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Casi enteros: un blog sobre los medios de comunicación, la publicidad, su papel en la financiación de los medios, la investigación y otros temas relacionados con todo esto

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Vigía: Generación colaborativa de conocimiento

Hace unas semanas la IAB me invitó a e.show, unas jornadas que se celebraron en IFEMA, para que contara mis estudios Vigía y Zenthinela.

Ya he hablado aquí en otras ocasiones de esos estudios así que si, a pesar de lo poco que publico últimamente, aún queda algún lector del blog,  puede pensar que se trata de un tema repetido.

Pero hoy quiero contar la esencia de mi breve charla del otro día: estos estudios, que surgieron en su momento de una necesidad, son buenos ejemplos de cómo colaborando se puede construir conocimiento. Yo suelo decir que si ponemos en común las incertidumbres de un grupo de personas, el resultado no es la suma de todas las incertidumbres sino una incertidumbre menor que la de cualquiera de sus componentes.

Por muy complejo que sea un panorama, si ponemos en común lo poco que sabe cada uno de nosotros, al final del proceso todos sabremos algo más.

Vigía nació a comienzos de 2001; muy pronto cumplirá trece años. Y nació con ese enfoque.

A lo largo del año hay varios momentos en los que todos necesitamos saber cómo va el mercado, cómo les están yendo las cosas a los demás, al conjunto de nuestros competidores, que en esto son colegas. El mejor ejemplo es la época en que se elaboran los presupuestos, pero todos conocemos algunos más.

Cuando uno ya lleva un tiempo en un determinado negocio normalmente sabe algo acerca de ese negocio y también, lo que aún es más importante, el teléfono (o la dirección de e.mail, ahora) de quienes saben más.

A comienzos de 2001 se avecinaba algo, que entonces llamamos crisis (la de las punto com) y que visto desde ahora casi suena a chiste. Entonces se me ocurrió poner en una cadena de mails a algunas de las personas, que trabajaban en medios, con las que solía intercambiar impresiones sobre la marcha del mercado. Les envié un sencillo cuestionario. Con las respuestas de aquellos amigos (pocos más de diez) elaboré el primer Vigía. Yo había utilizado Vigía como seudónimo en algunos artículos anteriores.

Desde entonces el número de amigos Vigías ha crecido hasta cerca de 200, aunque en pocas ocasiones he conseguido reunir más de 100 respuestas.

En 2009, ya inmersos en la crisis de verdad de la que aún no hemos salido, añadí un nuevo panel, Zenthinela, éste de personas que trabajaran en empresas anunciantes, que hicieran algún tipo de publicidad. Mis amigos Zenthinelas son ahora cerca de 100, aunque el número de respuestas que suelo conseguir se queda en el entorno de las 40.

Como no se puede preguntar sobre cifras de las empresas (o uno se arriesga a quedarse sin respuestas) en el cuestionario se pregunta sobre opiniones acerca de la tendencia del mercado.

La evolución que han ido registrando las previsiones refleja muy bien la marcha del mercado publicitario.

Con el tiempo estos páneles se han convertido en una referencia en el mercado. Cuando los panelistas dicen que las cosas empiezan a mejorar, los medios del sector se hacen eco en sus editoriales, como en este ejemplo reciente de Marketing News.

Incluso, como recogí en el blog hace unas semanas, parece que algunos asesores de inversión tienen en cuenta las previsiones a la hora de valorar a las empresas de medios.

Yo me siento orgulloso de contribuir al mejor conocimiento de este mercado; de haber tenido la idea que ayuda a muchos a construir una información mejor que la que maneja cada uno de nosotros.

Los popes de la prensa y su futuro

La semana pasada asistí a la charla de Juan Luis Cebrián en el Hotel Ritz, uno de esos interesantes desayunos que organiza el Foro de la Nueva Comunicación que dirige José Luis Rodríguez y patrocina Vodafone.

Justo esa misma semana pude leer en Jotdown, una publicación que cada vez me gusta más, una entrevista en profundidad a Gumersindo Lafuente.

A los pocos días ví también en El Mundo un artículo de Pedro J Ramírez sobre el futuro de la prensa y los nuevos dispositivos. Pedro J dio también una charla en el CEU en la que tocaba temas muy similares.

No hay duda de que el futuro de la prensa es preocupante.

Lo de menos es si el papel sobrevivirá o no. Nadie llora ya por el final de las tabletas de barro con escritura cuneiforme (por cierto, la tableta vuelve, aunque sea en otra forma) y muy pocos por la desaparición del pergamino y los copistas medievales.

Es el propio concepto de la prensa lo que está en peligro. Cada vez más personas declaran no leer diarios (y no se refieren a diarios en papel, sino a cualquier tipo de transmisores de información) por su enfoque exclusivo en las malas noticias o por su sesgo partidista. Ahora es muy difícil saber qué está pasando si no se confrontan varias fuentes (y casi siempre es complicado encontrar la verdad entre opiniones tan dispares).

El otro problema es el sesgo  de la prensa digital hacia lo frívolo : pocas veces un análisis profundo figura entre los artículos más leídos; en cambio es muy fácil situar en esa lista un  artículo si se utiliza una adecuada combinación de sexo y famosos en el titular. El artículo Sexyperiodismo, de David Jiménez, también en Jotdown, es muy esclarecedor.

Mientras tanto, la inversión publicitaria en Diarios sigue descendiendo a marchas forzadas y terminará este año en cifras similares a las de 1993 si se cumplen las previsiones de mi estudio Vigía. ¡Retrocede casi 20 años! Si uno escucha a Juan Luis Cebrián, esto no debe preocupar demasiado, porque la publicidad ya sólo representa un 20% de los ingresos de su grupo (en mi opinión, unas cuentas saneadas se sitúan en el entorno del 50/50, mejor si la publicidad tiene algo más de peso). Supongo que sería menos preocupante si durante ese tiempo hubiera aumentado la venta de ejemplares, pero justo se produce la situación contraria.

A lo largo de esta misma semana se han seguido publicando noticias sobre EREs y despidos que afectan prácticamente a todos los grupos editoriales. Han sido muy comentadas las declaraciones de Cebrián en el sentido de que los mayores de 50 años no tienen sitio en los medios de su grupo porque no han sido capaces de reciclarse y adaptarse a las nuevas tecnologías. Curioso en alguien que supera por mucho esa edad y que presume de haber previsto hace ya quince años en su libro La red hacia dónde iban a ir los cambios en los medios de comunicación.

Sindo Lafuente habla de la actual contradicción: disponemos de las mejores heramientas para contar la realidad, pero esas mismas herramientas han puesto a los medios contra las cuerdas. Y no hay soluciones mágicas: el iPad (sea Orbyt o Kioskoymás) no lo es. Los dinosaurios que dirigen ahora los grupos editoriales no pueden renovar el periodismo.

Las estructuras de los nuevos medios tienen que ser más ligeras, ardillas en palabras de Sindo. Él es contrario a introducir, al menos de momento, el pago en los diarios on line y cree que el futuro está en hacer un periodismo de comunidades de audiencia y establecer diálogo con ellas. También defiende la marca personal del periodista, como un valor que suma a la marca del diario en el que publica.

Pedro J reconoce en su artículo su perplejidad por el hecho de que sus muchos millones de usuarios únicos de elmundo.es no le compensen en ingresos publicitarios las pérdidas que sufre su edición en papel. La crisis de la publicidad se superpone a la crisis del papel y ambas se realimentan. Pierden miles de lectores de pago en papel y los millones de lectores on line son gratuitos y, en su opinión, de paso. Al contrario que Lafuente, Ramírez confía en que los dispositivos de tipo tableta y las aplicaciones de pago como Orbyt serán la solución para el sector. Por el momento ya han conseguido 65.000 suscriptores de pago para su diario y ahora se dispone a afrontar nuevos retos.

Veremos quién de todos ellos tiene razón. Lo que está claro es que los diarios, y con ellos el periodismo, están atravesando una profunda crisis: cada vez se venden menos ejemplares y los ingresos por publicidad se han hundido.

En esas condiciones es muy difícil que se puedan mantener los altísimos costes estructurales y de distribución de la prensa tradicional. Lo más probable es que la mayor parte de los diarios reduzcan radicalmente sus plantillas, que las ediciones en papel desaparezcan o se dediquen sólo a análisis en profundidad de algunos temas, con tiradas mucho menores. Creo que en un mundo en el que la información es un bien excepcionalmente abundante será muy complicado introducir el pago, que perdió su oportunidad con los errores de los primeros tiempos de internet.

No sé si en esa situación estaremos mejor informados. Tendremos toda la información al alcance de nuestra mano, la buena y la mala, la seria y la frívola, la verdadera y la falsa, la sesgada hacia un lado y la sesgada hacia el otro, pero no sé si todos seremos capaces de encontrar lo que nos interesa y en la versión que más se ajuste a la realidad.

Ese debería ser el momento para los diarios rigurosos y de prestigio. Pero ¿quedará alguno?

Tres días de pensamiento intenso

Ayer me quedé en la parte más lúdica de Talent_ya; pero ya comentaba que en las tarjetas de identificación nos definían como pensadores. Hoy voy a intentar transmitir una idea del pensamiento que se fue creando a lo largo de esos tres días.

Las sesiones de las mañanas comenzaban con una frase seleccionada por Juanjo Fraile, el alma de la organización, (el primer día, para hablar de creatividad, comparaba nuestra mente con un huerto) continuaban con una presentación/ponencia y terminaban con un debate entre todos los participantes. Como siempre ocurre, algunos participan mucho más que otros. En esta ocasión yo fui de los que participaron poco; había muchas personalidades poderosasy en el fondo sigo siendo un tímido.

En realidad la primera ponencia, trufada con música, la pronunció Carlos Jean la noche de nuestra llegada. Su búsqueda de un nuevo rumbo para la música por el camino de la creación colaborativa empezó a marcar un camino.

La mañana del miércoles tuvo un protagonista claro: José Luis Izquierdo, «Mago More». El humorista, conocido por sus actuaciones en televisión, triunfa también como empresario y, para los que no le conocían en este aspecto, fue la sorpresa como conferenciante fuera de serie. Mantuvo muy alta la atención de todos los presentes a lo largo de casi dos horas de charla, mezclando serias teorías sobre la empresa y el cambio con constantes notas de humor. En palabras de uno de los asistentes es un conferenciante que descodifica la realidad. Las ideas fluyeron:

Si fomentas la creatividad y das libertad a la gente para que muestre su talento, el cambio es enorme. Para que tu equipo esté motivado, debes darle motivos. El problema es el miedo, una fuerza muy poderosa que nos paraliza. Innovar es una cuestión de actitud: Haz todos los dias algo que no te apetezca. Cuando te dicen: estas loco, es que vas por buen camino.

Internet ha cambiado casi todos los negocios, en especial el de la intermediación, que casi ha desaparecido.

Este día conocimos también la experiencia de Taxioviedo, una magnífica persona que ha hecho en su taxi una verdadera revolución tecnológica: wifi en el coche a disposición de los clientes, que disponen de una impresora si la necesitan para imprimir la tarjeta de embarque o pueden pagar con sistema NFC (que también incluye en sus tarjetas). Además fomenta que sus clientes del aeropuerto compartan taxi, como medida de ahorro de energía.

La charla del jueves corrió a cargo de Juan Luis Polo, de Territorio Creativo, con importantes intervenciones de Andy Stalman. Juan Luis es partidario de dar la máxima visibilidad al equipo, como una forma de motivación; esto provocó una polémica con uno de los asistentes, que considera que propiciar la visibilidad del equipo equivale a ponérselo en bandeja a la competencia. La mayoría de los asistentes, y yo con ellos, estaba más de acuerdo con el punto de vista del conferenciante.

Se habló mucho de educación: es triste ver cómo tus hijos salen de una casa del siglo XXI para ir a un colegio del siglo XIX. También de la diferencia entre dichos y hechos: España es el país en el que más se habla de innovación, pero en el que menos se implanta. Para que las ideas prosperen hay que dotarlas de los recursos necesarios; las personas son lo más importante.

Innovar es poner en marcha la creatividad y emprender convertir en rutina la innovación.

La universidad española está de espaldas a la sociedad: el alumno más aventajado está condenado a ser becario.

En algún momento se habló de inteligencia colaborativa; yo siempre pienso que mis Vigía y Zenthinela son un buen ejemplo de eso, pero no fui capaz de introducir la idea en la conversación.

El último día, Paloma Fuentes, nos contó su trayectoria como joven emprendedora. Paloma fue cofundadora de TedCas, una empresa de tecnología médica basada en los videojuegos de Microsoft, uno de los proyectos de Wayra Madrid 2011, que apoyó Telefónica. Volvió a hacer hincapié en las deficiencias de nuestro sistema educativo, que castiga la originalidad.

Al debate final, muy rico en ideas, le faltó desde mi punto de vista, una vocación de concreción. Los organizadores prefieren que cada uno reguemos y cultivemos a partir de ahora todas las ideas que se manejaron.

El día que se cerraba Talent_ya el Gobierno, en contra de su promesa de apoyo a los emprendedores, les subía los impuestos, lo que está provocando una interesante reacción.

Una de las características de Talent_ya es que, salvo muy contadas excepciones nadie repite en ediciones sucesivas, así que tendré que sacarle a mi presencia de este año todo el partido posible.

¿Cómo ha cambiado internet nuestras vidas?

Hoy, 17 de mayo, es el día de Internet.

Hace 20 años, muy poca gente había oído hablar de Internet. Hoy creo que muchos no nos podríamos hacer a la idea de cómo sería ahora nuestra vida sin internet. Había pensado recoger en este post todos aquellos aspectos de mi vida que han cambiado desde que ¡hace ya 17 años! tuve mi primer contacto con aquella internet incipiente y desesperantemente lenta (que, pese a todo, nos parecía un milagro). Pero no caben en un post de tamaño legible, así que me tengo que conformar con algunos. Y eso que, evidentemente, no soy un nativo digital; ni siquiera un usuario avanzado de internet.

Ya casi no recibo cartas, a lo sumo facturas; a cambio una buena parte de mis horas de trabajo las dedico a leer y escribir e.mails.

Tengo mi propio blog (éste) y me he convertido en un minimedio de comunicación que hasta tiene unos cuantos miles de seguidores habituales, muchos de ellos amigos o colegas de profesión. Además puedo ver su reacción si son de los que comentan.

Cuando publico algo se lo puedo contar inmediatamente a mis cientos de contactos en las redes sociales.

Cuando quiero buscar el significado de algo, casi nunca utilizo un diccionario de papel: voy a la wikipedia o a un buscador, que además me permiten enlazar con las empresas o los sitios en los que encontraré más información o incluso podré comprar el producto si lo necesito.

He dejado de estudiarme los periódicos en papel, que compro muy pocos días; pero no tengo la sensación de estar peor informado que antes.

En el plano profesional internet se ha convertido en mi principal objeto de estudio (estudio de Redes Sociales,estudio de Blogs, Net Radar, estudio de eficacia publicitaria en internet) y también en el vehículo de una buena parte de las investigaciones que llevamos a cabo: Vigía y Zenthinela existen porque existe el e.mail, pero hay otras investigaciones (los cuatro estudios de Móviles, algunos de los estudios Touch Points, más de un estudio rápido de notoriedad, The Pool sobre Vídeo en internet, o post tests de creatividad y varios más) que se han hecho a través de internet.

El propio mercado publicitario, en el que trabajo, ha cambiado radicalmente: Internet ya es el tercer medio por captación de inversiones y se prepara para ser el segundo muy pronto. Y es, como medio muy tecnológico pero intensivo en mano de obra, el que más trabajo da actualmente.

Por si fuera poco, internet ha cambiado también la relación entre los políticos y sus electores; creo que en España estamos lejos de vivir una campaña electoral comparable a la de Obama, pero hay un acuerdo general en que internet fue un factor clave en la elección de Obama.

Además está contribuyendo a cambiar el mundo: las revueltas de Oriente Medio, que cambiaron el Gobierno en Túnez y Egipto y que están complicando mucho la vida a otros dictadores en Libia, Siria o Yemen, tampoco habrían sido lo mismo sin la influencia de internet.

En algún momento me he preguntado si en un país con cinco millones de parados y con una juventud sin esperanza no acabaría ocurriendo algo similar. Europa es mucho más conformista; los sistemas de protección social pueden frenar muchas reacciones, el tener un partido del siglo generador de grandes polémicas cada semana puede atontar…y si falla eso tenemos una buena dosis de Belén Esteban, pero…

…el movimiento Democracia real ya acaba de ponerse en marcha. La repercusión inicial no ha sido muy grande ¿o sí? pero esto no ha hecho más que comenzar y no creo que internet tenga menos fuerza aquí que en los países árabes.

Veremos

Se acabó la crisis publicitaria

Hoy se han publicado los datos de Infoadex: la inversión en medios convencionales creció un 3,9% en 2010. Después de dos años de caídas tremendas (se perdió casi un tercio del volumen de inversión anterior) se trata de una magnífica noticia.

La semana pasada ya se había publicado en estudio i2p que hablaba de un crecimiento del 1,4%, que no estaba nada mal y se situaba en la línea de mis previsiones, pero el dato de Infoadex, que solemos tomar como la estimación oficial, es toda una llamada al optimismo.

Hace poco más de un mes, con unas previsiones bastante más conservadoras (los panelistas de Vigía y Zenthinela han demostrado que lo son) yo hablaba aquí de que éste podía ser un año para la esperanza. Más de uno me trató de optimista y poco menos que vendido a los intereses del Gobierno. Parece que me quedé muy corto.

Ahora nos espera un trabajo complicado para tratar de explicar las diferencias entre los resultados de los dos estudios, pero en los dos tenemos datos de crecimiento y eso es, sin duda, una buena noticia, que debería de confirmarse este año.

El medio que más ha crecido (lo siento, Goliat) es el más pequeño: el Cine. Nada menos que un 58% en la versión de Infoadex, pero un también respetable 28,8% en la de i2p.

Entre los grandes medios el triunfador es Internet (+20,7% según Infoadex; +19,2% en versión i2p).

El otro gran triunfador del año es la Televisión, que consigue mantener toda la inversión que salió de TVE y aún aumentar un poco. Crece más que el conjunto del mercado (un 4% según Infoadex o un 3,2% en la de i2p).

Sólo otro medio, los Suplementos, crece en las dos versiones: un 4,8% según Infoadex, un 2,5% en la de i2p.

A partir de aquí empieza a haber discrepancias en el signo: la Radio habría crecido un 2,1% según Infoadex, pero retrocedió un 0,5% si nos fiamos de i2p; aún es mayor la diferencia en el caso de Exterior: crecimiento del 4,8% en la versión de Infoadex; caída del 2,8% en la de i2p.

Para los grandes medios impresos vuelve a haber una aproximación entre las dos fuentes, pero ya con valores negativos en ambos casos. Las Revistas cayeron un 1% según el estudio de Infoadex, justo el doble, un 2% en el de i2p. Los Diarios perdieron un 4,2% según Infoadex, pero algo menos, un 3,2% según i2p.

Las metodologías de los dos estudios no son exactamente iguales, aunque sí muy parecidas en buena parte de los casos. Tendremos que buscar el origen de las diferencias.

Pero yo prefiero quedarme con lo esencial del mensaje: en el año 2010 creció la inversión publicitaria: la crisis ha terminado.

Los cambios en la radio deportiva

Hace un par de semanas se publicaron los resultados de la tercera ola del EGM (Estudio General de Medios), los primeros después de la migración de locutores deportivos desde la cadena SER a la COPE.

Aunque el EGM tiende a ser muy lento en reaccionar a los cambios (se trata de un estudio basado en el recuerdo y mucha gente cree que sigue oyendo lo mismo en el mismo sitio, aunque en realidad haya cambiado. Aún así es el mejor estudio posible para analizar la audiencia de radio) los resultados no han sido muy diferentes de los esperados: cae la audiencia de los programas deportivos de la cadena SER y aumenta la de los programas deportivos de la COPE. Así lo recogieron muchos medios y lo reconocieron los propios locutores de la SER. Y los tránsfugas se frotaron las manos.

Desde el principio me pareció que este tema podía tener interés, no sólo periodístico sino también publicitario: los cambios en las audiencias deberían interesar a los anunciantes. Así que cuando, en octubre, tuve la oportunidad de poner en marcha un estudio de tendencias para adelantar lo que podía estar pasando, no lo dudé. El instituto IMOP, que tiene mucha experiencia en este terreno, se encargó del trabajo de campo.

Pero cuando publicamos los resultados, casi me cuesta la cabeza. Incluso tuve que llamar a algún amigo periodista para pedirle que no publicara nada de la nota que nosotros mismos habíamos enviado.

De hecho ya no puedo enviar notas de prensa sin que las lean mis jefes. Eso ha supuesto la muerte para la prensa de Vigía y Zenthinela, los dos estudios que manejaba yo personalmente; siguen como un asunto entre los panelistas y yo, pero en los dos últimos meses no ha habido resumen para la prensa. Claro que nadie, dentro de mi casa, se ha dado cuenta (y dudo que lo hagan en mucho tiempo).

Eso sí: aunque hubo que frenar la publicación del estudio en algunos medios, creo que es uno de los estudios que ha tenido más repercusión entre todos los que he hecho en mi vida (y han sido muchos). Creo que no hubo cadena de radio o grupo de medios que no pidiera una ampliación de la nota de prensa frustrada. Por supuesto: quién pedía mi cabeza (o la de quién hubiera cometido aquel atropello: o sea yo) era el más interesado.

Ayer ví que las cosas no se habían quedado ahí: Alejandro Nieto, un colombiano, será el encargado de renovar los formatos de la SER. Será el nuevo Director General.

Al final rodaron cabezas pero, de momento, no ha sido la mía.

La responsabilidad de hacer previsiones

La semana pasada, Maite Sáez, periodista de la revista Anuncios y buena amiga, me hizo una entrevista en profundidad, algo así como un resumen de cierre de carrera (espero que no sea así). Cuando se publique ya lo contaré aquí y, si es posible, pondré un link por si a alguno de los lectores del blog le interesa conocerme algo mejor.

En uno de los momentos de la entrevista me preguntó por un tema que ya he tratado aquí. Cuando alguna de las cosas que uno hace, en este caso estaríamos hablando de Vigía, acaba teniendo mucha repercusión, casi puedes verte superado por la responsabilidad.

Hablar de crisis en plena crisis, ponerle dimensión a las sensaciones de las que todo el mundo habla, puede significar dar más alimento a la bestia, incrementar el pánico y provocar una vuelta más en la espiral.

Más aún si se sabe que la repercusión de las malas noticias es siempre mayor que la de las buenas.

Por supuesto que alguna vez, sobre todo en estos últimos meses, se me ha planteado esa duda. Pero está claro que sería una irresponsabilidad mayor no publicar esos datos cuando se dispone de ellos.

Sí creo que sería malo lanzar un bulo con previsiones muy negativas que luego la realidad no confirme.

Pero estos últimos días he visto algunas cosas que me han tranquilizado.

Arce Media ha sacado su informe I2P sobre inversiones publicitarias correspondiente a los tres primeros trimestres de este año. En general las cifras son algo peores que las que reflejaba Vigía como previsión para todo el año, pero de magnitud muy comparable. LLegar a resultados similares (diferentes pero no demasiado) utilizando metodologías diferentes sobre realidades diferentes pero no demasiado, es una buena noticia; seguro que tranquilizadora para las dos fuentes.

Hace unos cuantos días más la MMA (Mobile Marketing Asociation) publicó un estudio, realizado en colaboración con Accenture, sobre la inversión en publicidad en el mercado de la telefonía móvil. Mi amiga Paloma Martín me invitó a la presentación, que fue un éxito desbordante (en sentido literal: no se cabía en la sala, por más sillas que se fueron añadiendo).

La estimación de la inversión en telefonía móvil (como soporte) es de 28,6 millones de euros. Muy lejos de la previsión del último Vigía, pensé, pero una cifra tranquilizadora si pensamos que hasta ahora para este mercado se estaban manejando cifras que nunca bajaban de los mil millones de euros (y que en algunos casos los superaban hasta con un cero más).

Luego, si consideramos que Vigía sólo habla del dinero dedicado a medios y que la cifra de la MMA incluye, creatividad, producción y alguna cosilla más y que a medios sólo se puede atribuir un 40%, resulta que estamos hablando casi de lo mismo. De nuevo me tranquilicé.

Otro dato más: El Periódico de la Publicidad publica como noticia de portada, con amplio desarrollo en el interior, una entrevista con Christopher Moser, Director General de Myspace.com en España y Portugal.

En un momento de la entrevista, Silvia Garayoa, Subdirectora de El Periódico, comenta Hay previsiones que apuntan a una inversión publicitaria de 3,6 millones de euros en redes sociales en España para final de año. ¿La estima acertada?

A lo que el joven Director General de Myspace responde:

Me parece adecuada. Como estimación para el total del mercado español, más o menos está en línea.

Lo primero que hice el viernes al llegar a la oficina fue comprobar si esa esa la cifra publicada como previsión de Vigía. Me sonaba pero no estaba seguro.

Sí. Esa era la cifra.

De nuevo me tranquilizó.

O sea que sí; es una gran responsabilidad, pero de momento estoy tranquilo.

La explicación de la crisis

Ayer hablaba aquí de los resultados de Zenith Vigía. Parece que nuestro mercado publicitario puede estar entrando en una temporada algo más oscura que la anterior.

Es curioso, pero cuando uno publica un estudio con esos resultados no sabe si está contribuyendo a aumentar el efecto devastador de los rumores sobre la crisis.

Todas las crisis, como casi todo en economía, tienen también una componente sicológica: si todos creemos que habrá crisis, al final habrá crisis. Si se extiende el rumor de que un valor va a subir en Bolsa, el valor sube en Bolsa.

Sobre este tema leí hace algunos años un libro magnífico: Un matemático invierte en Bolsa, de John Allen

Paulos, uno de los mejores divulgadores de matemáticas que conozco. El libro está editado en español por Tusquets, en esa magnífica colección de tapas plateadas llamada Metatemas.

Hace unos días un amigo me envió un vídeo que, en clave de humor, explica la actual crisis económica. Es un poco largo, pero merece la pena verlo. Creo que incluye todas las claves.

Otra cuestión que me llama la atención es el curioso comportamiento de algunos panelistas. Como creo haber explicado, Zenith Vigía no es más, ni menos, que el resumen de las opiniones sobre la marcha del mercado publicitario de algunos, casi todos, de los principales actores del mismo mercado.

Bueno, pues cuando publico los resultados siempre hay alguien que me llama para decirme que las cosas están mucho peor (o mucho mejor según los casos) de lo que esos resultados indican.

La información que me ha enviado cada panelista es secreta, pero yo la conozco.

Se sorprenderían si pudieran comparar esas opiniones a posteriori con la información que el protestante de turno me dio en su momento, normalmente dos semanas antes.

¿Tanto nos traiciona la memoria?¿Tanto cambiamos cuando tenemos que justificar unos resultados?

¿Próspero? 2008

Es lo que tiene. Cuando entre los propósitos de año nuevo uno se encuentra empezando un blog, parece que hay que hablar del año que se fue (seguro que lo haré, pero vamos a dejar pasar unos días) y también, claro, de lo que se espera para el año que acaba de empezar. Sobre todo si uno lleva ya muchos años haciendo previsiones sobre la inversión publicitaria en medios, los siete últimos utilizando un instrumento como Vigía (algún día hablaré de Vigía) que hasta ha conseguido un cierto prestigio dentro de la profesión.

¿Qué nos trae 2008? De momento, confusión.

Todos los años anteriores, por estas fechas y mucho antes, yo podía decir si el año que empezaba iba a ser bueno o malo para el mercado publicitario. Y me podía equivocar en el grado de bondad o de maldad, pero no en el signo: un año bueno podía ser aún más bueno y un año malo aún peor, pero si iba a ser bueno se veía venir.

El año 2007 empezó extraordinariamente bien y terminó con menos alegría, pero el balance es bueno.

Pero desde el mes de agosto, cuando estalló la crisis de las hipotecas “basura” en Estados Unidos y luego la de liquidez de la banca inglesa y aquí se disparó la inflación y…

…se han ido produciendo, una tras otra, demasiadas malas noticias económicas y eso crea inquietud en el mercado publicitario.

La sensación de que las cosas van bien ha ido desapareciendo. La publicidad, como la economía, tiene un componente emocional, psicológico: si todos decimos que la economía va mal, acabará yendo mal; si la opinión general es que la Bolsa se hunde, la Bolsa se hundirá; si domina la idea de que el mercado publicitario se hunde…

La previsión de Vigía para 2008 habla de un crecimiento del 5,4% para la inversión publicitaria, que podría quedarse en una variación sólo nominal si la inflación sigue subiendo. Pero se esperan crecimientos mucho mayores para internet, los canales temáticos de televisión y los diarios gratuitos. Y hasta la televisión convencional podría una vez más crecer por encima del promedio del mercado, en un año con Eurocopa y Juegos Olímpicos.

Así que, como si fuera una pitonisa mirando su bola de cristal, a la pregunta sobre cómo va a ser el año 2008, la respuesta más sincera es “¡y yo que sé!”