FOTO: Un homme et une femme
Él parecía extrañamente enamorado de aquella mujer de unos cincuenta, veinte o veinticinco años mayor, o al menos la miraba con ojos distintos. La mujer, seguramente, había encontrado en el chico una suerte de divertimento revitalizante: se sentía más liviana, fugaz y más joven a su lado. Él, sin embargo, se veía fascinado pero no por la mujer en sí, sino por la joven que antes fue. Quiero decir que parecía enamorado a destiempo de la imagen que la mujer sugería de cuando ella tenía la edad de él. La miraba como forzándose a imaginarla sin arrugas, sin sus rasgos endurecidos por los años o sin toda esa experiencia acumulada. Incluso en sus palabras, en su forma de tratarla, se intuía una intención de compensar la edad de ella con la suya en un desesperado intento por quitarle años de encima. Hablaron de ir a un bar de copas. Ninguno de los dos creía, o no les importaba que yo, como taxista, estuviera escuchando.
La charla cambió de tono cuando ella confesó que prefería tomar las copas en su casa. Tenía ganas de hacer el amor sin más preámbulos, pero él parecía resistirse y yo creí entender por qué. Imaginé a mi pareja de repente envejecida treinta años y yo con mi edad de ahora, acariciando el desfase temporal de su cuerpo junto al mío, negando sus arrugas con mis dedos, con mis ojos, o cerrando los ojos forzado a imaginar su rostro cuando ella representaba mi misma edad. O pensar que nuestras vidas ya no van sincronizadas: hubo un salto en el tiempo inevitable, una experiencia dispar prolongada en ella: ¿cuántas cosas vivió que a mí aún me faltan? ¿cuándo alcanzaré su madurez o sus costuras? ¿cómo compensar sus labios gastados por el uso con mis ganas de besar su presente?
Yo me hice el sordo cuando ella le propuso cambiar el destino a su casa, y al final les dejé en la zona de copas que él había dicho. Pagó el chico, aliviado, y ella me lanzó una mirada que no entendí. Tal vez la entienda dentro de treinta años.
O tal vez no llegue.
09 diciembre 2013 | 23:31
Mas te vale…
09 diciembre 2013 | 23:47
Estar con alguien con tanta diferencia de edad, tiene muchas desventajas.
10 diciembre 2013 | 00:23
La mirada es la de «acabas de romper mi relación» Porque cuando se vea en un local de copas dónde él parezca su hijo, o ella su madre (según la edad del público) ambos tendrán que enfrentar la realidad.
10 diciembre 2013 | 01:28
No se supone que el amor es ciego, que nubla la vista y se mira al otro con el corazón?
http://www.lunaenpapel.blogspot.com
10 diciembre 2013 | 01:46
El amor no tiene edad 😉 http://xurl.es/9ik46
10 diciembre 2013 | 06:15
Mantener una relación con mas de diez años de diferencia es una aberración, hay historias de amor muy bonitas muy románticas muy sectarias que merecen ser contadas a diario 100 veces, con multitud de palmeros alrededor,pero cuando el chico tenga 40 años y la «chica madura» 70, vamos a ver lo q tienen entre si, pero es verdad, el amor es muy bonito.
La mirada significaba un… «Vamos a hacerle creer q lleva la voz cantante»
10 diciembre 2013 | 07:06
El amor es muy bonito
y no importa conque edad,
el desfase al principio
se intenta de disimular
con mil y un artilugios.
Pero en pasando algún tiempo
el desfase se acrecienta,
parece que se duplica,
exponencialmente al año
y que la diferencia aumenta.
aumenta y aumenta.
Había aquí en Gomaranto
una mujer de sesenta
que comenzó relaciones
con un joven veinteañero
y el desfase era de cuarenta.
Al principio el igualarlo
casi no era un problema
él, se dejó crecer la barba
y se ponía vestimentas
que en algo le avejentaran.
Ella cambió el colorido
de sus blusas y vestidos
recortó mucho las faldas
y años le quitó de encima
a su cara al policromarla.
Pero en pasado los fulgores
de su tardía primavera
dejó de vestirse joven,
de remover sus polveras
y el desfase en la edad
de nuevo se hizo patente,
la cosa no terminó bien
y cada uno por su lado
como era de esperar
más ella con sorna decía:
Que me quiten lo bailado
y lo que yo he disfrutado.
También hubo el tío Ramón,
un simpático vejete
que a sus setenta seis años
por eso de echar polvetes
pretendía a Rosalía
joven de unos dieciocho
hermosa lozana y bravía.
Y los dos se hicieron novios
noviazgo de casi un año
el tiempo de preparar
para la boda, lo necesario.
En el hogar de mayor
muchos decían a Ramón:
No es conveniente ni sano
el casarse con un bombón
cuando se está jubilado
y se tiene el pelo blanco,
no podrás estar a su altura
y al fallarle en la cama,
lo más seguro será
que más de media ciudad
le vaya bajando el tanga.
y Ramón con picardía
a todos ellos respondía
Más vale tener un bombón
de sabroso chocolate
aunque sea muy repartido,
que tenerse que conformar
con verlo en el escaparate
y no poderlo catar.
10 diciembre 2013 | 08:36
Eran 16 años de diferencia, pero él la buscó a ella. Al principio, como en todas las historias, todo era bonito y casi perfecto. El hecho de que ella estuviese casada, con varios hijos, no añadía sino morbo a la relación. Sólo tuvo que pasar el tiempo para comprobar que iban a destiempo. Y ese destiempo se terminó convirtiendo en desencuentro. Y un día ya no le llamo, otro día ya no contesto a sus llamadas y tres años más tarde ya ni se hablan. Una historia que fue bonita mientras duró, pero duró tan poco o quizás demasiado?
10 diciembre 2013 | 08:41
El tenía miedo al éxito, a verse toda su vida (o lo que le quede a ella de vida) con una mujer mayor, y eso da mucho mucho vértigo, ¿no creéis?
10 diciembre 2013 | 08:49
Pobre, ella ya veía la noche resuelta y ahora se lo tendría que trabajar más.
http://areaestudiantis.com
10 diciembre 2013 | 09:01
El tiempo y los años se suceden de manera inevitable. Pero con ellos, no tiene por que perderse las constumbres ni las ganas de vivir la vida.
Nuestra vida es continuo presente.
http://relatossincontrato.blogspot.com.es/
https://www.facebook.com/relatossincontrato
10 diciembre 2013 | 09:21
Ya te vale Simpulso !!!
Hoy día una mujer de 50 ES JOVEN…a pesar de las arrugas esa mujer podía serguir siendo joven por dentro…lo importante es la aptitud…
Le cortaste el rollo a la mujer…lo raro, siendo un post tuyo, es k ella no decidiera dejar al joven donde los bares de copas y llevarte a ti a la cama…Lo mismo ya te vió viejuno…XDDDD…Desde k vives en pareja te has vuelto menos «putero» – textualmente hablando, quiero decir – 🙂 🙂 🙂 🙂 🙂
10 diciembre 2013 | 10:55
Hola. Esto parece extraído de la revista Pronto. En bastantes ocasiones las mujeres maduras rechazamos de entrada posibles relaciones serias con hombres bastante más jóvenes, sopesamos posibilidades frente a hombres más maduros, igual o más interesantes, por diversos motivos. Podemos elegir y eso hacemos, elegir.
Da un poco de corte tener que sentar estas bases reales y no tan alejadas del tópico, como para ignorarlas.
El taxista pluriempleado debería haber empleado varios minutos más en puntualizar que no se trata de una fuga machista de su subconsciente y que en el caso de invertir sexos sucedería exactamente lo mismo ¿verdad chicas, mujeres?
10 diciembre 2013 | 12:57
No quiero alarmarte, de verdad te lo digo, a lo mejor ni te has dado cuenta, pero te está siguiendo una de esRadio…¡No, no, no mires, disimula! Es jovencita, eso sí te lo confirmo, lo que, dentro de lo malo…al menos no te darán grima sus inexistentes arrugas. Cavernaria, pero tersa.
Arrugas y canas, poquicas, empecé a tener con 25 años, ni me deprimieron entonces ni me deprimen las muchas más de ahora. Las arrugas en el alma sí que son jodidas, y no tienen que ver con la edad.
10 diciembre 2013 | 13:32
Interesante historia, gracias por la publicación.
10 diciembre 2013 | 13:47
Que lo disfrutéis. Estos ejemplares descritos tampoco tienen una edad determinada. Los «liberales de izquierda» como, aquí, el amigo, os tenemos pillada la medida. A los liberales de derecha les moláis más que los mismísimos liberales de izquierda, porque confian una mijilla en el Estao, esos mismos que no son de izquierda para los ultraizquierdistas, porque confían una mijilla en el libre mercao. Es más, muchos/as se pegan a vuestros culos para parecer modernetes/etas. Total, que la Tercera España está jodida sin preámbulos ni nada.
http://opinion.infobae.com/yamil-santoro/2013/12/09/test-del-progre-berreta/
10 diciembre 2013 | 15:14
Vaya manía con la edad .. ni que tuviéramos todos (ellas y ellos) fecha de caducidad¡¡ Desde luego que no somos yogures …. aunque algunos podamos tener una fecha de consumo recomendado.
Y no te equivoques Dani, al final terminaron en la casa de la señora …
10 diciembre 2013 | 15:57
Buf, pues nos quedan 15 para vernos en esa patética situación. En fin… a la vuelta de la esquina.
10 diciembre 2013 | 16:49
Las mujeres maduras, NO PODEIS elegir y si podéis es porque vuestra cuenta corriente tiene muchos ceros, sin pelas ni os miran.
Una de 50 con un tío de 30? Sólo si está forrada.
Un tío de 50 con una de 30? El pan nuestro de cada día, no le hace falta pasta, le vale con estar bueno.
10 diciembre 2013 | 17:27
Apasionante comentario del pais de la pandereta, las neuronas siguen de vacaciones, no?
10 diciembre 2013 | 17:41
Me habéis pillado: me hago la moderna todo el tiempo para pareceros mucho más joven pero, veo que eso no cuela. Qué torpeza la mía.
10 diciembre 2013 | 19:07
Entiendo y comparto los gustos e inquietudes de tu usuario, Simp. Siempre me parecieron más atractivas, interesantes y seductoras las madres de mis amigas, que éstas.
10 diciembre 2013 | 20:48
Siendo mujer, cuando se te acerca un hombre mucho más joven, es cierto que esas miradas existen. Y ese miedo en el hombre joven es real… y para la mujer, puede ser incluso una bofetada más del destino, un puñetazo en la boca del corazón.
Cuando él me habló de mi edad, yo le dije que efectivamente era un problema…. pero no mi edad…. la suya.
Y como en tu relato…. acabé tomando copas en un pub, me pinte una sonrisa….
10 diciembre 2013 | 21:45
Bien mirado soy la menos indicada para mostrar descontento, decepción o tristeza por mi físico y mi rostro y/o mi atractivo. El mundo está lleno de mujeres que se preocuparían mucho más por ese asunto, de lo que yo he tenido que preocuparme jamás.
También es mala suerte para quien pretenda «chafar» mi optimismo en ese sentido porque desde luego en mi caso resulta bastante absurdo.
10 diciembre 2013 | 22:47
… por nada. Cada edad tiene lo suyo. Y puede que haya algunos de 30 que no se fijen en mi cuando tenga 50, pero también estoy segura de que esos mismos serán los que no me interesarán. Como ahora no me interesa ninguno de 20. Mucho mejor los de mi edad, donde va a parar, y si alguno de 20 me parece atractivo será porque tenga algo especial, independientemente de la edad. No sé si me explico…
10 diciembre 2013 | 22:47
Por cierto que Helena Rubinstein fabrica un «tapa ojeras» maravilloso y supongo que también hará la versión de hombre joven «Magic Concealer» se llama. Lo he usado durante años, por su especial textura, claro que a mi me dura muchos meses, me pongo muy poquito. Te lo recomiendo y, para qué me voy a andar con tonterías pudiéndote decir en la cara que con esa jeta y esos «abismos» debajo de los ojos, no pareces muy fresco y joven.
https://twitter.com/GD_RNE/status/393554327614144512
10 diciembre 2013 | 23:21