Aquel usuario de mi taxi no era excesivamente guapo (labios de besugo, ojos como faros de un Mini Cooper, pelo lamido a izquierdas) pero hacía lo posible por potenciar su potencial. Primero, se notaba musculado, depilado hasta donde alcancé a ver, bronceado, e hidratado. Segundo, vestía a la última moda choni/cool (pantalones ceñidos y remangados verde pistacho, Nikes nuevecitas, camiseta blanca de pico y americana azul eléctrico, gafas de sol Feat. Pitbull y diamantes CR7 en ambos lóbulos). Tercero, se esforzaba en hablarme sosegado y educado, aunque se notaba que las buenas formas no eran su fuerte: «¿Podría usté llevarme a la calle Infantas, por favó?», pero al instante me demostró un lenguaje menos forzado, como si el BMW Serie 6 que pasó a nuestro lado descorchara de un golpe sus bajos instintos:
—¡Buá qué coche, chaval! Y mira qué llantazas calza. Yo acabaré pillándome uno, ¿que no? Me lo estoy currando un huevo.
—¿Ahorrando? —pregunté intrigado.
—Qué va. Estoy sin curro y aún vivo con mis viejos, pero me lo estoy currando muy en serio para entrar a saco en Mujeres, Hombres y Viceversa: mucho gimnasio, mucha dieta, cremitas para tener la piel chachi, buena ropa, subo selfis al tuiter para ganar fologuers, ya sabes…
—Pero la ropa, las cremas, el gimnasio… debe costarte un dineral.
—Por ahora me están ayudando mis viejos. Ojo: que no son ricos ni nada ¿eh? Son mazo humildes y tal. Vivimos en un piso cutre ahí donde me has cogido, en Aluche, pero les he prometido que pienso devolvérselo todo y comprarles una casa nueva cuando triunfe en la tele.
—Te veo convencido.
—Lo estoy, nano.
Lo de «nano», tratándose de un tipo de Aluche, me dejó roto, descompuesto, en blanco, sin nada más que decir. Y el opositor a tronista aprovechó el silencio para hacerse una tanda de selfies desde el asiento trasero de mi taxi.
Mientras tanto, un tal José María Eirín-López, a la sazón investigador en biología evolutiva (cuyo estudio para encontrar sustitutos naturales a los antibióticos fue destacado por la revista Nature como uno de los mayores logros de 2008) ha tenido que emigrar a EEUU por la falta de ayudas aquí, en nuestra peculiar España.