Cuando queremos referirnos que algo no es una cosa ni otra, un alimento no tiene sabor o algo ni nos ha gustado ni disgustado solemos utilizar la expresión «ni chicha, ni limoná».
El origen de esta expresión proviene de dos tipos de bebidas, una alcohólica (chicha) y la otra refrescante (limoná).
La chicha es una bebida fermentada y no destilada que proviene del maíz y es muy típica de Centroamérica, aunque también se consume en el sur del continente. Es de origen prehispánico y de fuerte sabor.
Por el contrario, la limoná es una bebida suave, muy típica de Castilla y que está hecha a base de limón, azúcar y vino blanco.
El dicho comenzó a utilizarse para comparar las dos bebidas con una tercera (no es ni fuerte como la chicha ni suave como la limoná), aunque algunas fuentes aseguran que era para indicar a alguien que ya no quedaba más bebida para servir: ni chicha, ni limoná.
Erróneamente, algunas personas creen que la chicha a la que se refiere esta expresión es la carne, modo en el que familiar e infantilmente también se la conoce.
Lee y descubre el curioso origen de otras conocidas palabras y expresiones
Curiosidad que forma parte del libro “Ya está el listo que todo lo sabe” (Una curiosidad para cada día del año) de Alfred López
Compra el libro a través de los siguientes enlaces: https://www.amazon.es/dp/841558914X (para España) | https://www.amazon.com/dp/841558914X/ o https://www.createspace.com/7085947 (desde fuera de España)
Fuente de la imagen: porquechileeschile