Archivo de septiembre, 2019

Los bochornosos pitos del Bernabéu a Vinícius, un chaval de 19 años

Vinícius llorando junto a Nacho

Vinícius llorando junto a Nacho (EFE).

Que la del Santiago Bernabéu es una afición exigente no es ningún secreto. Que algunos se pasan de frenada ya en demasiadas ocasiones es algo que quedó bastante claro ayer con esos silbidos a un chaval de 19 años que lo da todo cada vez que salta al campo.

Existe un sector del público que acude al estadio que parece llevar al extremo ese ‘yo pago, hago lo que me da la gana’. Una especie de ‘el cliente siempre tiene la razón’ mal entendido. Más que nada porque esa última frase es un absurdo.

Vinícius es un chaval de solo 19 años que cuando tenía 18 se echó a sus espaldas un equipo moribundo y que fue capaz de sacar una sonrisa a una afición al borde de la depresión y que iba de cabreo en cabreo ante una de las peores temporadas que se recuerdan.

El premio a esa valentía ha sido esos pitos que dan vergüenza ajena cuando las cosas no le han salido. Del brasileño se pueden decir muchas cosas pero nunca, nunca que se esconde. Ha sido objeto de mofa constante por las aficiones rivales y pese a ello él lo sigue intentando, nunca se rinde, siempre confía en sus posibilidades.

Es posible que Vinícius tenga hoy más cosas de Robinho (que ojo, no lo hizo tan mal como la gente ahora quiere vender) que de Neymar. Pero lo último que se merece es recibir pitadas de un sector del público que parece haberse acostumbrado en exceso al caviar y que no sabe distinguir entre la exigencia alta y el comportamiento rozando lo estúpido.

Verle llorar soltando toda la presión que ha tenido encima debería hacer reflexionar a más de uno.

¿En qué mesa estás comiendo, Antoine?

Griezmann, en el partido del Barcelona en Dortmund (EFE).

Dice el viejo refrán que somos esclavos de nuestras palabras y dueños de nuestros silencios. De eso sabes tú algo, Antoine. Hace justo un año dijiste que ya comías en la mesa de Cristiano Ronaldo y tu nuevo compañero, Leo Messi. Este verano dijiste que los trenes pasan dos veces y te subiste al del Barça. Hace unos días supimos que sacabas billete para ese tren y te llevabas una propina de 14 millones de euros mientras tus compañeros, porque aún lo eran entonces, se jugaban la vida en Champions contra la Juventus. Ese día, por cierto, no compartiste mesa con el 7 del equipo rival.

Y ya ves. Apenas han pasado unos minutos (mientras escribo estas líneas) de la derrota de tu equipo-tren en Granada y ya veo las redes sociales inundadas de opiniones de tus nuevos hinchas sobre ti. No te van a gustar, Antoine. Ojo, que no todo son opiniones. También leo datos: en los cuatro partidos a domicilio que llevas este año, no has rematado ni una vez a puerta.


En fin, que esto es fútbol y a lo mejor en un par de días me callas la boca, porque malo no eres, Antoine, y podrás hacer un baile de los tuyos o lanzar confeti como LeBron (supongo que lo preferirás al abrazo que no te dieron tus nuevos compañeros). Y sí, puedes ganar títulos, incluso la Champions (acuérdate de meter el penalti si os pitan uno a favor en la final… aunque en el Barça no creo que lo tires tú). Pero recuerda que para comer en la mesa de las superestrellas, ninguna camiseta te puede quedar grande.

Ter Stegen no tiene nada que envidiar a Neuer

Cuando un futbolista está cómodo y ven que confían en él está claro que dá mucho más de sí mismo. Y desde que el Barça ha reconocido el trabajo de Ter Stegen, el portero alemán no es el mismo. Recuerdo aquel Marc-André dubitativo, que no era un experto jugando con los pies y cuya solvencia en los mano a mano dejaba mucho que desear. Fue suplente de Claudio Bravo (sí, suplente) en la Liga durante dos temporadas, de 2014 a 2016, e incluso se planteó irse del Barça para jugar más minutos.

Aquel era un Ter Stegen muy diferente al de ahora. Sus pasadas debilidades se han convertido en enormes fortalezas. Sus actuaciones en la gran parte de los partidos que juega no dejan indiferente a nadie, más bien boquiabiertos: paradas estratosféricas, de portero de balonmano, y grandes pases para iniciar la jugada desde la portería, al más puro estilo Barça son habituales.

Ter Stegen vuela ante el Dortmund. (EFE)

Ter Stegen vuela ante el Dortmund. (EFE)

Es más, la frase de «qué pesado eres, Ter Stegen» se escucha mucho entre los aficionados rivales. Y por algo lo dicen, porque les saca de quicio. No hay quien traspase su portería sin intentarlo varias veces antes (y raro es que lo consigan pese a intentarlo).

Un claro ejemplo de ello fue el partido del Barça ante el Dortmund, en el que el portero culé se lució como nadie e incluso le paró un penalti al vuelo a Marco Reus. Fue el jugador del partido y el que evitó que los de Valverde cayeran ante un rival, a priori, inferior. Hizo un partido mejor incluso que el de Messi (aunque es verdad que el argentino solo jugó media hora y sale de una lesión). Todas las portadas de los periódicos deportivos y medios especializados remarcan su buena actuación. Neuer debe estar que trina…

Por que sí, Ter Stegen no tiene nada que envidiar al portero titular con Alemania. Nada. De hecho, es normal que pida un puesto en el once inicial dada su trayectoria. Desde que debutó en 2012, Ter Stegen acumula solo 22 partidos en la selección alemana. Y se quejó de ello tras el último parón de selecciones.

No es fácil encontrar una explicación para lo que estoy viviendo. Estoy dando mi mejor versión en cada partido para hacer más difícil la decisión. Estoy intentando entrar en la portería como sea. Para mí es un golpe duro viajar y no jugar

Y tras el partido del Dortmund volvió a reclamar su titularidad a Joachim Löw:

Todos saben de qué soy capaz. Yo me fijo sólo en mí, lo que quiero es estar siempre al 100% y ha sido una buena ocasión para demostrarlo

No olvidemos que en La Liga española (una de las mejores, por no decir la mejor del mundo) es indiscutible. ¿Cómo no va a serlo con su selección? Lo será seguro, no sabemos cuando e igual más pronto que tarde. Se rumorea que Neuer (que tiene 33 años por los 27 de su compatriota) podría dejar Alemania próximamente y Ter Stegen es su MUY digno sucesor. Eso sí, esperemos que no le pase como a Messi y demuestre lo que vale con su país.

Y el fútbol femenino entra en otra dimensíon gracias al Real Madrid

Gol de Alexia Putellas al CD Tacón

Gol de Alexia Putellas al CD Tacón (EFE).

Para el que tenga dudas sobre que el fútbol femenino ha entrado en otra dimensión (aquella polémica portada del diario Marca…), le insto a que repase las redes sociales. Gente que no había visto en su vida ni un minuto de fútbol femenino y que, probablemente, tampoco vieron ayer el partido entre el Barça y el CD Tacón (o Real Madrid), hablando sobre él. Por supuesto, para mofarse, faltaría más, dado que está el club blanco de por medio.

Las redes, que ya se sabe que en el caso de Twitter saca lo peor de mucha gente, se llenaron de cuentas riéndose -sí, riéndose­­- del CD Tacón, culpable de dos cosas: una, ser un equipo recién ascendido que fue goleado por el subcampeón de Europa; la otra, haber sido comprado/absorbido/fusionado por el Real Madrid. Y ahí ya no hay piedad.

Podemos encontrarnos tuits crueles de periódicos como Mundo Deportivo o Sport, y sorna en periodistas a cuento, sobre todo, de una portada del diario Marca en el que se decía que la llegada del Real Madrid pone al fútbol femenino en otra dimensión.

Pues sí, efectivamente, entra en otra dimensión, y es la mediática. Un 9-1 que de normal hubiera pasado desapercibido ha estado todo el fin de semana en boca de todos y eso, guste o no, es bueno para el fútbol femenino. Su crecimiento estará ligado a que se hable de ellas, de sus partidos, de sus goles y también de sus polémicas. Bienvenido sea la llegada del Real Madrid, por muchas goleadas que caigan en este año y en los venideros.

PD: Y como prueba, les dejo las cuentas de medios de comunicación y otras con miles de seguidores que, por una vez, les han hecho caso al fútbol femenino.