En la parada de taxis de Ópera me llegó al móvil el aviso de una solicitud de contacto vía Bluetooth. Me hizo gracia el nick del remitente: DIOS PUNTO CERO. Así que lo acepté.
Al instante me llegó un mensaje del recién agregado:
«Bienvenido a mi Reino»
«Un honor, Señor. ¿O puedo tutearle?», contesté no más que por seguirle el juego.
Aquel bromista no podría andar muy lejos. El radio máximo de acción del Bluetooth apenas alcanza unos metros a la redonda. Tal vez se tratara de algún otro taxista de mi misma parada, o cualquiera de los chavales que esperaban al autobús, con el móvil en la mano, justo al otro lado de la calle.
«Sé en lo que estás pensando», volvió DIOS PUNTO CERO.
«En efecto. ¿Qué llevas puesto?», contesté bromeando.
«Una hoja de parra. Y mi largo cabello rubio me cubre los pechos». Aquella inesperada respuesta suya me excitó. Bien podría tratarse, en efecto, de una mujer. De hecho, había una taxista justo delante de mi taxi, y otra mujer más sentada en la parada del autobús, las dos manejando sus móviles. Tal vez fuera alguna de ellas.
«Soy el tercer taxista de la parada. ¿Dónde estás tú?», escribí nervioso.
«Estoy dentro de ti». Esto me excitó aún más.
«¿Y qué ves en mí?», pregunté al instante.
«Te preocupa algo que sucedió ayer. Hiciste mal en abrir aquel correo de Beatriz».
Hice una pausa, absorto.
«Esto no ha tenido gracia. En serio, ¿quién eres?, ¿dónde estás?» contesté desconcertado.
«Ya te lo he dicho: dentro de ti. Pero no te apures. Me he puesto en contacto contigo para ayudarte».
«¿Cómo sabes lo del mail de Beatriz?»
«Perdiste tu oportunidad. Ahora que Beatriz se va a casar con otro, no te queda más remedio que olvidarla. Yo puedo ayudarte. Sólo tienes que seguir mis instrucciones».
«Dime».
«Borra su contacto de la agenda de tu móvil. Si lo haces, también borrarás su recuerdo».
Miré a mi alrededor. Ahora estaba solo en la parada de taxis (los taxis que me precedían ya se habían marchado) y el autobús también había vaciado la otra parada. DIOS PUNTO CERO no era ninguno de ellos.
Pese a lo incomprensible de aquella situación, le hice caso. Accedí a mi agenda del móvil y borré el contacto de Beatriz. De inmediato, me llegó otro mensaje de DIOS:
«¿Quién es Beatriz?».
No supe qué contestar a eso:
«¿A qué Beatriz te refieres?».
«Perfecto. Ahora márchate de aquí».
Arranqué mi taxi e inicié la marcha. Mientras me alejaba de la plaza pude ver, apoyado en la fachada del Teatro de la Ópera, a un hombre con aspecto de mendigo siguiendo mi estela con la mirada. Al pasar junto a él, me guiñó un ojo. Dos calles después perdí el contacto de DIOS PUNTO CERO en mi móvil.
¿Sería él? ¿Por qué me preguntaría por una tal Beatriz? No entiendo nada.
P.S:
Se me olvidaba Señá Colère
Quien habló de sustracciones fue esa misma Natalia , dando la indicación del blog de Bloodymary dónde , por lo visto Lobo había hecho comentarios diciendo lo agradabe que era y que para nada de hortera. No fuimos ninguna de nosotras.
No te enfrentes ahora conmigo que no sé ni de qué vas. La INSULSA es la que lía todo y a tó Cristo
21 octubre 2011 | 17:21
Ale, sacaros los ojos unas a otras, patéticas !!!!!!!!
21 octubre 2011 | 17:55
Según mi entorno? je,je….Señora Marisa por favor, si hubiera hablado con alguien de mi entorno…le hubieran dicho que además de en catálogos de Alcampo, me pueden ‘ver’ en los de Primark, Pull&Bear, Fórmul@ Joven, Yokana Trendtation…y un largo etcétera 🙂
Tiene trabajo de investigación para el finde Sra. Marisa je,je…me encontrará? Todo es posible con Vds. Le doy una pista a Vd. y una alegría a Lobo: soy rubia natural 😀
No he desfilado en Cibeles y estos pies no pisarán nunca la pasarela de Milán, pero gracias a estos trabajos de los que me siento orgullosa, me pago mi piso, me pagué mis estudios y me pago el wifi de telefónica en mi casita Señora pesada de pelotas Marisa.
Supongo que ahora también critcará esas firmas para las que trabajo…Vd. que debe ser muy entendida en moda…visto lo visto y su vestidito de boda….no coment XD
Le preocupa mucho más a todas Vds. lo que pasa entre Lobo y Bloodymary que a mí….se lo digan a Susana Susy, élla misma lo reconoció aquí. Algo pasa con Mary? 😉
21 octubre 2011 | 17:59
Natalia:
Haces que me parta de la risa.
Tienes «tanto» en prespectiva, que te importa «tanto» , lo que yo ponga, mis opiniones, que ya es que resultas lo que te dijeron con agumentos anteriormente, PATETICA.
Ahora ya hasta pones dónde se te puede localizar, jajajj, y lo de rubia natural para información de otros. Y, es que no me puedo contener más de las risotadas, así que lo de Alcampo que lo dije al buen gun tu es cierto ¿No me lo puedo creer! Ja Ja JA JA JA JA JA JA
«Señora pesada de pelotas»
Cambia el disco, rica, y lee algún libro de vez en cuando, por lo menos para variar el vocabulario , que eres un rayado completo en tus expresiones. Que no te das cuenta, pero todo el mundo lo nota, infeliz
Y , como alguien dijo en alguna ocasión en este blog, existen «talleres de compresnsión lectoras», lo necesitas, créeme, que yo no he criticado nunca ninguna firma de moda. Y si has visto mi vestido de novia puesto después de 18 años y no te gusta…. quiere decir que tienes un gusto deplorable y además cotilla al meterte en mi facebook
Te vueLvo a decir, que no tenemos nadie interés en ti, pero ya me doy cuenta que aprovechas lo que sea, jajajjjj, para que alguien te vea o te busque, por mi parte desde luego eres un menos cero que decía otro.
Ahhhh, y eso de que se paga su piso y demás es un buen reclamo para contactos que supongo ya tienes experiencia en ello
21 octubre 2011 | 18:23
Me encantaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!
22 octubre 2011 | 23:44
Perdona, mi pregunta es técnica, a ver si me la puedes resolver, por favor. Alguien que no tenga tu teléfono, puede enviarte mensajes por bluetooth? Cómo se hace? Gracias!
23 octubre 2011 | 19:26