A lo mejor yo también debería sentirme amenazado. Por maricón. Por estar casado con otro maricón, inmigrante, suramericano y bastante rojo. Por tener algunos amigos maricones y otros suramericanos. Y convencidos rojos a mi alrededor.
Y a lo mejor, por eso mismo, tendría que felicitarme por la emisión anoche del programa especial de Telecinco sobre el racismo que aprovechó la corriente de aire viciado de la agresión de un energúmeno en un tren a una chica ecuatoriana para montar un pseudorreportaje de periodismo de investigación acerca de los grupos neonazis en España y del caso de otro inmigrante, golpeado hasta la parálisis.
Pues no. Ni me felicito, ni me alegro, ni me gustó. Sino todo lo contrario.
En primer lugar, me repugnó enormemente descubrir cómo Telecinco fue capaz de primar el espectáculo y las «imágenes impactantes» a la seguridad. Cómo fueron capaces de emitir unas escenas de las lecciones de métodos criminales que imparten esos salvajes. Eso NO se muestra en televisión. No se debe. Por mucho que algunos – he extraído algunos mensajes del foro de telecinco.es sobre el programa – se regodeen con su emisión:
en las costillas y parriba jaja buenisimo!! ARRIBA ESPAÑA C********* P**** INMIGRANTES FUERAAAA ****** SSSSSSS
Anónimo
Miércoles 31 de Octubre a las 00:51
En segundo lugar, y aunque os parezca una apreciación fuera de lugar, no me gustó nada el modo en que trataron la tetraplejía del inmigrante apaleado en Alcalá de Henares. Puedo entender que el efectismo y la dramatización sean necesarios para denunciar la barbarie, pero no soporto esa necesidad de hacer hincapié en el hecho de que vivir sobre una silla de ruedas, tal y como repitieron hasta el empacho en el programa, sea tener «una vida destrozada, no ser nada», etc. Por supuesto que es terrible. Pero alguien, a la hora de redactar esta clase de productos sensacionalistas, debería pensar que hay gente que vive en una silla de ruedas y que cuando se despierta cada mañana intenta encontrar buenas razones para disfrutar de su vida. Y que yo, si algún día me veo así, no querré que nadie me dé por televisión una valoración negativa de mi vida. Gracias.
En tercer lugar, hay numerosas cosas del programa que no puedo entender:
1. ¿por qué no subtitularon las casi incomprensibles palabras de los encapuchados?
2. ¿por qué la televisión funcionó anoche como un canal de promoción de los mismos vídeos de palizas que los miembros de los grupos neonazis reparten entre sus adeptos para hacer proselitismo?
3. ¿Por qué si Lacoste quiso denunciar a los autores del vídeo de las juventudes socialistas por asociar su logo a un tonto, Thomas Burberry no se querella contra Manuel Leal, el líder del partido ultraderechista Alcalá habitable? Las imágenes de ese tipo con el logo de la marca en su jersey no la limpia ni la mejor campaña con Kate Moss.
4. ¿Para qué sirven esta clase de programas?
sera subnormal la gente, son tan tontos q se han creido el montaje del reportaje este, los «nazis» q salían eran actores (por cierto muy malos) basta ya de manipulación. La verdad nos hará libres. Arriba España
Anónimo
Miércoles 31 de Octubre a las 01:55