Vézina, en los años 20 (WIKIPEDIA).

Seguimos este domingo hablando de otro de los cuatro grandes deportes de Norteamérica, el hockey, y en concreto del primer gran portero de esta modalidad: Georges Vézina.

Joseph Georges Gonzague Vézina nació el 21 de enero de 1887 en Chicoutimi, en la región canadiense de Québec. Hijo de un panadero, empezó a jugar al hockey de niño en las calles y con 16 años se estrenó en un equipo local, con el que empezó a jugar partidos de exhibición al tiempo que ayudaba a su padre en la panadería.

Uno de esos partidos fue contra los Montréal Canadiens, que ya por aquel entonces era uno de los poderosos del país. El portero de los Canadiens quedó impresionado con Vézina y convenció a sus jefes para que lo ficharan. En un principio, Vézina rechazó la oferta, pero un año después los Canadiens insistieron y se lo llevaron a él y a su hermano Pierre, que apenas hablaban inglés, a Montréal. Finalmente, sólo Georges se quedó en el equipo, y firmó su primer contrato profesional en diciembre de 1910.

En sus tres primeras temporadas fue el portero menos goleado de la NHA, la competición anterior a la NHL. En 1916, los Canadiens ganaron la Stanley Cup, la primera de las 24 de su historia, con Vézina como portero. Antes del paso de la NHA a la NHL, logró acabar un año más como meta menos goleado de la competición.

La NHL comenzó a rodar en noviembre de 1917, y Vézina fue el primer portero de la historia de la competición en dejar su meta a cero en un partido y fue el portero menos goleado de aquella temporada inaugural. En 1924 volvió a convertirse en el meta menos goleado de la competición y los Canadiens lograron su segunda Stanley Cup. Los Canadiens son el equipo más laureado de la historia de la NHL y es el equipo deportivo con más títulos de toda Norteamérica, solo superados por los New York Yankees de béisbol, que tienen tres más, 27.

Georges Vézina (WIKIPEDIA).

En 1925, la salud de Vézina empeoró notablemente, aunque él lo intentó mantener en secreto. En poco más de seis y medio perdió casi 16 kilos de peso y solía tener fiebre de hasta casi 39 ºC. El 28 de noviembre de aquel año, en un partido ante Pittsburgh, Vézina empezó a vomitar sangre en el descanso y en la reanudación se desmayó. Al día siguiente se le diagnosticó tuberculosis, una enfermedad que por aquel entonces aún era sinónimo de una muerte casi segura.

Unos días después se despidió de sus compañeros, con lágrimas en los ojos. Se fue a vivir con su mujer y sus hijos a su localidad natal, Chicoutimi. Vézina fue empeorando hasta el día 27 de marzo de 1926, cuando murió en el hospital l’Hôtel-Dieu de su ciudad. Tenía 39 años. Los Canadiens acabaron últimos de la NHL aquella temporada.

Más de 1.500 personas abarrotaron la catedral de Chicoutimi para asistir a su funeral y a lo largo de toda Canadá se hicieron homenajes para honrar su memoria. Fue enterrado en el cementerio de San Francisco Javier de la localidad.

En 1927, los dueños de Montréal Canadiens donaron un trofeo a la NHL, que se entregaría al final de cada temporada al portero menos goleado de la competición. Todavía hoy se entrega con ese nombre, el Vezina Trophy. Curiosamente, el primer ganador fue George Hainsworth, el sustituto de Vézina en la meta de los Canadiens. Hainsworth, de hecho, lo ganó tres veces seguidas. Otro portero de los Canadiens, Jacques Plante, que jugó en los 50 y los 60, ostenta el récord de trofeos Vezina.

Espero que os haya gustado el artículo. Hasta el jueves.