Hola a todos.
Antes de nada, un breve detalle ñoño: Ayer, mientras seguíamos la gala en directo, llegamos (y superamos) a la entrada 1.000 en Reality-Blog-Show.
Dicho ésto, nos ponemos con el resumen de la gala.
Lo primero que supimos fue que la final no será este domingo, sino el lunes día 2, que es fiesta en Madrid, porque hace muchos años nos liamos a palos con los franceses y lo mismo como en El reencuentro se lían a palos día sí, día también, pues han querido conmemorarlo.
Marta y Coyote protagonizaron la gala. Estuvimos viendo vídeos de Marta y Coyote, que llevaban a pensar que están locos de amor y que se han liado, pero claro, con el montaje creativo de Telecinco no te puedes fiar. Son capaces de poner un vídeo en el que parezca que Benedicto XVI se dedica a estrangular gatitos en clubs de alterne.
Poco después supimos que las parejas nominadas eran:
– Sofía y Javián.
– Iván y Loli.
– Marta y Coyote.
Y más vídeos de Marta y Coyote haciéndose cariñitos mientras en el plató la señora Coyota las pasaba canutas. Que forma de buscar que una persona se derrumbe. Me imagino a los directivos, con los colmillos chorreando saliva ante un posible llanto.
Lili compara a su marido con un gatito perdido al que le das cariño y que acaba siendo un yonki del amor. Y hablado del gatito perdido, en la prueba semanal Coyote dijo: «no tengo partes íntimas». Se refería a que no ha tenido contacto carnal con Marta López, pero es una declaración escalofriante. ¿Este hombre meará sentado?
Chari, que iba vestida de tirolesa de vida alegre, salió a defender los celos de Lili. Nos ha jodido, no va a criticar drácula a los vampiros.
Pero los no-tortolitos de la casa discutieron, como en todas las parejas, y aunque al final se arreglaron, Marta aprovechó para inventar el lloroning, que es llorar debajo del edredón. La verdad, me parece más sano el edredoning de toda la vida. Y claro, Coyotito, que es como un gatito perdido, también lloró lo suyo.
¡¡Queremos una telenovela sobre el tema ya!! La podríamos llamar Amor Coyote.
Entonces supimos que se iban a ir a la calle dos parejas, y que Jorge y Lara iban a ser los primeros en decidir. ¿Y a quién eligieron? Pues a Buzz Lightyear, no te digo, ¡¡A IVAN SOSAZO Y LOLICHUPS!!
Inmediatamente después, porque lo de las expulsiones y esas cosas son de relleno, nos pusieron de nuevo vídeos de Marta y Coyote, incluido uno en el que se suponía que se besaban en la boca y en el que en realidad lo que pasaba es que se besaban un poco más allá de la comisura por error.
¡Que altura moral la de este espacio y su amable presentador Jordi González! ¡Qué forma de buscar la verdad para iluminar a la gente!
Al final lo consiguieron, porque Lili dijo que Marta y Coyote le han hecho mucho daño a sus hijos, de seis, once y doce años y que habían roto dos familias.
¿Tendrán en el plató una barbacoa para hacerse la carnaza después de la gala? No, para mi que son más de comérsela cruda.
Tuvimos la desgracia de ver a Yola y Lara comentando fotos de personajes de actualidad. Ese vídeo se lo pones a un catedrático y se le degrada el cerebro. O sea, ese vídeo es como un antidocumental, que lo ves y desaprendes. Es como el vídeo ese del pozo que mueres a la semana de haberlo visto, sólo que en este caso, a los siete días te vuelves tonto.
Tuvimos que enterarnos de que Iván Sosazo es más guarro que coleccionar tarzanetes en el culo. Digamos que le gusta el eau du sobac y que se sepa que ha ido al váter, dejando una tarjeta de visita pegadita en el inodoro.
Poco después supimos que la segunda pareja expulsada era la formada por Sofía y Javián.
A continuación nos pusieron un documental sobre las costumbres de cortejo de la Yola Salidensis, que en su época de apareamiento seduce al macho con todo tipo de demostraciones de sumisión. Peeeero el macho pasa de ella como de comer caca (la misma que deja en el inodoro).
Y entonces llegaron al plató Sosazo y Lolichups (la mujer del cuerpo palo y la cabeza Kroyac)
La entrevista, que fue solo a Iván, porque Loli se le puede preguntar lo mismo que a los muebles de la casa, consistió en una sucesión de vídeos de malos rollos y broncas de Iván con todo el mundo.
Iván volvió a decirle a Gerardo que es una ondatra zibethicus, o lo que es lo mismo, una rata almizclera.
«Lara es una gran mentira», dijo Iván. Y Jordi le respondió que quería que desarrollara ese concepto. Tócate los huevos, un club de debate es ahora ésto.
Sofía y Javián llegaron también al plató, porque no les iban a llevar a comulgar a una catedral.
En este caso, el sujetavelas fue Javián al que le pusieron silla porque sobraban, pero vamos, que porque el chaval no se cansara esperando a que le preguntaran algo.
Otra entrevista que fue una sucesión de vídeos de broncas. En este caso, de broncas y escenas lésbicas subidas de tono, contra las que, dicho sea de paso, no tengo nada.
Y es que dentro de la casa Sofía ha tenido la herrería del amor con el fuelle dando aire, como para templar espadas.
Y ahí acabó la cosa, amigos, hasta el lunes.