Santuarios del deporte: Estadio 20 de Mayo de Kinshasha, el escenario del combate más grande de la historia

Cartel del combate (FLICKR)

Cartel del combate (FLICKR)

Si ha habido un combate de boxeo famoso en la historia es el que hace casi 40 años enfrentó en Kinshasha, entonces Zaire, hoy Congo, a dos de los más grandes púgiles de todos los tiempos: George Foreman y Muhammed Ali. El combate se llamó Rumble in the Jungle (algo así como el ‘retumbo en la selva’) fue una mezcla de acontecimiento deportivo, cultural y político en una época convulsa. Hoy voy a hablaros del combate, pero sobre todo, del lugar donde se celebró: el estadio 20 de Mayo.

Nombre oficial: Stade Tata Raphaël (antes, Stade 20 de Mai y antes, Stade Roi Baudouin).

Ubicación: Kinshasha (antes Leopoldville), República Democrática del Congo.

Capacidad: 50.000 espectadores

Año de inauguración: 1952.

Deportes: Fútbol, boxeo.

Propietario: Federación Congolesa de Fútbol y Gobierno del Congo.

Más cosas: Pues estaríamos ante un estadio africano más de no ser por lo que os comentaba en la introducción. Pero antes de ponernos los guantes de boxeo, hablemos un poco del estadio en sí mismo.

El estadio se construyó en 1952, cuando el país era aún el Congo Belga. En consecuencia, recibió el nombre del rey de la metrópoli, convirtiéndose en el estadio Rey Balduino (antes incluso que el de Bruselas). En 1967, después de la llegada al poder del dictador Mobutu, el estadio fue renombrado como 20 de Mai (20 de mayo), ya que fue esta la fecha en la que se fundó el partido de Mobutu, el Movimiento Popular de la Revolución. No fue hasta 30 años después, en 1997, cuando el estadio recibió su nombre actual: Tata Raphaël, en honor del impulsor del edificio, el misionero belga Raphaël de la Kethulle de Ryhove (‘tata’ significa padre en idioma lingala).

No obstante, desde 1994 ha perdido la importancia que tenía. Antes era el estadio nacional de el Congo y en él jugaban sus partidos dos equipos de la capital, el Motema Pembe y el AS Vita Club, además de la selección. En 1994, como os decía, se inauguró el Estadio de los Mártires, moderno y de mayor capacidad, que es ahora el que se lleva los grandes eventos.

Estadio Tata Raphaël, en la actualidad (WIKIPEDIA)

Estadio Tata Raphaël, en la actualidad (WIKIPEDIA)

Pero como os decía, si por algo es famoso el Tata Raphaël es porque en octubre de 1974 acogió uno de los más grandes combates de todos los tiempos: el de Foreman contra Ali.

El combate no se entiende sin pensar en su impulsor: el inefable promotor pugilístico Don King. Este Foreman-Ali era uno de sus primeros combates. Había conseguido el compromiso de ambos púgiles de pelear pero a cambio de una bolsa de 5 millones de dólares. King no tenía ese dinero y empezó a buscar un país que corriera con la mayor parte del gasto. Mobutu, el dictador de Zaire, se ofreció y se ‘quedó’ el combate. El tirano quería publicidad internacional y lo logró. Para entender eso, vale con leer la frase que ilustra el cartel que os he puesto abriendo: «Un regalo del presidente Mobutu al pueblo zaireño y un honor para el hombre negro». A Don King no le importó que Mobutu fuera el paradigma del dictador africano: megalómano, tiránico, sanguinario…

La pelea estaba prevista para septiembre de 1974. A tal efecto, Foreman y Ali pasaron el verano entrenando en Zaire para acostumbrarse al clima del centro de África. Foreman sufrió una lesión que le obligó a posponer casi un mes el combate, cuya fecha definitiva se fijó para el 30 de octubre.

El evento no sólo fue deportivo. Antes del combate se celebró el Zaire 74, un festival musical que también acogió el estadio 20 de Mayo. Tuvo lugar del 22 al 24 de septiembre y en él participaron algunos de los mejores artistas negros del momento: BB King, Celia Cruz, Miriam Makeba, James Brown… Asistieron más de 80.000 personas.

Vista aérea del estadio (GOOGLE MAPS)

Vista aérea del estadio (GOOGLE MAPS)

Y llegó el combate, celebrado a las 4 de la mañana, hora de Zaire, para que pudiera ser televisado en horario de máxima audiencia en Estados Unidos. Foreman, que tenía 25 años y era el campeón invicto, era el favorito ante un Ali con 32 ya cumplidos. Pero Ali, que contaba con el apoyo del público tras una hábil campaña de autopromoción durante su preparación en Zaire (supongo que conoceréis el cántico de «Ali, bomaye» -«Ali, mátalo»-), derrotó a Foreman por KO en el octavo asalto.

El combate pasó a la posteridad, e incluso dio lugar a una película documental (When we were kings), que logró un Oscar en 1996. Como detalle, os diré que tanto Ali como Foreman  recogieron la estatuilla. Tras el evento de Zaire, ambos púgiles fraguaron una gran amistad y fue realmente emotivo ver a Foreman ayudar a Ali, con párkinson, subir al escenario.

Os dejo con el combate:

Hasta mañana.

7 comentarios

  1. Dice ser MrBrightside

    El documental When we were kings es fantástico. A pesar de no ser aficionado al boxeo, sin duda es uno de los documentales deportivos mejor hechos. La figura de Ali siempre ha sido como un imán, tiene un magnetismo incomparable a otras estrellas del deporte.

    Leyendo el artículo, no puedo evitar pensar en el amistoso de España en Guinea, ¿es Villar el nuevo Don King?

    Como tampoco he podido evitar pensar en Mwepu Ilunga, quizás estaba en la grada aquel día el gran defensa zaireño ¿tiene post? sin duda lo merecería.

    04 diciembre 2013 | 09:17

  2. Dice ser ruomalg

    Buenooooo, este artículo hará las delicias de los aficionados del boxeo. Tiene gracia que un estadio como ese le deba toda su fama a aquel combate entre Ali y Foreman. Me pregunto a quién se le ocurrió el pareado, aunque me atrevería a intentar adivinarlo. Sin duda el combate más mediático de la historia del boxeo, seguido del «Thrilla in Manila» (otro original pareado).

    Creo que es necesario matizar sobre las diferencias entre los dos Congos. Sin duda el más conocido por todos es el belga, este del que estamos hablando y que hoy recibe el nombre de República Democrática del Congo. Luego está la República del Congo o antiguo Congo francés. Desde luego, con lo pequeña que es la nación belga, hay que ver la de territorio que se agenciaron.

    Dictadores africanos, por lo que he leído, de los más crueles que han existido en el planeta (aunque se quedaban cortos en comparación con los que conocemos todos). Mobutu sería de la piel del diablo, pero el que se llevaba la palma sin duda era Idi Amin. A los ugandeses les tocó lo peor de lo peor. Un día de estos tengo que ver El último rey de Escocia.

    Leyendo el comentario de Mr. Brightside, puedo llegar a la conclusión de que comparar a Billar con Lucius Sweet, digooooooo Don King es como comparar el Princesa del Pacífico con la Leyenda del Pisuerga. No digo lo de Dios y el gitano, que me parece una expresión bastante discriminatoria.

    04 diciembre 2013 | 09:40

  3. Dice ser ruomalg

    Por cierto, eso de celebrar el combate a las cuatro de la madrugada es el colmo del nefasto control que tienen las televisiones sobre todo. Cómo echo de menos la época en la que la liga tenía horarios decentemente razonables.

    04 diciembre 2013 | 09:53

  4. Dice ser igesar75

    Pues no sé si será casualidad, pero precisamente ayer el programa «Conexión vintage» de TDP dedicó un reportaje a Cassius Clay/Muhammad Ali (no lo vi entero porque me fui a la cama jejeje, ya lo terminaré de verlo por la web……). No estuvo mal pero abusan demasiado del copia/pega, aprovechando el excepcional fondo documental de TVE, podrían habérselo currado un poco más en cuanto a edición, música, etc….. pero bueno, tuvo su valor.

    Sí, yo también me hago un lío entre la República Democrática del Congo y Congo «a secas» porque en mi época era Zaire, pero efectivamente, lo que era Zaire y lo que era el Congo belga, es lo que es ahora RD del Congo. El Congo «normal» (de donde es nuestro Serge Ibaka, por cierto) he oido que a veces se le menciona como Congo-Brazzaville, supongo que para diferenciar uno de otro, claro.

    Absolutamente indispensable, y yo diría que hasta obligatorio, «When we were kings». Yo lo habré visto unas 5 o 6 veces y totalmente recomendable tanto si nos gusta el boxeo (o el deporte en general) como si no. Más o menos este post es un excepcional resumen del documental, pero yo me quedo con una de las primeras frases de Ali en el mismo, que viene a explicar un poco por qué contó con el apoyo del público desde el primer momento (todo esto a grito pelao jejeje): «África es mi hogar, yo hace 400 años corría libre por esta selva y ahora he vuelto para luchar y pelear junto a mis hermanos».

    Sí, tanto lo de «rumble in the jungle» como «thrilla in Manila» se lo inventó Ali, como no jejejeje. El comabate de Filipinas se puede decir que fue una secuela o una parte II de la misma «película» (aunque el otro protagonista fue Joe Frazier en vez de George Foreman), también dirigida por el ínclito Don King y a mayor gloria del dictador Ferdinand Marcos.

    En mi opinión, el infame ranking de dictadores africanos lo encabeza Jean-Bedel Bokassa. Un ser absolutamente enloquecido que en su delirio se autoproclamó emperador de la República Centroafricana, y por lo tanto, Imperio Centroafricano por aquellos años. Se decía/se comentaba/se rumoreaba que practicaba el canibalismo y se zampaba a sus rivales políticos.

    04 diciembre 2013 | 11:22

  5. Dice ser igesar75

    Ah sí, bis……

    También he visto «El último rey de Escocia» y entretenidilla sin más. Buena interpretación de Forrest Whitaker como Idi Amin, eso sí.

    04 diciembre 2013 | 11:56

  6. Dice ser PEDRALBES

    Hola a todos

    Gran artículo, Edu. En el cartel, además de esa frase del final que citas en el texto, hay otra arriba que dice «super choque y combate del siglo», con gran acierto por lo que se vio después

    Saludos

    04 diciembre 2013 | 14:50

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