El británico Adam Smith, tocayo del economista y filósofo escocés, fundador del liberalismo económico, es el promotor, junto con otros siete socios, de un restaurante, Pay As Yoo Feel cafe, que cocina con sobras y en donde el cliente paga lo que quiere.
El proyecto comenzó en febrero de 2013 y en diciembre se dieron de alta como Community interest company, empresa de interés de la comunidad, un negocio con objetivos primordialmente sociales cuyos excedentes se reinvierten principalmente para este fin en el negocio o en la comunidad.
La empresa recibe cada día alimentos perecederos y no perecederos que sobran en restaurantes, supermercados y granjas locales de Inglaterra y en su local sólo cocinan lo que les donan. Y como el coste de las provisiones es cero, el restaurante se puede permitir una política de precios muy relajada. «Aquí el cliente paga lo que quiere, señala Smith. La media por cabeza es de unas 3,5 libras». La clientela son estudiantes, jubilados, gente de clase media, los de clase baja, niños, amas de casa…
El menú cambia todos los días y, según dice Smith en Yorokobu.es , se pone especial interés en ajustarse a las necesidades dietéticas de los clientes, porque abogan por la cocina sana. Pero, sobre todo, lo que pretende es «reducir a cero los residuos alimenticios, que llegan a alcanzar 7,2 toneladas al año en Reino Unido: Queremos que los restaurantes, supermercados, granjas y domicilios particulares sean conscientes de la cantidad de comida que tira a la basura«.
También disponen de un banco de alimentos propio y sus cocineros ofrecen servicios de consultoría a quien los solicite. «Estoy convencido de que si todo el mundo aprendiera desde edades tempranas cómo cultivar y producir sus propios alimentos y nociones básicas de cocina, no tendríamos tantos sobrantes de comida», señala.
A los ocho directores del consejo de la compañía se unen los aproximadamente 100 voluntarios con los que cuenta The Real Junk Food Project. Gracias a todos ellos, el local recibe semanalmente entre 100 y 150 comensales.
Todo lo que ahora practica en Inglaterra, lo aprendió durante su estancia de 15 meses en Australia. Allí le dio tiempo a trabajar en una granja y comprobar la cantidad de comida que se desperdiciaba a diario. «Con ella se alimentaba a los cerdos, en lugar de dársela a la gente más necesitada».
A veces con las sobras, se puede hacer muy buena cocina de reciclaje. Evidentemente todo depende de la calidad de dichas sobras, y sobre todo de como las traten… no vaya a ser que el pifostio que hagan no lo puedan arreglar ni Chicote ni Ramsay….
Hemos Visto
http://hemosvisto.blogspot.com
29 abril 2014 | 09:03
¿Darle la comida a los cerdos es desperdiciarla? De toda la vida, los cerdos tambien comen.
29 abril 2014 | 09:10
que asco
29 abril 2014 | 09:45
No hay que despreciar ningún sistema de supervivencia, porque es lo que es este tipo de iniciativas, y muchos no pueden permitirse nada para sobrevivir.
http://goo.gl/0SbKpe
29 abril 2014 | 10:15
Muy buena idea!!!!la verdad que es una muy buena iniciativa para no tirar alimentos y que la gente los pueda comer sin riesgos ya que imagino que los alimentos en mal estado se desecharan.
29 abril 2014 | 10:36
Es una excelente idea, y hay muchas personas que necesitan comer para sobrevivir. Hay muchos supermercados que tiran comida caducada pero que esta bien.
Clica sobre mi nombre
29 abril 2014 | 10:49
Comer las sobras de mi casa me importa poco, pero de ahi a comerme las sobras del resto dl personal va un tramo importante.
29 abril 2014 | 11:40
Una vez estuve en un pueblo donde los cerdos comian frutas deliciosas: brevas,manzanas,melones…..todo en su punto de madurez naturál sin ningun artificio de maduración en almacen ni pesticidas.en los años 80 cuando España todavia no estaba podrida.
29 abril 2014 | 11:42