Archivo de diciembre, 2018

El madridismo le recuerda a Cristiano Ronaldo todas las veces que fue egoísta

Cristiano Ronaldo

Cristiano Ronaldo en una imagen de archivo (EFE).

De Cristiano Ronaldo uno se espera todo ya, pero aún así no deja de ser sorprendente leerle que «en otros equipos alguien se siente más grande que los demás». Él, Cristiano, el jugador con más ego de la historia, considera que en el Madrid (está bastante clara la alusión), alguien (Florentino Pérez, obvio) se siente más grande que los demás. Surrealista.

«Este es el mejor grupo en el que he jugado en mi vida. Aquí somos un equipo«, ha soltado también, quedándose tan ancho, como si en su carrera destacara por una generosidad sin límites, siempre apoyando al compañero, un Iniesta de la vida. Y claro, el madridismo se ha enfadado, recordando las numerosas veces que el luso fue mal compañero y egoísta. Desde esa vez que dijo que si todos jugaran como él irían mejor, hasta cuando llamó Kovacevic a su compañero Kovacic, pasando por innumerables enfados demostrando que piensa más en él que en el equipo y, por consiguiente, en sus compañeros.

Disfrutemos de los mejores tuits y retuits de noticias antiguas:

El River-Boca en Madrid: no quiero (más) ultras pelotudos

Por Susana Gozalo, jefa de cierre de 20 Minutos

Hinchas de Boca, en el Santiago Bernabéu (EFE)

No me gusta el fútbol. Nunca lo ha hecho. Cada vez menos. Lo detesto desde que los domingos soporto a toda pastilla las televisiones de mi redacción con dos o tres partidos simultáneos. Cuando los gritos de Edu Casado alteran mis tímpanos y mi ritmo cardiaco. Depende del día y de si he logrado, o no, esquivar al equipo de sus amores: el Atlético. No lo soporto desde que las madres de jugadores infantiles se lían a golpes en las gradas. Menos aún desde que la afición ‘machirula’ da por hecho que las árbitras son, en general, «pasadas por la piedra del vestuario».

Pero que no me guste el fútbol no nubla mis entendederas ni el sentido común que debería regir las decisiones de las máximas autoridades deportivas y gubernamentales.

El River-Boca es un partido de riesgo. De máximo riesgo. De altísimo riesgo. El país de una de las dictaduras más férreas que ha conocido la historia reciente, Argentina, se declara incompetente para controlar la violencia de sus aficiones. Sí, ese país en el que policías y militares no se andan ni han andado nunca con chiquitas a la hora de controlar al que se desmanda, ya sea disidencia política o barras bravas deportivos.

Por eso, por la violencia extrema y etílica que destila el choque entre estos dos equipos de los arrabales bonaerenses, me niego a que ese encuentro se celebre en España. Y más aún, me niego a que se celebre en Madrid el día que las familias cierran un puente festivo.

No quiero compartir espacio ni aceras en plenos días de ocio con quienes no respetan al prójimo. Con quienes usan el deporte para la gresca. Para el cuerpo a cuerpo. Para ver quién es el más macho. En realidad, el más boludo. El más pelotudo de la fiesta. Que en todas hay uno o varios de esos.

El sector de la restauración se frota las manos. Los hoteleros se preparan para hacer caja. El turismo deportivo dejará miles de euros en la ciudad y, por extensión, en el país: vuelos, conexiones, trenes, quizá algunos de los cafres (los menos) aproveche para hacer turismo. Lo dudo. No va con ellos. Se trastornan con el simple rodar de un esférico. No dan para más, ni para menos.

Pero el fin nunca justifica los medios. Publicitar al reino como meca del deporte, como cuna del fútbol, es un argumento irrisorio para brindar nuestra casa a lo peor de las ajenas. Quienes viajarán al encuentro son ultras. Son extremistas. Son violentos. Son aquellos a los que Macri no puede controlar. Son incontrolables. Y los españoles, como siempre, los jaimitos. Todo sea por hacerse la foto. Y si puede ser con las gafas. Y mejor a bordo del Falcon. Porque esto va de eso, de la foto.

Esperemos que no haya que lamentar la imagen contraria. La de un agente muerto en la contienda (ya nos pasó en febrero en Bilbao en el choque entre el Athletic y el Spartak de Moscú). Al buen hombre le dio un infarto por la angustia de semejantes bestias descontroladas. Los hinchas del equipo ruso se entrenan con técnicas paramilitares cual guerrillas. A esos sí les abrimos la puerta.

Ya nos pasó cuando murió uno de su calaña, Jimmy, un aficionado extremo (como se dice ahora tras la irrupción de Vox, que es «derecha extrema, no extrema derecha»). A este hombre le tiraron sin miramientos al río los ultras del Atleti. Habían quedado para pegarse. Y le costó la vida. No me duele por él, sino por la familia que le llora y que dejó atrás. Padres, viuda y huérfanos.

Y antes que él también pagó con la vida un buen hombre: Aitor Zabaleta. Se equivocó de bar y él, aficionado de la Real, decidió tomarse algo en el nido de hinchas del Frente Atlético. También lo pagó con su vida

Pue eso… que no tengamos que lamentar.

Rufián desata la ira de la afición atlética: denuncia cánticos contra los vascos una hora antes del Atlético-Alavés

Montaje de fotos de Gabriel Rufián y una imagen del partido Atlético-Alavés (EFE).

Este sábado, la (a veces) delgada línea entre política y deporte se difuminó obra y gracia del portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados y célebre tuitero Gabriel Rufián y una reflexión acerca de un luctuoso aniversario y la celebración del Atlético de Madrid-Alavés de Liga.

El encuentro entre colchoneros y babazorros se disputó este sábado a las 13.00 horas. Una hora antes, el político catalán tuiteó el siguiente mensaje: «8 de diciembre de 1998. Ricardo Guerra apuñala en el corazón a Aitor Zabaleta en la previa del Atlético-Real Sociedad. Es un nazi miembro de Bastión del Frente Atlético. 20 años después el Frente sigue cantando ‘vascos, hemos venido a acuchillaros» y Guerra tiene el 3er grado».

El tuit del político de Santa Coloma ha despertado las iras de muchísimos aficionados del Atlético de Madrid, que han acusado a Rufián de mentir. Primero, porque según ellos, en ningún momento desde el fondo sur del Metropolitano se han entonado cánticos como los que Rufián refiere (más aún si tenemos en cuenta que la denuncia del portavoz de ERC es previa al partido ante el Alavés). Veteranos hinchas atléticos han recordado a Rufián que esos lamentables cánticos hace años que no se escuchan en el fondo sur (ni del Metropolitano ni del Calderón en sus últimos años en activo) y que el resto de la afición colchonera los ha criticado y silenciado siempre.

Sea como sea, aunque el tuit de Rufián iba encaminado a denunciar la presencia en la calle de Ricardo Guerra, condenado por el asesinato de Aitor Zabaleta en 1998, el comentario ha sentado muy mal a muchos aficionados del Atlético de Madrid.

A ver si lo que no nos gusta es que no se vote lo que nosotros queremos

Florentino y Modric con el Balón de Oro

Florentino y Modric con el Balón de Oro (EFE).

El titular podría valer para lo que ha pasado en Andalucía esta semana, y en prácticamente todas las elecciones, pero en este caso hablamos del Balón de Oro que recibió Luka Modric.

Las críticas se centraban en dos asuntos: por un lado, que el premio recayera en el croata. Por otro, que Messi quedara en el quinto lugar.

Voy a poner un tuit como ejemplo de cosas que se leyeron tras la gala, como si hubiera una mano negra detrás de las votaciones, como si fueran varios hombres vestidos de negro sobornados por Florentino Pérez que eligen cada año a un jugador del Real Madrid.

El Balón de Oro lo eligen con sus votos periodistas de 176 países elegidos por France Football. Si esto no nos gusta, nos podemos ir a los votos de los capitanes y los entrenadores de las selecciones nacionales, que son los que otorgan el The Best y en el que también resultó ganador Modric. Y si tampoco nos agrada, nos podemos ir al voto de los entrenadores de los clubes (80) y periodistas seleccionados (55), que son los que dan el Premio al Mejor Jugador de la UEFA… y que también se llevó el croata.

Mucha indignación este lunes en las redes… porque no nos gusta los que otros han votado. Vamos, lo de siempre.

Es vergonzoso para el fútbol que Leo Messi no esté en el podio del Balón de Oro

Messi recibió el trofeo Pichichi de la temporada 2017/18. (MARCA)

Messi recibió el trofeo Pichichi de la temporada 2017/18. (MARCA)

Hace apenas dos meses la revista France Football (que otorga el premio) retiró por presunto hackeo una encuesta sobre el favorito para ganar el Balón de Oro encabezada por Leo Messi. Y no por poco. El crack argentino ganaba con un 47% de los votos de los aficionados al fútbol (no vinculantes), por delante de Mohamed Salah (32%). Luego, ya a gran distancia, aparecía Cristiano Ronaldo con un 8% y tres jugadores más con un 2%: Mbappé, Modric y Neymar.

La revista aseguraba en ese momento que los resultados habían sido manipulados: «Nos hemos visto obligados a suprimir el artículo debido a la creación de miles de cuentas falsas, a través de malware [programa diseñado para provocar un mal funcionamiento], para trucar los resultados», explicaban fuentes del medio galo. En esa encuesta se habían registrado más de 700.000 votos. Y no fue la única hecha por un medio al respecto.

Encuesta Balón de Oro de 20minutos.es.

Encuesta de 20minutos.es.

También 20minutos.es lanzó la pregunta de «¿Quién será el ganador del Balón de Oro 2018?» a sus lectores y registró más de 26.000 respuestas. La sorpresa llega cuando, a la hora de recabar las respuestas, el 34,19% de los votos fueron para Leo Messi. Otra encuesta realizada, otra encuesta ganada. Para los lectores de este medio, en segundo lugar se encuentra Luka Modric (30,49%) y en tercero Antoine Griezmann (14,48%). Ya fuera de los tres primeros estaba Cristiano Ronaldo (10,22) y Kylian Mbappé (4,6%).

Encuestas de Sport y Mundo Deportivo.

Encuestas de Sport y Mundo Deportivo.

En cuanto a periódicos especializados, otro que refleja el claro favoritismo de sus lectores por Messi es Mundo Deportivo. Su pregunta, lanzada el pasado 10 de octubre da como principal ganador a la Pulga (74% de los 30.884 votos). A él le siguen, aunque muy de lejos, Griezmann (7%), Ronaldo (5%) y Modric (5%). Otro medio catalán como Sport, no obstante, no lo da como ganador, sino que lo sitúa en segunda posición con el 30% de los 24.016 votos, por detrás del croata (60%).

Encuestas de Marca y As.

Encuestas de Marca y As.

Ambas opciones se repiten en periódicos madrileños como As (cuyos lectores le darían el Balón de Oro a Leo Messi con un 32,59% de los votos por delante de Modric y Griezmann) y Marca, que pone a Messi con el 18% en el tercer lugar (el que peor resultado le da) por detrás de Modric (29%) y Cristiano (22%).

Obviamente estos resultados tampoco son vinculantes, ya que los que votan para elegir quien verdaderamente gana el premio es «un jurado de periodistas especializados e independientes«, como explican desde France Football. Pero, por muy independientes y especializados que sean creo que se han dejado a alguien bastante importante fuera.

Es vergonzoso para el fútbol que un jugador de la categoría de Leo Messi no esté siquiera en el podio de candidatos a obtener el galardón como mejor jugador del mundo cuando los aficionados al fútbol lo meterían, como poco, en tercera posición. Y muchos de ellos se lo darían. ¿Con razón o sin ella?

La nueva colección de ropa del Betis: una mezcla de Neng de Castefa y yonki de barrio

Imagen del ‘spot’ de la nueva colección del Betis (TWITTER REAL BETIS).

Debo de entender poco de moda, pero después de haber descubierto este viernes el spot de la nueva colección de ropa deportiva que Kappa ha creado para el Real Betis, creo que algo falla en el mundo del estilismo futbolístico.

¿Recuerdan la película Trainspotting (basada en una fantástica novela del mismo nombre)? ¿Cómo olvidar a ese Neng de Castefa interpretado por mi tocayo Edu Soto? O haciendo un ejercicio de memoria, ¿quién no recuerda al típico yonki de los 80 siempre en chándal? Pues parece como si el Betis hubiera mezclado estos conceptos para la presentación de su colección. Chándales, camisetas, zapatillas… la firma italiana ha sacado una línea vintage que por ahora, ha causado más hilaridad en redes sociales que otra cosa.

El community manager del Betis la califica de «brutal». No sé. Igual son cosas mías, pero ya les dije que debo de entender poco de moda.