA!

    22 julio 2016 | 12:24

  4. Dice ser Don Mojito

    La UE siempre se ha entendido a sí misma como la vanguardia política, un modelo político multiestatal, multicultural, multiingüe a seguir.

    Pero parece que sólo es un modelo con fecha de caducidad, una propuesta y resulta, aunque duela, que ya algunos quieren salir de este barco y surcar a sólas los mares embravecidos del mundo globalizado.

    Esta unión que antes prometía protección, bienestar social, prosperidad, paz ya muestra cada día más que es este torpe buque petrolero que necesita 10 ó 20 millas y mucho tiempo para para cambiar de rumbo o para pararse y con la desventaja adicional de que hay 20 capitanes a bordo.

    Los ingleses ya no quieren depender del circo político de Bruselas y prefieren tomar su destino en las propias manos y queda esperar qué pasa cuando realmente se hayan retirado de la UE que ya dista mucho de ser el paraíso terrenal aunque vengan muchos refugiados en busca de una vida mejor.

    En lo que a la construcción de las relaciones económicas se refiere no hay que olvidar que en esa materia los grandes consorcios internacionales, la banca harán valer su poder.

    Todavía no se ha dicho la última palabra.

    22 julio 2016 | 14:43

  5. Dice ser Contestataria

    Ante la duda, principio de precaución. El clima es demasiado importante para arriesgarnos a cargárnoslo.

    22 julio 2016 | 20:37

Escribe aquí tu comentario





    Normas para comentar en 20minutos.es

    • Antes de enviar su comentario lee atentamente las normas para comentar en 20minutos.es.
    • Esta es la opinión de los internautas, no la de 20minutos.es.
    • No está permitido verter comentarios contrarios a las leyes españolas o injuriantes.
    • Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema.
    • Por favor, céntrate en el tema.
    • Algunos blogs tienen moderación previa, ten paciencia si no ves tu comentario.

    Información sobre el tratamiento de sus datos personales

    En cumplimiento de lo dispuesto en el Reglamento (UE) 2016/679 del Parlamento Europeo y del Consejo de 27 de abril de 2016 relativo a la protección de las personas físicas en lo que respecta al tratamiento de datos personales y a la libre circulación de estos datos, y Ley Orgánica 3/2018, de 5 de diciembre, de Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales le informamos que los datos de carácter personal que nos facilite en este formulario de contacto serán tratados de forma confidencial y quedarán incorporados a la correspondiente actividad de tratamiento titularidad de 20 MINUTOS EDITORA, S.L, con la única finalidad de gestionar los comentarios aportados al blog por Ud. Asimismo, de prestar su consentimiento le enviaremos comunicaciones comerciales electrónicas de productos y servicios propios o de terceros.

    No está permitido escribir comentarios por menores de 14 años. Si detectamos el envío de comentario de un usuario menor de esta edad será suprimido, así como sus datos personales.

    Algunos datos personales pueden ser objeto de tratamiento a través de la instalación de cookies y de tecnologías de tracking, así como a través de su acceso a esta web desde sus canales en redes sociales. Le rogamos consulte para una más detallada información nuestra Política de Privacidad y nuestra Política de Cookies.

    Los datos personales se conservarán indefinidamente hasta que solicite su supresión.

    Puede ejercer sus derechos de acceso, rectificación, supresión y portabilidad de sus datos, de limitación y oposición a su tratamiento, así como a no ser objeto de decisiones basadas únicamente en el tratamiento automatizado de sus datos, cuando procedan, ante el responsable citado en la dirección dpo@henneo.com

    Le informamos igualmente que puede presentar una reclamación ante la Agencia Española de Protección de Datos, si no está satisfecho con en el ejercicio de sus derechos.