Los compañeros le han hecho el vacío a Pedro, que sólo se ha llevado dos votos.
Se ha salvado Jon… lo de los pocos apoyos a Pedro me sorprende, la verdad.
Diría que se va a salvar Pedro, pero como me he equivocado en muchos pronósticos últimamente, casi prefiero taparme un poquito. Todo el mundo grita «Pedro», como otrora gritaron «Púa».
Comienza la marcha atrás. Elías pidió a todos los profesores que le salvaran, pero no ha surtido efecto. Los compañeros, que tanto rajan de él, tampoco lo han rescatado.
Tengo la sensación de que Jon se va a rebelar contra Risto en la próxima gala, no sé por qué…
Turno de Jon, que ya dice de primeras que su aspecto es chulesco. No se anda por las ramas… también quiere dar la satisfacción a sus padres… es un buen hijo.
Nazaret habla con la pajarita de Jesús Vázquez (no sé en vuestras casas, pero en mi televisión la pajarita ocupa la mitad de la pantalla). Se quedó a las puertas el año pasado y dice que se ve con mucha más confianza este año porque… ha perdido nueve kilos. Va a ser su año, dice. «Podría ser una personalidad de Operación Triunfo» (Esther también lo es… y no precisamente para bien).
Pedro, alias Pitingo en miniatura, hace gala de acentazo andaluz y presume de «arte». ¡¡OLÉ!!! Que conste que Pedro me gusta, ¿eh? Lo que no sé es si tiene el perfil más adecuado para OT.
Y llega Cristina, mi favorita. La «encasillan» en el rock, pero canta de todo. No ha pisado ningún escenario pero tiene una pinta… ¡¡A MUERTE CON ESTA ARTISTAZA!!!