Celosos y en celo: ‘La última tentación’ es ya el acabose de las infidelidades presentes y futuras

Beso en el culo, una medida anticovid. (TELECINCO)

• ‘Boom’, ‘Zasca’, ‘Catacrack’, ‘Pum’, resumen de Fani zurrando al egocéntrico de Gonzalo en ‘La última tentación’.

Llevaban en la isla horas y varias de las parejas de La última tentación ya habían sido infieles o estaban haciendo méritos para serlo cpn gran desempeño. Me fascina la capacidad para cambiar de filiación que tiene esta gente, qué libertad de morreo, qué facilidad de acople a genital ajeno, qué generosidad en el reparto de baba. Esta gente tiene tanta necesidad de sexo que lo de poder tener sólo un hijo lo pusieron en China estando ellos y ellas de vacaciones allí. Y oye, con qué soltura. Esta gente va a comprar al Mercadona con una bolsa de rafia del Alcampo.

Vamos a repasar quiénes se han liado ya con quienes y algunos otros episodios interesantes porque la cosa tiene miga y se puede mojar pan. Que en esa isla es lo único que no se moja, al parecer.

En primer lugar Andrea se ha liado con Óscar. A ver, esto una sorpresa no es, porque Andrea según entró le ponía ya unas caras que se podían traducir por «hazme tuya y a ser posible ya». Dejando de lado que a cualquiera en su sano juicio la chulería y prepotencia de Óscar le tiraría para atrás, lo cierto es que Andrea quería resistirse a sus encantos pero poco y a la mínima encontraron la ocasión de besarse con el jueguecito de pasarse un hielo de boca a boca. Los hielos han provocado más embarazos no deseados que la marcha atrás.

Pero… ¡¡GIRO INESPERADO DE LOS ACONTECIMIENTOS COCHINOS! Andrea, que es desde ya mi participante de La isla de las tentaciones favorita, no se lió con Óscar, si no con Manuel, que acababa de entrar a la villa para resolver asuntos pendientes y lo que hizo fue revolver asuntos.

Y es que Andrea y Manuel habían estado liados fuera de la isla poco antes de ir y claro, donde hay ascuas… y ahí no había ascuas, había mechero con la palanquita puesta en el + para que saliera la llama gorda.

Total, que Andrea y Manuel se pusieron a besuquearse en la piscina, dándose piquitos en los labios. Manuel se puso después a darle besitos de abuela en las tetas a Andrea. Sólo le faltó pellizcarle las mejillas y decirles a las domingas que tenían que comer más. Bueno, eso no, que ya van servidas.

«¡¡ATENCIÓN, ATENCIÓN, SE HAN COMIDO LA BOCA!!«, se puso a chillar Gonzalo, que es el típico que se come los mocos y trata de boicotear a los demás por pura envidia. «¡ESO ES QUE TU NOVIO LO HA VISTO YA!», se puso a berrear como una portera histérica cuando sonó la alarma de la tentación.

Poco después Andrea se fue a hablar con Fani, a quién eligió como consejera, que es como si un asesino coge de consejero a Jack el Destripador. «Yo creo que deberías hablar con tu novio y decirle que te gusta Manuel», le dijo Fani.

«Pero mientras no me lío con Manuel?», preguntó decepcionada Andrea.

«Ah, sí, liarte sí… y si te quieres acostar, acuéstate, pero no te quiero influir…«, le dijo Fani, que no quería influir, pero estaba haciendo de mamporrera que sólo le faltaba estar en el acto sexual dando ánimos y proveyendo de condones y lubricante como en las paradas de Boxes de la Fórmula 1.

Y claro, Andrea se fue a dormir con Manué, que no tiene la manita relajá.

¿Y por qué Andrea es una jefaza? Porque le dio en los morros a Óscar, que se cree irresistible y pensaba que Andrea iba a caer rendida. «Él se pensaba que iba a llegar aquí y que yo iba a caer otra vez. Pero si tú quieres algo con una persona, tienes tiempo fuera. Yo no he hablado en la vida con él fuera», dijo Andrea. OLÉ TU PAPO.

Y oye, que yo soy fan del amor y del sexo libres y de lo contrario, pero no de las dos cosas a la vez. Porque esta gente se declara celosa, dice que no tolera ni los tonteos de su pareja, pero luego hacen y deshacen de forma desaforada. No se puede ser celoso y estar en celo. 

Por otro lado:

Fani estuvo bailando con Julián con el paso de la prospección de manguera, que es ese paso de baile en el que compruebas si tu pareja tiene pene palpando con las nalgas. Es como si tu culo fuera la nariz de un perro pachón y estuviera olisqueando. El paso de baile que hace que la morena saque el cuello fuera del arrecife. Fani arrimaba pompis como para hacerle bolitas a la ropa de Julián y luego se reía en plan jajaja, qué risa, era solo una broma. Pero no.

«Vamos a disfrutaaaaaaar, fuera camisetas», dijo Fani durante la primera celebración, porque Fani es muy de disfrutar cualquier ocasión festiva. Es por eso por lo que ya no la invitan a las comuniones y los bautizos, porque se quitaba la camiseta y los niños pensaban que su regalo de comunión eran dos cabezas de calvo.

En la primera fiesta sonó la luz de la tentación. Sonó por el beso de Andrea y Óscar, pero ellos no lo sabían y pensaban que era por algo que pasaba en la otra casa. Les importó cero. Una vez más Fani, que es La Guardiana de la Fiesta, dijo que para qué preocuparse, que ellos a lo suyo y «UH, UH, UH».

Óscar tuvo que darle un beso en el culo a Maikya, por el juego de la botella, que es el segundo método anticonceptivo menos eficaz después del hielo. «Pero lento, que se note», apuntó Julián, que cuando da un beso en una nalga se toma su tiempo. Una vez Julián besó un culo y estuvo seis meses pegado a esa nalga. La pobre chica tuvo que usar faldas anchas un año entero para que no se le viera.

Aquí podemos ver a Julián besando el culo de la infanta María Teresa:

En el avance del próximo capítulo podemos ver cómo una fiesta en la piscina se iba de madre y cómo había más roce que en un disco de freno, solo que allí no se frenaba nadie.

Antes de acabar, os dejaré uno de mis momentos favoritos: el que usó Mayka para darle un zasca a Gonzalo de los que hacen época. Iba él todo chulito (por algún motivo piensa que es un seductor infalible) y Mayka le paró los pies:  «Yo dejé a Tony (a Tony Spina) por ti, idiota. Seré una infiel porque puse los cuernos a mi novio y todo lo que tú quieras. Pero a mí me gustabas de verdad y has perdido tu oportunidad, máquina», le dijo Mayka a Gonzalito.

Que oye, mal porque Gonzalo le haya gustado alguna vez, pero muy bien por lo de darle calabazas. Ojalá siga así, por el amor de Dios.

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