Eran novios recientes. Se miraban con ojos de novedad, y aún se hablaban para conocerse:
– Si todo sale bien, ese puesto será mío. Me lo he currado mucho, ¿sabes?
– Eres emprendedora, ¿eh? Mmmm. ¡Me gusta! – dijo él tomándola de la mano.
Ella desempeñaba el papel de la clásica mujer hecha a sí misma: independiente (vivía sola), ambiciosa, con personalidad; por otra parte sus miradas y sus gestos demostraban mantener el control de la situación: Le tenía rendido a sus pies.
Él, sin embargo, tendía más a la adulación. Trataba por todos los medios de ser el hombre perfecto: Cariñoso, sensible, romántico, detallista. Sin duda, había puesto muchas esperanzas en aquella cita.
Unas cuantas frases, caricias, besos, y semáforos después, y como para probarle, ella sacó de súbito el tema del machismo:
– Mi padre, siempre que llegaba a trabajar, se ponía a ver la tele. En casa nunca hizo nada. Mi madre, sin embargo, cuando llegaba a casa después del trabajo se ponía a limpiar, hacía la cena… ¿entiendes lo que quiero decir?
– Me estás hablando de otra generación. Las cosas han cambiado mucho…
– ¿Y mi hermano?, otro que tal… con 30 años no sabría ni hacerse un huevo frito. Te lo digo yo: los hombres tenéis mucha cara…
– Yo cocino muy… bien – se defendió él.
– También lo veo en mi curro, Carlos. Todos mis jefes son hombres: Y es que sigue habiendo mucho machismo…
Su postura había quedado bien clara. Sin embargo, al llegar (con el taxímetro marcando 12,35€) fue precisamente él quien me tendió un billete de 20€. Y ella, lejos de declinar su invitación, soltó:
– ¡No me has dejado pagar nada esta noche! Estás hecho todo un caballero…
(…)
Aquel detalle final me dio que pensar: ¿Realmente queremos ser iguales?
No debemos ser iguales. Es precisamente en lo distinto donde tenemos la posibilidad de encontrarnos.Deberíamos ser distintos sabiendo que somos capaces de ser iguales.Un beso, igual y distinto.
17 febrero 2009 | 12:32
y q hay de las amigas a las q preguntas y te responden » que ellas no pedirian matrimonio a un chico, q eso es cosa de hombres» mientras que «luchan» por una supuesta igualdad???q facil es qerer ser iguales en ventajas y no en inconvenientes¡¡
17 febrero 2009 | 21:10
igual a quien? a que? yo soy mi familia, mis amigos, mis compañeros de vida.Yo soy una persona y así me he sentido siempre y lo que me molesta es la necesidad de demostrar. Yo quiero igualdad de oportunidades, que se me valore como persona y no como mujer.¿Que es ser mujer? y ¿ser hombre? como se supone que debemos comportarnos. Unas como sentimentales y dependientes y ellos como dominantes e insensibles.Mi compañero puede ser tan sensible o más que yo y yo puedo ser más parecida a mi hermano que a mi compañera de trabajo. El organo genital es sólo eso un organo y no podemos dejar que sea eso lo que hable de nosotros. Por cierto, creo que no han encontrado todavía el gen del color rosa ni el de azul y ahi seguimos, que viva el verde¡¡¡
17 febrero 2009 | 21:50