Un corazón roto no debe ser menospreciado: Las emociones también duelen (literalmente)

Por horrible que parezca el dolor es necesario. Funciona como una señal de advertencia que nos dice no solo cuándo debemos evitar las amenazas físicas, sino también cuándo debemos evitar las amenazas sociales (por ejemplo, el aislamiento social , una mala relación) que pueden amenazar nuestra supervivencia. Ya hay investigaciones que demuestran que el dolor que sentimos cuando hieren nuestros sentimientos es real.

Por ejemplo, un reciente estudio concluyó que incluso la exclusión en las salas de chat en línea ya conduce a sentimientos autoinformados de ira, tortura y dolor. Pues supongo que más aún cuando te ocurre en la realidad, en situaciones como que te aparten del contacto visual directo mientras hablas, que no te respondan, acompañen, que te ignoren o peor, que recibas malas palabras que te hieran.

Y sí, duele, en el más estricto sentido de la palabra. El dolor social y físico comparten fundamentos neurológicos similares. 

Resulta que ambos daños no son tan diferentes. En el estudio de Hallmark sobre el dolor psicológico, los investigadores usaron imágenes de resonancia magnética funcional (IRMf) para examinar la actividad cerebral de los participantes. Encontraron que las regiones cerebrales previamente asociadas con el dolor físico se activaban durante las experiencias de rechazo emocional.

Esta misma actividad cerebral (en la corteza cingulada anterior dorsal) predijo los autoinformes de los participantes sobre el rechazo social. En otras palabras, aunque el dolor emocional y físico parezca tan diferente, los procesamos de manera similar.

Seguro que a todos nosotros nos han roto el corazón alguna vez y hemos tenido por delante la ardua tarea de intentar recomponernos. El corazón roto duele, nos duele realmente. Otro estudio ya lo demostró hace más de cinco años: Los participantes del experimento pasaron por dos tareas diferentes bajo fMRI. En la primera, diseñada para provocar dolor físico, los participantes se sometieron a «estimulaciones térmicas» en sus brazos. En la segunda tarea, diseñada para inducir dolor psicológico, los participantes vieron imágenes de los ex, con los que habían terminado su relación recientemente.

Los resultados indicaron que se activaron regiones cerebrales similares (es decir, corteza somatosensorial e ínsula posterior dorsal) en las dos condiciones. Una vez más, el dolor físico y el dolor social fueron procesados ​​de manera similar por nuestros cerebros. Un corazón roto, entonces, no debe ser trivializado.

 

*Fuente de consulta: Psychology Today

9 comentarios

  1. Dice ser Luisa

    Por experiencia propia (y de varias veces) se que es así. El dolor que se experimenta cuando se acaba una relación sentimental es real, por eso hay que aprender a gestionarlo lo mejor posible

    27 junio 2019 | 10:26 am

  2. Dice ser Lucas

    puede que duela, pero nadie se muere de amor

    27 junio 2019 | 10:27 am

  3. Dice ser ignotis parentibus

    Un clavo se saca con otro clavo. psicología de la abuela.

    27 junio 2019 | 12:22 pm

  4. Dice ser Anonimo

    Puede que no mueras de amor, pero el dolor puede ser mucho peor.
    Lo digo por experiencia.

    27 junio 2019 | 1:00 pm

  5. Dice ser ignotis parentibus

    Cuando fuiste martillo no tuviste clemencia y ahora que eres yunque… ¡ten paciencia! literalmente. literalmente?

    27 junio 2019 | 5:07 pm

  6. Dice ser Nancy

    Un dolor emocional mal gestionado o llevado puede llevar al suicidio. Tal vez de amor no te mueres pero de tristeza y desesperanza si..

    27 junio 2019 | 7:32 pm

  7. Dice ser ignotis parentibus

    Conozco a uno al que dejó la novia y días después fue internado en un psiquiátrico y hasta hoy y supongo que hasta que se muera de viejo.

    27 junio 2019 | 11:50 pm

  8. Dice ser ignotis parentibus

    A por la amiga y cuando esté con ella la echara de su lado al tiempo que la pregunta ¿y ahora qué? duquesa sabelotodo?

    28 junio 2019 | 11:30 am

  9. Dice ser ignotis parentibus

    A un chaval le gustaba una chavala, la chavala dijo no y el chaval se lió con la madre de la chavala ¿te molesta? la preguntó. Ella bajó la cabeza sin decir nada. Pues de hoy en adelante será así todos los días, al menos hasta que me canse de ella o ella no me de lo que la exijo.

    28 junio 2019 | 3:12 pm

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