Casi enteros Casi enteros

Casi enteros: un blog sobre los medios de comunicación, la publicidad, su papel en la financiación de los medios, la investigación y otros temas relacionados con todo esto

Archivo de la categoría ‘Premios’

Ilusión por la Academia de la Publicidad

La Academia de la Publicidad afronta una nueva etapa.

El pasado mes de julio se eligió una nueva Junta. Pablo Alzugaray, su tercer Presidente, llega acompañado por una buena dosis de savia nueva, junto con la continuidad que aportan varios miembros de la Junta anterior. Consigue así un interesante cocktail de continuidad, ilusión, empuje y nuevas ideas.

Primera reunión de la Junta Directiva 2017. FOTO: Academia de la Publicidad

El objeto fundamental de la Academia sigue siendo el que ya tenía cuando la fundó Julián Bravo, su primer Presidente, pronto hará diez años: seleccionar y nombrar Académicos de Honor, un pequeño número de personas (cuatro al año, como máximo) que hayan destacado en nuestra profesión a lo largo de su vida.

La Academia se define así como una fábrica de referentes. Los Académicos de Honor lo son por: mérito, integridad, generosidad y ejemplaridad durante una trayectoria profesional no inferior a veinte años. A diferencia de lo que se pedía en los primeros estatutos de la Academia, pueden ser profesionales que sigan en activo.

Sigue en pie el objetivo de colocar un publicitario en la RAE. Sabemos que es un camino largo pero ya se han dado importantes pasos en la buena dirección.

Se ha creado el reconocimiento al Publicitario del Año para quien haya destacado por su labor durante ese periodo y se ajuste a los valores de la Academia.

Hay otros proyectos, siempre en la línea de fortalecer la memoria y el prestigio de una profesión como la nuestra basada en crear contactos muy efímeros pero que en muchas ocasiones provocan cambios sociales que permanecen durante muchos años.

La Junta Directiva se ha organizado en grupos de trabajo de tamaño reducido para abordar las diferentes actividades.

La Academia de la Publicidad emprende esta nueva etapa cargada de ilusión, convencida de que los proyectos que aborde van a interesar a la profesión y conseguirán el apoyo económico necesario.

¿Aún no eres socio?

(*) Este artículo apareció en la revista IPMark, en papel, en su número correspondiente a octubre de 2017

En este enlace puedes escuchar una entrevista sobre la Academia

Homenaje a seis grandes de la Publicidad

Cada año la Academia de la Publicidad elige a seis personas que hayan destacado por su trayectoria en alguna de las profesiones relacionadas con la publicidad y les nombra Miembros de Honor.

Ayer se celebró en la Biblioteca del diario ABC una emotiva ceremonia para entregarles este reconocimiento. Fue emotiva porque cada entrega fue precedida por un vídeo en el que familiares y amigos glosaban las virtudes (y los defectillos) de los homenajeados; porque no estaba uno de ellos, el profesor González Martín, fallecido trágicamente hace unos años, y porque los discursos de los premiados también lo fueron.

A algunos les conocía ya personalmente, a otros sólo por referencias, pero puedo asegurar que todos son grandes figuras de la publicidad, que se han hecho grandes a la vez que hacían grande el negocio publicitario.

De Manolo Idiarte, uno de los fundadores de Antena 3 entre otras muchas cosas, todos destacaron que es muy buena persona. Doy fe. Pero también ha sido un gran profesional y ha creado grandes equipos. Estuvo en el nacimiento de OJD, el EGM, Autocontrol…y la propia Academia de la Publicidad. Se definió como la cuota de medios entre los premiados. Por mi trayectoria estoy encantado de que se reconozca a personas de medios. Pueden ser las menos visibles, pero suelen ser grandes y rigurosos profesionales.

César Vacchiano, procedía de la investigación de mercados (también me gusta esto, claro) pero lo ha sido todo en un buen número de grandes (y no tan grandes) anunciantes. Es un firme defensor del valor de la publicidad. Ahora es asesor para la Marca España, trabajo complicado pero apasionante. Su hijo, del mismo nombre, también trabaja con gran éxito en el sector publicitario.

Ángel del Pino fue el gran creativo de la agencia McCann, esa que nos apabulla todos los años con la cantidad de premios que consigue. También ha sido gran defensor del asociacionismo en la profesión; ha dirigido varias asociaciones. Durante muchos años todo el que pasó por la facultad en la Universidad Complutense hizo sus cursos de Creatividad en Vivo (no había ningún CV que no los incluyera). Una de sus amigas le definió como un gran tímido; como a eso no creo que me gane, supongo que ese es el motivo de que, a pesar de haber coincidido muchas veces, nos conozcamos poco.

Y ahora voy con los que no conocía personalmente.

El profesor Juan Antonio González Martín, un lingüista convertido en publicitario, ha sido una referencia para todos los que nos dedicamos a esto. Publicó varios libros que siguen estando vigentes. Se considera que su Teoría general de la publicidad es el libro más completo escrito en castellano sobre la materia. Recuerdo la impresión que causó en todo mi entorno la noticia de su muerte, muy joven, creo que en un accidente en un taxi. Yo llevaba poco tiempo a este lado de la mesa y me emocionaba ver la unanimidad en los comentarios sobre él. Sí conocí a su hermano, cuando fui a dar alguna clase en el Centro Asociado de Segovia.

José Luis Zamorano, con gran sentido del humor, se definió como Fundador (lo ha sido de un buen número de agencias). Fue director de arte y creó algunas de las campñas más notorias de la historia de la Publicidad española. ¿Quién no recuerda los spots (fueron varios)  Si no hay Casera nos vamos?

Ferrán Martorell, también un reconvertido, en este caso desde sus estudios de economista. Empezó en La Nesle, como repitió varias veces, donde no encontró su sitio hasta que llegó al departamento de marketing. Después de unos pocos años decidió fundar su propia agencia, Slogan, que ha sido durante más de cuarenta años creadora de muchas de las campañas más reconocidas. Ha ganado varios grandes premios en los festivales internacionales de publicidad. También es un creyente convencido en la eficacia de la publicidad: Vende más una mala publicidad que ninguna publicidad.

Como ya he comentado aquí en alguna ocasión, aunque los jurados intentan elegir alguna mujer entre los premiados (yo siempre envío los nombres de tres mujeres entre mis seis candidatos) las normas lo hacen muy difícil por el momento: entre los publicitarios que ya han finalizado su presencia en primera línea del negocio, los de los sesenta, los setenta o anteriores,  había muy pocas mujeres. Dentro de unos años puede que lo difícil sea elegir hombres.

El acto se inició con un reconocimiento a la AEA (Asociación Española de Anunciantes) que cumple 50 años desde su fundación y a los ganadores y finalistas del Premio Academia Joven, siete estudiantes a quienes se augura un gran porvenir en la profesión.

Una noche inolvidable

Hoy debería hablar de las previsiones Zenthinela para este fin de año y para 2013; para eso me pasé el fin de semana trabajando en ellas. Pero prefiero dejarlo. Para una vez que puedo hablar de buenas noticias…

El martes se celebró el día de la Eficacia. Por la mañana nos reunimos unos cuantos para escuchar una mesa redonda y cuatro interesantes ponencias sobre el tema de la eficacia publicitaria.

Por la noche, con más de 2000 asistentes, se celebró la entrega de los Premios EFI a la Eficacia de la Publicidad. Y fue la gran noche de (entre otros) Zenith, la empresa en la que trabajo.

Muy pronto supimos que habíamos ganado (con Mercedes y Contrapunto) el Premio de Oro a la Investigación. Se reconocía el trabajo de mi equipo y yo ya me empezaba a llenar de orgullo.

A medida que iba avanzando la noche llegaron tres premios más para Zenith: un Bronce por la campaña de Mercedes y dos oros por la campaña de gama de Campofrío, la de los cómicos (con McCann como agencia creativa), que tantas alegrías nos ha dado y que finalmente ganaría el Gran Premio como la campaña más eficaz del año. Marketing News describe muy bien la campaña; eso ayuda a comprender por qué ha ganado.

Aquí el orgullo se empezaba a mezclar con una fuerte emoción. Llevo muchos años en la empresa, algunos de ellos muy duros, y ver que por fin se reconocía que somos un gran equipo, que hace un gran trabajo, hacía que las lágrimas asomaran a mis ojos.

Casi al final de la Gala nuestra emoción (la gente de Zenith ocupábamos casi una fila del Palacio Municipal de Congresos) llegó al límite: ¡Zenith ganó el Premio a la Agencia de Medios del Año!

Seguro que más de uno pensará que con clientes como esos (Campofrío y Mercedes son sólo dos de las grandes marcas para las que trabajamos) cualquiera gana el premio, pero quienes hemos sido jurados de los Premios EFI (yo lo fui hace dos años) sabemos lo complicado que resulta ganar cada premio. Mucho más aún los premios a agencias del año, que suponen ser el que más premios ha ganado.

Por cierto, gracias a los miembros del jurado. Sólo cuando se ha estado ahí se sabe el volumen de trabajo que eso supone. Y lo que se aprende a cambio…

Para mí, y para muchos de mis compañeros, la noche del 30 de noviembre será una noche inolvidable.

Mi 2011 y la investigación de Internet

El año 2011 fue muy importante para la investigación de Internet en España. Después de muchos años IAB y AIMC pusieron en marcha el concurso que decidió que ComScore sea la referencia del mercado para los datos de audiencia. Yo participé hace años en los primeros pasos de la mesa que acabó dando lugar a este concurso, tan necesario, pero luego dejé paso a la gente de mi equipo (primero Marga Ollero, luego Mapi Merchante) que por edad y trayectoria saben más de eso. Creo que fue un acierto; ellas lo han hecho muy bien.

Pero no era de eso de lo que quería hablar hoy. Mirando hacia atrás veo que en 2011 he participado en varios proyectos relevantes en el campo de la investigación de Internet; siempre con grandes colaboradores.

El próximo miércoles iré a Barcelona a la entrega de premios de la IAB Europe’s Research Awards. Entre los siete proyectos seleccionados en la lista corta en el apartado de investigación de la eficacia publicitaria están dos en los que he participado junto con diferentes equipos. Es muy probable que el miércoles no ganemos nada, pero el simple hecho de que dos de nuestros estudios hayan sido seleccionados entre los siete mejores, me llena de orgullo.

Uno de ellos, The Pool junto con el equipo de Vivaki (Bea Fernández, Ana Arias, Andrés Azpilicueta, Cristina Recuero y, cómo no, Mapi Merchante) consistió en la búsqueda de un nuevo formato para la publicidad en vídeo en Internet. Participaron los nueve soportes más importantes de publicidad en Internet y diez anunciantes, clientes de empresas del grupo. El formato ganador, ASq, ya se ha empezado a utilizar en alguno de los soportes participantes.

El otro, Net Radar, es un estudio de Zenith en el que el papel principal lo ha tenido el equipo de investigación de mi empresa, capitaneado por Mapi Merchante, junto con TNS que ha realizado el trabajo de campo. Es un estudio complejo, del que me siento particularmente orgulloso. Utiliza técnicas innovadoras para medir la eficacia de la publicidad en Internet, los diferentes formatos, sites, tipos de anunciantes etc.

Pero además de esos estudios en los que participé por mi trabajo también es importante el Estudio de Inversión en Comunicación Digital, que puso en marcha IAB. Aquí el equipo lo formaban Gonzalo Iruzubieta, que fue quien me involucró en el proyecto y Patricia Chávez y Óscar López de Grupo Consultores, junto conmigo. Todos supervisados por Antonio Traugott, de IAB y Kika Samblás de Consultores y siguiendo la idea de Daniel Solana de Doble You. Como ya escribí aquí, creo que el estudio supone un primer paso en una dirección que dará muchos frutos en el futuro.

Además he seguido incorporando nuevas opciones digitales a las estimaciones de inversión que hago con mis estudios Zenith Vigía y Zenthinela. En algunos casos son las únicas estimaciones de las que dispone el mercado.

Así que me siento orgulloso de mi aportación durante 2011 al conocimiento de internet. Creo que no está mal para un inmigrante digital que ya no cumplirá los sesenta años.

El orgullo de ser publicitario

Yo soy matemático de formación, pero la vida me llevó, por el camino de la investigación de audiencias primero y de la investigación a secas después, a ser publicitario.

Un intruso, como tantos otros.

Pero la profesión me ha recibido bien y yo he intentado devolverle con creces todo lo que me daba. Lo he hecho con mi tiempo, mis ideas, mis charlas, mis artículos y ahora, creo, con este blog. Todavía me quedan unos años para devolverle algo más.

Creo que hace unos años los publicitarios podían ir por la calle con la cabeza muy alta; su consideración social, al menos la de los líderes del sector, era grande.

Ahora parece que hemos perdido mucho terreno; probablemente porque en muchos casos se ha sustituido el amor a la profesión por el amor al dinero. Las grandes empresas de publicidad están, como todas, en manos de financieros que en ocasiones no dudan en echar a la calle lo mejor que tienen, porque piensan que así las bolsas les recompensarán. Lo peor de todo es que las bolsas suelen recompensarles con subidas justo cuando descapitalizan sus empresas al prescindir de lo mejor (que a veces es también lo más caro) del capital humano, el único que tienen las empresas de publicidad.

El martes pasado se celebró la fiesta de la Academia de la Publicidad, en la que se nombraron seis nuevos miembros de honor. Su Presidente Julián Bravo nos despidió con un discurso valiente, que ha inspirado este post. Creo que deberíamos luchar para recuperar la consideración social de la publicidad.

Algo, mucho, hemos debido hacer mal para que ahora se nos vea casi como el enemigo del pueblo.

Por cierto, el viernes vi que la Universidad Blanquerna le había concedido recientemente a Julián Bravo su Premio Extraordinario de Comunicación.

Para mí es una gran noticia. Conocí a Julián muy tarde, cuando yo ya estaba en el lado publicitario del negocio y él llegó a la Presidencia de AIMC. Ya había oído hablar mucho de él y sabía que, desde la Thompsom (la JWT) había sido uno de los grandes, de los pioneros, de la publicidad en este país.

Durante casi todos los años que él permaneció en la presidencia de AIMC yo seguí siendo miembro de su Comisión Técnica, uno de los sitios en los que más he aprendido y donde he conocido a mejor gente.

Cuando Julián se fue, yo lo dejé; claro que por otras razones.

Julián me ha parecido siempre un caballero, una de esas personas que dignifican la profesión en la que están y todo lo que hacen.

Ahora que él está jubilado le considero, en la distancia (yo nunca llegaré ni a la mitad de su nivel) un amigo. Siempre que he podido hacer algo con él (el número de la revista Telos de hace un par de años creo que fue lo último) lo he hecho muy a gusto; siempre aprendiendo de su vasta cultura y disfrutando de su conversación.

¡Enhorabuena, Julián! Seguro que este premio no será el último. Tú has hecho de la de publicitario una profesión digna.

Por cierto, este post casi se me va al terreno de los matemáticos en publicidad. Somos más de los que se cree y hay aportaciones muy importantes de algunos de nosotros. Otro día abordaré este tema. Creo que se lo debo a Atenea 1989 por su comentrio del otro día.

Cuando ya tenía escrito este post veo que el editorial de la revista Anuncios trata este mismo tema y con el mismo título. El discurso de Julián fue muy inspirador.

Una marca valiente

Tengo un poco abandonado este blog.

Hace unos diez días se estropeó el ordenador de casa y no lo habíamos podido llevar a arreglar. Ayer lo llevó Carlos, pero no estará al menos hasta el lunes.

Y claro, escribir en la oficina, cuando cada día se sale muy tarde, no apetece mucho. Este fin de semana me he traído el ordenador a casa para trabajar, así que aprovecho un momento de descanso.

En estos días he tenido muchos festejos; seguro que eso también ha ayudado a mantenerme alejado del blog. Una boda en Murcia (Paco, sobrino de Maxi), otra en Madrid al día siguiente (Jorge, hijo de mi amigo Roberto), varias entregas de premios (los EFI, los del concurso 20 blogs de este periódico).

También ha habido noticias sobre inversión publicitaria que darán para otro post.

Pero ahora quería hablar de la campaña ganadora del Gran Premio en los EFI.

¿Cual ha sido la campaña más eficaz de la temporada pasada, al menos a juicio del Jurado de los Premios EFI, del que este año he tenido el honor de formar parte?

En un año caracterizado por la crisis económica y por el ataque de las empresas y las marcas de distribución contra las marcas de fabricante, el Gran Premio fue para una campaña de un producto de gran consumo.

La campaña las Elenas Salgado de Pavofrío incidía justo en esa idea: cada ama de casa, como vicepresidenta económica de su hogar, sabe en qué cosas puede ahorrar, pero nunca en la calidad de lo que da de comer a su familia. Pese a que el momento no podía ser más complicado, la campaña consiguió aumentar notablemente las ventas.

No fue el único premio conseguido esa noche por la compañía Campofrío. Otra campaña, protagonizada por los cascos azules consiguió también una plata.

Estas últimas semanas, una nueva campaña de Campofrío, esta vez de su producto Naturísimas, está siendo protagonista en los medios publicitarios. Se trata de un cortometraje, Cuatro sentidos, muy emocionante, que se ha proyectado en cines y emitido en algunas cadenas de televisión.

Se trata de una historia muy sentimental: los hijos de una pareja de ciegos quieren devolver a sus padres una parte de todo lo bueno que ellos les han dado.

Por supuesto se puede ver también en internet. Muy recomendable.

Campofrío está apostando seriamente por la marca y por dotarla de valores; una apuesta valiente en los duros tiempos que corren. No todo consiste en bajar los precios. Una apuesta por la calidad puede suponer pagar un poco más; pero merece la pena.

Si además ayuda a aumentar las ventas, se cierra el círculo virtuoso.

Miembro del Jurado

La semana que viene se celebra la primera reunión del Jurado de los Premios EFI.

Los EFI premian la eficacia publicitaria; el cumplimiento de los objetivos fijados para las campañas. Eso implica haber fijado esos objetivos y la metodología con la que se van a medir. Y medirlos.

También es importante presentar bien los casos.

Yo he dedicado toda mi vida a la medición (de la audiencia, de las inversiones, de la notoriedad, del recuerdo, de la eficacia…) así que me hace mucha ilusión formar parte de ese Jurado.

Todas las personas que conozco que han formado parte del Jurado me comentan lo mucho que han aprendido y lo bien que se lo han pasado a pesar de que supone una importante carga de trabajo añadido.

Ya hace casi dos años que, en una entrevista que me hizo Maite Sáez para la revista Anuncios, comenté que esta era una de las cosas que me gustaría que pasaran antes de dejar esta profesión. Ha ocurrido justo en un momento en el que el resto de las cosas no acompañan precisamente, así que espero disfrutarlo. Que sea para bien.

Espero ver muchos casos interesantes.

Y que ganen los mejores.

Yo soy de AEDEMO

El pasado 24 de marzo se celebró la Asamblea de AEDEMO, la Asociación que nos agrupa a los profesionales de los estudios de mercado y de opinión.

Son tiempos difíciles para casi todos; también para las asociaciones, y AEDEMO no es una excepción. En el aspecto económico el año pasado fue malo, tuvo déficit.

En la Asamblea, el actual Presidente, José Carlos Gutiérrez, nos pidió, entre otras cosas, que manifestemos nuestro orgullo por pertenecer a esta asociación.

José Carlos ha sido mi jefe durante cerca de quince años y sigue siendo buen amigo mío. A quien le interese conocer sus puntos de vista sobre la investigación y sobre AEDEMO puede verlos en esta entrevista.

Yo llevo veinte años perteneciendo a AEDEMO; en esta asamblea me impusieron la insignia conmemorativa.

Nunca he pertenecido a ninguno de los órganos directivos de la asociación, pero he tratado de colaborar en todo lo que he podido; no me cuesta nada sentirme orgulloso de decir : yo soy de AEDEMO.

AEDEMO organiza numerosas actividades muy interesantes; en muchas de ellas he tomado parte.

He participado como ponente en numerosos Seminarios de Televisión, desde el del año 89 en San Sebastián, hasta el de 2007 en Valencia; a partir de ahí he preferido que otras personas de mi equipo sean quienes expongan.

Hasta he ganado el Premio a la mejor ponencia un par de veces, la primera en Granada, con Jaime Agulló, la segunda en Valencia, con Pepe Rubert.

Participé con ponencia también en el primer Seminario de Eficacia, de los que organiza con la AEA, el que se celebró en mi Vitoria natal. Ahí no he repetido muchas veces, creo que sólo una en Barcelona en una mesa redonda. He presentado sinopsis alguna vez más pero no fueron aceptadas por el comité de selección.

También he participado varias veces en el Seminario de Medios; una de ellas, en Marbella, gané con Marga Ollero, el Premio a la mejor ponencia.

Marga Ollero fue también mi compañera de ponencia en el primer Seminario de Tendencias: hace ya siete u ocho años hablamos sobre inmigración.

Como puede verse, casi siempre he tenido excelentes compañeros que me han ayudado a hacer un trabajo mejor. Hace ya muchos años, José María Moix y yo ganamos el Premio de Investigación AEDEMO Metraseis, que patrocinaba este instituto, hoy absorbido por Synovate. El trabajo versaba sobre la investigación de la nueva televisión que nos llegaba. Me gustaría recuperarlo ahora, para ver si acertamos en algo, pero me temo que se ha extraviado.

También he escito muchas veces en Investigación y Marketing, la revista de AEDEMO. Juanjo Ibáñez, su Director, sabe que siempre puede contar conmigo. Hace tres años me invitaron a Barcelona para recibir el Premio al mejor artículo del año.

Durante varios años fui profesor en el Curso de Investigación de Mercados.

Haciendo este repaso veo que la mayor parte de los premios que he ganado en mi vida profesional han tenido que ver con AEDEMO.

Sí; me siento orgulloso de decir: yo soy de AEDEMO.

Seguro que mucha más gente también está ogullosa.

Seguro que seremos capaces de hacer una asociación todavía mucho mejor, con muchas más actividades y que consiga ampliar el número de personas que exclamen con orgullo: Sí, yo soy de AEDEMO.

Los Goya: Sin publicidad arrasan

La entrega de los Premios Goya consiguió en TVE una audiencia media de 4.567.000 espectadores, un 27,2% de share, un share de los de antes y un rating de 10,9%.

¿El cine español está de moda?

Ya he comentado aquí más de una vez que el año 2009 fue un año relativamente bueno para el cine en sala, el segundo mejor de la década.

Además coincidieron varios buenos estrenos españoles y el cine nacional recuperó algunos puntos de cuota.

¿O sea que tenemos que deducir que el cine español interesa tanto como para liderar la audiencia de televisión de un domingo de febrero?

De eso ya no estoy tan seguro.

¿A quién hay que atribuirle este éxito?

¿A Alex de la Iglesia?

¿A la sorpresa de la vuelta de Almodóvar?

¿Al traje de González Sinde?

¿A la espalda de Natalia Verbeke?

¿A Ágora y Celda 211, las películas más premiadas?

¿A la actuación estelar de Pocoyó?

¿A la presentación de Andreu Buenafuente?

Seguro que todos estos factores que he citado tuvieron algo que ver, pero no podemos olvidar el principal.

¡Sí! también de esto es responsable la UTECA y su logro de una televisión pública sin publicidad.

Por cierto, permítanme un juego de palabras ¿para cuando una televisión privada sin privacidad?

El año pasado la entrega de los premios Goya fue superada ampliamente por la emisión en El Peliculón de Antena 3 de la película Mr y Mrs Smith. Se quedó en 3.291.000 espectadores, 21,4% de share y 7,9 % de rating.

Entre todos los factores que hemos citado antes y la UTECA aumentaron un 38% los resultados de audiencia de los premios Goya.

Seguro que las televisiones privadas, que según Jorge del Corral, Secretario General de UTECA, están encantadas de que TVE sea líder de audiencia estarán aún más encantadas con este resultado.

La publicidad ¡es la leche!

Acabo de llegar de Toledo, donde se ha celebrado el 26º Seminario de AEDEMO de Televisión.

AEDEMO es la asociación que nos agrupa a los profesionales de la investigación de mercados y de opinión. Su Seminario de Televisión lleva muchos años siendo el gran evento en el que nos damos cita para vernos y contarnos las novedades referidas a ese medio y a la investigación que le concierne.

Ya llevamos unos cuantos años en los que, como debe ser, se habla mucho más de los contenidos audiovisuales, sea cual sea la pantalla en la que se consumen que del electrodoméstico antiguamente llamado televisor.

Este año, a pesar de las dificultades económicas hemos sido más de trescientos los profesionales que nos hemos reunido para contemplar el convulso panorama de la tele.

Los asistentes al Seminario votan para conceder dos premios, uno a la mejor ponencia y otro a la más innovadora.

Hoy quiero compartir con los lectores mi gran alegría, que explica el título de este post: la ponencia La publicidad ¡es la leche! que presentaron ayer mi compañera y amiga Mapi Merchante y mi cliente y amigo Jorge Areces, ha ganado el Premio a la Mejor Ponencia. Y yo creo que muy merecidamente.

Por si fuera poco, el otro premio, a la Ponencia Más Innovadora, también lo ha ganado una buena amiga: Macarena Estévez, por una ponencia en la que aplica la teoría matemática del caos a la interpretación del zapping televisivo. ¡Enhorabuena por partida doble a Macarena!

Pero vuelvo con la ponencia ganadora, que resume el trabajo hecho por Zenith Media y el departamento de marketing de Central Lechera Asturiana a lo largo de cuatro años muy complicados.

Detrás de la brillante y amena exposición de Mapi y Jorge está el trabajo de mucha gente, tres estudios Touch Points, casi cuatro años de tracking semanal, varios modelos matemáticos y finalmente la constatación de que, además de los aportes a corto plazo de la publicidad a las ventas, también se puede medir la aportación a más largo plazo, que aún es más importante.

Y lo mejor de todo, como consecuencia del trabajo de todo el equipo de Central Lechera Asturiana, con la ayuda de las empresas que trabajamos para ellos, la cuota de mercado (y todos los indicadores de salud de marca) ha crecido en una coyuntura especialmente complicada, la más complicada que hayan vivido las marcas en su historia.

Como he intentado explicar tantas veces, en este blog y en cualquier sitio en el que me dejen, la publicidad funciona y ayuda a dinamizar la economía, algo tremendamente necesario en estos momentos.