La Feria del Libro de Madrid podría pensar un poco más en los niños

Creo que todas las familias tenemos nuestras pequeñas tradiciones.  A veces son heredadas: hacemos con nuestros hijos lo que nuestros padres hacían con nosotros extendiendo a otra generación esas costumbres, puede que modificadas en parte. En otras ocasiones son creadas, nacidas de nosotros. En la mayoría de los hogares probablemente será una mezcla de ambas.

Una de esas tradiciones incipientes y cotidianas que tenemos en nuestra casa es acudir al Retiro, a ese parque que nada tiene que envidiar al famoso Central Park, cuando están las casetas de la Feria del Libro para que Julia elija un cuento. Y eso hicimos este domingo aprovechando que no parecía que hiciera mucho calor. La primavera en Madrid es breve y esquizofrénica y  si hace calor entre las casetas parecerá siempre que hay cuatro o cinco grados más.

Llegamos a las tres y media de la tarde y estuvimos disfrutando del Retiro. Jugando en la hierba, recorriendo la rosaleda, trepando y corriendo. Y luego, a las cinco, enfilamos las casetas. Había muchos niños y las casetas que vi que más éxito tenían eran las de editoriales infantiles. Julia eligió en la de Kalandraka el cuento El artista que pintó un caballo azul mientras yo esperaba sentada a la sombra con Jaime y con mi perra (es uno de los pocos planes que combinan perros y niños), que tiene unas ilustraciones preciosas y que está inspirado en uno de mis pintores favoritos: Franz Marc. Esa misma noche lo leímos.
casalibro
La verdad es que la Feria del Libro podría mejorar bastante en su accesibilidad a los niños. El recorrido por todas las casetas es muy largo, los niños pequeños se cansan. Las casetas de cuentos y libros infantiles están esparcidas y tienen el mismo tamaño que el resto de casetas, así que son precisos bancos, sillas y alzadores, pero no todos tienen, no hay para todos los niños que se agolpan y no les facilita el tocar y elegir libros.

Sería preferible que estuviesen todas agrupadas, que el diseño de las casetas tuviera en cuenta su pequeño tamaño e incluso que hubiera una zona para los más chiquitos en la que pudieran tocar y leerlos en el suelo. Realmente casi cualquier librería lo tiene mejor pensado. En muchas abundan estas zonas infantiles, que acaban siendo rentables.

Seguiremos cumpliendo con nuestra pequeña tradición todos los años. Volveremos, pero lo haremos cualquier tarde entre semana. Con menos gente, más tranquilos.

6 comentarios

  1. Dice ser a

    ¿convinan? no puedo creer que alguien que lee sea capaz de escribir esto, ni que haya corrector ortográfico que se lo trague

    05 junio 2014 | 08:19

  2. Melisa

    Es lo que tiene escribir desde el ipad camino al trabajo. Odio al corrector automático de los dispositios móviles y él lo sabe 🙂 Gracias por el aviso.

    05 junio 2014 | 08:24

  3. Dice ser Montse

    Pues tienes razón y me siento muy identificada, porque como buena madrileña también iba siempre con mis padres y me hacían elegir un cuento. Como me chiflaba leer, ¡para mí era de los mejores acontecimientos del año! Y aunque mi peque es aún eso, muy peque, me encantaría ir con ella, pero claro, sería lo suyo que agrupen las editoriales infantiles. Por cierto, me encanta Kalandraka, tienen libros con pictos que suelo regalarle a mi sobri!! Besos

    05 junio 2014 | 09:27

  4. Dice ser miss spider

    En la Feria del Libro de Sevilla, que fue la semana pasada, pasa lo mismo. Llevé a mis hijos y tenía que cogerlos en brazos para que pudieran ver bien los libros.

    Al no tener los niños un acceso fácil a los libros infantiles, la Feria del Libro se les hace menos interesante, más aburrida, a ellos les gusta coger los libros, tocarlos, ojearlos. Por cierto, la mayoría de los libros que compramos fueron de Kalandraka, excelente editorial.

    Saludos

    05 junio 2014 | 10:05

  5. Dice ser sin comentarios

    Claro, ahora tendrán que poner escaleras mecánicas para que los nenes no se cansen. ¿Pero qué chorrada de artículo es este? ¿de verdad esto es lógico que semejante tontería aparezca en un PERIÓDICO?

    05 junio 2014 | 19:24

  6. Dice ser Venga ya

    ¿Qué lo niños soben y retoquen los libros?, ¿para qué?, para mal educarlos una vez más. Estoy de acuerdo totalmente con «sin comentarios», esto es una chorrada más de los padres chorras de hoy en día. Llevo yendo desde pequeña con mis padres, siempre me han comprado cuentos y libros allí, siempre ha estado igual y nunca hemos visto ningún problema porque no lo hay, los libros no son para que los niños los estropeen y los soben, se puede elegir sin tocar, hay que enseñarles a respetar a mirar y no toquetear todo, la feria es cultura, no es un mercadillo de porquerías ni un parque de bolas. Queréis muchas idioteces por tener niños, os creéis especiales por ello.

    06 junio 2014 | 09:03

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