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Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban [2]

Días atrás publicaba el post ‘Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban’ el cual alcanzó un gran éxito de lectura y muchos fueron quienes lo compartieron en sus redes sociales.

Haciendo caso a varias peticiones que he recibido a través de los diferentes medios de contacto, en el post de hoy os traigo una segunda entrega con otra docena de cosas que quizás no sabíais cómo se llamaban, el cual espero sea de vuestro agrado, al igual que ocurrió la vez anterior:

 

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Chicote

 

Chicote:

A muchos os vendrá a la cabeza el popular chef y presentador de televisión Alberto Chicote, pero, en este caso, un chicote es el nombre que se le da a la colilla de un cigarro puro

 

 

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Zorongo

 

Zorongo:

Nombre que recibe el característico pañuelo doblado (en forma de venda) que llevan en la cabeza los baturros (, el Diccionario de la RAE los define como «aragoneses rústicos»)

 

 

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Guedeja

 

Guedeja:

Es la melena del león. También se le llama así a las melenas muy largas en general

 

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Baceta

 

Baceta:

Son aquellas cartas (naipes) que se quedan en un montón y sin repartir (también llamada baza)

 

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Dilúculo

 

Dilúculo:

La última parte en la que se divide la noche. Es justo el momento anterior al que va a asomar el primer rayo de Sol.

 

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Boquerel

 

Boquerel:

Es la pieza que se encuentra en la manguera de un surtidor de gasolina la cual agarramos y  apretamos el gatillo para que salga el combustible

 

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Sicote

 

Sicote:

La mugre que se acumula en el cuerpo (sobre todo en los pies) por la falta de higiene y limpieza

 

 

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Bazucar

 

Bazucar:

Lo que hacemos con un vaso o cualquier otro recipiente que contiene un líquido y movemos dando giros con la muñeca con el fin de removerlo (por ejemplo el azúcar de un café cuando no tenemos cucharilla)

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Bomborombillos

 

Bomborombillos:

Es el acto de llevar a alguien montado sobre los hombros (muy típico hacérselo a toreros, deportistas o a los niños pequeños)

 

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Chisguete

 

Chisguete:

Se llama así al chorrito de un líquido que sale disparado con fuerza (por ejemplo el de una pistola de agua) Pero un chisguete también es pedir que te sirvan un culín de vino (un trago corto)

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Zupia

 

Zupia:

Y hablando de vino, la zupia es el poso o residuo que queda al fondo de la botella o copa

 

 

Una docena de cosas que quizás no sabías cómo se llamaban - Jareta

 

Jareta:

Es el dobladillo que llevan muchas piezas de ropa por el que se coloca y/o asoma un cordón, goma o cinta que sirve para ajustar la prenda (pantalones, sudaderas…)

 

 

 

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Fuentes de las imágenes: KS Peartree (Flickr) / medicablogs / badeendjuh (morguefile) / clipartbest / João Carlos Beneton (panoramio) / pixabay / kurtito (Flickr) / public-domain-image / vladimirteran (Flickr) / pixabay / descorchevinos Wikimedia commons

 

El curioso negocio que hay tras las cáscaras de cacahuete recicladas

El curioso negocio que hay tras las cáscaras de cacahuetes recicladasMillones son las toneladas de cacahuetes que anualmente se consumen en todo el planeta, generando estos unas cantidades desorbitantes de desechos en forma de cáscaras que habitualmente son lanzadas al suelo o la basura.

Normalmente cuando los cacahuetes son consumidos en casa acaban siendo recogidos por uno mismo y se tiran al cubo de la basura, pero el problema viene cuando éstas son tiradas al suelo en los estadios o instalaciones deportivas en el que han acudido miles de personas que los consumen.

El curioso negocio que hay tras las cáscaras de cacahuetes recicladasSe calcula que cerca de medio millón de toneladas de cáscaras de cacahuete son las generadas anualmente en ese tipo de lugares, por lo que el gasto que siempre se ha generado en recogerlo y deshacerse de él ha sido astronómico.

Hasta que a alguien se le ocurrió la brillante idea de dar una segunda vida a todas esas cáscaras desechadas que ayudase a respetar el medio ambiente, redujese los costes de recogida que generaba y que encima pudiese dar algún beneficio económico.

Tras investigar cuáles podrían ser las vidas útiles para las cáscaras de cacahuete tras ser recicladas han surgido un buen número de negocios que se encargan de recoger los desechos de los estadios, instalaciones deportivas, bares y otros lugares de consumo para después reciclar y vender como alimento para el ganado o animales de corral, abono orgánico (compost), material para hacer ladrillos ecológicos, combustible (biomasa) e incluso detergente (entre otras muchas utilidades que se les puede dar).

Aquellos que se dedican al curioso negocio que hay tras las cáscaras de cacahuete recicladas no facilitan cifras exactas de cuáles son las ganancias económicas que genera y aunque tímidamente dicen que apenas da para cubrir gastos, muchos son los expertos que aseguran que en realidad da unos pingües beneficios similares a los de otros productos derivados del reciclaje.

Cabe destacar que, aparte de los beneficios y negocios que se puedan crear en torno a esa segunda vida que se le da a las cáscaras de cacahuete, también hay que tener en cuenta todo el comercio que hay alrededor de la semilla en sí: la famosa mantequilla de cacahuete tan popular en Norteamérica, aceite, champús, jabones, biocombustible, colorante alimentario, insecticidas, pegamento, etc

Para finalizar y como nota curiosa, queda añadir que la ‘araquibutirofobia’ es el miedo irracional que sienten algunas personas a que las cáscaras de cacahuete o la mantequilla hecha con este producto se les pegue en el paladar.

 

 

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Fuentes de las imágenes: publicphoto / athleticbusiness