Archivo de junio, 2022

Se acabó hablar de ‘realities’: Gus Hernández deja sus blogs y más de uno abre champán

 

Sé que os tengo más abandonados que Marco, cuya figura paternal era un mono. También le pasaba a Dora la Exploradora. Joder con los monos. Te quedas solo 10 minutos esperando un bus y te adopta un mandril.

En fin, este silencio mío tiene una explicación. Hay una buena noticia y una mala. ¿Cuál queréis primero? Va, la mala.

He dejado el blog de realities. BOOM. 

Veréis, El Ojo gran hermano lo empecé a escribir el 15/09/2008. No me tiro el pegote si digo que por aquel entonces casi nadie (casi por no poner nadie) escribía sobre realities. Sobre Gran Hermano, quiero decir, que era prácticamente el único.

Desde entonces hasta que se acabó escribí la friolera de 2.137 post, con una media de unos 30 o 40 párrafos. En esos post me dejásteis 80.769 comentarios y llegó a tener más de un millón de usuarios únicos mensuales.

Algún tiempo llegó Reality Blog Show, que como era de cualquier reality fue más prolífico que un conejo en un local de intercambio de parejas. Fueron 2.461 entradas con más párrafos que El Quijote en versión extendida. Ahí hubo 53.232 comentarios.

El caso es que trabajar tres días por semana hasta las tres de la mañana más o menos (LAS GALAS, SEÑOR, LAS GALAS) y luego ir a currar como periodista (porque ya estaba podrido de dinero gracias al blog, pero uno tiene el vicio de trabajar) empezó a pesarme. Calculo que me he quitado 20 años de vida. Ahora ya digo la edad en años perrunos de lo poco que me queda.

Hasta ahí la mala noticia. PERO. PERO: ¡Voy a empezar una columna de humor en 20minutos! 

Se va a llamar ‘La vida según Gus’ y hablaré de cosas diversas. ¿He dicho hablar? ¡No! Diré tonterías sobre cosas que veo en la vida. 

Así que os animo a seguirme. Me estreno con el proceloso mundo de TikTok.

NOTA: Gracias. En estos casi 14 años de blog me habéis mandado miles de mensajes maravillosos. Me habéis dicho hasta la saciedad «gracias, porque lo estaba pasando mal y me reí»; «no veo los programas pero te leo porque me río mucho»; «casi me atraganto en el bus»; «la gente me mira como loca porque me río en la cafetería»… Gracias al blog me he realizado como persona, como profesional y como humorista. Me han salido grandes oportunidades y he conocido a personas maravillosas que me han llenado el corazón. ¡Gracias, mil gracias a todas!