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Casi enteros: un blog sobre los medios de comunicación, la publicidad, su papel en la financiación de los medios, la investigación y otros temas relacionados con todo esto

Archivo de la categoría ‘Diarios Gratuitos’

España ¿es tan diferente?

Hace unas semanas Manolo Carbajo, Director de la revista IPMark, una de las más veteranas del mercado publicitario, me pidió un artículo sobre los diarios en España y en Europa. Esto es lo que le envié, que se ha publicado hace unos días.

En España nunca se había leído mucha prensa. A finales de los ochenta y principios de los noventa se hablaba de un índice de desarrollo cultural propuesto por la UNESCO que se basaba en el número de ejemplares de prensa, datos OJD, vendidos por cada mil habitantes. España a duras pena cruzaba la línea del subdesarrollo, establecida en 100 copias.

Si nos fijábamos en el porcentaje de lectores, datos EGM, la situación no era mucho mejor. Durante muchos años estuvimos en el entorno del 30%, una cifra muy baja comparada con la de Japón o las de los países nórdicos, pero también baja si la poníamos en relación con las de los países de nuestro entorno más próximo.

Hasta 1993 no se superó el 35%.

Yo siempre lo explicaba diciendo que a la prensa le quedaba mucho recorrido porque faltaba por llegar la generación de la alfabetización completa, la que iba a tener mayor proporción de universitarios, en resumen la que en algún momento se ha llamado la generación más preparada de la historia de España.

Además en España no teníamos prensa amarilla propiamente dicha; nos faltaban los casi cuatro millones de ejemplares diarios del Bild Zeitung, o sea los casi doce millones de lectores que un solo diario aportaba en Alemania. O los más de tres millones de ejemplares de The Sun (con sus casi ocho millones de lectores); o el millón seiscientosmil del Daily Mirror, que aporta casi cuatro millones de lectores. O el Daily Star, o el Daily Record…Con todos ellos la prensa sensacionalista británica se pone en casi seis millones de ejemplares y más de catorce millones de lectores.

Y en esto llegó internet.

Y la generación que tenía que encargarse de recuperar el prestigio lector (de prensa) para España, empezó a leer las noticias, si es que lo hacía, en internet.

Y en esto llegó la prensa gratuita.

Y demostró que los jóvenes no tenían alergia al papel sino apego al euro que había que pagar para leer el periódico.

El porcentaje de lectores de prensa superó por primera vez el 40 en el año 2004.

Y en esas estamos.

¿De verdad somos tan diferentes?

Cada país tiene su historia, que está condicionada por sus gentes y, en el caso de los medios sobre todo, por las leyes que ha ido tendiendo.

Hay países en los que ha predominado la letra impresa (Alemania y los nórdicos son buenos ejemplos) en parte porque la televisión ha tenido limitaciones legales. Hace muchos años Adrián García, todo un clásico, entonces en Saatchi y ahora en Starcom, lo explicaba en función de la religión: en los países protestantes era necesario saber leer, para conocer bien la Biblia; en los católicos no hay tradición de lectura (ni de la Biblia ni de nada) entre las clases más populares. Puede ser.

Hay países con una fuerte tradición audiovisual. España e Italia serían los más genuinos representantes del grupo en el que la televisión se lleva una parte muy sustancial de la tarta publicitaria; la fuerte comercialización de las televisiones públicas es una parte de la explicación.

El Reino Unido es un caso especial; un país con una audiencia de televisión muy elevada, pero en el que una buena parte de la televisión (los canales de la BBC) no se comercializa. Eso explica en parte el éxito fulgurante de internet, único en Europa y uno de los mayores del mundo, que siempre se pone como ejemplo de evolución del nuevo medio. Pero también explica por qué en el Reino Unido la inversión en prensa ha superado tradicionalmente a la que se dirigía a la televisión (entre el año 2000 y el 2002 más del 40% de la inversión publicitaria total se la llevaban los diarios).

Tengo en mis manos los informes que realiza ZenithOptimedia, basados en la información de fuentes públicas de cada país. En el Western Europe Market & Mediafact correspondiente a 2007, vemos que los países nórdicos siguen destacando por su audiencia de prensa, que oscila entre el 90,4% de Suecia y el 71,3% de Dinamarca. Entre las cinco grandes economías destaca el Reino Unido, con un 56,8%. España (40,1%) ya ha superado a Italia (37,7%). La comparación es compleja en el caso de Alemania (no se calcula el dato de cobertura del medio) y de Francia, donde sólo se dispone de la cobertura para diarios nacionales (12,3%) en un país en el que los diarios regionales tienen más potencia que los nacionales o los deportivos.

En el Advertising Expenditure Forecasts, otro informe de ZenithOptimedia vemos que la inversión en diarios en Europa Occidental (37.154 millones de dólares, un 29,9% de la inversión total en medios) va a verse superada este año por primera vez por la inversión en televisión (37.474 millones de dólares, un 30,1%). Y es que la inversión en prensa se estanca mientras la televisión mantiene un leve crecimiento.

Los diarios se llevan la parte del león de la inversión publicitaria en los países nórdicos (desde el 52,5% de la tarta en Finlandia hasta el 41,3% en Suecia). Pero siguen manteniendo un peso importante en Alemania (36,7%) y el Reino Unido (31,3%), países en los que la prensa sigue siendo el medio líder por inversión. España, con un 24,1% ocupa un lugar central entre las cinco grandes economías. Italia (18,6%) y Francia (15,1%) dedican a los diarios menos parte de su inversión que nosotros.

Alemania, con más de nueve mil millones de dólares de inversión en diarios es el líder destacado en cifras absolutas; además sigue registrando ligeros crecimientos. Le sigue el Reino Unido, con casi ocho mil millones, pero perdiendo peso poco a poco cada año desde el 2003. España, con una inversión prevista de 2.566 millones de dólares es el tercer país de Europa Occidental por su inversión en diarios, pero baja hasta el decimosegundo escalón si comparamos la cuota de los diarios en la inversión total en medios.

Las diferencias entre los países también se pueden apreciar si nos fijamos en cual es el título líder de audiencia en cada caso. En Alemania y en el Reino Unido reina el sensacionalismo. Los 11.640.000 lectores del Bild Zeitung no tienen parangón en Europa; sólo los líderes del Reino Unido, el Sun con 7.716.000 lectores, superados el domingo por los 8.258.000 del News of the World.

En Italia y en Francia (como ocurría en España hasta hace poco) el líder es un deportivo: La Gaceta dello Sport, con 3.604.000 lectores y L’Equipe, con 2.496.000 respectivamente. En España el líder es un gratuito, 20 Minutos, con 2.436.000 lectores, todo un símbolo de la fuerza que han alcanzado los gratuitos en nuestro país.

Cada país tiene sus peculiaridades. Aquí también España sigue siendo diferente, pero yo creo que ahora un poco menos diferente que antes.

La Torre Espacio era una fiesta

Ayer jueves se celebró en la planta 18ª de la Torre Espacio la fiesta de cumpleaños del EGM y de la AIMC. 40 y 20 años respectivamente.

Todo un acontecimiento para los que nos hemos dedicado a la investigación de medios.

Ayer ví a casi todos los amigos que he hecho a lo largo de los años en esta profesión.

Creo que, siguiendo la broma de los EFI, estreché más manos y dí más besos que hace una semana.

Fue un acto sencillo. Tras una introducción de Carlos Lozano, el actual Presidente Ejecutivo de AIMC, nos dirigió la palabra Agustín Casado, Presidente de la Asociación (y mi jefe, o el jefe de mi jefa, en estos momentos). En un breve discurso resaltó la importancia del EGM y los principales hitos que han ido jalonando su recorrido.

Luego llegó el momento de los saludos, las charlas y los reencuentros.

Allí estaba Merche García, la más veterana de la Asociación (no la mayor, por supuesto). Me hizo mucha ilusión encontrarme, después de muchos años, con Lourdes Zambrano, compañera de clase y antigua Directora Técnica, puesto en el que le sucedieron Begoña Cerezo y Carlos Lamas, a quién veo más.

O con Julián Bravo, el primer Presidente Ejecutivo, al que sigo teniendo mucho cariño y he seguido viendo de vez en cuando.

De la gente de AIMC también estuve con Juan Luís Méndez, que fue mi jefe hace muchos años en RTVE y que sigue siendo un buen amigo; con Fernando Santiago, también viejo compañero de mis tiempos de RTVE, José Andrés Gabardo, Nacho, Víctor o Julio, con los que he compartido muchas horas en los tiempos de Comisión Técnica.

También charlé con muchos antiguos compañeros. De los tiempos de RTVE, José Ramón Rubio, María Jesús Solaún, Matilde Barrio, José María Moix o Pablo Alonso.

De los tiempos de Central Media o Zenith Media, José María Casero (que fue durante ocho años Presidente de la Asociación), José Carlos Gutiérrez, Fernando Rodríguez.

Actuales compañeros de Zenith o de Optimedia estaban Maite Palacio, Jaime Agulló, Silvia Malumbres, Mapi Merchante o David Esquinas.

Antiguos compañeros de Comisión Técnica, aparte de algunos de los que ya he citado, estaban María Lizarraga, Pedro Molina, Ana Orsikowski, Juan Luís Gil, Paz Álvarez, Ana Hernández, Carlos Pelayo, Claudio Martínez, Miguel Ángel Durá, Raul Domingo, Fernando Palacios, José Manuel Sierra o Teresa Osma.

Compañeros de otras agencias de medios, además de algunos de los que ya he citado, saludé a Jesús Muñoz, Rafa Urbano, Raquel Ortega, Carmen Montero, Lorenzo Ruiz, Carmen Novo, Anna Eisselberg, Marta San Pedro, César Galiana, Marta Sáez o Javier Herreros.

También ví a algunos profesionales que están o han pasado por TVE, pero con los que yo he coincidido en otros ámbitos: Yolanda Marugán, Mario López, José Manuel Eleta o Juan Menor.

Profesionales de los medios especializados en publicidad saludé a David Torrejón, Manolo Luque, Esther Valdivia, Daniel Campo, Nacho González, Juanjo Moreno, Luís Palacio, Miguel de Haro, Manolo Carbajo, Pepo, Cristina o Antonio Cano.

De otros medios estuve con José Antonio Martínez Soler y Arsenio Escolar, de 20 Minutos, Pedro Mayenco, Luis Fernando Ruiz, Laura LLamas, Carlos Bravo, Carlos Ramos, Ágata Romo, Fernando Carrión, Raquel Pérez, Raquel Beato, Marta Castán, Maite Rodríguez, Mar Camps, Mar González, Marc Basté, Silke Vollmann, Cristina Gonzalo, Joaquín Frías, Jordi Catalá, Eduardo Medrano y la gente de Local Media.

De institutos de Investigación saludé a LLuis Fatjó, Maite Rodríguez, Patricia Sánchez, Julio Vidosa, Ricardo Cuéllar, Camilo Arias, Jorge Clemente y Miguel Ángel Navas, además del Director de Ipsos, que me presentó Pedro Molina pero cuyo nombre no recuerdo ahora.

De ODEC, el centro de cálculo que ha tabulado siempre el EGM y tantas y tantas encuestas que hemos hecho, echamos de menos a Pepe Pellicer (se los hace coincidir) el alma de todo este tinglado. Pero no faltaron Luís Pistoni, Julián Sánchez, Sergio Guerrero, Ana Gallardo, Mariano Martín, Alfonso González.

Estuve también con Alicia González, una gran amiga, ahora consultora, con Lidia, de la AEA , con Rafa Peña, con Benito Rodríguez y seguramente con alguno más.

A pesar de todo estoy seguro de haberme olvidado de algún nombre de las personas con las que sí estuve… y de haberme quedado sin saludar a otras personas a las que ví de lejos en algún momento y luego se me despistaron.

Al final nos entregaron una bolsa con el libro resumen de estos cuarenta años y dos revistas, Brandlife y El Periódico de la Publicidad, con páginas conmemorativas del evento.

Al final también, un ligero regustillo amargo, entre tantos ratos buenos: ni en el libro, ni en las revistas hay un mínimo recuerdo personal. Mis casi 25 años en Comisión Técnica; mis dos en Junta Directiva; mis dos conferencias en Encuentros de Investigación; mi año 2005 de esfuerzos ímprobos para hacer una propuesta de reforma que no interesó a nadie…no han dejado ninguna huella. Al menos ninguna huella en las publicaciones conmemorativas.

¡Qué poco duran los recuerdos en esta profesión!

Me prometiron fotos del acto para este blog. En cuanto las tenga, las colgaré.

La fuerza de los blogs (y de 20 Minutos)

Hace ya casi dos meses publiqué en este mismo blog un post en el que contaba una historia triste sobre Jose, un amigo de mi hija Usúe que lleva unos cuantos años peleando contra un cáncer.

Ella también había contado otra parte de la historia en su blog Tecme y Puma.

Tuvo cierta repercusión, entre los amigos y también algo más entre absolutos desconocidos. Pero no la que esperábamos. Y sobre todo Jose, que sigue siendo una persona admirable, que respira vida por los cuatro costados, no había conseguido el dinero que necesita para si tratamiento.

Jose no se rinde.

Pero Usúe aún menos. Sí, ya sé que lo dice un padre orgulloso de serlo. Pero qué le voy a hacer, si es la realidad. O al menos yo la veo así ;-)).

Hace unos días mandó un mail a todos sus contactos recordando el caso.

Cuando uno (una) es periodista, los contactos son lo más valioso que se tiene.

Y esta vez ha tenido eco.

20 Minutos, este diario que me acoge en su versión on line, le ha dedicado hoy la foto de portada y un cuarto de la página 7 al caso de Jose.

GRACIAS ARSENIO. Ya sé que alguno me va a decir que qué pelota soy, pero lo siento así.

Esta mañana estaba en una presentación, la del Global Entertainment Media Outlook (GOME) que ha hecho PricewaterhouseCoopers en la Casa de América y han empezado a entrarme llamadas. A mí, que casi nunca utilizo el móvil.

No sé cómo han conseguido el teléfono de mi casa y luego el móvil, pero otros medios han buscado el contacto y hoy Jose ha sido noticia en varios programas de televisión.

Le han entrevistado para Antena 3 y Tele 5. También han llamado de otras cadenas y va a seguir teniendo eco.

Espero que la cosa no se quede sólo en el morbo de los programas de la tarde y que de verdad Jose consiga el dinero que necesita.

En todo caso, este post quería, además de agradecer, dejar constancia de la fuerza que los nuevos medios (los blogs, la prensa gratuita) están adquiriendo en nuestra sociedad.

Congreso Mundial de Prensa Gratuita

Me entero por la prensa de que hoy se ha iniciado en Madrid el Congreso Mundial de Prensa Gratuita.

Me vienen a la cabeza muchos recuerdos.

Aquel primer Congreso Nacional en Valencia hace ya casi cinco años, al que me llevó Manolo Fernández, en el que conocí (o recuperé) a JAMS y a Arsenio Escolar.

Puede que allí empiece la explicación de por qué mi blog está en 20 Minutos.

O aquel otro de Salamanca, en el que, desde la misma mesa en la que yo estaba hablando, otro de los ponentes azuzó al público contra mí. Nunca he vivido con más fuerza la sensación que supone que te echen a la jaula de los leones.

A la vuelta de Salamanca, con una gran nevada, murió mi suegro y empezó el calvario del 2005, cuando murieron también mi hermano, mi primo Miguel Ángel y dos buenos amigos. Un año para olvidar.

O el de Benidorm, en el que compartí mesa con Juan Luín Méndez, Adrián García y Ángel Durández, entonces recién llegado a OJD.

O el del año pasado en Marbella, en el que mi compañero de mesa era nada menos que el admirado Luís Bassat, junto al que creo que no hice mal papel.

Recuerdo también otro foro sobre gratuitos, en la Universidad Europea de Madrid, hará ahora dos años; allí estuve con Jesús Muñoz, el actual Presidente de la AM, y con José Santamaría, de Minority, a quien ahora veo más, en foros relacionados con el EMI.

Y otro, el año pasado, en el que ya no estuve en la mesa, un foro de AEDEMO sobre prensa gratuita. Este sí que es el antecedente directo de este blog.

A la salida coincidí con Arsenio, Rafa Martín y Luis Alberto Rivero, salió el tema de los blogs y el reto de iniciar uno.

Un par de meses después estuve en la sede de 20 Minutos para que Melisa Tuya me enseñara los rudimentos de este blog. A partir de ahí he escrito ya casi ciento cincuenta artículos, o posts. Y he tenido más de 50.000 visitas en este blog (según Net Rating). Gracias, por cierto.

Esta vez no estaré en el Congreso. Siento como si se rompiera una buena costumbre.

Mañana empieza en el Hotel Palace de Madrid un Seminario organizado por IFE (Instituto de Fomento Empresarial) sobre la TDT. Ahí sí que estaré; hablando de medición y rodeado de buenos amigos.

Ya les contaré.

El tamaño de los libros

Hace algo más de un par de semanas empecé a leer Vida y destino de Vasili Grossman. Un libro de 1111

páginas (supongo que no es casualidad el numerito y que la gente de la editorial –Galaxia Gutemberg– calcularon muy bien para que saliera un número tan ¿redondo?).

Fue un error.

LLegaba la jornada continua y pensé que iba a tener más tiempo. Pero este julio ha sido pródigo en concursos y aunque ya no cuenten con uno tanto como hace unos años, eso siempre acaba siendo duro.

Ahora llevo unas quinientas páginas y ya veo que me lo voy a llevar de vacaciones.

Y no es un libro para dejarlo tanto tiempo. Tiene la complejidad de las grandes novelas rusas, con multitud de personajes a los que, además, se nombra de diferentes maneras a lo largo del texto.

Pero es una gran novela. Una epopeya de lo que fue el siglo XX de las grandes dictaduras, el de Hitler y Stalin, el de los campos de concentración de uno u otro signo. Un libro duro también, como el siglo que retrata.

Mi madre tiene 87 años. Y sigue siendo una gran lectora. En verano compartimos muchas lecturas. Y las comentamos.

Pero esta seguro que no será una de ellas.

Ya no puede con los grandes tochos. No por la longitud (lee mucho más, y más rápido, que yo). No, por eso no. Por el peso. Se le cansan los brazos; sobre todo si lee en la cama.

Todavía hay gente que dice que en España no se lee, o que se lee poco. Pero está claro que no es verdad.

En el caso de la prensa, los diarios gratuitos han hecho que el número de lectores de diarios sea ahora mayor que nunca.

Pero es que también muchos libros tienen ahora tiradas millonarias. Tan altas como nunca se habían vivido en España.

Y encima muchos de los libros más vendidos son tomos inmensos.

Toda la saga de Harry Potter la componen libros de gran volumen. Los éxitos de Ruiz Zafón no son precisamente libros delgados. Los pilares de la Tierra o

Un mundo sin fin, los grandes éxitos de Ken Follet

rondan también las mil páginas. Algunos de los mayores éxitos de ventas de Arturo Pérez Reverte tampoco puede decirse que sean breves.

¿Quié dijo que en España se lee poco?

Hoy, escribo esto el 22 de julio aunque lo voy a publicar después, veo en el 20 Minutos de papel una página de recomendaciones literarias: Veinte tochos, ningún tostón. Casi todos responden a la idea de libro de muchas páginas. En algunos casos se han publicado en España en ediciones de varios tomos.

He leído ocho de los llamados tochos. Y algunos figuran entre mis libros favoritos.

Es el caso, por ejemplo, de La cartuja de Parma, un

fantástico libro de aventuras que comienza en la batalla de Waterloo, con un Fabrizio del

Dongo, el protagonista, despistado sin saber el momento histórico que está viviendo..

O el de Moby Dick, otro libro inconmensurable, con la persecución de una ballena blanca como retrato de una obsesión y con el

mundo de la caza de ballenas en el siglo XIX como telón de fondo.

También me encantó en su momento El cuarteto de Alejandría, con el ambiente griego de la Alejandría de comienzos

del siglo XX y sus cuatro visiones diferentes de un mismo suceso.

No recuerdo demasiado de Lord Jim, que leí hace muchos

años, pero sí sé que me gustó.

Viaje al fin de la noche, sin embargo, no me gustó

demasiado. Tampoco enganché en su momento con Paradiso,

que me resultó algo enrevesada.

El hombre sin atributos me gustó al principio, pero se me hizo larga y pesada con el paso de los volúmenes. Además, si no recuerdo mal, es una obra inacabada.

También podría decirse que es inacabada 2666, la obra

póstuma de Roberto Bolaño, la más reciente de todas las citadas. Se publicó como un solo tomo muy extenso, pero podría haberse hecho como cinco tomos relacionados. Es una gran obra, muy interesante.

Me temo que me he enrollado demasiado y ni siquiera les voy a dar mi impresión de las novelas que he leído últimamente. Lo prometo para otro post.

Ahora que llegan las vacaciones tendré tiempo para leer más.

Una clase magistral de Arsenio Escolar sobre el EGM

El martes de la semana pasada salió la segunda ola del EGM.

20 Minutos consolida su liderazgo de audiencia en la prensa.

Y como no quiero empezar otra vez con la polémica que viví hace dos meses sobre lo que es audiencia y lo que es difusión; si los lectores de diarios de pago valen más (¿cuanto más?) o menos que los de diarios gratuitos o tantas y tantas otras preguntas respondidas ya mil veces, remito a los lectores a un magnífico post del director de 20 Minutos.

Yo he estado más de veinte años en la Comisión Técnica de AIMC; he ayudado a definir las normas para que el estudio fuera lo más imparcial posible, he vivido en primera fila todas las polémicas cuando nacieron los diarios gratuitos y muchas otras. Y, de verdad, no creo que se puedan contestar mejor esas preguntas habituales.

¡Enhorabuena, Arsenio!

No es fácil ser tan didáctico.

¿Se muere la prensa de pago?

Si todavía hay alguien que me sigue, este post le sonará repetido.

Ayer tuve una nueva clase en la Complutense.

Les recuerdo, un Máster en la Facultad de Ciencias de la Información.

Personas que en su mayoría ejercen la profesión de periodistas, muchos en empresas de comunicación y relaciones públicas.

Al principio de la clase había , como la víspera, pero esta vez sin partido de España, dos alumnas.

Son gente que trabaja y fueron llegando a lo largo de la clase.

Ya a última hora, repito el mismo experimento que conté aquí, allá por el mes de febrero. En ese momento había unos treinta alumnos.

¿Cuantos habéis comprado hoy un periódoco de pago? Ni una sola mano se mueve.

¿Cuantos habéis leído hoy un periódico de pago? Sigue la huelga de brazos caídos.

¿Cuantos habéis leído un periódico en papel? Aunque no sea de pago. Aquí sí; se levantan casi la mitad de las manos, unas doce.

¿Cuántos habéis leído hoy información? Aquí se incluye internet. Absoluta unanimidad. Toda la clase saluda brazos en alto.

Nueva sorpresa. (Recuerdo que estoy entre periodistas, gente a la que se supone que le gusta escribir). ¿Cuántos mantenéis un blog? Dos manos aisladas se mueven al fondo de la clase.

Alguno comenta: pero yo estoy en Facebook

Ya comenté en un post anterior que, tras la subida de precio, he dejado de comprar entre semana el periódico que seguía desde hace más de treinta años. No me parece lógico subir el precio justo ahora, con la que está cayendo. He perdido un hábito que creo que era sano, pero he ganado mucho tiempo.

Si yo fuera el editor de un diario de pago, estaría muy seriamente preocupado.

Si trabajara en otro medio, también.

Yo que trabajo en una agencia de medios y que he comenzado a recibir hoy cuestionarios de una nueva ola de Zenith Vigía, el panel sobre inversiones publicitarias, del que ya he hablado otras veces por aquí…estoy ATERRORIZADO.

Mono de papel

Ayer me había pedido un día de vacaciones por razones familiares.

A primera hora salí a hacer un poco de ejercicio. Como otras veces me llevé un euro para comprarme a la vuelta ese periódico al que he venido siendo fiel desde hace más de treinta años.

Pero al llegar al quiosco me encontré con una sorpresa: el periódico había subido un 10%; ahora costaba 1,10 euros.

Me volví a casa sin él.

Como luego volví a salir, ya con mi monedero a cuestas, acabé comprándomelo, aunque me daba rabia. Pero como no trabajaba tenía más tiempo para leer.

¿Por qué subir ahora el precio? ¿Quién ha tenido semejante idea? Es una decisión que no comprendo:

como estamos en crisis y ha bajado la inversión publicitaria, vamos a ver si el sufrido lector nos compensa con más dinero.

¿Tiene eso sentido? ¿No están jugando con la audiencia, que es un factor clave? Yo creo que es una decisión poco meditada.

Así que hoy he decidido catigar a mi periódico y no me lo he comprado.

Como tenía una reunión a primera hora (y la primera hora de las reuniones es un poco más tardía que mi primera hora habitual) no he llegado al reparto de los gratutitos.

Así que me he pasado todo el día sin mi ración de lectura en papel.

Y para mí, recuerden que tengo 58 años, un periódico en internet no es lo mismo. (Y lo digo aquí, en un periódico en internet)

Ya sé que la mía también es una decisión irracional (y sobre todo absolutamente ineficaz) pero ¿qué quieren que les diga? No sé si aguantaré mucho (seguramente no)

La audiencia de Diarios alcanza su máximo histórico

¿Quién dijo crisis?

La semana pasada se publicaron los datos de la primera ola del EGM, la primera que utilizaba la nueva metodología. Ya saben: un multimedia algo menor combinado con diversos monomedia que, al final, tras un proceso informático de fusión dan lugar a un único fichero.

Todos sabemos que ninguna metodología es perfecta; aún mucho menos neutral. Así que los que seguimos estas cosas estábamos expectantes para saber cómo evolucionaban los resultados.

Y no era para menos.

Las Revistas, por ejemplo, experimentan una subida de más de dos puntos en el acumulado; casi tres en el caso de las mensuales. Con unos resultados de audiencia tan buenos no se explica que la inversión se esté retirando del medio. ¿O será que estas dos variables no tienen nada que ver? Porque, desde luego, no será que alguien no se termina de creer los datos.

En el caso de los Diarios, el cambio no es tan fuerte. Al fin y al cabo ya tenían antes su propio monomedia. Pero los resultados son espectaculares desde el punto de vista simbólico. Nunca antes la audiencia de Diarios había alcanzado un 41,7%, dos puntos más que en el acumulado anterior. A todo lo largo de 2004 y 2005 se movieron en el entorno del 41% pero nuca llegaron a la cota actual (que se sitúa en un 42,3% si sólo miramos a la ola).

El trabajo de campo se celebró en su mayor parte coincidiendo con una muy reñida campaña electoral. Los diarios de pago están inmersos en una continua e imparable carrera de promociones; el diario de un día cualquiera puede llevar entre cuatro y ocho cupones correspondientes a promociones diferentes. Se trata de una dinámica peligrosa: hay que seguir nadando sin parar, braceando cada vez más fuerte para no hundirse. Pero de momento funciona. Al menos en lo que se refiere a las audiencias. La publicidad es otra cosa. Supongo que en este mismo número se presentarán los resultados de Zenith Vigía, que nos dicen que la inversión publicitaria se empieza a resentir; y en los medios impresos más que en otros. En algunos casos ya se nota hasta en el propio grosor del diario, que parece en plena dieta de la operación bikini. Y se quedaría aún en menos si prescindiéramos de las dobles páginas de autopromociones o de publicidad de la promoción. Pero la audiencia aguanta. También la difusión, batiendo récords en algunos casos.

El número de lectores de Diarios se acerca a los 16 millones, la mayor cifra que hayamos visto en cualquier momento; los de Información General se acercan a los 14,5 millones; los Deportivos a los 4,1 millones; los Económicos se aproximan a los 250.000 lectores. Todas son cifras históricas, nunca superadas.

¿Qué ha ocurrido en el interior del medio?

Ocho de los diez primeros diarios mejoran su dato anterior de audiencia. 20 Minutos se consolida como líder absoluto, por cuarto acumulado consecutivo; esta vez también con una cifra récord: 2.685.000 lectores. Sólo es la punta del iceberg del fenómeno gratuito, cada vez más asentado: los cuatro diarios gratuitos de ámbito nacional se sitúan entre los seis diarios más leídos. Los otros dos son el Marca, segundo con 2.550.000 lectores y El País, tercero con 2,336.000.

A continuación se sitúa Qué (2.106.000 lectores), por primera vez por encima de los dos millones; Metro (1.764.000 lectores) mejora su resultado de los últimos cinco acumulados, está en franco proceso de recuperación, pero no puede ocultarse que ha vivido tiempos mejores; todo lo contrario ocurre con ADN (1.638.000 lectores): el diario de Planeta está en pleno proceso de consolidación y registra un mejor resultado en cada nueva entrega de datos.

El capítulo de damnificados se inicia con El Mundo (1.395.000 lectores) que se queda por debajo de las cifras obtenidas en los tres acumulados del año anterior. Pese a todo mantiene la séptima posición o, como seguro que les gusta más, la segunda entre los diarios de pago de información general. También en cifras históricas se sitúa As (1.243.000 lectores) segundo diario deportivo, con una evolución de audiencias muy saludable. La audiencia de El Periódico (788.000 lectores) se ha mantenido muy estable a lo largo del último año, lo que le permite ganar una nueva batalla en su particular lucha frente a La Vanguardia (715.000 lectores) también muy estable en los últimos meses. Por su parte ABC (667.000 lectores) también se ha estabilizado y parece haber frenado la sangría que sufrió hace un par de años.

Así que, pese al run rún de crisis, los datos del EGM han traído a la prensa un poquito de todo, como siempre, pero con una mayoría apreciable de buenas noticias.

Que sea para bien.

Este artículo se ha publicado en el número 267 de El Periódico de la Publicidad correspondiente a la semana del 9 al 16 de mayo.

Evidentemente, como en muchos otros artículos míos, no falta un puntito de ironía.

Como esperaba en el mismo número se publicaron los datos de Zenith Vigía.

¿Se hunde la inversión publicitaria?

Ayer me quedé hasta muy tarde en la oficina para enviar los resultados de Zenith Vigía.

Ya he hablado aquí en alguna ocasión de ese estudio, que hago personalmente y al que tengo un cariño especial.

A veces eso es lo malo; ese cariño se traduce en dedicarle más tiempo. Unos comentarios largos y razonados para los panelistas, en los que me permito un tono más irónico y desenvuelto. Una nota más breve, y más seria, para la prensa, que es también la que circulo internamente en Zenith con la idea de que llegue a los clientes antes de que lean los resultados en la prensa. Y…quería, en este caso haber escrito aún otra aquí en el blog.

Al final se me hicieron las nueve y media de la noche y estaba en la oficina desde antes de las ocho de la mañana. Justo ahora que se habla tanto de conciliar la vida personal y la laboral.

Así no hay manera.

Y ni siquiera esto me salió bien. Al final mandé a la prensa esos comentarios más largos y más informales. No pasa nada; no hay nada impublicable, pero me gustaría que nadie hiciera un uso inadecuado de esos comentarios.

¡Vaya introducción más larga! Pero a veces apetece contar un poco de la propia vida diaria.

Voy al grano. En la ola anterior de Vigía ya veíamos que en el mercado publicitario empezaban a dominar los sentimientos negativos. Pero aún se esperaba un crecimiento superor al 5%; superior, por tanto, a la inflación prevista. Un crecimiento real, al fin y al cabo.

Ahora, en abril que es cuando he hecho la encuesta, ya sólo se espera un crecimiento del 3,8%. Eso, con una inflación superior al 4%, quiere decir que no hay crecimiento real. Sólo algunos medios aún muy jóvenes, como Internet o los Canales Temáticos de Televisión van a experimentar crecimientos importantes.

La Televisión Generalista y los Diarios Gratuitos mantendrán un crecimiento del orden de la inflación. El Cine y las Revistas pueden registrar caídas incluso en cifras nominales y el resto de los medios tendrán crecimientos nominlaes, pero no reales.

Parece que el panorama empieza a oscurecerse en estos últimos meses.

Lo peor, sin embargo, es que se han apoderado de nuestro mercado sentimientos muy negativos. Los dos índices que manejamos para reflejar este tipo de cosas, el IPSE (Índice de Percepción de la Situación Económica) y el IPMP (Índice de Percepción del Mercado Publicitario) adoptan ahora valores muy negativos. Se sitúan en las cotas más bajas que hayamos visto nunca en los más de siete años de existencia del estudio.

Y en estos siete años ya vivimos otra crisis del mercado publicitario, la de 2001, cuando se pinchó la burbuja de internet.

Ahora, cuando lo que pincha es el mercado inmobiliario y el financiero, todo parece indicar que la crisis, que afectará a la economía real, puede ser más profunda. ¿También más larga? Demos tiempo al tiempo.